Vacaciones con morbo (3)
Las vacaciones terminan de forma inesperada. Aun me masturbo pensando en lo que pasó aquel verano con mi hermana, mis primos y los amigos de estos.
La vuelta a casa no tuvo nada reseñable. Volvimos en silencio mientras tratábamos de digerir lo ocurrido. Personalmente le daba vueltas a dos cuestiones, una el que mi hermana fuese lesbiana y dos, el que la novia de mi primo me hubiese hecho la mamada de mi vida. Mire a mi hermana y realmente la vi feliz, supongo que se había quitado el peso de encima, había salido del armario y de qué forma. Mi primo y Pili volvieron sin hablarse pero uno al lado del otro, ni me miraron. Carlos iba el último y seguía excitado, así es Carlos, todo el día empalmado y ahí me las den todas. La parejita, Ronda e Iñaki volvían abrazados pero callados, parecía que intentaban recordar todo lo ocurrido en este día tan largo. Volvimos a casa. Yo con mi hermana Maria y con Sole, y Jose se fue con Pili. No le volví a ver hasta por la noche.
Nada más llegar a casa conecté el ordenador, descargue las fotos de la cámara y me las envié todas a mi correo privado de hotmail, de manera que pudiera rescatarlas más tarde en mi casa si desaparecían de la cámara.
Sentado en el ordenador repasé todas las fotos una a una. Había dos que me ponían, y aun me ponen, a cien por hora. Es una se veía a Ronda agarrando la polla morcillona de Iñaki al salir del río con las picaduras. La mano de Ronda parecía la mano de una niña comparada con el tamaño del aparato del muchacho. La otra es una de mi hermana con los ojos cerrados y una mano que sale desde detrás de ella y se cuela por la braguita del bikini formando un bulto bajo la tela, los pezones están erizados. No pude evitar un calentón pasando las fotos. Cuando hube mirado todos los detalles y sabiendo que en mi correo electrónico tendría una copia, borré todos los archivos.
Llegó la hora de cenar y apareció mi primo. No me habló en toda la cena. Después subimos con las chicas a su habitación mientras mis tios se iban a casa de un vecino a jugar a las cartas. Nos sentamos dos a dos en las camas. Las chicas llevaban unas largas camisetas blancas a modo de camisón. A mi lado se sentó mi prima con las piernas cruzadas como los indios y la camiseta envolviendo sus rodillas. Ella rompió el fuego y preguntó:
¿Te has arreglado con Pili?
No, no le pienso perdonar lo de esta tarde, y a este tampoco. Tu también podías haberla dicho que no...Eres un cabrón... Pero ella...ella siempre está diciendo que su fantasía es hacerlo en público, que le da mucho morbo.
Su mirada estaba llorosa, estaba muy jodido. Mi prima le contestó, antes de que yo pudiese abrir la boca
Ya bonito, pero podías haberla tenido en cuenta para una cosita de esas, ¿no? Yo creo que deberías dar lo comido por lo servido, tu torpeza la pagas con su castigo y punto. Y a este, (me señaló) que le vas a hacer, si a ti se te acercase, por ejemplo Maria y se pusiera a tus pies a chupartela, ¿Le dirías que no?. No me creo nada
Joder , pues yo creo que no tienen el mismo peso las dos cosas, al fin y al cabo lo mío fue una declaración de intenciones y lo de ella fueron hechos. Y vosotras dos también lo disfrutasteis, no digáis que no, el único que resultó jodido fui yo.
Sorpresivamente intervino mi hermana. Yo preferí mantener un discreto silencio hasta que llegase la ocasión de hablar.
Seguro que para ella es al contrario, que tu pienses que ella es un mueble del que tú puedes disponer a tu antojo porque es desinhibida y le gusta el sexo, no te lo ha perdonado, y si sigues poniendote burro, te dejará.
Si, ya sabes como es Pili de taxativa, sobre todo cuando cree que tiene razón.
Ahora tome yo la palabra.
Si te sirve de algo lo siento, pero es que no se que pasó, fue una perdida de papeles general.
Miré a mi hermana y la sonreí. Jose se cruzó su mirada entre las nuestras y dijo:
Ya lo vi, ya. ¿Y estas dos? Eso por no hablar del cabrón de Carlos que menuda paja se hizo. Ese va a morir esta semana a base pajas.
El ambiente sufrió una distensión, mi primo sonrió de la parida que acababa de decir y todos pusimos nuestro grano de arena..
Ya te digo, le va a dar un codo de tenista mortal de necesidad.
Eso si no se le desprende el miembro con gran ruido y nosotros lo oímos desde aquí. Habrá que estar atentos. Y podíamos mandarle a las olimpiadas en la modalidad lanzamiento de lefa, casi nos desgracia y eso que estábamos a dos metros. Si estamos más cerca alguna cae embarazada.
Si da a alguien desde más cerca, lo que hay es una desgracia.
Mi prima, muerta de risa, me apuntó:
Pobrecillo, con todo lo que ha visto hoy.... Porque si investigamos el culo de María seguro que encontramos dos globos oculares entre las nalgas. Vaya repaso que la ha dado.
Jose añadió:
Hombre, con el modelito que llevaba hoy mi niña, a ver quien no la miraba... Y eso que hay gente que decía que era un poco monja...
Un poco monja es la chiquilla, pero yo la estoy curando.
Mi prima se levantó y fue hasta su armario; del fondo sacó una cajita de música de la que sacó dos porros de marihuana.
Uno para los niños y otro para las niñas.
Abrió la ventana de par en par y apagó las luces de la habitación. Dejo encendidas dos velas aromáticas en la mesilla de noche y con ellas encendió los dos porros, pasándole uno a su hermano., Después, se dirigió a mi hermana y la dio un morreo de casi un minuto que le dejo temblando. Yo me empalme, mi primo se empalmó, y no sigo conjugando el verbo porque no había allí mas tíos, pero la metida de lengua que Sole le hizo a María habría hecho empalmar hasta al casto José. Jose les dijo:
Jo, siempre pensé que te iban los tíos, me habéis dejado de piedra esta tarde.
Lo que te hemos dejado de piedra ya lo vemos, hermanito. Y, mira Mari, al tuyo parece que también lo tenemos de piedra..... Pues veréis bonitos, a mi me gustan los tíos y las tías. Y aquí, mi reina... me pidió que la enseñara un poco de mundo. Y en ello estamos. Me alegra que os gustara el modelito, ya le dije cuando lo elegí que con eso puesto iba a tener que recoger los ojos de más de uno. De todas formas si no habéis probado con un tío, no sé como sabéis que no os va a gustar.
Incoscientemente me acorde de la paja mutua con mi primo mientras la mirábamos a Sole masturbarse, y fue a mi a quien me dieron los temblores. Aproveché para coger el porro y darle una buena calada. La marihuana comenzaba a mostrar su efecto y me sentía muy bien. Maria por la expresión de mi cara sacó sus conclusiones y dijo para picarme.
Pues yo creo que mi hermano si que sabe lo que es un tío....
Serás cretina. Tú que sabrás.
Pues por el color de tu cara se adivina que si que has tenido algo con otro tío, venga suéltalo, cuenta, cuenta.
No digas tonterías Mari, no se de donde te sacas eso.
Va venga, si nos lo cuentas, Mári te cuenta como compramos el bikini que llevaba hoy.
Maria miró entre sorprendida y fingiéndose enfadada y contestó a Sole
y tu que contarás, listilla
Inmediatamente Jose dijo
Que hizo con Carlos este invierno.
¿Y tu que sabes de eso?
Yo vi como se la chupabas
Que cabronazo. ¿Y tu que contarás?
A eso respondí yo.
Una buena follada con su novia
Vale, pero primero quiero oír vuestras historias.
Eso, primero que mi hermano cuente como se lo montó con un tío.....
Bueno no me lo monté, fue solo una paja.
Da lo mismo cuéntalo ya.
Bueno pues llevaba una noche de mucha excitación, vamos que estaba salidísimo y vi a alguien mirando una cosa muuuuyyyyy excitante y masturbándose. Estaba tan caliente que me puse a su lado y me masturbe también y en un momento de excitación a tope nos intercambiamos las manos. Y yo tome su polla, os juro que es la primera ve que cogía una polla que no fuese la mía. El caso es que nos corrimos en menos de un minuto, yo creo que a él también le gustó. Y los dos somos hetero, pero....
Mi hermana preguntó
¿Que mirabais que os excitó tanto?
A una tía masturbarse
¿Y como es que estabas tu primero tan salido?
Porque había oído y medio visto follar a una pareja. Fue la hostia esa noche, si no me hago una paja me habrían explotado los huevos.
Mi prima pregunto, y mientras lo hacía, note que el ambiente de la habitación se estaba cargando y mucho.
¿Y no nos dices quien era el? ¿Fue hace mucho?
Jajaja, se dice el pecado y no el pecador.
¿Y fue como cuando te lo hace una chica?
Hombre....
Mi prima se sentó a mi lado y me preguntó al oído con voz susurrante que todos podían oir.
¿Y hoy estas tan excitado como ese día?
No, ese día no podía más.
Claro, es que hoy ya te la han mamado, ¿no?
Joder, tía, que se va a mosquear otra vez tu hermano
Cuando terminemos de contar las historias ya me dirás si estás como aquel día.
¿La pareja que viste follar te dejó mirar o eras un mirón?
Estaba de mirón, aunque no esperaba encontrarme con eso, quizás por eso me calenté tanto, era muy morboso. Pero prácticamente no vi nada, solo oí.
¿Y que decían?
Guarradas, no se, era una relación un poco sadomaso, fue curioso. Se trataban de forma ruda, un poco salvajes, se decían barbaridades.
¿Eran conocidos?
Si
¿Quiénes eran?
Si te lo digo.... ¿acaban las preguntas y pasamos a la siguiente historia?
Venga
Eran tus padres
¡Anda ya! Buajjjj, solo de pensarlo....
Cayó como una bomba y se produjo un momentáneo silencio. Me di cuenta entonces que eso suponía que mi relación homo había sido en este viaje, que tenía mi primo todas las papeletas para ser el otro, y que la persona a la que habíamos visto masturbarse....
Mi primo, que tampoco sabía lo de sus padres, se lo tomo deportivamente y sin pensar que a poco que pensaran sabrían que el otro de la paja era él, dijo:
Pues ahora mi primita tiene que contar como hemos elegido ese bikini tan elegante que llevaba hoy
Mi hermana se puso colorada y se colocó sentada con las rodillas apoyadas en su pecho y la barbilla sobre ellas. Empezó a hablar muy bajito pero audible.
Pues fuimos al centro comercial. Sole eligió tres bikinis, de distintos tipos, ninguno me gustaba, eran cortísimos, lo iba a enseñar todo. Insistió en que me iban a quedar bien y entré a probármelos. La chica que controla las prendas que te vas a probar me acompañó a la ultima puerta de la batería de probadores. Me quité la ropa y me probé uno rosa muy chillón a la vez que escueto. Amarraba con cintas y apenas me tapaba los pezones. Sole abrió la cortina de par en par una vez lo tuve puesto y no se percató de que un chico se estaba probando el bañador en el probador opuesto y le veía reflejado en el espejo por la rendija que se había quedado abierta en la cortina de su probador.
No seas ilusa, nena. Ya le había visto cuando entramos, y él a nosotras. Se estuvo cambiando el mismo bañador todo el rato. Mientras tu te quitabas la ropa dentro, yo estuve provocándole sacándome el tanga por encima del pantalón y agachándome para que imaginara. Tienes que fijarte más.
Bueno, el caso es que yo le vi mirar mientras me giraba para verme en el espejo. Sole me dijo que me pusiese el segundo conjunto, y cuando intenté cerrar la cortina me dijo que la dejase así. Me dio vergüenza y me di la vuelta para quitarme la braguita del bikini y rápido me puse la siguiente.
Cuéntalo todo, guarrilla.... Cuando se agachó comprobé si le estaba gustando y pasé un dedito por su culo, desde bien abajo hasta el rabín. Y vaya si nos estaba gustando, estaba chorreando, me giré hacia donde sabía que el chaval me veía perfectamente y me chupe el dedo.
Claro, así que cuando me puse de nuevo delante del espejo y miré de reojo al espejo del otro probador lo que vi era un empalme inmenso. Ahora miraba descaradamente y no hacia nada por disimular. El caso es que este otro bikini no me estaba bien de teta , así que me probé el último, que es el que me habéis visto puesto.
Si, solo que la guarrilla de tu hermana esta vez se lo quitó de forma que el chaval pudo admirar lo generosa que ha sido la naturaleza con ella.
Mi hermana puso cara de niña buena y dijo:
Incluso se metió la mano en el bañador y empezó a tocarse.
Y este zorrón de familia que tenéis, empezó a posar y a colocarse las tetas dentro del bikini, tanto que yo misma me calenté más de lo que yo quería. Así que empecé a acariciarla las piernas, a besarla...hasta que vi movimiento en la entrada de los probadores y entré en el probador y cerré la cortina.
Yo me asusté pensando que nos habían visto y me pude la falda vaquera y la camiseta corriendo. Recogí las bragas y me las guardé en el bolsillo.
Yo mientras miraba lo que pasaba por la rendija de a cortina. La chica de control llego hasta el probador del chico con una señora detrás que decía no se que de indecencia. El chico estaba tratando de ponerse los pantalones sin gayumbos ni nada. Y tartamudeo para decir "me me me los llevo"
Todos nos reímos, sobre todo mi primo y mi hermana. Se descojonaban con una risa loca que nos hacia reír también a Sole y a mi. Sole siguió contando mientras mi hermana se recuperaba de la risa:
Al salir el chaval estaba pagando todavía en la caja. La cara la tenía incandescente ya que todas las dependientas lo miraban. Al pasar junto a él para pagar, tire de la goma de las bragas de tu hermana que asomaban en el bolsillo de la falda, y haciéndolas una bola se las puse en la mano discretamente, pagamos y nos fuimos.
Yo atiné a preguntar:
¿Y volviste a casa sin bragas?
Sole, riendo abiertamente
Nos subimos en el autobús y hasta tomamos una cerveza antes de subir a casa.
Joder con mi hermanita, y yo pensando que era una monja
Puso cara pizpireta y dijo:
Era, hermanito,....era
Mi primo estaba salidísimo con la historia y quiso saber.
¿pero te gustan los tíos, o las tías?
Me gustan los dos, aunque solo he hecho el amor con Sole
¿Habéis hecho el amor aquí, en casa? ¿cuándo?
Mi prima intervino:
Bueno hermanito, no te pases. Eso es cosa entre ella y yo.
Joder, es que me da un morbazo que te pasas.
Toma, y a mi que os hayáis hecho tu y este una paja mutua....
¡Y tu que sabrás!
Pues no hay que ser muy lista para deducirlo de lo que ha contado tu primo.
Jose pareció caer entonces en la cuenta que todo lo que yo había contado, con pocas suposiciones más, llevaba a que nos habíamos hecho una paja él y yo. Siguió hablando:
Bueno, no te hagas la sueca, te toca contar lo de Carlos este invierno.
¿Quieres cambiar de tema? ¿No nos vas a decir si te gustó?
Jose puso de cara de enfado y repitió haciendo mueca:
Es una cosa entre el y yo, es una cosa entre el y yo. ¡Una mierda te voy a contar nada!. Te toca a ti.
No tiene mucho que contar.
Claaaaaro, Claaaaro. Pues cuando yo te vi estabas de rodillas y con su polla en la boca.
Te digo que no tiene nada que contar, porque no duró ni dos minutos. El hijoputa de él se corrió en dos minutos. Y el muy cabrón me agarro la cabeza y me sujetó mientras se corría en mi boca. Casi me ahoga, debía llevar un mes sin correrse.
Mi hermana tenía cara de asco y comentó:
Puja, ¡Que asco! Que cerdo.
Tampoco será eso mujer. Yo he probado lo mío con el dedo y tampoco está tan malo. Un poco ácido quizás.
Todos miramos a mi primo y Sole le dijo:
Ya guapín, una cosa es probarlo un poco y otra que te metan la polla hasta la garganta y se corran como si fuese a terminar el mundo. Me puso perdida la camisa y el sujetador. Y encima me dejo más caliente que un volcán porque el cabrito de él tenía tal pedo que no acertaba ni a metersela dentro del pantalón. Total, que me tuve que venir a casa, meterme en mi cama y hacerme una paja reparadora. Lo que os puedo asegurar es que ese cabrón no me va a volver a poner las manos encima. Y ahora, bonito, te toca contarnos ese polvo con la Pili.
Sí, y luego se lo decís, y la pierdo definitivamente. De eso nada.
Protestamos
¡Ese no era el trato!
¡No seas cabrón!
Si no lo cuentas ya podéis arrancar a vuestra habitación y mataros a pajas si queréis.
Mi primo se levantó haciendo ademán de irse, pero mi prima fue más rápida y salto sobre él. Cayeron los dos sobre la cama con Sole encima del estomago de Jose. Medio en bromas todos saltamos sobre él. Yo la ayudé a agarrar los brazos y mi hermana a duras penas podía con los pies. No se si conseguimos reducirlo o fue él el que se dejo reducir, el caso es que mi prima enseñaba la totalidad de sus piernas mientras permanecía sentada sobre el estomago de Jose, y mi hermana abrazaba sus pies con mirada divertida. Sole dijo sonriente:
Ríndete, miserable y cumple tu trato, o tendremos que torturarte.
Nunca, no pienso contaros nada, que luego todo se sabe.
Tu mismo.
Sole echó las manos hacia detrás de su culo y palpó por encima del pantalón de su hermano.
Vayaaaaaa, parece que esto te alegra al muchacho eh? Pues hala, ya puedes ir a darle gusto, capullo.
Nos hizo un gesto para que le soltáramos y se levantó de su estómago. Jose tenía otra vez cara de mosqueo.
Ya os he dicho que no pienso contar nada de mi novia. Iros a tomar por el culo.
Y salió de la habitación dando un portazo. Nos miramos sonrientes y le oímos entrar en el baño. Les dije a las chicas:
Otro codo de tensita en ciernes. Y si no os importa yo también me retiro. Os dejo solas, pero no hagáis guarradas...
Jajaja, seguro además.
Me fui a mi habitación y me acosté. Me dormí antes de volver mi primo, entre sueños de mamadas, refocilamientos familiares y otras guarrerías varias.
Pasaron un par de días sin nada que reseñar. Hizo mal tiempo y lo dediqué a retomar el tema de los libros. Aquella mañana estaba sentado estudiando. Mi primo había salido a buscar a su novia, mi tío estaba currando, y mi hermana y mi prima se preparaban para salir, en una ardua labor que llevaba horas de trabajo.
Conecté el ordenador y navegué un rato sin especial interés por nada. Me baje un par de juegos de demo y después me aburrí de ellos y los desinstalé y los tiré a la papelera.
Por casualidad, después de borrar la papelera, se me ocurrió buscar los archivos que hubiese en disco .jpg y descubrí una carpeta con fotos de mi primo. Había un montón, e incluso algún pequeño video. También observe que este ordenador tenía conexión con otro por red que se llamaba como mi tío, con lo que supuse que mi primo y mi tío compartían red, seguramente para las conexiones a internet. El pequeño demonio que todos llevamos en el interior me hizo comprobar los accesos a ese ordenador. Nada, solo conexión a una carpeta compartida que no tenía nada reseñable. ¿Y si bajara al cuarto de mi tío y me diese acceso total al disco desde aquí? Algo temporal, me dije a mi mismo, algo que no se notara mucho.
Salí de mi cuarto y baje a comprobar quien estaba por casa. Mi tía estaba en el jardín y no parecía haber nadie más. Mi hermana y mi prima permanecían en su habitación, así que me dirigí al cuarto contiguo al suyo que era el de mis tíos. Abrí la puerta despacito y me introduje en la habitación. El ordenador estaba encendido con el monitor apagado. Tras encenderlo vi que estaba conectado a emule bajando algo que no entré a comprobar. Sencillamente abrí su disco duro y lo compartí de forma completa. Después, salí de la habitación lo más discretamente posible, no sin antes haber apagado el monitor y haber dejado todo en el mismo estado. Pasé la puerta del baño y entré en mi habitación. El gusanillo de lo prohibido recorría mi cuerpo y me senté rápidamente a cargar el disco de mi tío desde la distancia.
Comencé la búsqueda de formatos de foto o de video. Ahora mismo no se muy bien que es lo que esperaba encontrar, pero de pronto comenzaron a aparecer muchos archivos con nombres ininteligibles. De entre todos ellos había un par de ellos que me resultaban familiares y los abrí. Me llevé una buena sorpresa. Eran las dos fotos de Ronda e Iñaki que tomé en su casa. Parece que mi idea de piratear la información de otro ordenador de la casa no era muy original y el padre o la madre de la criatura se habían adelantado.
Rápidamente copié todos los fichero que me decían algo, es decir las fotos y los videos al ordenador desde el que estaba operando. Cuando terminó la copia, me aseguré de que esa carpeta estaba protegida contra miradas indiscretas y decidí volver al ordenador de mi tío a dejar el disco como estaba, es decir, sin compartir. Escuché en el pasillo y no oí más que la música en el cuarto de mi prima, así que me dirigí silencioso y entré en el cuarto. Encendí el ordenador y dejé el disco como estaba antes de la copia de archivos. Apague el monitor y oí un ruido. Alguien se acercaba por el pasillo. Miré a mi alrededor con mi mente funcionando a todo gas. Lo más simple es siempre lo más efectivo, así que me tiré debajo de la cama. A tal tiempo entró mi tía en la habitación. Podía ver unas playeras y calcetines blancos que se aproximaban a la cama y dejaban algo encima. Después vi caer una camisa. Se quitó, apretando contra el pié opuesto y sin desabrochar los cordones, las deportivas; cayó un pantalón vaquero que quedó arrugado en el suelo. Uno de los pies dejó de pisar el suelo, y apareció una braguita de las de cordón lateral de color negro. Después se levantó el otro pie y exudando fragancia quedo expuesta ante mis narices la ropa interior de mi tía. Los pies, aun con calcetines, se dirigieron al baño y se oyó el ruido de la ducha. Mi corazón se salía por la boca. Tenía que salir de allí aprovechando la ducha.
Esperé a oirla entrar en el agua y salí de debajo de la cama lo más rápido y silencioso que pude. Y al acercarme a la puerta oí que salían para la parte de debajo de la casa mi hermana y mi prima. Esperé a que sonaran sus voces abajo y salí. Tenía los nervios destrozados y mi corazón iba a mil por hora, tanto que el llegar a mi habitación me supo a estar a salvo de todo. Me senté delante del ordenador. El gusanillo de lo prohibido seguía en mi estómago. Comencé a abrir archivos, Fotos antiguas, no tan antiguas, familiares, de amigos, en verano, en invierno. Nada raro en suma. Fui metódicamente abriendo todos los archivos hasta que llegue a las carpetas que estaban en tercer nivel de profundidad. Primero di con algunos desnudos de mis tíos, algunos por la casa, otros en la playa. Hasta que llegue a unos en los que mi tía enseñaba su coño y sus tetas en sitios públicos aprovechando que no había nadie o que no miraban. Los había en el aparcamiento de un supermercado, en un paseo marítimo. Vaya con mis tíos. Y definitivamente mi tía estaba buenísima. Seleccioné un par de fotos, las que más me ponían y las mandé a mi correo electrónico para disfrutarlas más adelante. Concretamente una en que la sonrisa de complicidad de mi tía, enseñando un coño completamente afeitado, me cautivaba. La otra era en una playa y mi tía estaba tirada en la arena completamente desnuda y abierta de piernas, los ojos cerrados y los pezones de punta.
Más adelante encontré la parte porno que ya adivinaba que tenía que existir. Y vaya si existía. Contrapicados de la cara de mi tía con una polla metida hasta las bolas en su garganta y una mirada suya implorante. Corridas en su cara y en su pelo. Fotos de folladas a cuatro patas, en fin, un festival porno que hizo que se me pusiese más dura que las rocas del campo. También había fotos de mi tío, desnudo, con el rabo tieso, apoyandolo en el culo de ella, e incluso con un consolador en el culo y corriéndose sobre su propio estomago. Un reportaje amplio y muy interesante, sin duda. Le cojí a mi primo un CD y me hice una copia completa. Borré todo y guardé la copia como un tesoro.
Mientras hacía esto me acordé de que no había mirado los fichero del ordenador de mi primo. Pelis porno, fotos guarras, unas cuantas fotos de Pili, algunas en bikini, pero poca cosa más. Me abrí la bragueta, saque la polla y me hice una paja por todo lo alto mientras miraba el cuerpazo de Pili en aquel bikini azulito y aquella sonrisa placentera. Al terminar me limpié con un cleanex, cerré el ordenador y me fui a duchar.
Pasaron los días y apenas vi a mis primos y a mi hermana. Estuve toda la semana combinando los estudios con las salidas nocturnas con Carlos e Iñaki. Ronda se había ido con sus padres de vacaciones y a Iñaki no le quedó más remedio que cambiarnos por su novia. Hicimos el crápula todo lo que pudimos, pero de follar nada de nada.
Y llegó el sábado anterior a nuestra vuelta a casa. Mis tíos se iban a un pueblo cercano de fiesta con unos amigos, y nos planteamos el hacer una barbacoa para comer y fiesta por la tarde en casa. Ronda ya había vuelto de las vacaciones con sus padres, así que íbamos a estar todos juntos por ultimo día en el verano.
Montamos una barbacoa en el jardín. El día acompañó y hacia bastante calor, lo que redujo el numero de prendas de vestir a bañadores en el caso de los chicos y a pantaloncitos cortos y bikinis en las chicas. Tomamos el sol y jugamos con las mangueras del jardín para refrescarnos. Nos tumbamos después formando un circulo, empapados de la cabeza a los pies. Sole dijo con tristeza:
Bueno chicos, se acaban las vacaciones...
Noté como mi hermana tenia los ojos brillantes, se estaba guardando las ganas de llorar. Así que dije:
Venga, venga, no os pongáis así, que no se acaba el mundo. Han sido unas buenas vacaciones, pero nos queda todo el día de hoy, disfrutémoslo. ¿Qué os parece que hagamos?
Pues divertirnos Agregó Iñaki- Yo he traído cervezas.
Y yo tengo tres o cuatro porritos Sole se levanto y fue corriendo a buscarlos.
Mientras Sole buscaba los cigarros de marihuana, Ronda se sentó cruzando las piernas como los indios y dijo:
Pues venga, que os parece si jugamos a contar relatos.
¿Relatos? ¿Qué tipo de relatos? Contestó un poco despectivamente Carlos
Pues relatos de lo que quieras, se vota entre todos y gana el que consiga llegar con su relato a los demás, el que consiga producir alguna sensación en los demás. Eso sí, han de ser verídicos aunque no tienen porqué haberos pasado en primera persona.
Uffff, parece un rollo.
Pues no tiene mala pinta, siempre que empiece alguien que no sea yo. Dije, a lo que Ronda añadió guiñando el ojo a Carlos
Además, no me has dejado decirte que los relatos tienen que ser un poco subidos de tono. Siendo así seguro que no es muy costoso que el relato te produzca alguna "reacción"
Muy graciosa. Te creerás que es tan fácil calentarme...
No es que sea fácil, es que lo podemos hacer cuando queramos
Que apuestas a que no..
Jajajajaja, mira que eres bocazas, si te pasas el día empalmado. Mira si quieres te apostamos, estoy seguro que todas, a que si al terminar la ronda de relatos no estas empalmado como un mono, nos despelotamos todas. Pero si te empalmas como es habitual, tendrás que recibir un castigo por nuestra parte.
Hecho, pero os despelotais todas, sin excepción y aquí en medio.
¿Chicas?
Todas asintieron, era jugar sobre seguro. Sole se incorporó al grupo y estuvo de acuerdo con el juego. Se sentó también cruzando las piernas. Se había quitado los shorts y se había quedado en un bikini de cintas de color blanco. El pelo humedo goteaba sobre sus hombros y pequeñas perlas de agua se deslizaban cuerpo abajo intentando alcanzar la toalla. Mientras discutían sobre quien empezaba o no empezaba el juego miré en derredor. Enfrente mío, a la izquierda de Sole estaba mi hermana. Vestía el bikini del día del río. Los lados del bikini ascendían por sus caderas muy altos y marcaba rajita escandalosamente. Permanecía tumbada boca abajo con la barbilla apoyada en sus manos entrecruzadas y mantenía una expresión pensativa. A su lado, como no, estaba Carlos. Llevaba un bañador amarillo estilo los vigilantes de la playa pero sin músculos. Su mirada insistía en rotar entre las tetas y lo culos femeninos que allí había arriesgando mucho en su apuesta. Me sonreí pensando en que si Carlos tuviera poderes telequinésicos las chicas tendrían que atarse los bikinis con grapas en vez de con nudos.
A la izquierda de Carlos y a mi lado, se encontraban Pili y mi primo Jose. Este al colocarnos en las toallas se había apresurado a colocarse a mi lado separando así a su novia de mi, como si fuese a mamármela cada vez que me viera. El llevaba un bañador tipo boxer negro y ella.... ella llevaba el bikini azulito de la foto. Dios, como estaba esta muchacha con ese bikini.....
Por la derecha de Sole, y entre ella y yo, estaban Iñaki y Ronda. Iñaki bronceado y también con perlas de agua goteando vestía un bañador largo con dibujos tipo africano. Ronda estaba a mi lado y estrenaba un bañador deportivo negro que sujetaba sus carnes, y digo estrenaba porque de su espalda colgaba aún la etiqueta de compra cuando se desprendió de la camiseta por la mañana y la habíamos vacilado por ello.
La discusión acabó con la conclusión de que empezaba Ronda a contar su relato y seguiría el orden en sentido de reloj, es decir, Iñaki, Sole, Mari, etc, a mi me tocó el último.. Ronda comenzó:
El mío es un relato breve y absolutamente verídico. Cerrad los ojos y disfrutad. Le sucedió a alguien que conozco en la universidad. En el colegio mayor en el que estaba esta chica, todos los años las novatas tenían que pasar unas novatadas a principio de curso. Los colegios de chicos hacían lo mismo con sus novatos. A..., la llamaremos Yoli, la sacaron de la cama a medianoche y la hicieron quitarse el pijama y ponerse una sabana en plan toga romana. Debajo solo unas braguitas de algodón blancas y un sujetador blanco también, tapaban de indiscreciones a la toga. Con ella iban otras dos novatas y un grupo grande de veteranas que las llevaron hasta los baños del colegio, allí les vendaron los ojos. Ella no lo sabía, pero los novatos del colegio de chicos habían sido llevados también con toga, y los habían metido dentro del colegio mayor de Yoli.
Después de varias memeces como cantar canciones a dúo y hacer un desfile de moda romana decidieron que era el momento de que estrecharan lazos de amistad y los metieron a todos en uno de los cubículos de los baños del colegio. Los hicieron pasar mezclados chico/chica en lo posible, pues había 3 chicas y cinco chicos; y después empujaron como revisores de tren japoneses para poder cerrar la puerta. Desde dentro escuchaban las intrascendentes conversaciones de los veteranos que aprovechaban para ligar. Yoli comenzó a sentir que en medio de aquel aplastamiento unos dedos se entraban por detrás entre sus piernas. Le resultaba imposible girarse. Protestó bajito para no atraer la atención de los veteranos y que la novatada fuese a más. Girando la cabeza podía ver que detrás de ella había un chico y una de sus compañeras de novatada, pero sólo los veía de refilón. Los dedos, que primero solo tocaban por encima de sus braguitas, se hicieron un hueco hacia su interior. Se estaba mojando, sobre todo de no saber si era el chico o su compañera, aunque ella pensaba que era uno de los chicos aunque solo fuera aplicando probabilidades. Por sus caras, vistas de medio lado, no podía adivinar quien era, pero la estaba poniendo a cien por hora. Uno de sus brazos lo tenía cubriendo su pecho de los aplastamientos, pero el otro lo tenía pegado a su cuerpo, y decidió que este buscara el sexo más cercano. Palpó hasta encontrar una pierna, y amparada en el anonimato de las masas apretujadas, busco la pierna más cercana y ascendió por ella. Tenia los ojos cerrados, no quería saber ni a quien podía corresponder. La pierna no tenía pelos, pero eso tampoco indicaba nada, algunos chicos también se afeitan las piernas, y decidió seguir. En ese momento los dedos que la exploraban a ella llegaron a su ano. Uno de ellos describió círculos sobre él muy despacito. Después continuaron viaje hacia su sexo, hasta dejar la muñeca y base de la mano encajado entre sus nalgas y los dedos apresando su clítoris y sus labios. Volvió a mirar para intentar saber quien era el explorados pero no había forma de girarse, era imposible. De hecho no tenían ni porque ser los que tenia pegados detrás de ella. Me confesó que le daba mucho morbo que fuese la chica la candidata a culpable. Mientras su temperatura corporal seguía subiendo, decidió que su presa sufriese de igual forma. Llegó a la ropa interior, palpó sus nalgas y encajó la mano entre ellas. Su manó bajo con la incertidumbre del sexo a encontrar y le dio al ano el mismo tratamiento que había recibido el suyo. Entre la multitud que abarrotaba el cubículo se percibía un silencio tenso, roto por algún ahogado gemido, que indicaba que las hostilidades se habían roto en todos los frentes. Yoli continuó hacia a bajo en su presa y determino el sexo del atacado, era un varón. Tocó sus huevos con las yemas de sus dedos y apretó el espacio entre estos y su ano justo en el momento que ella se corría ahogando un gemido. Continuo torturando el perineo de su oponente hasta que consideró que los espasmos que notaba se debían a que este se corría. Quitó la mano de su presa y notó como se abría la puerta vomitando personas al exterior del cubículo. Después de otra media hora de pruebas tontas, los veteranos dieron por terminadas las novatadas de esa noche y los hicieron retirarse a dormir. Ronda hizo una pausa-
¿Bueno que os ha parecido? Esto le pasó a una amiga mía este año en la universidad.
Iñaki preguntó:
¿A Vero..., a Yoli? ¿A la Yoli que yo conozco?
Si, a esa Yoli.
Joder, yo que creí que era una mosquita muerta, mira como ha espabilado.
Pues esta es la mas suave de sus historias, de un año para acá se ha vuelto más puta que las gallinas. Ya te contaré la fiesta de la espicha en la facultad de Ciencias.
Ronda paseó la mirada en derredor y al menos reparó en mi rubor, porque su relato me había calentado. Nadie dijo nada y Ronda pasó el turno a Iñaki para que comenzara su historia.
Bueno, pues mi historia empieza un día en que una pareja estaba de vacaciones en la costa gallega. El caso es que los dos tomaron el sol toda la mañana y después de comer ella se quedo tomando el sol y el se fue a dar una vuelta por la inmensa playa que se ofrecía a su vista. Había muy poca gente y la que había estaba separada por muchos metros. Llegado a una zona de dunas el chico paró en seco al oír unos gemidos claramente. Se acercó a las dunas siguiendo el sonido y se encontró con una pareja ....en actitud....., como diría...., porno. Eran de nuestra edad, 17 o 18 añitos los eché yo..... quiero decir..., los echó el prota de nuestra historia.
Jajajajajaj, ¿y como dices que se llamaba ese voyeur de pacotilla? Preguntó mi prima riéndose del lapsus de Iñaki
Eh....Jesús, vamos a poner que se llamaba Jesús. Bueno, ¿queréis que siga? ¿O que?.
Claro, claro.... Sigue... jes...., digo.... Iñaki....jajajajaja
Bueno la chica era muy delgadita, muy delgadita, y blanca como la leche. El era un chaval alto para su edad, delgado también y con la piel aun más blanca que ella. Ambos rubios y a todas luces guiris. El caso es que la chica estaba a 4 patas chupando la polla al muchacho, que gemía como si le estuviesen matando. Ella tenía una tetas diminutas que apenas colgaban de su cuerpo y sin embargo tenía unos pezones larguísimos. El chaval tenia bajado el bañador lo justo para dejar asomar su polla y los huevos que se encajaban contra el cordón de cierre del bañador que estaba anudado.
Jesús se quedó petrificado mirando el espectáculo. Bueno, petrificado en todas las partes de su cuerpo excepto en una. Cuando él estaba a punto de correrse, ella retiró su boca y continuó una masturbación manual hasta que la leche salpicó al muchacho desde la barbilla hasta el ombligo. Joder, la cantidad de leche que pudo tirar el tío aquel, parecía una fuente. Ella se rió y limpió su mano en el pecho de él, después le dijo algo y subió a cuatro patas por encima de él hasta colocar su coño a la altura de la boca. Él apartó la braguilla del bikini y entonces...vio a Jesús.
Jajajajaja, a Jesús, ya lo había visto antes, y a los ángeles. Jajajajaj Se rió con ganas Ronda. La de detalles que conoces de la historia ¿no?
Joder, dejad que termine ya, ¿no? La interrumpió las risas Carlos.
No eras tú el que no se excitaba tan rápido.... el duró entre los duros....
Mi prima dijo esto mirando desafiante a Carlos.
Jajajaja y tanto que duro, duro como una piedra que debe tener el Carlitos el badajo. Jajajaja Ronda no dejaba de reír y yo sembré la paz antes de que Carlos se mosqueara.
Venga Iñaki, coño, sigue y termina la historia.
Bueno pues el chaval, pese a saberse espiado, no dijo ni Pamplona y comenzó a chupar y a meter la lengua, mientras con los dedos aguantaba apartada la tela del bikini. Ella empezó a mover la cintura adelante y atrás sobre la cara del chico. Jesús la tenía más dura que un garrote y no podía parar de mirar. Ni siquiera había intentado ocultarse minimamente de la vista de los dos folladores. Allí estaba de pie, mirando la escena empalmado como un mono y con la boca abierta. El caso es que el muchacho aplico un dedo sobre el bikini de ella justo encima del agujero del culo y no hizo mas que empujar un par de veces para que ella se corriera entre grandes gemidos. Ella se dejo caer de lado su coño quedo a mi vista al quedar el bikini en el punto en que los dedos del chico lo habían dejado apartado. Una fina pelambrera rubia poblaba un ahora jugoso y brillante agujero. Entonces también la chica fue consciente de que allí había espectadores. Él, al tiempo que se subía los pantalones y se pringaba de lefa empezó una perorata que habría que suponer de insultos; y ella toda colorada se colocó el bikini y se dispuso a irse. Entonces llegó una señora de pelo rubio que parecía ser la madre de la chica por su parecido físico y les habló. No se pudo percatar de nada porque el chico se calló y se limpió con la toalla justo antes de que ella llegara. Jesús lentamente hizo mutis por el foro y dejó de verlos, estaba salidísimo. Volvió con un calor inaguantable donde estaba tomando el sol su novia y se colocó a su espalda de lado, y por encima del bañador se masturbó como un salvaje sin decirla nada. Ella ni se dio cuenta. Después del baño ,reparador y refrigerante en el mar, explicó a su chica lo que había visto, y por la tarde fliparon cuando vieron a los chicos con sus padres por el chiringuito de la playa, y por el parecido físico con sus padres y entre ellos mismos, Jesús y su novia llegaron a la conclusión de que podían ser hermanos. El morbo fue tal que inspiró un polvo salvaje entre ...Jesús y su novia esa noche.
Hubo un silencio y mi prima dijo:
¿Cómo de salvaje fue ese polvo?
Pues bastante, todavía solo de acordarme me duelen las piernas. Dijo Ronda con la cara sonriente y colorada.
Mira por donde sale la novia de Jesús jajajajajajaj
Bueno ya había metido la pata, aquí el cuentacuentos, así que ya sabéis quienes eran los protas de la historia.
Yo estaba ya más que cachondo a costa de las historias de las narices. De hecho, no se qué me daba más morbo, si que la pareja pudiesen ser familiares o recrear el polvo de Iñaki y Ronda inspirados por ellos. Los porros se sucedían y pasaban por nuestras bocas de manera cíclica. A mi personalmente me estaban aumentando los grados del calentón que me rondaba.
Llegó el turno de Sole, y no se cortó un pelo.
Mi historia es verdadera, y las protas somos esta y yo. (Señaló a mi hermana que empezaba a ponerse colorada). El día que llegasteis estas vacaciones subimos por la noche a mi habitación a ponernos los pijamas. Maria se quitó los pantalones y la camiseta que llevaba y nos pusimos a hablar de nuestros morenos en ropa interior. La conversación derivó en novios, o mejor dicho en la falta de novios. Hablando, hablando llegamos a que nuestros cuerpos lo que necesitaban era un buen masaje. Y el resto de la narración se la dedico a Carlos que seguro se va a empalmar como un mono y nos va a tener que enseñar la polla.
Sonrió a Carlos, que la miro con suficiencia, como diciendo no vas a poder conmigo. Se sentó en el culo de mi hermana que permanecía tumbada boca abajo como si fuese a darle el masaje ahora.
Me coloque así encima de ella para relajarla. La pobre estaba cansada de tanto viaje. Empecé por los hombros. Noté que tiene la piel más suave que conozco y aplique presión a mis dedos en la zona del cuello.
Apenas dijo esto comenzó a aplicar el masaje narrado en los hombros de mi hermana que poso su frente en la toalla y se relajo, dejándose hacer. El silencio de todos nosotros era sepulcral y todos mirábamos las manos de Sole en la piel de Maria.
Apliqué dos chorretones de crema a la parte superior de la espalda para que mis dedos se deslizaran mejor por la piel. Desabroche el sujetador y note que a ella no le importaba, pues levanto un poco el torso para que pudiese retirarlo.
Sole tomó en sus manos el bote de la crema solar dejó dos manchas sobre la espalda de mi hermana que parecían manchas de peli porno. Para nuestro asombro sus dedos se dirigieron a las lazadas de la nuca y de la espalda del bikini y las deshicieron con un pequeño tirón final. El bikini quedó muerto sobre la toalla con el cuerpo de Maria sobre él, pero por poco tiempo porque con sin abrir lo ojos siquiera, levanto la cabeza y el torso hasta que las manos de Sole retiraron la tela. El resto no sé, pero yo le vi las tetas a mi hermana perfectamente, y sus pezones estaban tiesos como para quedarte pinchados en ellos. Mi hermana adoptó la misma posición que tenia antes, con toda la espalda al descubierto. Yo, he de reconocerlo, estaba empalmado y comenzaba a necesitar ayuda, al menos manual.
- Esparcí la crema por su espalda y recorrí cada uno de sus recovecos. Llegaba hasta los hoyuelos de la parte baja y subía hasta su cuello despacio, apretando los dedos, sintiendo la piel con los ojos cerrados. Mientras, movía mi cadera frotándome suavemente contra su culo, así.
Sole continuó pasando sus manos por la espalda hasta que la crema quedó absorbida por la piel. No se cortó un pelo y pasó sus manos por los laterales de las tetas de María repetidamente como lo habría hecho cualquier chico en su posición.
Me calenté rápidamente y estaba mojadísima, tanto que no sabía si Maria no lo habría notado ya. Después me di la vuelta y comencé el masaje a sus piernas. Primero los dedos, poco a poco para después ir subiendo. Noté que no tenía ni un solo pelo en las piernas y estaban suaves y calientes por la zona de los muslos. Cuando llegué al culo recogí sus braguitas en su raja. Tiré de ellas hacia arriba para que se marcara todo. Aparecieron por los lados unos pelillos y el pliegue de su ojete, mas oscuro que el resto de la piel.
Sole siguió, uno a uno los pasos que estaba narrando. A mi hermana se la oía suspirar de vez en cuando. Sole permanecía sentada sobre su espalda, de rodillas y masajeando sus nalgas que aparecían blancas entre sus dedos. De vez en cuando tomaba la parte superior del bikini y tiraba de ella hacia arriba y mi hermana se encogía de gusto. De pronto se levantó, susurró algo en su oído, y se sentó con las piernas cruzadas.
En esas estaba cuando mi madre llamó a la puerta y entró. Me dio el tiempo justo de bajarme de la espalda de Maria y cubrirla un poco. Mientras nos decía no se qué memez sobre que se alegraba que mis primos estuviesen aquí, yo me fui al baño caliente como una perra. No pude aguantarme y me hice una paja antológica que parece ser que fue del agrado de alguien más que mío. Cuando volví a la habitación.....
Mi hermana la interrumpió entonces.
Espera, no sigas, déjame seguir a mi , y esa será mi historia.
Vale, por mi....
Mi hermana siguió entonces el relato.
Yo me quedé en la habitación semidesnuda, hablando con mi tía. No se si lo notó pero estaba deseando que se marchara. Tenía un autentico charco entre las piernas y unas ganas locas de masturbarme. En cuanto mi tía salió de la habitación, me quité las braguitas y abrí mis piernas para que mis manos entraran sin problemas entre ellas. Seguía tapada solo con la sabana y mis piernas hacían con ella una tienda de campaña. Cerré los ojos y me puse a ello, me deje ir. Cuando estaba a punto de correrme abrí los ojos y allí estaba Sole de pie, delante de mí, mirándome. Ella tomo la sabana y de un fuerte tirón la apartó. Yo no hice nada por detenerla pero con un brazo, vergonzosa, me tapé el pecho. Ella me ordenó que quitara las manos. No se porqué obedecí, me gustaba aquello, me gustaba que me mandara. Y no se porqué, ella se dio cuenta y siguió ordenándome cosas. Mi hizo abrir las piernas todo lo que pude, me mandó que me pellizcara los pezones. Eso fue agradable porque estaban muy duros. También me mandó que siguiese tocándome, pero sin correrme. Yo cerré los ojos y solo oía su voz mandando esto o aquello. Me daba un morbo y una excitación salvaje el estar a su disposición. No se como explicarlo, pero me gusta. De hecho ahora mismo estoy contando esto como fue porque ella me lo ha pedido.
Carlos preguntó..
¿Y como estas ahora?
¿tu que crees?
¿eres bollera de verdad? ¿De veras no te gustan los rabos?
Sole intervino
Desde luego, si todos son tan salidos y capullos como tu, lo que me extraña es que queden mujeres heterosexuales. Y te recuerdo que hay una apuesta pendiente. Cuando Maria termine el relato tendrás que ponerte en pie para que veamos como dominas tu "increíble" cuerpo...
Te sorprenderás imbecil... y lo vas a pagar
Jajajaja, ya me gustará verlo, eso.
Mientras tanto yo estaba estupefacto, corroído por el morbo, caliente. Me sentía extraño, por un lado completamente excitado, de hecho creo que mi polla salía por la parte superior del bañador. Gracias a Dios, mi postura de descanso bocabajo tapaba cualquier bulto sospechoso que me delatara. No me cabía ninguna duda de que Carlos iba a palmar la apuesta, porque yo mismo daría un brazo por poder deshacerme de esa calentura. Por otro lado observaba que Iñaki y Ronda se metían mano de forma discreta y el color de sus caras delataba que si esto duraba mucho igual acababan follando allí mismo. Mi primo sin embargo parecía algo enfadado y no le estaba gustando nada la última historia. Pili si que tenía rubor en sus mejillas y cuello, y creo que era la que aguantaba a Jose para que no parara el juego de las narraciones. Mi hermana prosiguió.
¿Sigo o preferís seguir discutiendo?....Cuando Sole me mandó tocarme se alejó y sin que yo la viese, ya que disfrutaba de mi paja y cerré los ojos, se quitó la ropa y se sentó en su cama. Yo me deje ir. No oía nada, solo sentía. Sentía un placer indescriptible, mejor que cualquier placer disfrutado hasta entonces. Me corrí. Ahora no me resulta increíble, pero si me lo hubiesen contado hace unos días no me lo hubiese creído. Me estaba masturbando delante de alguien, ese alguien encima era una chica, y nunca había sentido tanto placer como entonces. El caso es que a mi me gustan los chicos, pero no se que me da ella que es mucho mejor. Después de correrme me hizo un gesto con el dedo para que me acercara, me tumbó a su lado y me beso con pasión en la boca, en el cuello. Ufffffff. Se colocó encima mío pero al revés y me comió entera. Tuve cuatro, cinco, seis orgasmos, perdí la cuenta. Estaba derrotada. Cuando intenté comérmela a ella me apartó, se levantó , se dio la vuelta y se sentó sobre mi boca. Me agarró la cabeza y comenzó a mover las caderas contra mi boca como una posesa. Realmente me usó como consolador. Solo podía respirar por la nariz y lo humedisima que estaba su vagina hacía peligrar mi respiración. Yo solo posaba mi lengua, no podía hacer más. Se corrió mordiéndose los nudillos para no gritar, mientras sus muslos se cerraban incontrolados a los lados de mi cabeza. Nunca había visto un orgasmo de mas de un minuto. Cuando terminamos estábamos empapadas de sudor y exhaustas. Nos dormimos desnudas una al lado de la otra.
Terminó el relato y no se oyó una mosca durante unos segundos. Estaban empalmadas hasta las chicas. Sole le dijo a Carlos:
Vamos a ver, valiente, ponte de pie.
¿Y si no lo hago?
Habrás perdido la apuesta igual.
Paso de ti
Pasas de mi pero el castigo no te lo quita ni Dios, listillo.
Mira que miedo, bollera
Intervine ante esta escalada en el conflicto.
Ehhhh, parad un poco antes de llegar a las puñaladas. Tu chaval, tendrás que pagar la apuesta perdida.
¿Y si no?
Pues sino, tu palabra no tendrá valor aquí. Llevas todo el día muy cruzado y muy rarito.
Mi primo medio en bromas se dirigió a él
Lo que le falta a este es un buen polvo.
¿Y por qué no me dejas a tu novia?
Pili saltó antes que nadie
Porque su novia todavía elige con quien folla, gilipollas
¿Sabéis que os digo? Iros todos a la mierda, me largo.
Sin más se levantó, se dio la vuelta, cogió su ropa y su toalla y se fue. Nadie intento detenerle y todos vimos claramente que había perdido la apuesta. Seguimos hablando sobre el tema.
Que mosca le ha picado a este
Mi prima se despachó a gusto
Es un imbécil que cree que las mujeres están para adorarlo, y es un callo. Y a lo que va ese ya se yo a lo que es. Ahora se va a pegar una paja de campeonato a costa nuestra y encima no ha tenido que contar historia. Que cabrón.
Mi primo se calentó también
Tendríamos que darle una lección
Pero ahora mismo Convinimos todos.
Nos levantamos raudos y en plan masa justiciera lo encontramos en la cocina de casa con los pantalones a medio poner. Nos abalanzamos sobre el. Mi primo y yo le sujetamos por los brazos en tanto que Iñaki le cogía por las piernas. Llegaron las chicas y mi prima, rapidísima de pensamiento y de obra, se agacho y sacó del armario donde mi tío guardaba los productos de jardín unas bridas de plastico que se usaban para amarrar ramas y plantas..
Tumbadlo en la mesa de la cocina.
Sin miramientos lo hicimos. Fue brazo por brazo atándolo con las bridas a la pata de la mesa. Después ató las dos piernas por los tobillos, y el conjunto a las patas. Carlos se revolvía furioso al tiempo que nos insultaba y nos llamaba de todo. A mi ya se me estaba pasando el arrebato justiciero, pero me estaba dando morbo ver que harían las chicas con él. La imagen tenia su aquel. Carlos tumbado y atado boca arriba en la mesa de la cocina, con los pantalones en los tobillos, sin camiseta y con los gayumbos puestos. Gritaba e insultaba a todos. Mi prima sacó del mismo armario cinta de embalar y se la puso en la boca después de unos cuantos intentos. Tenía los ojos inyectados de rabia cuando ella se puso al lado de su oreja a decirle:
¿No nos habías soñado así a alguna de nosotras? Seguro que si. Desnudas y amarradas. Pues mira tú por donde vas a recibir el mismo trato. Pero además te debemos un castigo. ¿Dónde se suponía que ibas? A cascarte una paja a costa nuestra, ¿no? So cabronazo. Pues además vamos a hacer reportaje fotográfico para que así no vayas contando nada por ahí que no debas.
Mi hermana salió y volvió a entrar con la cámara de fotos y tiró un par de ellas. Mi prima le bajo los gayumbos dejando su polla morcillona a la vista. Se puso a soplar suavemente el glande, los huevos hasta que la polla cobró una erección considerable. Entonces cogió a Iñaki de la mano y le acercó a la mesa diciéndole:
Ponte como si se la fueras a chupar, no te preocupes que no se te vera más que lo justo para que se vea que se la "estaba" chupando un tío y no se reconocerá que eres tú. Es un seguro de que no irá contando por ahí lo que no debe.
Joder, ¿y tengo que ser yo?
Iñaki miró a Ronda que asintió. Se colocó con la cara muy cerca de su polla. Su aliento debía caer sobre ella y mientras mi hermana cogió el ángulo adecuado y tiró las fotos. Mi primo dijo entonces:
Venga dejadle ya que se marche. Ha pagado el castigo.
Sí, cortadle las ataduras y que se marche, pero si cuentas lo más mínimo de lo que has escuchado aquí, tus fotos acabarán en internet para deleite de todos.
Le soltamos y jurando en ruso e insultándonos se largó. El embrujo del momento se había roto y el juego quedó sin terminar. Comimos algo y hablamos más bien poco, todos intentábamos digerir lo ocurrido. Aquel día ha sido inspiración de cientos de pajas a lo largo de mi vida y muchas de mis fantasías sexuales provienen de aquel ultimo día en el pueblo. Cada uno se fue a su casa, supongo que los que tenían pareja a follar como locos. Yo me quedé en mi habitación y me masturbe completamente en bolas en la cama. Estaba tan excitado que la leche casi me da en la cara. Desde entonces guardo unos maravillosos y morbosos recuerdos, y aún hoy miro el CD de las fotos que me traje y me pongo loco.
Espero que el relato sea de vuestro agrado y me encantaría tener vuestras opiniones, ya sean buenas o malas.