Viajando a Valencia

Lo cogió, lo chupo con deseo y lentamente lo introdujo en su sexo mientras el, la observaba sin quitarle el ojo de encima. Una vez el huevo dentro de ella. Él se acercó a su boca y la beso diciéndola.

Ángeles entro en el despacho para despedirse.

_ Buenas tardes y hasta el lunes.

_ ¿Pero bueno, que hora es?

_ Pues más de las tres y media.

_ Ok, buen finde y disfrútalo.

Aun se quedó un rato en el despacho, sopesando que hacer.

Saco su teléfono móvil y la llamo.

_ Hola guapa ¿Qué tal el viernes? Mira te llamo porque me voy a mi casa de Valencia, ¿por si querías venir?

La verdad es que tui oferta es tentadora, pero no sé, no tenía nada pensado.

Perfecto, mándame tu ubicación y te recojo en un par de horas.

_ Perooooooooo ??

_ No te pongas bragas.

Ella se quedó con cara de boba cuando observó que él había colgado. Se lo pensó un buen rato y noto como se estaba mojando y no lo dudo, le mando su dirección. Metió unas cosas en un bolso y espero a que el llamase.

Se había puesto un vestido que la llegaba a medio muslo y que se ceñía a su cuerpo como una segunda piel, y en este caso lo era, no había nada más que el vestido y su piel.

El llamo a su móvil comunicándola que estaba abajo. Cuando salió por el portal, abrió tanto los ojos que casi se le salen.

_ Esta preciosa dijo dándola un pico largo.

Mientras ella se acomodaba en el asiento del coche.

_ Creo que será un fin de semana espectacular.

_ ¿Por qué querías que no llevase bragas?

El metió su mano en la guantera y saco un huevo vibrador. Se lo dio y la dijo.

_ Póntelo.

Ella lo miro con ojos vidriosos por la excitación

_ (Sí que empezamos pronto)

Lo cogió, lo chupo con deseo y lentamente lo introdujo en su sexo mientras el, la observaba sin quitarle el ojo de encima. Una vez el huevo dentro de ella. Él se acercó a su boca y la beso diciéndola.

_ Ahora te espera un viaje muy largo.

Apretó el botón del huevo y puso una intensidad suave dejando el mando a su alcance. Salieron rumbo a la playa.

Un escalofrió recorrió la espalda de Mily

_ ¿Te gusta el mar?

_ Me encanta el mar y bañarme desnuda hummm me vuelve loca.

_ Que bien, no tendrás problema para nada.

Aún faltaban 100 km para llegar y el huevo estaba haciendo que un charquito se quedase en la tapicería del coche.

_ ¿Vas bien, quieres parar?

_ Nooooo quiero que pares esta tortura hummmmm.

El cogió el mando y subió a intensidad media, ella pego un bote en el asiento y empezó a jadear.

_ Joder cabrón hummmmm que gusto.

Se lanzo a su polla y la saco del pantalón, el llevaba un pantalón corto con elástico. Levanto un poco el culito y ella lo bajo. Aminoro un poco la velocidad y dejo que ella hiciese lo quisiera.

Ella bajo la cabeza y empezó a lamer sus huevos y subió por el tallo ya duro lamiéndolo lentamente, hasta llegar a la punta de la polla que tenía ya unas gotitas preseminales, las cuales chupo con deseo para lentamente enterrar ese falo hasta tocar sus huevos con su lengua. Subía y bajaba con lentitud disfrutando cada centímetro y notando las gordas venas en sus labios. Con su mano acaricio su clítoris mientras seguía chupando con emoción esa preciosa polla. Él paró en un área de servicio lo más alejado que pudo de la civilización y acercó su mano hasta el culito de ella, metiendo dos dedos en su húmedo coño, esto hizo que ella introdujese su polla hasta tocar su garganta y una arcada salió de su boca. El saco los dedos y los chupo mientras ella le miraba con los ojos vidriosos por el deseo. Volvió a su tarea y siguió ahora si con más rapidez su felación. El chupo sus dedos los acerco a su cuerpo metiendo uno de ellos en su coñito y el otro en su culito, iniciando una lenta pero incansable penetración, notaba el vibrar del huevo y como ella se retorcía abriendo y cerrando la boca. Su orgasmo estaba cerca y siguió con tranquilidad entrando y saliendo de su coño hasta que su boca se abrió y su polla llego a su garganta entrando en ella y cuando el suministro de aire ceso, el cogió su cabeza y la retuvo unos segundos, los suficientes para que un orgasmo la volviese loca y su cuerpo comenzase a temblar como una hoja de papel.

Saco un poco su polla, lo justo para dejarla respirar, mientras unos fuertes chorros inundaron su boca y su garganta. Ella trago todo y cayó rendida en el asiento. El acerco su boca y la beso con un beso tierno.

Arrancaron y continuaron camino.

_ Joder tío que pedazo de orgasmo, casi me desmayo, jodeeeeeer. ¿así será el fin de semana?

_ Sera como tú quieras que sea.

Llegaron a su destino, era un chalecito con piscina que estaba un poco apartado de la civilización y muy cerca de la playa.

_ ¿Nos cambiamos y damos un paseo por la playa para ir a cenar?

_ Vale.

_ Ponte algo cómodo, un vestido sin nada debajo.

_ Ehhhhhhh ¿perooooo?

_ ¿Tú veras lo que quieres?..............

Salieron del chalecito y se dirigieron a la playa.

Ella estaba radiante con un vestido rojo que le hacia un precioso escote en v y le llegaba poco más arriba de las rodillas.

El la agarro de la cintura y la fue conduciendo camino a la playa, al llegar cerca de la orilla se quitaron sus zapatos y el, remango sus pantalones de lino blancos, a un a pesar que se arrugarían.

Caminaban cerca de la orilla y de vez en cuando el mar mojaba sus pies. El bajo su mano hasta su culo y la empezó a tocar, la atrajo hacia él y dándola un morreo suave y lento, la dijo:

_ Lo pasaremos bien.

Llegaron a un chiringuito de la playa y entraron.

_ ¿Hombre Pablo que tal va todo?

_ Muy bien gracias. Queríamos cenar un poco.

_ ¿Te puedo sorprender o tienes ya pensado?

_ Sorpréndenos, ¿que será, pescado?

_ Por supuesto super fresco.

_ Vale pues ponnos para beber, un viña Tondonia blanco reserva.

_ Excelente elección, seguidme.

Fueron al final el chiringuito, había un pequeño cuarto con cuatro mesas y se sentaron en la del fondo una mesa con un banquito con cojines para hacerlo más mullido y unas espectaculares vistas al mar.

_ Su vino señores, ¿quiere probarlo?

_ Por supuesto. Hummmm está excelente.

_ Ahora les traigo una cubitera con hielos.

Marcho el camarero y nada más irse mi mano subió por sus piernas hasta llegar a su sexo, volviendo a bajar otra vez. Ella me miro con cara de pícara.

_ ¿No te atreverás?

_ ¿Tienes alguna duda.?

El camarero llego con la cubitera y la dejo a la izquierda de él.

Mi mano seguía subiendo y bajando sin prisa y sin pausa, llegaba hasta su sexo hacia unas rotondas sobre él y volvía a bajar hasta sus rodillas. Ella estaba empezando a calentarse y algún gemido salía de su boca. Me volví y la bese, la bese con pasión con entrega, mientras mi mano ascendía a su pezón y lo apretaba entre mis dedos. Mientras ella abría sus piernas y su boca en un gemido de placer ahhhhhhh. Miraron al mar mientras su mano se deslizaba lentamente entre sus piernas, solo sus uñas tocaban la suave piel de su coñito.

El camarero llego con un tartar de bonito rojo en aceite de oliva.

_ Hummm está delicioso, hummmm y el vino espectacular. No te cuidas mal no jajajajajja

_ Me gusta más lo natural y en su propia salsa.

_ El sushi?

_ Siiiii jajajajaj.

Bajo un dedo a su coño y recogió sus jugos, se llevó el dedo a la boca y lo chupo con pasión.

_ Hummmm una salsita estupenda, pero a de marinar un poco más.

_ ¿Siiii está bueno?

Se acerco a su boca y la beso suave.

_ ¿Está bueno?

_ Hummm así mucho mejor.

Terminaron el primer plato y la mano volvió a recorrer el camino anterior, solo que esta vez se paraba unos segundos en su clítoris y lo rodeaba un par de veces.

_ Hummmmm cabrón, vas a hacer que me corra.

_ Puedes hacerlo ahora será suavecito.

_ Eso solo se sabe cuándo llega.

El camarero llego con el segundo plato los dejo en la mesa y se quedó mirando sus pezones que apuntaban al cielo y estaban a punto de romper la tela del vestido.

_ Ehhh …..... lomo de trucha del coto de la Rinconá de Chuchilla Valencia.

_ Muchas gracias.

Se marcho no sin echar otra mirada a esos pezones que estaban pidiendo unos labios que los apretasen.

_ ¿As visto?, casi me arranca los pezones

Hummm subí mis manos y los apreté.

_ Hummmmm no es para menos.

_ Acabemos el plato hummmmmmm, ahhhhhh!!!!!!

Los lomos de trucha estaba delicios, terminamos de comer ese plato y mi mano siguió su camino, con la voluntad de calentar el momento al máximo.

Ella acerco su mano a mi polla.

_ Hummmm cabrón estas como un toro hummmm.

_ ¿quieren postre?

_ No gracias un café solo y un cortado y un par de Johnnie Walker Blue Label.

El camarero llego con los cafés y las copas y recogió la mesa marchándose después no sin echar una mirada a los pezones de la chica, qué seguían inhiestos y desafiantes.

Ahora mi mano siguió con más tranquilidad subiendo hasta ese maravillo clítoris que ya estaba lleno de juguitos y muy, muy hinchado, lo cual hacían más fácil la excitación.

Hummmmmm ronroneaba mientras sus dedos acariciaban ya sin descanso su botoncito del placer.

_ Ahhhh hummmm siiiiiiiii, no pares hummmm nooooo paaaarrreeeeesss.

Y así se corrió pegada a su boca y dejándole sentir su orgasmo.

Agacho la cabeza y se metió su polla en la boca, quería su corrida pues el ritmo era alto. Pero el, la paro.

_ Quiero follarte luego, tranquila.

_ Hummm no se si podre esperar, mira mis pezones y la silla esta empapada.

Pedro el dueño del chiringuito se sentó a su lado.

_ ¿Qué tal la cena?

Espectacular dijo ella y el vino magnifico.

_ Este pájaro no tiene mal gusto. Por cierto, Pablo, venía a decirte que “Caperucita” da mañana una fiesta en su casa.

_ Que bueno, lo consultare con ella, si quiere ir, iremos.

Le di mi tarjeta y a la vuela nos fuimos ya éramos los últimos clientes.

Al salir, la agarre de la cintura y la atraje hacia mí, besé su boca y la dije.

_ Te voy a follar hasta que no podamos más.

Por el camino me pregunto

_ ¿Qué fiesta es esa que me tienes que consultar?

_ Una fiesta liberal, donde todo el mundo va en bolas y donde no, sí que siempre es no, pero cualquiera puede pedir participar y si es aceptado, pues se une a la fiesta.

Mily lo pensó un momento mientras mi mano acariciaba su culo.

_ No tiene mala pinta, podíamos ir, será una experiencia nueva para mí.

_Tus deseos son órdenes.

Llegamos a nuestra casa y nada más entrar la apoye contra la puerta besando su boca y tocando esos pechos que me estaban volviendo loco. La saque el vestido por la cabeza y la lleve hasta el jardín y la piscina. La subí encima de la mesa y bajé a chupar su coño que estaba totalmente húmedo. Lo lamí y lo relamí repasando sus labios con mi lengua, mientras lo absorbía y mi lengua daba vueltas y vueltas sobre su clítoris.

_ Siiiii, maaaas siiiii hummmmmmmmm me voyyyyyyyy hummmmmmmmmm

Y su sexo exploto en un mar de jugos. Bajé mi pantalón la metí la polla de una, entrando hasta el final, para así iniciar un polvo salvaje un polvo duro y fuerte, que hacía qué la mesa se tambalease. Mi polla entraba y salía con suma facilidad la humedad de su sexo. Subí mis manos a sus pezones y apretándolos me corrí

_ hummm siiii hummmmmm.

Sentir mi corrida y el dulce dolor de sus pezones hizo que también se corriese

_ hummmm cabrón hummmm me matas.

Caimos rendidos uno encima del otro, el polvo, aunque corto, haba sido salvaje.

Una vez descansados te dije

_ ¿Un bañito?

CONTINUARA