Vecina me atiende cuando no está mi mujer en Méxic

Mi vecina me atiende cuando no está mi mujer en México

En 2017 a causa del temblor nos mudamos de la CDMX al estado a una casa que teníamos desocupada, tenía un auto para dar servicio de transporte, pero en la zona que nos cambiamos casi no hay servicios de hecho tenía que bajar hasta satélite o Naucalpan para coger algún servicio, ya no me convenía y dejé de dar servicio, sólo lo hacía ocasionalmente entre los vecinos o recomendados por ellos al punto que prácticamente dejé de trabajar.

En ése tiempo nació mi nieto y mi esposa se iba a cuidarlo por largas temporadas ya que mi hijo y nuera viven fuera de México, se iba por 4 o 6 meses regresaba uno o dos y de volvía a ir, prácticamente vivía yo solo, algunos vecinos me invitaban a convivir con ellos, otros me pedían algún servicio, entre ellos estaba una vecina de frente a mi casa, casada con dos niñas.

Le hice varios servicios a los pobladores cercanos y de ahí hicimos una buena relación tanto con ella como con su marido, aunque éste por motivos de trabajo llegaba muy tarde o hasta el día siguiente, ya que entraba a las cuatro de la tarde en una fábrica a una hora de camino.

Una ocasión llegó mi vecina con una bandeja y la comida, se lo agradecí y le dije que no debía molestarse y ella me dijo que no era molestia que me haría de comer si no diario por lo menos cada tercer día. Así pasó como un mes.

Ella tiene una estética y me ofreció cortarme el cabello y arreglarme la barba y las manos, insistió tanto que un día fui por fin a que me cortara el cabello.

Es una mujer de piel apiñonada, bonitas piernas aunque casi siempre viste de pantalón, unas nalgas no muy grandes, algo de vientre debido a sus dos partos y unos senos bastante grandes, mientras me cortaba el cabello estuvimos hablando de que me parecía el cambio de la ciudad a allá y otras trivialidades, como el área es muy angosta al pasar por sus utensilios había ciertos roces de sus piernas o nalgas con mi codo o brazos.

Cuando quitaba el vello de mis narices al inclinarse sus grandes senos prácticamente descansaban en mi brazo, yo lo movía distraídamente ocasionando que sus pezones se pusieran duros y ya se notaban en su delgada blusa.

Me empezó a decir que pasaba mucho tiempo sólo, que si no extrañaba la compañía de mi esposa etc.; Le dije que sí en ocasiones, ella se sonrió y dijo: si me imagino, yo también a veces extraño la compañía de mi esposo sobretodo cuando no puede venir a casa pues al salir tarde ya no alcanza transporte y se va a casa de su mamá que está más cerca.

Si, somos víctimas del mismo mal le dije sonriente, cuando terminó de cortarme el cabello y ya me iba me invitó un café pues ya era tarde y difícilmente vendrían más clientes, acepté su gentileza y como el local está al frente de su casa nos fuimos a la a tomar el café.

Continuamos platicando cuando una de sus hijas salió de su habitación por un cuaderno y se nos quedó viendo haciendo unos ademanes muy de adolescente como el mover su cabello y su mamá comentó: ay niña coqueta y la niña se metió corriendo a su pieza.

Es muy guapa, dije, no me extraña salió a la mamá

Ah gracias, favor que me hace

No seas modesta, eres una mujer muy atractiva!!si no fueras casada y yo con unos años menos te cortejarla, le dije tratando de halagarla.

Ella muy seria me contestó: en verdad le parezco atractiva?

Mucho y por favor háblame de tú o no somos amigos? Eres muy guapa y te conservas muy bien!!

Se rió y me dijo: ya me dijiste vieja jajaja

No me refería a eso sino a qué muchas mujeres cuando tienen hijos se descuidan y tú aún con dos tienes un lindo cuerpo.

Ella se sonrojo un poco y entre dientes mencionó: ojalá mi marido pensara igual.

Pues si no lo hace debe estar ciego, ni creo que no te diga palabras bonitas.

No de si sea por su horario o que realmente no le intereso pero casi no me busca

Al estar sentados en el mismo sofá y muy cerca uno del otro, yo tenía mi mano sobre el respaldo detrás de su espalda, nos quedamos viendo y al estirarnos por nuestra taza, nuestros rostros quedaron tan cerca que no pude contener el impulso y acercando mis labios a los suyos la besé, ella en un principio trató de retroceder pero al sentir mi brazo en su espalda cedió y la volví a besar y en esta ocasión sí correspondió a mi beso entres riendo su boca.

Rodeó mi cuello y nos besamos enroscando nuestras lenguas mis manos recorrían su cuerpo de su espalda hasta el inicio de sus nalgas y mi otra mano acariciaba su pierna avanzando poco a poco hacia su entrepierna.

Comenzamos a acariciarnos con más confianza, fui desabrochando su blusa besando su cuello y el canalillo entre sus senos, mi mano ya acariciaba su pierna y nalga izquierda, recorriendo su bajo vientre hasta su pubis metiendo entre sus piernas mi mano sintiendo el calor de su entrepierna.

Ella bajó su mano tratando de apartar la mía de su entrepierna, se la cogí y la dirigí a mi paquete que ya presentaba una gran carpa, apretó mi masculinidad suspirando, me besó y dijo: espera

Se levantó y fue al cuarto de sus hijas, las acomodó en sus camas pues ya se habían dormido y regresó más relajada, la detuve antes de que se sentara la tomé de la cintura y bajé el cierre de su pantalón y se lo fui bajando descubriendo una pequeña tanguita amarillo que apenas cubría su vulva de lo mojada que estaba. Acerqué mi cara y pegando mi nariz a sus labios vaginales bien marcados en su prenda la olí y pasé mi lengua.

Ella se estremeció, la voltee e incliné y comencé a besar sus nalgas, ella separó sus piernas y pasé mi lengua por toda su vagina varias veces escuchando sus gemidos y viendo a través del espejo cómo se mordía los labios por el placer que le daba. Le bajé la tanguita y así como estaba empinada me acerqué y le hice sentir mi erección a través de mi bóxer poniendo todo mi paquete entre sus nalgas, ella se movía cerrando los ojos disfrutando el roce.

Saqué mi pene de su encierro y se lo introduje de un solo empujón enterrándole más de la mitad, ella gimió y chilló aaahhhgggyy que grande y grueso!!! Arqueando su espalda. Seguí avanzando dentro de su vagina hasta metérselo completamente y comencé un rico vaivén entrando y saliendo de ella apoyado en sus nalgas acariciándolas, metí mis manos bajo su blusa y brassier y andaba sus grandes senos y jalándola me senté en el sofá y la hacia subir y bajar enterrándose todo mi miembro, se quedó quieta en el momento que sintió la llegada de su orgasmo, yo seguí penetrándola profundamente.

Se levantó sacando mi pene de su vagina y sentándose a mi lado acarició mi pene humedecido por sus fluidos y me dijo: no podemos seguir… estoy en mis días fértiles y no me estoy cuidando..

Me le quedé viendo y sin decirle nada se inclinó me lo besó en la punta y siguió masturbándome mientras yo le quitaba la blusa y el brassier dejándola completamente desnuda y acariciaba sus grandes senos!!! Ella seguía con una mano masturbando mi pene y con la otra sobaba mis testículos.

Levanté mi cadera dirigiendo mi miembro a su boca ella primero se opuso pero seguí insistiendo punteando sus labios con mi humedecido glande mojando sus labios con mi líquido pre seminal, lo saboreó moviéndolos como cuando se los pintan y me dijo: no creo poder es muy grueso!!!

Anda aunque sea la punta, mira cómo estoy!!!

Lo cogió con su mano le dio un beso y abriendo su boca lo metió en su boca, puse mi mano en su cabeza y comencé a ponerle el ritmo a su mamada, se ve que ya lo había hecho pues nunca sentí sus dientes… me dio una de las mejores que he recibido. Pasaba sus labios por todo el tronco como si tocará una armónica hasta mis testículos, los besaba y lamía volviendo a recorrer todo mi miembro hasta la punta y se lo volvía a meter moviendo su cabeza de arriba abajo riquísimo, yo acariciaba su espalda y nalgas deslizando mis dedos entre ellas llegando a sus labios vaginales e introducía dos de mis dedos en su vagina, pasaba su lengua alrededor de mi glande y se lo metía lo más que podía después de un buen rato me masturbaba para que su mandíbula descansara un poco y volvía a lamerlo de arriba abajo, así estuvimos hasta que con mi otra mano sostuve su cabeza y comencé a eyacular en su boca.

Ella quiso retroceder al sentir el primer chorro golpeando en su garganta pero al tenerla detenida con mi mano no se pudo safar tragándose todo lo que salió de mí pene para no atragantarse!!! Siguió chupando hasta que ya no salió nada más dejándolo bien limpio.

Me lo guardé en lo que ella recogiendo su ropa se fue al baño a vestirse, al salir me despedí y me fui a mi casa, al abrir la puerta oí ruido de un auto, era su marido que llegaba!!!