Vacaciones con el profesor: Cap 2.

Segunda parte de las aventuras de la putita Sam con el profesor, las vacaciones comienzan así como el ambiente sexual

Hola, soy Sam. Este es el 2do capitulo de las mini vacaciones con mi profesor, sucedió cuando tenía 21 años, una chica delgada, alta morena clara, cabello largo medio ondulado color castaño, pechos como naranjas y un culito paradito.

Inicio.

Durante el camino estuvimos conversando de lo bien que la pasaríamos, además el profesor colocaba una mano en mi pierna izquierda.

Prof Luis: Que guapa estás, muero de ganas por pasarla tan bien estos días, tienes que ganarte ese diez, muñequita.

Sam: Gracias, yo también quiero divertirme. - le arroje una sonrisa perversa, mi lado puta iba saliendo poco a poco.

Llegamos al lugar donde pasaríamos estas mini vacaciones, pero él siguió manejando hasta llegar a una zona un poco privada, ya que había rentado una pequeña casita para pasar estos días. Me bajé y entramos, estaba dividido en 3 partes, la cocina, la sala donde habían sillones y una tele, y la recamara. Entramos a esta última y había una cama matrimonial y unos pequeños muebles, era lindo. Comencé a desempacar rápido, ya que quería ir a la playa.

Prof Luis: Toma, es tu traje de baño que estarás usando, muñequita.

Sam: Gracias bebé - le di un beso en la boca y me metí al baño para cambiarme.

Era un traje de baño de 2 piezas color negro, me quité la ropa y me lo fui poniendo. Me quedaba un poco pequeño, ya que la parte inferior le faltaba poco para parecerse a una tanguita, pero supuse que así lo quería el profesor. Salí y él estaba sentado en la cama esperando a que saliera, me miró y rápidamente se levantó

Sam: ¿te gusta como me veo? - dije dando una vuelta y sonriéndole.

Prof Luis: Claro, te ves tan sexy. - se acercó a mi y me empezó a besar.

Coloque mis brazos rodeando su cuello para abrazarlo, y él colocó sus manos directas en mis nalguitas. Comencé a darle unos besos con tanta lujuria, que hizo que me manoseara aun más mis nalgas. Nos despegamos y nos dirigimos a la playa que quedaba frente a nosotros, cuando empecé a caminar me dio una fuerte nalgada que hizo calentarme un poco más.

Llegamos y nos metimos a bañarnos en las aguas tranquilas de la playa. No pasó nada relevante, solo que de vez en cuando se acercaba a mi para besarme nuevamente y manosear mis nalgas. La tarde fue transcurriendo rápida, entre el baño, el sol poco a poco se ocultaba y decidí salir para acostarme en las sillas.

Había una que otra gente a los al rededores, ya que era una zona privada, llegó un momento en que nos quedamos solos en la playa, yo estaba acostada boca abajo y el profesor se acostó a lado mio, sentí sus manos tocando mi espalda, para ponerme aceite lubricante, comenzó a darme un ligero masaje, yo simplemente cerré mis ojos y disfrute el momento.

Sam: Se siente tan rico.

Prof Luis: Relájate muñequita.

Sentí como desató el amarre del sostén para dejar mi espalda desnuda, sentía sus grandes manos recorrer toda mi espalda, lo estaba disfrutando. Poco a poco fue bajando hacía mis nalgas, sentí como colocaba aceite en ellas, y las masajeba una con cada mano suya. Las masajeba, las apretaba y las movía.

Prof Luis: Que ricas nalgas tienes, Sam. - de igual forma sentí como desataba los tirantes de cada lado, y retiraba ese pequeño calzoncito que parecía una tanguita.

Siguió con sus masajes, sentía como apretaba mis nalguitas. Comenzó abrir ligeramente mis piernas, y sentí como sus dedos se hundían hasta llegar a mi vagina. Frotaba sus dedos justo ahí, mientras comenzaba a retorcerme en donde estaba acostada.

Sam: Ay si, profe que rico, no pares. - derrepente sentí uno de sus dedos entrar en mi - Aaay que rico papito, si que rico.

Prof Luis: Que rico son tus gemidos Sam. - dijo mientras seguía jugando con sus dedos en mi vagina.

No pasaron muchos minutos, cuando comencé a venirme justo ahí.

Sam: Aaay papi que rico sii aaaay. - sentí como sacó sus dedos y me dio una nalgada.

Prof Luis: Vamos a la cama, muñequita.

Me levanté, medio amarre los tirantes de mi calzoncito y cubrí con mis brazos mis pechos, al levantar la mirada vi como habían 2 tipos viéndome, era más que obvio que habían visto lo sucedido. Así que bajé mis brazos dejando al descubierto mis pechos  y simplemente les sonreí.

Entré a la habitación y estaba mi profesor sentado en la orilla de la cama, me acerqué a él y comencé a besarlo lentamente, me senté encima de él, cara a cara y seguimos besándonos, metía mi lengua para tener unos besos más lujuriosos, era más que claro que estaba tan caliente. Se despegó de mis labios para bajar a mis pechos,  los tomó uno en cada mano y los empezó a comer, sentía su lengua lamer y chupar mis pechos, yo únicamente cerraba los ojos y gemia ligeramente.

Sam: Ay que rico los comes papi.

Prof Luis: Después de ver la foto de tus pechos tenía tantas ganas de comerlos.

Sam: Son todos tuyos, papi. - dije frotando mi entrepierna con la suya.

Me levanté, y me coloqué de rodillas, le di un último beso y baje su short, de inmediato salió su verga, no era larga, pero si estaba gruesa y venuda. Comencé a masturbarlo con mi manita derecha. Después me acerque y comencé a lamerla, desde abajo hasta arriba, recorriendo cada centímetro con mi lengua, llegué a la punta y de igual forma pasé mi lengua ahí. Estaba disfrutando mi paleta como la niña buena que soy, enseguida la introduje en mi boca, comencé a chupar la punta, y después introduje la mitad. Y realicé mis movimientos de cabeceo, subía y bajaba aumentando la velocidad. Estaba jugando con su verga, la sacaba escupía para humectarla y nuevamente la introducía a mi boca para chuparsela. Tomó mi cabello y hundió mi cabeza, de modo que su verga entrará por completo a mi boca, comenzaba a crecer un poco más, ya que la sentía hasta la garganta.

Sam: aghh aghhhh

Prof Luis: Eso es putita, que rico te la estás comiendo, eres una pequeña putita Sam.

Sacó su verga de mi boca, y se colocó un condon, estaba listo para cogerme. Me levantó y me acercó a donde estaba, me dio la vuelta dándole la espalda y comenzó a comerse mis nalguitas, las lamía y besaba, me quitó mi calzoncito y me dio dos nalgadas más.

Sam: Auch que rico me nalgueas papi.

Aun le daba la espalda y me empezó a sentar nuevamente encima de él, esta vez colocando su verga justo en mi vagina.

Sam: ¿quieres cogerme, papito?

Prof Luis: Si, desde hace mucho tiempo te traigo ganas Sam.

Sam: Cogeme a tu antojo, papito.

La fui introduciendo poco a poco, y comencé a subir y bajar de modo que entrara y saliera.

Sam: ay si que rico papi

Prof Luis: Que rico te mueves, muñequita. Me encantan tus ricas nalgas. - nuevamente me dio otra nalgada.

Estuvimos un rato en esa posición, después me puso arriba de la cama, me coloque en 4 y deje mi culo en pompa lista para que me siguiera cogiendo, estaba más que excitada y lo único que quería era que me siguiera metiendo su verga.

Prof Luis: Que rica te miras, muñeca. - me dio otra nalgueada y colocó su verga en la entrada. - ¿la quieres dentro, putita?

Sam: Si papi, cogeme por favor.

Me empezó a embestir con su verga, sentía como mis piernas temblaban, además de sus constantes nalgadas, estaba a punto de venirme.

Sam: Ay papito me voy a venir, si dame más duro, que rico aaaaay.

Prof Luis: Aguanta putita, ya casi. - me jaló del cabello y me siguió cogiendo así. - que rica estás, eres toda una putita.

Me sentía tan excitada, estando en 4 siendo cogida por mi profesor, mientras me jalaba de mi cabello y me daba múltiples nalgadas. Duramos unos minutos más, mientras sentí como mi vagina se convertia en una fuente, mis piernas temblaban y me hundía en una gran orgasmo.

Sam: Ay si papito, que rico dame más, me voy a venir aaaay aaaay papiii.

Sacó su verga dentro de mi, se retiró el condon y comenzó a venirse en mis nalgas, además sentí una que otra descarga llegar a mi espalda.

Porf Luis: uh que rico Sam, en verdad habia fantaseado tanto con este momento, tenía tantas ganas de cogerte y reventar esas lindas nalgas que tienes.

Quedamos rendidos en la cama y me coloque boca arriba, sentí los labios del profesor en mi boca:

Porf Luis: Descansa putita, mañana será otro día. - dijo acompañado de 3 bofetadas ligeras.

Después estaré subiendo las demás partes, espero que esté siendo de su agrado y gracias por sus comentarios.

Besitos.