Versos para ella y para él

Una fantasía en verso, que describe los deseos de un hombre que sueña con una mujer casada y consentida.

VERSOS PARA ELLA Y PARA ÉL

A ÉL:

Si tu esposa encantadora

está en la flor de la vida

si es una hermosa señora

con las ganas encendidas.

Si te sientes orgulloso

de tu mujer dulce y tierna

de su derriére majestuoso

y de sus preciosas piernas.

Si es tan guapa y deliciosa,

no merece estar sedienta,

...a una dama tan preciosa

hay que tenerla contenta.

Si por alguna razón

no la puedes complacer,

si a pesar de tu pasión

ella se queda con sed.

Quiero pedir tu licencia

para probar sus delicias

penetrarla en tu presencia

y llenarla de caricias.

Permíteme ser su amigo

con respeto y discreción,

déjala gozar conmigo

y dale tu aprobación.

Si ella apetece un amante

bien dotado y rendidor,

que no lo dude un instante,

puedo ser su servidor.

Invítame a complacerla,

convídame a tu mujer,

yo sabré satisfacerla

y colmarla de placer.

La quinta parte de un metro

se alzará dura y sabrosa

en la carne de mi cetro

al contemplar a tu esposa.

Y crece más la herramienta

si ella voltea ruborosa

y sus nalgas opulentas

las ofrece, apetitosas

¿Me consientes que la toque,

que bese toda su piel,

que con mi lengua provoque

el derrame de su miel ?

¿Quieres que llene su boca

con mi instrumento viril?,

¿quieres ver como se aloca

lamiendo hasta la raíz?

Se endulzará tu mirada

al observar a tu esposa

tan mujer y tan hermosa,

tan linda y tan desatada.

Imagínate que miras

a tu mujer retozando,

que entre mis brazos suspira

y que goza cabalgando.

Que entre sus muslos anida

mi paloma palpitante

que ella goza y me convida

su rica flor desbordante.

Mírame entrar suavemente

en la rosada hendidura

y enterrar mi carne ardiente

besándola con ternura.

Ella disfruta y suspira

satisfecha en carne y alma,

busca tus ojos, te mira,

tú la besas y la calmas.

Y este amante no se cansa

en aquel juego exquisito,

hasta que tu esposa alcanza

calmar todo su apetito.

Ella termina jadeando

y te mira agradecida

mientras su flor va goteando

el elixir de la vida...

A ELLA:

Sobre la cama tendida

y con la luz apagada

pareces estar dormida

mientras esperas callada.

¿Qué sorpresa te ha ofrecido

el travieso de tu esposo,

qué regalo ha prometido

al pedirte cariñoso

que te pongas muy bonita,

que lo esperes fraganciosa,

con tu falda más cortita

y una blusa vaporosa?

Quizás al fin te has dormido

y esto es sólo fantasía

¿o es que acaso tu marido

te ha traído compañía?

Pero ¿quien alza tu falda,

quién te besa, quién te toca ?

¿quién cosecha con su boca

las frutas bajo tu espalda?

¿Qué dedos son los que apretan

los botones de tus senos,

quién suelta todos tus frenos,

quien con la lengua te inquieta?

¿Quién separa con sus manos

los pétalos de tu rosa,

quién recoge con su lengua

la miel que se te derrama?

¿Quién coloca entre tus labios

un caramelo de carne

quién te ruega que te inclines,

a quién ofreces tus ancas?

¿Quién te cabalga tan rico

como el potro a su potranca?

...Simulas estar dormida

para guardar el pudor,

sabiendo que tu marido

te concede este favor.

Ni culpa ni temor sientes

pues no engañas a tu esposo,

ya sabes que no es celoso

y que él mismo te consiente,

¡Cómo disfrutas soñando

esas caricias prohibidas

esa carne endurecida

que tu sexo está deseando!

Él mismo te alza la falda

hasta llegar a la espalda

para mostrarme orgulloso

tu culo maravilloso.

Después baja lentamente

tu calzoncito mojado

y separa lentamente

los pétalos sonrosados.

En un gesto precavido

él recibe al invitado

y muestra ser buen marido

cubriéndolo con cuidado.

Lo hace llegar a la entrada

de la flor azucarada

y acerca más la mirada

para verte penetrada.

¡Cómo goza contemplando

la inocente travesura,

la carne potente y dura

que entra y sale rezumando!

Y mirando a tu marido

le sonríes agradecida,

esto es lo que él ha querido:

verte hermosa y encendida.

Con un gesto generoso

Te da su consentimiento

y vuelve a mirar goloso

el feliz acoplamiento.

El mismo sugiere luego

llevar más lejos el juego

y cambiar de posición

para mayor diversión.

Te hace besar mi instrumento

y lamer toda su piel

mientras el chupa contento

tu vulva de leche y miel.

después quiere que yo frote

tus pechos con mi garrote

que acaricie sin reposo

tu trasero voluptuoso.

Y otra vez quiere mirarte

copulando con pasión,

con los ojos disfrutarte

en cada penetración.

Si el te brinda estos placeres

y quiere verte gozar,

si el te pido que me esperes

vestida para encantar.

Dale gusto a tu marido.

que goce y esté contento,

que no hay placer prohibido

si el da su consentimiento.

.

Si estás sola te presente

Escribirme cuando quieras,

Si son dos y él te consiente,

Escribe pronto ¿qué esperas?

Es mi deseo sincero

Esta sana fantasía.

Estoy en Lima y espero

Conocerlos algún día.

Para cualquier comunicación, escribir a: granlani@yahoo.es