Vacaciones en Venecia 1
Las vacaciones en Venecia de Emily se convierten en una aventura inesperadas
Vacaciones en Venecia 1
Europa ha cambiado mucho con la entrada en vigor de las nuevas leyes de esclavitud femenina, pero eso solo ha aumentado más su interés turístico en el extranjero.
Venecia en particular ha recuperado su aspecto más medieval, con ferias y espectáculos en los que decenas de esclavas desnudas son expuestas para su uso y su posterior venta.
He viajado con el resto de mi clase desde Nueva York en un viaje de quince días por Roma, Florencia, Milán y finalmente Venecia; por fin después de doce días de visitar museos e iglesias, los veinticuatro alumnos del grupo tenemos tres días libres para hacer lo que queramos.
El primer día libre, decidí visitar las mejores tiendas de ropa de la ciudad, y aunque Venecia no es Milán o Roma en el tema de la moda, pude comprar una amplia variedad de caros y exclusivos modelos, esa noche junto al resto de mis compañeros salimos de fiesta por la ciudad, aunque pronto me sentí mal y regresé temprano al hotel.
Al despertarme y bajar a desayunar, apenas encuentro a la mitad del grupo, y supongo sonriendo que la noche se ha alargado demasiado para la mayoría.
Aunque en principio no me apetecía demasiado la idea, un poco excitada por la visión todo el día de esclavas desnudas decido visitar el mercado de la Plaza de San Marcos y ver todo lo que allí sucede.
Cuando llego allí, quedo impactada ante la visión de decenas de puestos de venta de esclavas, aunque lo que más me llama la atención es un grupo de unas veinte chicas expuestas en el medio de la plaza. Me acerco a ellas con curiosidad y al verme uno de los guardias de la plaza se acerca a mí.
‘Buongiorno signorina, sono Giacomo, ¿posso aiutarla?‘
Intento responder al guardia con el poco italiano que se, aunque pronto me veo interrumpida.
‘¿Americana?’ me pregunta el guardia, a lo que contesto moviendo la cabeza sin hablar.
‘Tranquila Señorita, la hablare en inglés, soy Giacomo, ¿puedo ayudarla en algo?’ me dice el guardia.
Paso la mirada de las jóvenes al guardia una y otra vez sin atreverme a preguntar.
‘Le gustaría saber qué pasa con esas jóvenes, ¿No es así?,’ me dice sonriendo.
Con la cara roja por la vergüenza, solo puedo mover la cabeza afirmativamente.
‘Algunas de esas jóvenes han sido dejadas por sus novios esta noche como muestra de amor, pero la mayoría han sido encontradas borrachas por la noche sin ninguna identificación, si nadie las reclama antes de las cinco, serán vendidas como esclavas una hora después;’ me explica Giacomo.
Mirando de nuevo a las jóvenes, por fin me atrevo a hablar, ‘Lo siento, me llamo Emily, ¿Y sus novios vuelven a por ellas?, le preguntó.
‘La mayoría de las veces vuelven a por ellas, y cuando las liberan las piden matrimonio;’ me responde, ‘Aunque algunos esperan a que sean vendidas para comprarlas y llevárselas a casa como esclavas; sin embargo, algunas acaban aquí engañadas y son vendidas a burdeles de toda Europa,’ añade.
Tiemblo al oír las palabras de Giacomo y miro de nuevo a las jóvenes buscando alguna chica que tenga pinta de acabar seguro en la subasta.
Giacomo nota mi curiosidad y se acerca a mi pegando su cuerpo demasiado; ‘La morena que está de rodillas, es la tercera joven que trae el mismo hombre esta semana, se lleva un 20% de la venta, esta es virgen, con lo cual se llevará un buen dinero;’ me dice besándome el cuello al acabar de hablar.
Me siento excitada ante esa caricia, pero no me separo de Giacomo, que sigue hablándome, ‘Todas las jóvenes son de uso libre, hasta que las reclaman o llega la hora de la subasta, las jóvenes arrodilladas son para uso oral, las que están en posición invertida están disponibles para que las coman en coño y las sujetas en las picotas lo están para uso completo.’
Mientras Giacomo sigue explicándome las cosas, noto como mete una mano entre los botones de la blusa apoderándose de una de mis tetas, mientras lleva la otra mano debajo de mi falda hasta colocarla sobre mi coño húmedo, ‘Como te he dicho, me llamo Giacomo, si esta noche sales por la ciudad, búscame en el Palace y continuaremos con esto;’ me dice retirando sus manos de mi cuerpo y alejándose de mí.
Necesito unos minutos para recuperarme de la sensación, y solo un coro de gemidos me devuelven a la realidad; dos de las jóvenes de las picotas están siendo folladas por dos hombres que hablan entre ellos como si estuvieran tomando un café y no follándose a dos jóvenes indefensas.
Miro como las dos pollas entran y salen de los coños de las jóvenes; los ruidos que hacen las pollas al entrar profundamente en los coños, se mezclan con los gemidos de las chicas provocando una música casi hipnótica, no puedo dejar de mirar las dos pollas hasta que los dos hombres se corren casi al unisonó llenando los usados coños con otra carga de semen.
Me acerco a otra de las jóvenes encadenadas en las picotas y llevo la mano a su coño encontrándolo mojado y lleno de semen, meto dos dedos en él y siento como la joven gime y susurra algo, ‘Por favor, necesito correrme, llevan horas follándome y no he conseguido llegar al orgasmo.’
Sin saber muy bien porque, comienzo a mover los dedos dentro del coño de la joven buscando su clítoris, nunca he masturbado a otra chica, pero pienso en lo que a mí me gustaría que me hicieran, en cuanto encuentro su botón comienzo a pellizcarlo y apretarlo, solo necesito un par de minutos para lograr que la joven se corra manchando mi mano con sus jugos.
Aunque he llevado a la joven de la picota al orgasmo, sigo sintiéndome muy excitada y me acerco a la joven arrodillada que me ha señalado Giacomo, me subo la falda y me bajo las bragas antes de colocarme delante de ella con mi coño delante de su boca, ‘Chúpame el coño hasta llevarme al orgasmo zorra;’ la digo estirando uno de sus pezones.
No soy lesbiana, y a pesar de haber tenido sexo con varios chicos, nunca me han comido el coño, pero ahora estoy disfrutando más que nunca en mi vida, las sensaciones de la lengua de la joven dentro de mi coño, lamiendo mi clítoris son increíbles, pronto llego al orgasmo, y tengo que apoyarme en la estructura de madera a la que está sujeta la joven para evitar caerme.
Mientras me calmo después del orgasmo y me coloco la ropa, dirijo mi mirada a una de las jóvenes en posición invertida y veo en el muslo un tatuaje de una rosa roja que me resulta conocido; me acerco a la joven y sonrio al reconocer a Mary, la jefa de animadoras de mi clase en esa humillante posición.
Mary es una completa zorra, sabedora de lo que su cuerpo esbelto y lleno de curvas causa en los hombres, no para de lucir ropa que apenas oculta sus encantos; todas las jóvenes que no asumen su liderazgo son dejadas de lado, y eso me ha ocurrido a mí; mirando de nuevo a Mary, veo en esta circunstancia una oportunidad para vengarme.
Mientras juego con dos dedos en el coño de Mary, acerco mi boca y meto mi lengua dentro, arrancándola un gemido, ‘Sabes muy bien Mary, no puedo esperar a contar a toda la clase que la zorra que no para de presumir de sus conquistas por todos los lados es una jodida virgen;’ la digo dándole un fuerte azote.
De primeras, Mary grita y protesta, pero cuando me reconoce un gesto de alegría aparece en su cara, ‘Gracias a Dios que estás aquí Emily, anoche nos emborrachamos demasiado y cuando despertamos todas estábamos aquí, avisa enseguida al Señor Mars para que nos suelten;’ me ordena olvidando su delicada situación.
Un poco sorprendida por las palabras de Mary, me alejo un poco de ella para ver al resto de las jóvenes que se encuentran restringidas, enseguida veo que la otra joven en posición invertida es Carol, su hermana gemela Janet esta arrodillada junto a la joven engañada, las dos jóvenes a las que he visto cómo se follaban son Elena y Tracy, y la joven que me ha suplicado que la lleve al orgasmo es Sofie.
Está todo el grupo de Mary, todas ellas animadoras del equipo, que siguen fielmente las ordenes de la líder; me tomo unos minutos para pensar que hacer y cuando al final tomo una decisión empiezo a hacer fotos a todas las jóvenes en esas posiciones humillantes para luego mandarlas al grupo que hemos creado para el viaje con el siguiente texto, ‘Creo que debéis ver esto, Plaza San Marcos, rápido.’
En cuanto mando el mensaje, vuelvo a acercarme a Mary, ‘Tranquila, ya está todo el mundo avisado, tardarán media hora en llegar, mientras tanto voy a tener mi recompensa por salvarte;’ la digo volviendo a meter la lengua en su coño.
Para ser la primera vez que chupo un coño, no debo estar haciéndolo mal, las negativas iniciales y las suplicas para que me detuviera de Mary, se han convertido en fuertes gemidos de placer y suplicas para que no me detenga.
En la media hora que tardan en llegar el resto del grupo del viaje, llevo a Mary a tres intensos orgasmos y disfruto sorbiendo los jugos de su coño. Cuando levanto la cabeza de entre las piernas de Mary y me vuelvo, puedo ver a todos mis compañeros de clase aplaudiéndome; ‘Joder Emily, pensábamos que estabas de broma cuando nos mandaste las fotos;’ me dice Albert, el quarterback del equipo que lleva meses deseando follarse a Mary.
‘Todo esto es real;’ les digo, ‘Podéis usarlas a vuestro antojo, siguiendo las reglas del mercado, avisaré al Señor Mars para que venga a rescatarlas en dos horas, hasta entonces disfrutad;’ añado con una sonrisa pícara en los labios.
Aunque sé que Albert desearía follarse a Mary, al no poder hacerlo se coloca detrás de Elena y sacando la enorme polla que todos hemos visto en varias ocasiones la coloca a la entrada del coño de la joven, ‘Hace dos meses que no disfruto de un buen coño;’ grita en alto Albert antes de empujar y meter su polla hasta la mitad en el usado agujero.
Me coloco detrás de Albert y observo como el coño de Elena se estira para alojar toda la longitud de la enorme polla; Elena comienza a suplicarle a Albert que se detenga, pero al momento otro de nuestros compañeros fuerza su polla en la boca de la joven obligándola a guardar silencio.
Lo peor para Mary y sus amigas no es que un grupo de doce chicos y cinco chicas se dispongan a jugar con ellas durante las siguientes dos horas, lo peor es que el alboroto creado, ha provocado que dos grupos de turistas de unas cincuenta personas cada uno se acerquen interesados por lo que ocurre y una vez informados por Giacomo y otros guardias del funcionamiento del mercado deciden unirse a la diversión.
Cuando miro al grupo de chicas antes de alejarme, cada una tiene cinco o seis personas esperando para usarlas, aunque la cola de espera de Mary se duplica. No puedo evitar pensar que a pesar de todo la muy zorra va a tener suerte y va a mantener su virginidad intacta; cuando estoy a punto de llamar al Señor Mars para que venga a recogerlas una idea me viene a la cabeza y decido llamar a otra persona.
Al llegar al hotel, veo que el Señor Mars está esperando nervioso en recepción, en cuanto me ve se acerca a mí y me pregunta dónde está el resto del grupo, le miento diciéndole que están visitando los canales y disfrutando de las costumbres locales.
Aunque quiero dormirme, soy incapaz de hacerlo, y solo después de masturbarme imaginándome a Mary siendo follada por decenas de personas consigo dormir un par de horas. Cuando la alarma del móvil suena a las cinco de la tarde, me visto rápidamente y me dirijo sin perder tiempo al mercado. Cuando llego, busco a Giacomo por la zona para que me explique el funcionamiento de la subasta, pero no le encuentro por ningún lado. Al no encontrar a Giacomo, dirijo mi mirada a las jóvenes, y veo como las sueltan de sus restricciones y las llevan a uno de los edificios de la plaza.
No puedo dejar de mirar a Mary que no deja de gritar y patalear mientras dos guardias la levantan del suelo para llevarla hasta la oficina de esclavas; sigo observando la lucha de Mary cuando noto como una mano me agarra por la cintura mientras otra se mete por debajo de mi vestido hasta tocar mi coño.
‘Eres una maldita zorra Emily, te excitas viendo como tus amigas son conducidas a la esclavitud;’ me dice Giacomo retirando las bragas y metiendo dos dedos en mi coño húmedo, ‘Me has hecho perder mucho dinero, aposté con mis compañeros a que no serías capaz de hacer esto a tus amigas y avisarías para que las liberaran, esta noche te espero a la una de la madrugada en el Palace y vas a hacer todo lo que yo quiera para ayudarme a recuperar mi dinero;’ añade pellizcándome un pezón y dejándome de nuevo excitada y sorprendida como hace unas horas.
A las seis de la tarde en punto un hombre trajeado sube a la tarima de la subasta y comienza a hablar, ‘Bienvenidos todos a la subasta pública del 13 de Julio de 2019; hoy vamos a subastar a diecisiete jóvenes que tuvieron la desgracia o la suerte de acabar en nuestras amorosas manos, algunas de ellas son de países donde no existe la esclavitud, pero gracias a los últimos acuerdos aprobados en la ONU, los contratos de compra de esclavas son válidos en todo el mundo, la única diferencia es que fuera de Europa, no podrán pasearlas desnudas por la calle ni follárselas en ningún sitio público, ¡Dios bendiga a la vieja Europa por permitirnos estas libertades!’ añade el hombre entre los aplausos de la gente.
La subasta transcurre rápidamente, cada chica que es subida para su venta, apenas está dos minutos en la tarima antes de ser vendida y llevada de nuevo a la oficina de esclavas para prepararla siguiendo las ordenes de su nuevo dueño.
Aunque todas las jóvenes que están siendo subastadas son auténticas bellezas, a mí solo me interesan mis compañeras de clase, después de media hora de subasta, la primera en subir a la tarima es Sofie, la joven a la que he llevado al orgasmo restringida en la picota, Sofie es una morena de pelo largo, con tetas firmes y amplias caderas, con un cuerpo esbelto y firme gracias a sus muchas horas de atletismo, al no ser virgen, el precio de Sofie alcanza los 37.500 $, Elena y Tracy, son las siguientes, ambas son rubias de grandes tetas y cuerpos mantenidos gracias al pilates y al fitness, son vendidas por 43.000 y 47.000 dólares respectivamente.
No solo es humillante para las jóvenes el estar siendo vendidas como esclavas delante de cientos de personas, a eso hay que añadir los comentarios del subastador, que convierten a las jóvenes en meros objetos sexuales; a la par que las pujas suben, pellizca las tetas de las jóvenes y abre sus coños al público mientras habla de todos los que se las han follado y de las calificaciones que las han dado.
Cuando le llega el turno a la joven que me ha dado mi primer orgasmo lésbico, centro mi atención en el subastador para oír bien sus palabras, ‘Está belleza que tenemos ahora a la venta, se llamas Clara y tiene 20 años, es una turista española que se encontró con uno de nuestros cazadores y se enamoró perdidamente de él, vean sus hermosas tetas y sus estrechas caderas, es virgen anal y vaginal, aunque su boca ha sido bien usada por hombres y mujeres durante todo el día, la puja empieza en 20.000 $.’
Clara es la primera virgen que se subasta y despierta mucho más interés que las jóvenes anteriores, su precio sube rápidamente hasta llegar a la cantidad de 110.000 $; repaso los datos dados por el subastador y calculo que todavía quedan otras tres vírgenes además de Mary y las gemelas.
La subasta se acerca a su fin y ya sólo quedan Mary y las gemelas, no sé bien a quien van a subir ahora, pero cuando veo que suben a Mary no puedo evitar pensar que saben bien lo que hacen guardando los mejores lotes para el final.
A diferencia de las demás, Mary sube a la tarima encadenada, amordazada y con varias marcas de latigazos en sus tetas, cuando la colocan al lado del subastador este pellizca y golpea sus tetas antes de empezar a hablar, ‘Esta perra rebelde se llama Mary, y como alguna de las anteriores chicas es americana y comparten viaje, como ven necesita una mano firme para domarla, pero os aseguro que sus tetas acabaran adorando el látigo, virgen anal y vaginal, ha sido llevada al orgasmo numerosas veces en el día de hoy, aunque varios clientes han hecho una reserva para cómprala, estimamos que su precio será muy alto y las hemos rechazado, comenzamos la puja por 100.000 $.’
Al igual que la mayoría de los espectadores, me sorprendo al oír el precio de salida de Mary, aunque es una belleza de pelo castaño, tetas de tamaño medio y su mayor atractivo son sus ojos azules y sus largas piernas, el precio me resulta excesivo. Repaso la subasta y el precio más alto pagado por las anteriores esclavas han sido los 110.000 $ por Clara, diez mil dólares menos que el precio de salida de Mary.
Las pujas comienzan a subir rápidamente con varios compradores levantando los carteles identificativos, la puja no para de subir hasta que el mismo hombre que ha comprado a Clara hace unos minutos hace enmudecer a todos ofreciendo medio millón de dólares por Mary. Cuando el subastador cierra la puja, el público comienza a aplaudir interrumpiendo la subasta durante varios minutos, en ese tiempo oigo susurrar a varias personas que el hombre es dueño de varios burdeles de lujo en Europa y Estados Unidos y sonrio al pensar en que no están muy lejos de la verdad.
El último lote es doble, las gemelas Carol y Janet suben juntas al escenario y aunque avergonzadas no muestran signos de miedo en sus rostros; ‘Ultimo lote del día, las gemelas Janet y Carol, estadounidenses de 20 años, ambas vírgenes en sus dos agujeros, aunque la boca de Janet ha sido bien usada hoy; imagínenselas besándose y acariciándose antes de tumbarlas en la cama y follárselas por turnos, la puja se abre en 150.000 $;’ dice por última vez el subastador.
Al igual que con Mary la puja sube rápidamente hasta 350.000 $, entonces el subastador sorprende a todos pidiendo silencio, cuando lo consigue se dirige de nuevo a la gente, ‘Vamos a calentar un poco más el ambiente;’ dice mirando a las gemelas, ‘Os vais a besar apasionadamente y luego os vais a tumbar en el suelo a comeros el coño, la primera que haga que la otra se corra no será vendida como esclava.’
La gente estalla en aplauso mientras Janet y Carol se miran sin saber que hacer; Janet reacciona primero y besa los labios de su hermana, para luego empujarla al suelo y colocarse sobre ella.
Al instante las dos hermanas están de costado en el suelo con su lengua en el coño de la otra; los siguientes minutos ambas jóvenes se emplean a fondo, jugando con sus dedos y su lengua en el coño de su hermana para llevarla al orgasmo y así obtener su libertad.
Al poco de empezar el duelo, tengo claro quién va a ser la ganadora, Carol lleva todo el día siendo estimulada y llevada a un orgasmo tras otro mientras que Janet no ha hecho más que utilizar su boca para dar placer a hombres y mujeres, en apenas cinco minutos Carol estalla en un intenso orgasmo en la boca de su hermana Janet.
Después de dejarlas descansar unos segundos, dos guardias ayudan a las gemelas a levantarse entre los aplausos de la gente, que solo se ven interrumpidos por las palabras del subastador, ‘Después de este caliente espectáculo continuamos con la subasta de las dos hermanas, la puja estaba en 350.000 $.’
Janet intenta protestar, pero ambas hermanas son atadas y amordazadas por los guardias, ‘De verdad pensabas zorra idiota que después de ese espectáculo íbamos a dejarte ir;’ la dice a Janet el subastador sonriendo.
La subasta se reanuda con varias pujas más, hasta que, elevando su voz por encima de la multitud, alguien grita Un Millón de dólares, todas las cabezas se giran para encontrar que la voz es la del hombre que ha comprado a todas las turistas americanas.
Nadie se atreve a subir la puja y el subastador da por finalizada la subasta mientras los afortunados que han adquirido una nueva esclava se dirigen a las oficinas para hacer el papeleo.
En pocos minutos la plaza se ha vaciado y en ella solo quedamos el hombre que ha comprado a mis compañeras y yo; le observo detenidamente con interés, es bastante alto y debe de tener unos cuarenta años, musculoso y atractivo con una barba de tres días. Al verme observándole sonríe satisfecho y comienza a hablar, ‘Vas a dejar de mirarme como una tonta o vas a venir aquí y dar un abrazo a tu tío Francesco.’
Me acerco a él y le abrazo sin ser capaz de abarcar todo su musculoso cuerpo, sin soltarme el hombre me levanta del suelo y empieza a dar vueltas girando sobre sí mismo; ‘No me puedo creer lo que ha crecido la pequeña Emily, eres el vivo retrato de tu madre, me alegro mucho de verte;’ me dice dejándome en el suelo.
Apoyándome en su hombro sigo hablándole, ‘Pensaba llamarte mañana para comer, pero todo esto que ha ocurrido hoy con mis compañeras de clase, ha hecho que te llamara antes;’ le digo dándole un beso en la mejilla.
Agarrándome por la cintura, Francesco me guía hasta una de las terrazas de la plaza, ‘Vamos sobrinita, tienes que explicarme lo que tienes pensado hacer con esas siete zorras que he comprado para ti.’
Mientras tomamos un poco de helado, le explico al tío Francesco lo que tengo pensado hacer con mis antiguas compañeras de clase ahora convertidas en esclavas; mi tío no me interrumpe en ningún momento y solo cuando acabo de hablar, me expone algunos de sus pensamientos e ideas.
Cuando llamé a primera hora de la tarde al tío Francesco para que utilizara sus contactos para comprar a mis compañeras de clase sin que ellas se dieran cuenta hasta que ya fuera demasiado tarde, sabía sobradamente que parte de los negocios de la familia de mi madre, tanto en Estados Unidos como en Europa no eran legales, pero lo que yo sabía ni se acercaba a lo que empezó a contarme mi tío en aquella terraza.
‘En cuanto acabé de hablar contigo esta tarde llamé a tu madre para contarla todo lo que pretendías hacer;’ me dice mi tío, haciéndome sentir inquieta por lo que pueda pensar mi madre de todo esto, ‘Después de hablar un buen rato con ella, decidimos que era el momento de contarte algunas cosas sobre los negocios de la familia que tarde o temprano ibas a tener que conocer;’ añade poniendo un tono serio y ceremonial.
Siempre me ha molestado ese tono que algunas personas utilizan conmigo pensando que no me entero de la cosas e interrumpo a mi tío un poco enfadada, ‘Vete al grano tío Francesco, se desde hace años que las empresas de la familia trafican con armas, drogas y Dios sabe que más.’
‘¡La familia nunca ha traficado con drogas!’ me dice mi tío elevando mucho el tono de la voz, ‘Con el tráfico de armas tienes razón, la familia empezó en la Segunda Guerra Mundial y todavía mantenemos la actividad, las armas son la mejor forma de pagar a algunos de nuestros contactos por sus exclusivas mercancías;’ añade volviendo a relajar la voz.
‘Como bien sabes, el origen de nuestra familia se remonta hasta el siglo XI, cuando la República de Venecia comenzó a hacerse con el control del comercio en el Mediterráneo, partiendo de una pequeña flotilla de cuatro cocas pronto la fortuna de la familia creció hasta convertirse en una de las familias más poderosas y respetadas del comercio marítimo en el Mediterráneo;’ me dice mi tío.
Voy a interrumpirle, pero levanta la mano y sigue hablando, ‘Ya sé que toda esta historia te la sabes desde pequeña, lo que no sabes es que la mercancía principal con la que comerciaba la familia en esos primeros años eran esclavos; gracias a diferentes acuerdos comerciales, durante doscientos años tuvieron el monopolio de la compra-venta de esclavos en los principales puertos del norte de África, el negocio se ha mantenido activo hasta nuestros días, centrándose en los últimos años exclusivamente en la esclavitud femenina;’ me sigue explicando.
Antes de continuar hablando y viendo como devoro un helado tras otro, mi tío pide dos platos de vermicelli con le vongole y una botella de Sassicaia 1985, ‘Espero que te guste;’ me dice, ‘Es el vino favorito de tu madre, le gusta tanto que compró la bodega por diez veces su valor;’ añade.
Hasta que no oigo a mi tío pedir la comida no soy consciente de que no he comido nada desde que desayuné en el hotel esta mañana; esperamos a que nos sirvan la comida y el vino antes de seguir hablando.
‘Tu bisabuelo Enrico utilizó durante la segunda guerra mundial los recursos y rutas de la familia para introducir armas y provisiones a la resistencia y facilitar el desembarco de las tropas aliadas; aunque no perdió la oportunidad que daba el conflicto para adquirir algunas mercancías únicas, en esos años consiguió unir a todas las familias bajo su liderazgo haciéndose con el control de todo el tráfico de esclavos en el Mediterráneo.’
‘Cuando tu abuelo murió, tu madre estaba terminando la universidad y acababa de conocer a tu padre; decidimos que yo me haría cargo de los negocios en Europa y ella de los negocios en Estados Unidos, pasando a ser la cabeza de la familia;’ me sigue contando.
‘Hace unos diez años las cinco organizaciones europeas que controlamos el tráfico de esclavos nos reunimos para dar el siguiente paso, gracias a sobornos, chantajes y asesinatos en dos años Europa aprobó las leyes de esclavitud femenina, y nosotros nos repartimos el negocio de la venta y procesamiento de las esclavas;’ concluye mi tío.
Cuando acabamos de hablar, mi tío me dice que ha enviado a mis nuevas esclavas al Centro de Procesamiento que controla la familia. El trayecto hasta allí se me hacemuy corto, apenas digo una palabra procesando toda la información de la que me he enterado esta última hora.
Continuara…..