Vete comprando las sales de baño

VETE COMPRANDO LAS SALES DE BAÑO

¿No tienes bañera?, ¿Solo plato de ducha?

…

Cuando quieras puedes venir.

…

El placer de un baño…. Anímate… No seas tonta… Ven….

…

Llevo sin tener noticias tuyas más de una semana. Y de repente, un correo. Tacaño en palabras, como siempre. Las justas para decir lo que quieres decir: “

Compro yo las sales de baño

”. Suficiente. Das por hecho que voy a ir.

Tu propuesta es sugerente, provocadora. ¡Qué bobada!, es irresistible y lo sabes.

Sobre todo si me dices eso de que “

me frotarás la espalda”… “Y tocarás alguna cosita mas”.

Cojo el teléfono.

-. Ya sé que lo de comer es muy complicado, te llamo para quedar, para que me digas la hora…

-.

¿Qué se te ocurre que podemos hacer?

, me preguntas burlón. (Como si no supieras la respuesta, como si no supieras cómo vamos a terminar. ¡Cuánto te gusta que te lo diga!)

-. Ummm... No sé… Ya lo pensamos cuando esté dentro del agua.

¿Crees que podré resistirme?...

Son las 20.15. ¿Espero cinco minutos en el portal?. Me gusta ser puntual, pero tanto… Ni que estuviera impaciente. Va a pensar que estoy ansiosa. Subo, da igual. Que piense lo que quiera.

-. Hola…

Lo has preparado todo. Práctico. No romántico ni cursi. No hay velitas. Las toallas. Zapatillas. Perchas para la ropa. Hasta una copita de “licor”… Para después, dices.

“Te dejo un rato sola. Para que disfrutes del baño.”

Más que un beso, un simple “piquito”. Cierras la puerta.

Sé que te imaginas como me desnudo. Paso a paso. Prenda a prenda. Y te excitas. Lo sé. Ummm me lo imagino.

Ya estoy desnuda.... Con las tetitas mojadas...

Uffff. Esa sensación tan agradable y excitante del agua caliente. Abro las piernas. Quiero sentirla entre los muslos.

Me sirvo una copa.

Mmmm... Un ambiente especial... Muy especial, tu aparentemente concentrado en tu trabajo, esa interminable montaña de expedientes que siempre te esperan...

Me relajo… Agua caliente. Sopor… Cierro los ojos. Aunque por debajo de la espuma me acaricio. Me froto con la esponja. Suave. Despacio. Recreándome con cada sensación.

No sé cómo puedes aguantar leyendo tus papelotes sabiendo que tienes a una mujer metida en tu bañera… Desnuda… Abierta de piernas… Esperandote para que me la… Mmmm…

Si supieras dónde y con qué me estoy tocando… ¡¡¡ Y si supieras cómo me estoy poniendo!!! Mmmm

Mientras te espero me toco, y sonrío al mismo tiempo que me embarga la tranquilidad de saber que estás cerca... Poco a poco empiezo sentir la respiración agitada de mi excitación, te acercas, lo sé... Es como si un sexto sentido te avisara de que mi sexo está esperando al tuyo.

No te oigo pero sé que no tardarás en venir.

Entras en el baño, te acomodas en el borde de la bañera, tus manos en mi espalda. Mmmm, empiezo a reclamar tus caricias en mis pechos... Te les ofrezco. Jadeo en cuanto me les acaricias. Sentimientos de pasión... Te deseo cada vez más... Abierta, expuesta, llena de ganas... Quiero tus dedos en mi coño... Siento que tus ganas van creciendo... Mmmm...

Disfruto embriagada, llena de lujuria, abro los ojos… te miro. Me dejas que te baje la cremallera. Lo hago despacio. No te importa que mis manos estén mojadas.

Tu polla en mi boca, te lamo con deseo, intensamente... Mmmm... Cada vez me siento más puta. Cada vez me diento más tu dueña.

Te muerdo con suavidad. Quiero que bajes tu mirada. Lleno la esponja de espuma. Me acaricio provocadora las tetas.

Jadeas. Te miro. Sin dejar de lamer tu polla, con la misma esponja te acaricio por debajo. No protestas aunque el agua escurra calándote entre los

pantalones. Has cerrado los ojos.

Tiemblas de placer cuando acaricio tus nalgas, cuando clavo las uñas.

Te abandonas. Podría tirar de ti y meterte en la bañera. O mejor aún podría ir retirando la boca hacia atrás… Me seguirías hasta meterte tu solo en el agua.

La tienes durísima. Podría vaciarte ahora mismo. Seguro que quieres correrte en la boca de tu putita. Tu polla lo necesita.

Lo mío también.

Ahora soy yo quien pregunta… ¿Podremos resistirnos?

(Dejad aqui vuestros comentarios. )