Ventosa 5. Dentro del jacuzzi.
Este relato real lo pongo en la categoría de "Grandes Relatos" pero realmente pertenece a la categoría "autosatisfación" solo que como es de más de 6000 palabras pues creo tener que ponerlo en la sección apropiada, aunque si desean poner en otra categoría, por parte del autor no hay problema.
Con los calores que trae el verano en el país en el que estamos la verdad es que apetece estar continuamente en remojo o dicho de otra forma, no salir del agua, pero somos humanos y no peces por ello tenemos que hacer vida fuera del agua, aunque a veces desearíamos hacer todo dentro del agua.
Hoy Laura me dijo que se iba a dar un merecido baño en su jacuzzi ya que se lo acababan de instalar hacía dos días y claro con esa palabras siempre apetece incluso que a uno le inviten para darse un gratificado baño pero la vida no es tan fácil como parece por eso le dije que empezará ella sola y que cuando yo pudiera (es decir, cuando acabará de hacer todos los tramites diarios que tengo que hacer), iría a visitar su nuevo jacuzzi y a ella, porque aunque no lo parezca siempre apetece follar dentro del jacuzzi, es como un pensamiento que nos llega a todo el mundo, de como se debe de sentir el sexo rodeados de agua, burbujas y ese temblor que nos recorre nuestro cuerpo desnudo cuando estamos en dentro de ese placer acuático.
Como es lógico Laura se metió totalmente desnuda y claro empezó a tocarse y masturbarse pero le faltaba algo como a toda mujer. Si. Le faltaba sus juguetes, por lo que salio del jacuzzi y totalmente mojada e intentando que no se resbalará por el camino, fue a su habitación, abrió su cajón en donde guarda sus juguetes sexuales.
Primero pensó en llevarse su vibrador, pero claro, no era totalmente acuático por ello podría incluso estropearse, por lo que pensó mejor en su consolador con ventosa, así podría ponerlo en cualquier posición y darse el placer que deseaba. También pensó en su juego de bolas chinas con mando a distancia, esas si que saben hacer explotar una vagina por dentro, tanto que miro si estaban cargadas por la luz al encenderlo, si estaba en azul estaban cargadas, si estaba en rojo estaban con poca batería, pero si, para ella estaban en color azul, perfectas para darle el placer que deseaba. Por ello agarro ambos juguetes y volvió tranquila donde se encontraba su nueva bañera de hidro masaje aunque realmente es eso, un jacuzzi.
Se metió y se sentó en uno de los laterales que tenia la forma casi cuadrada, porque tuvo la suerte de no poner el modelo estándar en plan redondo, sino uno que tenían en stock, en forma cuadrada y así podría poner sus piernas abiertas y sujetas por los asientos que tiene el jacuzzi dentro, y con las bolas chinas empezó, estando apagadas a pasarlas por sus tetas que ya se encontraban en plan de guerra, es decir duras e hinchadas. Mientras que con su consolador se lo pasaba por sus labios que estaban mojados por el agua tibia y con su postura de piernas bastante abiertas, estaban incluso enseñando a su juguete la entrada por donde luego debería de entrar para darle el sexo que ella deseaba tener esta tarde de verano tan calurosa.
Cuando empezó a gemir del placer que estaba recibiendo decidió que con la lubricación de sus jugos internos que empezaban a salir de su travieso coño podría empezar a meter su consolador poco a poco, para deleitarse con esa entrada que toda mujer le encanta sentir cuando están solas o cuando tienen a su compañero sexual y las mata de placer. Si, esa entrada lenta y que hacen que sientan por dentro como las van abriendo, y claro con ese movimiento lento pero prolongado de su juguete, ella no pudo contener más y empezó a jadear, tanto era el jadeo que pensó incluso que había tenido un pequeño orgasmo, pero su vagina no había vibrado, aunque le faltaba poco, por lo que quiso intensificar su excitación y bajo las bolas chinas a su clítoris, en donde le puso la vibración de martilleo continuo y eso hizo que viera en las ondas del agua alrededor de las bolas como era la excitación que le iban a producir.
Laura en ese momento realmente necesitaba tener el orgasmo pero no le llegaba por lo que apretó con su mano izquierda las bolas que estaban pegadas a su clítoris y con su mano derecha empezó a follarse su coño tan rápidamente como podía y claro al fin estallo en un grito, producido por una vibración casi volcánica nacida del interior de su coño. Al fin tuvo su primer orgasmo que la hizo mantenerse con las piernas abiertas pero sin apenas hacer mucho movimiento, ya que su cadera no paraba de vibrar, su coño no paraba de moverse contrayendo su interior, sus muslos seguían la vibración y las bolas chinas empezaron a subir lentamente de su posición, flotando ellas solas y haciendo esas ondas acuáticas porque seguían vibrando, mientras su consolador, atrapado por su vagina iba escurriendo poco a poco de dentro de ella pero sin salir del todo.
Ella como cualquier mujer en ese momento tenia cerrados los ojos, experimentando esas luces que se le ponen al tener dicho orgasmo y la hizo que estuviera bastante relajada y calmada, pero no estaba aún satisfecha.
Laura me había indicado días antes donde le habían instalado el jacuzzi, ya que en su baño no cabía por lo que tuvieron que hacer algo de obra y ponérselo como en un habitaculo cerrado cerca del patio de su casa, por lo que cuando yo llegué a su casa, sabía que no me podría abrir la puerta, es por ello que me fui por la parte trasera y abriendo con la llave que me dio de la puerta del patio, que además quería que le hiciera varias copias, porque nunca sabia donde ponía dichas llaves, pues entre por el patio.
A través del panel opaco que tenia dicho habitáculo, vi la silueta de ella, bueno, su cabeza, porque según me acerque para asomar mi cabeza, ella estaba casi sumergida dentro del jacuzzi, y la vi que estaba muy relajada, con sus piernas abiertas dentro del agua y con los ojos cerrados, mientras su cabeza reposaba en el borde que hacia la forma del jacuzzi.
Esperé a que ella abriera los ojos, pero parecía que se encontraba en un sueño placentero por lo que la susurre su nombre y fue cuando abrió los ojos. Me sonrío y me dijo que si le gustaba su nuevo juguete acuático, a lo que le dije que realmente me gustaba ella (lo sabía desde hacia mucho tiempo, porque aparte de recordárselo continuamente también le decía que era la mejor mujer que había tenido nunca jamas, y eso no son elogios es la pura verdad, aunque a toda mujer le guste que se lo digan, pero más cuando es verdad, y ella a día de hoy sabe que es verdad). Pero me dijo que lo suyo ya lo sabía y quería saber si le gustaba como se lo habían dejado instalado. En ese momento cerro sus piernas, se saco su juguete de entre sus piernas y se levanto para abrir sus brazos y casi girar como un molinillo dentro del jacuzzi para decirme lo contenta que estaba y lo bien que le sentaba.
A ver, ella es atractiva vestida y desnuda, para que lo sepa todo el mundo. Atractiva para parar trenes, para que haya atascos en todas las carreteras del mundo y encima estaba feliz, ya que tenia lo que siempre había querido y encima con sus juguetes, con su amigo que estaba viéndola radiante, por eso cuando me dijo que me desnudará y fuera a probarlo con ella, le tuve que decir que todavía no podría hacerlo. Si. Lo sé. Fui gilipollas por decir eso, pero es que yo traía cosas de comer que necesitaban urgentemente estar dentro del frigorífico y o era meterme en el jacuzzi con ella y que se pusieran mala dicha comida o me iba a su cocina y ordenaba todo para luego hacerle una buena cena, porque se lo debía de una apuesta que hicimos y claro, perdí. Por ello cuando le negué con la cabeza que no podía y le enseñe las bolsas de papel que traía, que algunas ya empezaban a tener liquido por abajo, fue cuando me puso una cara de pena y se sentó de nuevo en el asiento de su nuevo jacuzzi. Me puso la cara típica de tristeza y eso aunque no lo crean, llega al alma de uno. Por lo que le dije que tardaría poco y que ella mientras podría seguir jugando con sus juguetes y con el nuevo que le traía yo, porque con un juguete acuático nuevo como tenia instalado en su patio, era la mejor ocasión para un regalo.
Si. Lo sé, la mimo mucho, pero es que ella se merece eso y más. Aparte, me gusta regalar cosas útiles y los vibradores, consoladores, bolas chinas y cualquier juguete sexual siempre son útiles, y soy de provocar orgasmos aunque no esté con ella, por lo que sí, lo digo y repito mucho, la quiero y quiero mimar hasta que se agote de follar y follarse. Las cosas claras, al pan pan y al vino, pues cerveza que está muy fresca ahora. Y que seamos amigos no conlleva a que entre amigos nos mimamos o incluso tengamos detalles para satisfacer nuestra amistad. Y si, soy amigo para sexo pero también para otras muchas cosas, solo que por ahora estamos para lo que estamos. Para follar.
La cuestión es que ella volvió a su trabajo bastante estresado y es que se sentó en el borde de la parte de arriba, y mirándome con cara de pena espero a que le entregara su nuevo regalo, y cuando vio la caja me dijo:
— Joooo ya te vale, no tienes que hacerme tantos regalos, y encima yo estoy mojada y la caja es muy bonita como para mancharla. Andaaa, ¿por qué no me la abres tú y me enseñas como es?— todo esto con cara de diablilla, contenta, alegre, pero a la vez con esa mirada de “quiero que me lo enseñes tú, me lo pongas por mi cuerpo y me lo metas hasta que te cabalgue y te deje seco” que suele poner ese tipo de cara y uno ya sabe cuales son cada una de ellas, es lo que tiene conocerla desde hace más de un año.
La cuestión es que yo nunca compro regalos que no se envuelvan en cajas impermeables, porque siempre hay un liquido cerca que pueda dañarlos, por tanto le indique que el envoltorio con la caja incluida eran impermeables, por tanto podría mojarlo todo lo que que quisiera que no se estropearía. Esa respuesta la hizo sonreír porque no se lo esperaba de mi parte, pero además porque sabia que no había caído en sus redes de “necesito que me hagas caso y lo voy a conseguir” pero ella sabía que la deseaba tanto que haría todo rápidamente para estar con ella, como siempre hago, pero que entendía que la comida si no se ponía dentro de la nevera podría hacer que tuviera que tirar la mitad a la basura y entonces no cenaríamos lo que había comprado, por lo que ella misma, sentada, con las piernas cruzadas empezó a abrir la caja que envolvía ese regalo y cuando la abrió pego un chillido que casi creo que lo oyo toda la ciudad, y eso que no estamos cerca de ella precisamente.
Me giré y la vi con sus manos en su rostro, con la boca abierta y totalmente feliz. Vaya. No sabía que un juguete sexual podría hacer que una mujer se pusiera tan contenta, pero en el caso de Laura por lo visto sí, y claro cuando me acerque a ella, solo hizo el gesto de abrir sus brazos, pedir con el movimiento de sus manos que me acercará a ella, y me planto un beso metiendo toda su lengua caliente dentro de mi boca. Todo hay que decirlo, yo ya había acabado de colocar toda la compra, y estaba preparando unos cócteles de frutas que sé que el encanta a ella, principalmente con plátano, melocotón y un ingrediente que no diré pero que nos pone a los dos perracos perdidos, solo que me faltaba ponerlo en el vaso batidora y algo de hielo para que se picará y nos hiciera unos deliciosos casi batidos, muy energéticos y refrescantes, pero claro con el pedazo de beso que me metió pues me tuve que esperar.
Debo de indicar que yo estaba completamente vestido, tanto es así que no iba con ropa informal ese día, ya que había tenido una reunión importante y estaba vestido con un traje, para esas ocasiones, y claro, la chaqueta estaba en mi coche pero la camisa y el pantalón los llevaba puestos, y claro, al darme ella ese beso, pues Laura sin querer me mojo un poco la camisa que la verdad, incluso lo agradecí, del calor que estaba teniendo. Cuando ella se separo de mi boca y abrió de nuevo sus ojos me vio que me había mojado por lo que poniendo cara de “lo siento pero es que me has hecho muy feliz, solo que te he mojado sin querer o queriendo” pues me empezó a ayudar a quitarme la camisa que estaba toda la parte delantera mojada por haberme aplastado con sus tetas mientras nos besábamos. Yo la deje que lo hiciera, porque sé que le encanta, tanto que siempre después de follar con ella siempre, y digo siempre, le encanta ponerse mi ropa, ya sean camisetas o camisas, ya que la hace sentirse arropada como siempre me indica, y claro eso es otro motivo para que se ponga cachonda perdida y follemos de nuevo con esa prenda mía puesta, por lo que ahora Laura tuvo una dedicación especial en quitarme la camisa.
Cuando ya me la quito, quiso empezar por mi pantalón pero le dije que todavía no, que estaban los cócteles esperando y que iba a por ellos.
Le pregunté por el chillido de antes y me contesto:
— ¿Tú eres brujo o me lees la mente? Es que esta mañana entre en la pagina en donde sé que compras los juguetes sexuales, que siempre me has dicho, y vi esté y casi me enamoro de él, porque me encanta pero no sabía que caja tenia y encima no sabía que serías capaz de regalármelo, por lo que esto si que se merece que te haga hoy lo que tanto deseas, bueno, lo deseo yo más pero quiero hacértelo. ¿En serio que no me lees la mente? Jajajaja.
Yo no leo la mente, jajaja, ojala la leyera pero realmente no es ese el motivo, simplemente que cuando conoces a una persona que es afín a ti sexualmente, que tiene el vicio metido en su cuerpo como lo tengo yo, que encima es muy caliente y a todas horas quiere tener sexo, como yo, y que la conoces desde hace un tiempo, pues casi que sabes lo que le puede gustar y lo que no en temas sexuales y eso hace mucho a una relación sexual, por lo que yo pensé que ese juguete sería lo mejor que podría regalarla para inaugurar el nuevo habitáculo acuático de su casa.
Tengo que decir que siempre que miro en la tienda de sex-shop para juguetes sexuales favorita, soy tan exigente que no pienso solo en mi placer sino en que placer puede dar a la persona a la que quiero regalar o jugar con ella, por tanto, incluso visualizo las posibles posiciones y por ello también sé los orgasmos que pueda producirla, pero eso no quiere indicar que siempre pasé así, al contrario, cada mujer es un mundo diferente para las relaciones sexuales, pero en este caso con Laura sabía lo que todavía no había experimentado con un juguete como era este y ahora lo iba a comprobar y vaya que si lo comprobó.
Me pregunto que era lo que hacía el nuevo juguete pero yo que soy algo cabroncete no le dije nada, simplemente me acerque con las dos copas con los refrescos, me puse fuera del jacuzzi para ver la cara de contenta que tenia ella, que estaba dentro, con el agua cubriendo pare de su cuerpo y diciendo que se sentara y que sintiera como empezaba a darle ese placer por sus pechos fue cuando supe que le iba a tener más cariño que al resto de sus juguetes. Le indique que además, si se sentaba encima de su ventosa, puesta en el asiento, incluso le gustaría más.
Laura no es de obedecer cuando se le dicen las cosas, sino cuando ella quiere hacerlas, pero en este caso me hizo caso, tanto que se sentó literalmente encima de su ventosa, como que yo no veía a través del agua nada de la ventosa y eso que ella se quedo con las piernas abiertas.
Le indique que se tomara un poco del refresco porque eso incluso le vendría mejor para lo que a continuación le pasaría y tomo la copa y se tomo un poco de ese liquido que sé hacerle para su paladar. Luego me dio la copa y puso su nuevo juguete entre sus pechos. Le dio al botón de encendido claramente visible y cerro los ojos. Movía su cadera lentamente pero yo notaba como estaba digamos que haciendo círculos pequeños en su asiento, indicando a mis ojos que le gustaba que la viera como lo hacía y dando por sentado que vería una de las mejores acciones para tener un gran orgasmo por parte de ella. Abrió los ojos y en cuanto me miro ya sabia lo que quería. Tenia claro y no dejaba de mirar a mi pantalón. No hay que decir lo que realmente quería ella, pero no era todavía el momento para ello, por lo que saque de la caja de su regalo como un arnés para invitarla a que se lo pusiera, solo que esa casi braga sexual tenia la abertura en su parte de abajo, justo en donde se queda el coño y el ano cuando te sientas sin tapar, con unos pequeños agujeros. Le puse su nuevo juguete adosado a esa prenda, con lo que solo quedaba el agujero que sería para su coño, y el de su culo lo tapaba el nuevo juguete. Le indique de nuevo que se pusiera de pie, por lo que su ventosa se quedo agarrada al asiento y ella cuando se levanto incluso se dejo parte de sus músculos vaginales algo abierto pero sin entrar mucha agua, porque enseguida se cerraron al juntar sus piernas.
La ayude a ponerse ese arnés que casi parecía una braga y cuando estuvo lista le dije que volviera ha hacerme el favor de sentarse encima de su ventosa. Lo hizo toda ilusionada y cuando se ajusto para que le entrara completamente le pregunte:
— Laura, cariño, ¿qué necesitas ahora para empezar tu largo y bestial orgasmo?
Ella no me contestó, solo señalo a mi entrepierna y me guiño un ojo diciéndome con su dedo de que quería metérselo en su boca.
Pues nada, un hombre siempre tiene que dar placer a una mujer, sobre todo si la mujer es igual o más caliente que el hombre para tenerla complacida y con ganas de más de ese hombre.
Por lo que tomando un sorbo de mi copa de refresco de plátano, melocotón y ese ingrediente secreto, me descalce, quite mis calcetines negros que tengo cuando me pongo el traje y ni corto ni perezoso, me metí con el pantalón del traje dentro del jacuzzi. Ella estaba casi alucinando, pero el placer que sentía dentro de su coño con su ventosa metida hasta el fondo, y esa sensación de tener algo en la entrada de su esfínter la hizo que apenas me mirara, solo que bajara la bragueta de mi pantalón y metiendo su mano, agarro a través de mi bóxer mi polla que ya estaba bastante dura, porque ella ya de por si me excita mucho y en estos momentos lo estaba en bastantes grados. Me acerque más a ella, para que apenas pudiera hacer muchos movimientos, solo que sintiera, y eso que la veía como empezaba a cabalgar sobre su ventosa lentamente, pero supe que en cuanto el nuevo regalo empezará a hacer su labor entonces sería cuando ella se quedaría quieta y sintiendo todo el placer que le iba a dar.
Laura enseguida abrió su boca y sacando su lengua puso el capullo de mi miembro en ella y empezó a saborear, ya que le encanta mucho sentir mi dureza en su lengua y así empezó ella a hacer una lenta y profunda mamada, tanto que su nariz pego contra mi pubis completamente depilado y eso conlleva a que la nena es tragona cuando está muy excitada, como en este momento el caso.
Entonces metí mi mano izquierda en el bolsillo de mi pantalón, y agarre un mando pequeño, que es de distancia, como en casi todos lo juguetes modernos. Entonces esto es lo que ocurrió.
Laura pego un grito con mi miembro dentro de su boca, casi insonoro pero si lo oí perfectamente.
Su culo ya no cabalgaba lentamente, sino que se quedo quieto mientras se sentaba muy lentamente sobre su ventosa.
Se agarro de mis caderas porque estaba empezando a sentir en todo su cuerpo como una descarga eléctrica nacida del interior de su coño y de su ano y recorriendo toda su espalda hasta llegar a su nuca, lo que la hizo incluso ponerse casi erguida.
Voy a explicar con detalle lo que realmente hace ese juguete en la persona que se lo pone, para que sepan realmente lo que ella estaba experimentando en ese momento mientras intentaba hacerme una mamada como le gusta a ella. El aparato hace una vibración en casi todo el arnés, de un alto grado que todo lo que esté en contacto con él, vibra, pero además la ventosa, al estar casi aprisionada por el borde de ese agujero del arnés, hace que tiemble toda la ventosa produciendo unas descargas vibrantes en el interior de donde este metido, en este caso dentro del coño de Laura. Aparte en el ano se empina como un pequeño bulto que realmente te hace sentir como si te intentarán penetrar, pero a la vez es un martilleo constante y eso conlleva a una sensación mental y física de que te estén penetrando también por tu culito, con lo cual, la sensación es una doble penetración en tu cuerpo, cosa que realmente solo está la ventosa metida dentro de ella.
Solo indico que cuando puse el mando en la posición media, Laura tuvo un fuerte orgasmo, tanto que se saco mi polla de su boca, se agarro a mi cadera y sin levantarse del sitio en donde estaba, vibro todo su cuerpo. Pero como yo no paré la vibración del nuevo juguete, pues entonces seguía teniendo espasmos dentro de ella y alrededor, por eso cuando me grito que se corría otra vez fue cuando apague el mando a distancia que tenia dentro del bolsillo de mi pantalón y fue cuando ella pudo echarse un poco para atrás y quedarse sentada, con las piernas abiertas y con una cara de felicidad de cuando la follan bien follada. O dicho de otro modo, una cara de puta con un buen y profundo orgasmo.
Entonces agarre las copas y le ofrecí la suya, pero aún no podía sujetar nada con sus manos ya que su cuerpo le temblaba entero. Me volvió a mirar ahora con una cara que me encanta ver en ella que es esa cara cuando ves a tu chica totalmente satisfecha por lo que yo, estando de pie aún, con el pantalón del traje medio mojado desde el medio muslo hacia abajo, me tome tranquilamente nuestro cóctel del sexo como ella siempre había bautizado este refresco.
Cuando Laura ya dejo de temblar tanto y de casi reírse delante mía porque había tenido uno de los pocos orgasmos bestiales en su vida si quiso beber de su copa, por lo que se la acerqué y vi como la copa temblaba demasiado y en otros momentos la hubiera ayudado a sujetarla pero quería que viera que a veces un hombre es capaz de hacerla temblar tanto que viera el pulso que tenia, por eso mientras yo seguía de pie con mi polla por fuera de mi bragueta y totalmente erecta, mirando a ella deje mi copa en uno de los bordes de la piscina acuática vibrante y me quite literalmente el pantalón que lo deje en otro de los bordes, completamente mojado. Me iba a quitar el bóxer pero ella me indico que no, que lo haría ella pero en un rato, cuando se recuperará de aquel terremoto interno que estaba todavía padeciendo.
Yo esperé de pie porque la verdad es que ver a ella sentada, con las piernas abiertas, sentada, con cara de lujuria explosiva y bebiendo de su copa temblorosa era todo un poema a la sensualidad del sexo bien hecho por eso casi sin esperar mucho agarre mi miembro con una mano y empecé a darme el placer que su boca no me daba, vamos que comencé a masturbarme delante de ella cosa que sé que le encanta ver, porque es lo que la recuerda que todavía no ha sacado la leche que hay dentro de mí y eso le da más ganas de continuar a lo que efectivamente, volvió a incorporarse y estando con su ventosa metida, sin haber sacado nada de su coño, abrió su boca y se metió literalmente toda en ella.
Se agarro de mi culo y empujo más su boca contra mi pubis y con ello consiguió tener una arcada en su garganta que aunque no es lo que la guste tanto, es lo que hace que empiece a sentirse más zorra follando, por lo que comenzó con su garganta y boca a masturbarme mi polla, lentamente, degustando cada milímetro de grosor y largura en su paladar. Saco toda de su boca y babeando y casi con los ojos llorosos por el esfuerzo, trago su propia saliva y me indico que deseaba que la llenara de mi néctar cosa que a todo hombre le encanta hacer, pero para mí no es una de las cosas que más me guste porque necesito mucho estimulo en mi capullo y aunque ella sabe que tardo más de lo normal siempre quiere tragarse mi leche, es una manía suya, por eso como sabía que me estaba excitando viendo como ella tenia orgasmo tras orgasmo con su nuevo juguete y con la situación en la que estábamos, pues decidió hacer lo que muchas mujeres han hecho a otros hombres, esa famosa garganta profunda acabada en un deliciosa y espesante crema de hombre excitado y cachondo.
Laura empezó su maravilloso trabajo bucal, que no es porque yo lo diga, pero madre mía que boca y garganta tiene, y que manera de moverla, es capaz de poner dura a cualquier cosa que se meta en ella, pero claro Laura también sabe como hacerlo, por eso, cuando empezó su trabajo con su boca, lengua y garganta, agarro de mi bóxer para bajármelo hasta los tobillos y entonces, yo alzando una de las piernas hacia uno de los asientos del jacuzzi, levante un poco la pierna, y entonces ella con sus suaves manos acaricio mis testículos y parte de mi culo, en especial mi ano, y sabe como todas las mujeres, que en ciertos momentos de la excitación de un hombre en pleno acto sexual, pasar los dedos por el esfínter hace que nuestro punto P empiece ha realizar el trabajo estimulante, con lo que ella sabiamente haciendo ese ejercicio de relajación supo ponerme más burro que un miura(toro bravo de la ganadería “Los miura”) en plena corrida taurina y claro no pude hacer otra cosa que agarrarla de su melena, no para guiarla que eso no hace falta, sino para que sus pelos no se metieran en su boca, ya que aunque no lo sepan muchas personas, pero los pelos incluso pueden cortar y hacer sangre tanto en la boca como en la propia polla y es tontería parar para curarse, por eso siempre es bueno agarrar la melena de la mujer y tener controlados los pelos para que esa mamada o garganta profunda sea deliciosa para ambos.
En eso que ella empezó a mover de nuevo su cadera, dándose el placer que necesitaba en su coño, perforado por su ventosa que no había salido de ella en todo el momento desde que se sentó anteriormente y que debería de tener ya casi embadurnado de su rico y delicioso néctar, por lo que puse su juguete con el mando a distancia en una velocidad baja, lo que rápidamente hizo que se volviera a producir esa corriente eléctrica nacida del interior de su coño para subir de nuevo por su espina dorsal y llegar incluso a su cabeza. Se estiro en posición diagonal pero ella ahora quería deleitarse con la mamada que me estaba haciendo, tanto para darme el placer que ella estaba teniendo como para darse ella una doble satisfacción, una practica que millones de mujeres les encanta y es estar penetrada por dos sitios, en este caso eran casi tres, pero a Laura la hacia sacar la puta que lleva dentro y que yo sé como sacarla del interior de su vagina y es solo que dando lo que ella quiere en el momento que desea tenerlo.
Yo por la situación en la que estábamos, por el momento sexual que estábamos practicando y porque ya llevaba un buen tratamiento de garganta profunda con vibración auxiliar por su juguete que estaba reproduciendo en el interior de ella pues empecé a tener ganas de tener mi orgasmo pero como conozco muy bien mi cuerpo sabía que necesitaría más, por eso cuando ella metió uno de sus dedos suavemente dentro de mi ano y empezó a mover en círculos muy lentamente no pude controlar mis estímulos y sin pensarlo pulse el botón de velocidad media de mando a distancia, lo que hizo que ella volviera a tener espasmos dentro de su cuerpo, para ser exacto, dentro de su cueva del placer y entonces con mi polla metida en su boca llegando a su garganta se agarro a mi culo con una mano, con la otra movía rápidamente su dedo dentro de mi culo estimulando mi próstata y con la vibración por todo su cuerpo y llegando a realizar una movimiento en su garganta hizo que yo tuviera una boca agitada y acelerando la mamada profunda que me estaba haciendo, notando como respiraba por su nariz, que era el único sitio en donde no le obstruía para poder respirar, pero notando que estaba teniendo otro orgasmo pues mi polla no pudo aguantar mucho más, aunque yo deseaba ya llenar de mi semen pero como tardaba pues solo pude hacer una cosa y es probar la máxima velocidad del juguete, por lo que lo puse a la velocidad alta.
Si lo sé no lo hago. No pongo esa velocidad. Ya que lo que pasó fue exactamente esto.
El cuerpo de Laura vibraba como un ataque epiléptico.
Sus tetas vibraban.
Su culo vibraba.
Sus brazos vibraban.
Su cabeza vibraba.
Su garganta era una vibración constante.
Sus dedos vibraban.
Su coño explotaba como un volcán.
Toda ella vibraba.
Mi polla llego a un punto de explotar dentro de su garganta.
Agarre su cabeza que también vibraba y sacando un poco mi capullo de su garganta deje toda mi leche en su boca.
Entre mis espasmos de la corrida que tuve y entre que ella no paraba de temblar pude bajar la velocidad del mando a distancia a una velocidad lenta.
Acabe de llenar su boca, tanto que salia algo por la comisura de sus labios, al tener la boca cerrada con mi polla metía, solo el capullo.
Cuando acabaron mis espasmos, se la saque de su boca, y ella cerro sus labios para que no se escapara nada de mi néctar y la dejé que pusiera su espalda en el asiento en donde estaba sentada.
Su ventosa parecía que no existía porque la tenia tragada por su cuerpo.
Me senté a su lado, con la polla aún dura y erguida y tocándole un poco su clítoris que estaba tan hinchado que solo con el roce de las yemas de mis dedos volvió ha reaccionar y ella tuvo que cerrar sus piernas en una reacción normal de su cuerpo de que no le tocará nada ya que estaba muy sensible a ciertas caricias, pero dentro del agua esas caricias eran incluso inexistentes al tacto.
Al verla que estaba reventada de los orgasmos encadenados que había tenido instantes anteriores con la mamada que me había hecho, me abrace a ella, mientras ambos estábamos recuperando la respiración del orgasmo bestial que habíamos tenido.
Hubo un momento en que ella que todavía estaba temblando por los espasmos de su cuerpo hizo el movimiento dentro del agua de su mano acercarse a mi polla y al comprobar que estaba aún erecta me pidió que la ayudará a levantarse, cosa que hice sin ningún problema, pero cuando vi como levantaba su culo con mi ayuda y esa ventosa totalmente cambiada de color e impregnada de sus jugos vaginales y de su corrida entonces incluso me excite más por lo que no pude aguantarme más y pasando mis dedos por sus labios note que estaba abierta por sus músculos por lo que podría haber metido mis dedos para follarla, pero pensé que necesitaría que descansará un poco, por lo que la ayude a que se pusiera de pie dentro del jacuzzi, y ella girándose, abrió sus piernas, las puso una a cada lado de las mías, cerrando mis piernas y sentándose encima de mi polla empezó a besarme, con el maravilloso sabor de su boca, su saliva, de mi polla y de restos de mi corrida, y mezclando las lenguas ella sola se sentó encima de mi pene todo erecto por la situación.
Me miro con sus ojos totalmente brillantes y casi encendidos por la sesión de orgasmos que había tenido. Se acerco a mi mano que tenia el mando a distancia. Abrazo mi mano con la suya mientras seguíamos besándonos con las lenguas y tragando esa mezcla de su saliva, mi saliva y mi semen que aún quedaban restos en su interior y apretando un poco su mano a la mía, activo una velocidad que en ese momento me dio igual cual era ya que sentir esa vibración alrededor de mi polla, una vibración producida por un estimulo eléctrico que envolvía parte de palo de carne y que encima estaba metido dentro de su caliente cueva, mientras ella empezaba a mover su culo como si me cabalgará en posición horizontal hizo que ella volviera a tener otro orgasmo tan largo que casi se desmaya encima mía, pero pude controlar la velocidad del juguete para estar duro dentro de ella y que ella no perdiera la consciencia.
Como ella sabe que yo tras mi primer orgasmo tardo bastante o mucho en tener mi segundo orgasmo (nunca he tenido dos seguidos por mi naturaleza) pues Laura empezó a follarme con su juguete, con su coño y con su cuerpo y tuvo varios orgasmos, tanto que ni los contamos, solo sé que cuando estuve a punto de llegar a mi orgasmo estaba anocheciendo, que apenas veíamos nada dentro del habitáculo del jacuzzi y que Laura estaba reventada de tener una sesión sexual de las que pocas personas han tenido en su vida y que desean repetir más veces.
Pero lo que pasó después para que yo llegará a mi segundo orgasmo y que Laura deseará seguir queriendo follar hasta su agotamiento solo queda en la memoria de ella y mía y el día que quiera que lo cuente lo haré, pero hasta ahora no es posible.
Esperamos Laura y yo que os haya gustado esta historia real que hemos vivido y que hemos repetido en diferentes ocasiones y cada una de ellas totalmente distinta en hechos a las anteriores, es lo bueno de tener ambos una imaginación sexual muy activa para poder crear momentos follables tanto excitantes como calientes.
Laura invita a todas las mujeres del mundo que si desean tener unos orgasmos como los que ella tiene, siempre tengan una ventosa en su maletín sexual para así poder darse placer cuando y como quieran y si es en pareja o con un amigo, mucho mejor, ya que el sexo no es solo meter, es también jugar y usar mucho la imaginación no para soñar sino para darse placer.
Besos de ambos para quienes les guste nuestro encuentro y para quien no le guste, pues ellos se lo pierden.