Ventana indiscreta

A traves de mis ventana vi como se tiraban a mi mujer y a mi vecina.

Mi vida sexual nunca ha sido gran cosa, me case porque mi mujer, Silvia, estaba embarazada. Digamos que mi aspecto físico es del montón y mi pene mide unos 15 cm. (No gran cosa). Ella sin embargo es espectacular, bajita 1,59, pero con unas curvas y unos pechos (100 cm.) que el embarazo y posterior parto no desfiguro sino que las potencio. El problema es que yo siempre tengo ganas pero ella siempre pone mil excusas y casi no lo hacemos (1 ó 2 veces al mes) y además todo es muy rápido ya que ella quiere que acabe pronto. Debido a esta abstinencia forzada me dedico a espiar a mis vecinos, sobre todo a una vecina (Katy) del bloque de enfrente que siempre se cambia con la persiana subida y esta impresionante. Por la orientación de mi piso veo toda su habitación lo cual me permite verla siempre aunque se mueva de la ventana. Además debido a que soy fotógrafo de profesión también alguna vez la he filmado en vídeo para luego recrearme mejor. Normalmente lo hago cuando mi mujer duerme, enfoco la cámara, la pongo a grabar y me voy a dormir al día siguiente me levanto, recojo los trastos y luego en el laboratorio hago el montaje de las escenas más interesantes. Hay veces que se olvida de bajar las persianas hasta cuando tiene visita y he de reconocer que a mi vecina le encantan todas las variedades sexuales, lesbico, anal, mamadas, que envidia pensaba yo si mi mujer quisiera hacer todo eso. Un día estaba yo en mi laboratorio para montar la película de la noche anterior, Katy empezó a desnudarse muy sensualmente, estaba hablando con alguien mientras lo hacia, un hombre moreno de apariencia normal al que llamare X. Mientras que ella se desnudaba X se frotaba su aparato por encima del pantalón. Cuando Katy acabo de desnudarse se acerco a él y le bajo los pantalones y los calzoncillos hasta los tobillos apareciendo un miembro impresionante, así en perspectiva media por lo menos más de 25 cm, ella se lo introdujo en la boca y empezó a chuparlo como si fuese un helado de vainilla, en ese momento entro en la habitación otro hombre, llamémoslo W, completamente desnudo y con otro trasto igual de grande que el otro. Se puso detrás de ella y empezó a acariciarla por su espalda. Paso sus manos hacia delante y empezó a acariciar sus pechos. Katy se giro dejándosela de mamar a X y se puso a chupar la de W, mientras que X se desnudaba. Cuando estuvo desnudo le ofreció su polla y ella empezó a chupar alternativamente los dos aparatos. Yo estaba excitadisimo, vi que entraba en la habitación una pareja, iban los dos desnudos y ella iba abrazada a él con sus piernas rodeando sus caderas mientras que él (Le llamare Z) le tenia metida su polla en el coño, y se dirigía andando a la cama. Era mi mujer, no podía ser, Silvia estaba siendo follada por otro y no solo eso, si no que por la manera en que estaban las cosas imaginaba que se la follarian todos. Mi excitación paso a convertirse en ira. Con razón nunca tenia ganas la muy cerda me estaba poniendo unos cuernos como para colgarlos sobre la chimenea como trofeo. Pense en salir corriendo para el trabajo de mi mujer, trabaja en un restaurante de camarera, y pedirle el divorcio, pero me contuve y seguí viendo la cinta. Z la tumbo en la cama y se la follaba con violencia, Silvia disfrutaba como una loca. Que diferente era cuando lo hacia conmigo. Mientras tanto Katy se tumbo en el suelo y W comenzó a follarsela, X se sentó en el sofá y empezó a masturbarse. Mi mujer se corrió lo vi en sus espasmos y en su cara, Z dejo de metérsela a mi mujer se sentó encima de ella y le metió su polla entre las tetas, vaya polla aun era más grande que las otras dos, mi mujer cogió sus pechos y empezó a masajearselos con aquel aparato entre ellos. Se corrió, Se corrió entre esos pechos que yo adoraba, sin quererlo empece a notar como crecía mi polla y empece a masturbarme. Todavía con la leche chorreando entre sus tetas se acerco a X y cogiendo su tranca se la metió en la boca y empezó a chuparla. ¡Que guarra a mí nunca me lo hacia! Decía que le daba asco, claro que le daba asco pero mi polla, que era menuda comparada con esas. Katy se puso a cuatro patas y ofreció su culo a W, la va a partir pense, él se echo saliva en su glande y la apoyo en su ano y de un fuerte golpe le metió el principio de su polla. Katy hizo un rictus de dolor pero no se aparto, él pego otro empujón y se la clavo toda. Esa visión de ver a mi mujer chupándosela a otro hombre y a Katy siendo enculada hizo que me masturbase mas deprisa. W la enculaba cada vez mas deprisa y en la cara de Katy se notaba que estaba disfrutando la expresión de dolor había cambiado por una de placer intenso. Ella se corrió al mismo tiempo que él saco su polla y se corría sobre su espalda. Silvia seguía chupándosela a X y en la expresión de él se descubrí que se iba a correr, efectivamente así fue, y Silvia no separo su boca ni un segundo de esa polla, tuvo que soltar mucha leche porque a ella se le escapaba por las comisuras de los labios. Para cuando acabo de tragarse todo eso Z ya estaba otra vez empalmado. Le dijo algo a mi mujer y ella se acerco a la cama apoyo su cuerpo en ella dejando su culo listo para él. ¡Noooo! Tampoco nunca me había dejado encularla. Él se puso detrás se cogió su polla y sin lubricarla siquiera se la puso a la altura del culo. Con un golpe de caderas se la metió entera, no debía ser la primera vez que le daban por culo porque no hizo ningún gesto de dolor. Z empezó un vaivén que hacia que mi mujer pusiese cara de estar disfrutando. Mientras X, W y Katy se sentaron al borde de la cama mirando el espectáculo. Al mismo tiempo su polla iba y venia Z le daba palmadas en los glúteos a Silvia. Al cabo de un rato de mete-saca se corrieron los dos. Bueno los tres porque yo también me corrí derramando mi leche en el suelo del laboratorio. Quedando los cinco sentados en la cama. A continuación se levantaron y se fueron. Con la relajación que me daba haberme corrido termine de montar la cinta y me fui al restaurante donde trabaja mi mujer. Entre en él y sin decir palabra puse la cinta en el vídeo del comedor, con un destornillador quite todos los botones del vídeo y la televisión, cogí los mandos a distancia, la gente me miraba con cara de asombro. Pero su asombro creció mas al fijarse en las imágenes que ofrecía el televisor. Mi mujer salió de la cocina y todos miraban alternativamente a ella y al televisor. Silvia miro al televisor y vio las imágenes y a mí allí de pie, se acerco llamándome todo lo que se le ocurría y intento apagar el vídeo y la tele, pero no pudo, además con el estado de nervios que tenia no acertó a desenchufarlos. Me fui de allí sin decir palabra y con el dulce sabor de la venganza. En los días posteriores tuve que afrontar varias demandas del restaurante y de mi mujer, incluida la del divorcio, pero no me importo, ya que poco después inicie una nueva vida, con la inclusión de Katy y sus orgías, pero eso ya es otra historia.