Vecina caliente

Como una vecina seduce a un vecino viejo con su marido consintiendo

Hola lectores. Mi nombre es Adolfo estoy casado y tengo 78 años. Esto es una historia real que me sucedió hace 2 años.

Vivo en un edificio de un pueblo pequeño de Segovia. Siempre he sido activo sexualmente pero desde hace unos años mi mujer ya no quiere follar.

Tengo un polla bastante grande y de momento no tengo problemas de erección, en mi edificio viven varios matrimonios de unos 40, 49años. Pero hay una vecina que destaca sobre las demás morena 47 años con curvas siempre lleva tangas a mí me pone a 100. La veo habitualmente por el pueblo y por el portal a veces me he fijado y baja la basura sin sujetador y tienes unas tetas hermosas con pezones grandes.

Foto real Adolfo

A veces al subir por las escaleras la dejo subir delante para verle el culo y su coño se le marca mucho. No me atrevía a decirle nada hasta un día que no podía abrir la puerta de su trastero que tenemos cada vecino me ofrecí a ayudarla al pasar cerca de ella la roce con mi bulto ya erecto y ella no se retiró.

Note su calentura, y la pregunté oye Macarena así se llama mi vecina cuántos años tienes ella me respondió 47, le dije pues te conservas muy bien. Ella me dijo o sea que te pongo cachondo lo he notado desde hace tiempo. Yo le dije que llevaba mucho sin meterla en caliente y que sólo me consolaba viendo películas y viendo mujeres como tú. Ella contesto que no le importaría aliviarme un poco de mi calentura.

No me corté nada y me baje los pantalones al ver mi polla se puso colorada pero se agarró a ella y empezó a hacerme una paja alucinante .

Me la meneaba hasta que me la puso dura.

En ese momento se bajó las mallas y pude ver que no llevaba bragas y su coño estaba completamente depilado, era enorme chupe sus tetas hasta morirme de gusto. Le pase los dedos por ese coño alucinante y estaba completamente mojada

Ella me dijo que no me dejaba metérsela porque tenía que hablar con su marido para que la diera su consentimiento, porque eran un pareja liberal.Y porque la tenía muy grande y le daba miedo que no le entrará entera.

A mi marido le excita mucho verme enseñar mi cuerpo a abuelitos como tú me dijo.Pero aún así me la meneo hasta correrme como un loco le eche la leche en sus tetas. Después de correrme a un tenía la polla dura.

En ese momento oímos un ruido en la puerta del trastero nos asomamos con cuidado era otro vecino amigo de Adolfo que nos había escuchado y quería unirse a la fiesta. Antonio tenía casi 77 años viudo desde hace 3 años. Vivía encima de mi piso y siempre que me veía por el portal el hombre me miraba con cara de deseo. Me saludó y al verme en pelotas se quedó medio tonto, nunca había visto un coño depilado como el mio. Me dijo a los viejos nos encanta los coños depilados.

Sin darme tiempo a reaccionar me empezó a chupar el coño con mucha alegría. Sin darme cuenta se bajó el chándal que llevaba y dejó al aire un pedazo de polla gorda pero flácida de 20 cm.

Antonio me explico que no se le ponía dura debido a su edad, yo le dije no te preocupes mi marido me dice que soy especialista en ponérselas dura a los viejos como tú. Se la comencé a chupar apenas me entraba en la boca pero al poco tiempo se puso como un palo de dura era enorme. Mientras tanto Adolfo me la metía por mi culo dando unos golpes de polla increíbles. La sacaba y la metía con facilidad a pesar de su tamaño y es que estaba toda mojada, parece mentira estaba con dos vecinos en mi trastero follando con ellos .Los pobres abuelos no aguantaron mucho y se corrieron los dos, para su edad echaron un cantidad de leche enorme. Yo me vestí y me despedí de ellos prometiendo que repetimos pronto con mi marido mirando.

Este es el primer relato de mi vecino viejecito abra más.