Una tarde tranquila

Una tranquila tarde de sabado una madre y su hijo estan solos en casa ... un cruce de miradas provocara una sensual situacion.

UNA TARDE TRANQUILA

Empezare por decir que vivo en un núcleo familiar lo que se podría llamar un poco tradicional y bien aposentado. Mi familia esta compuesta por mi padre un hombre de 60 años, mi madre Isabel, una bellísima señora de 52 años y una de los protagonistas de nuestra historia, mi hermana Marta de 24 y yo que me llamo Carlos como mi padre con mis 20 años recién cumplidos.

Vivimos en una casa en las afueras de Madrid, en una de esas urbanizaciones de casas unifamiliares y donde el anonimato y la intimidad de lo que ocurre en el interior de ellas, fue quizás el detonante de lo que me pasó.

Era sábado por la tarde, en casa estábamos mi madre Isabel y yo en el salón, ella repasando unos papeles en un pequeño escritorio y yo sentado en el sofá leyendo un libro, el ambiente era de lo mas tranquilo. Levante mi vista del libro y sin darme cuenta me fije en esa señora, que con su maternal figura estaba sentada a pocos metros de mi, una extraña sensación recorrió mi interior ya que nunca me había quedado mirándola de esa manera, no se, estaba todo en su sitio, su rubio pelo recogidito hacia atrás, sus gafas que acentuaban la tremenda belleza de su cara, un rebeca de color beige cruzadita redondeaba la figura de sus pechos, una faldita que a la altura de las rodillas dejaba ver sus esbeltas piernas enfundadas en unas sedosas medias…..

Embobado ante semejante mujer, empecé a preguntarme si aún hacía el amor con mi padre o si a su edad se seguía masturbando y en caso de ser así, en quien pensaría para excitarse, como serian sus piernas al tacto… (las tenia fuertes y bien torneadas)… o como serian sus bragas … mi mirada iba subiendo por sus piernas , su cintura , sus pechos…. al llegar a la altura de su cara, una oleada de pánico me invadió, justo en el momento que nuestras miradas se cruzaron, la vi que me miraba con un semblante serio por encima de sus gafas, su cara no era lo que digamos de complicidad, ni mucho menos …. Me había pillado!!

Ella muy seria se me quedo mirando unos instantes y me dijo:

  • Se puede saber que te esta pasando por la cabeza jovencito?

  • A mi nada mama, por que lo dices?

  • Oye Carlos no te hagas el tontito conmigo que me acabas de hacer una radiografía que me has puesto nerviosa, tendrías que ver la cara que ponías.

Yo estaba muerto de vergüenza, cosa que ella noto enseguida.

  • Te pido perdón mama, no se, estaba leyendo y al levantar la vista me tope con tus piernas, no creo que sea pecado mirarle las piernas a una mujer??

  • Mira niño una cosa es mirarle la piernas a una mujer y la otra es pegarle un repaso a tu madre como tu lo acabas de hacer, entenderás que esté un poco incomoda en esta situación. Anda nene deja de hacer tonterías y sigue con lo tuyo

* Perdona mama, el hecho de que te mirase es porque a tu edad te conservas muy bien, eres una mujer madura pero eres muy bonita y lo sabes, aunque reconozco que nunca antes te había mirado así, total todo lo que pueda haber fantaseado se quedara en mi cabeza.

  • Así que además has fantaseado conmigo? No quiero ni saber en que estarías pensado, y preferiría que no siguieses por ahí, y no creo que sea muy apropiado que tú y yo estemos hablando de estos temas.

El semblante serio de su rostro, indicaba que no se trataba de ninguna broma y que la situación la estaba incomodando de verdad. A pesar de ser una mujer a la que yo consideraba muy segura de si misma y capaz de manejar cualquier situación con gran aplomo, se la veía un poco descolocada.

Un tenso y largo silencio se apodero del ambiente, cabizbajo levante un poco la vista hasta que nuestras miradas se cruzaron de nuevo, nos quedamos inmóviles, en sus ojos se reflejaba temor pero también deseo, nuestras agitadas respiraciones indicaban que irremediablemente iba a pasar algo que ninguno de los dos controlábamos en ese momento. Mi madre temblorosa, alargo su mano para acariciar mi cabeza y tranquilizarme un poco.

*** Carlos cariño, que nos esta pasando…. que es lo que deseas de mama

  • Tengo miedo mama.

  • Yo también estoy un poco asustada cielo.

  • Me gustaría saber como eres mama, como es el cuerpo de una señora madura, saber como es tu ropa interior….

  • Esto que me pides me da un poco de vergüenza, se que los jóvenes siempre tenéis este tipo de fantasías, y la verdad es que viendo como me mirabas me has provocado una sensación en mi cuerpo que hacia tiempo que no sentía, y ya que estamos los dos solos y me apetece saciar tu curiosidad. Te voy a dejar que explores mi cuerpo pero con una condición

  • Dime

  • Seré yo quien ponga los limites de lo que aquí pueda pasar, yo te iré diciendo lo que puedes hacer en todo momento. Tu padre esta por llegar y no me gustaría que nos pillase en una situación mas que embarazosa para los dos.

  • Acepto

  • Entonces acércate y quédate de rodillas frente a mi..**

Mi madre aguardo mi llegada.

* Tu solo observa ..

Lentamente se levanto de la silla, quedando mi cara a la altura de sus caderas, colocó sus manos encima de su falda y suavemente la fue subiendo muy despacio hasta que sus preciosos muslos aparecieron ante mi, se detuvo un instante cuando el encaje de sus medias empezaba a hacerse visible….( estaba claro que me quería volver loco, no podía mas, pero estábamos jugando con sus reglas y no seria yo quien echase a perder ese espectáculo tan maravilloso)…. Tras un instante, siguió subiéndose la falda muy lentamente, hasta que el bultito de sus bragas fue apareciendo, quedando visible la parte mas intima de mi madre. En ese momento pude percibir un calido y excitante olor que me excito muchísimo.

*** Te gusta como huele bebe

  • Me excita mucho mama

  • Acerca un poquito tu nariz y huélelo … observa como son mis bragas..**

Me quede mirando sus preciosas bragas de encaje, eran blancas y dejaban entrever una pequeña mata de pelo muy bien recortadita, su abultada vulva quedaba presa dentro de ellas luchando por salir. Acerque mi nariz hasta casi rozar sus bragas y aspire profundamente..

*** Es precioso mama, puedo tocar un poco, solo un poquito por favor

  • No cariño, ten paciencia …..**

Espero un ratito para que me deleitase con esa visión tan hermosa.

*** Quieres ver como es… quieres que me baje las braguitas….

  • Me lo enseñaras de verdad?

  • Te lo voy a dejar ver, pero tu debes quedarte quieto ..

  • Solo voy a mirar te lo juro!**

Con mucha suavidad empezó a bajarse las braguitas hasta que su deliciosa vulva quedo expuesta ante mi, me fije en sus abultados y carnosos labios vaginales en forma de higo, (que visión mas erótica), tenia a mi madre con toda su feminidad a escasos centímetros de mi, el problema era que había prometido estarme quieto y así lo hice, no quería jugármela y echar a perder ese mágico momento.

* Ahora cariño quiero que pongas las manos atrás y que saques la puntita de tu lengua, mama hará el resto.

Yo no entendía muy bien lo que quería hacer, pero mi estado era de tal calentura que obedecí, puse mis manos atrás, saque la puntita de mi lengua y espere

Mi madre avanzo un poquito y se detuvo a escasos milímetros de mí, arqueo un poquito su cuerpo hacia atrás y con mucha suavidad coloco toda su carnosa vulva encima de mi lengua. Note un sabor calido y saladito mientras me abría paso a través de los pliegues de sus labios vaginales, mi madre se estremeció,,,,,(ella también estaba muy excitada)…empezó un suave y rítmico vaivén de sus caderas, con la velocidad justa para que mi lengua fuera penetrando cada vez que su cuerpo se acercaba a mi. Su vulva se lubrico y sus labios vaginales se abrieron como una flor … paulatinamente fue aumentando su ritmo y su respiración era cada vez mas agitada, se la notaba que estaba gozando. Agarro mi cabeza con sus manos mientras sus embestidas eran cada vez más rápidas y sus jadeos iban en aumento… su cuerpo empezó a temblar y sus músculos se tensaron.

- Así bebe,, sigue así pequeño …….. sigue así, me corro … me coroooooo…..

Yo notaba que su corrida seria inminente, presiono mi cabeza con más fuerza y finalmente, con un sonoro grito descargo todo su orgasmo en mi boca inundándola con su dulce néctar. Entre jadeos me dio las gracias, mientras yo saboreaba su maternal corrida …….su cuerpo seguía temblando un poco, unas pequeñas contracciones de placer indicaban que acababa de tener uno de los orgasmos más intensos i eróticos de su vida.

Luego se relajo, cerro los ojos, aspiro profundamente y mas calmada me miro con mucho cariño agradeciéndome ese momento tan mágico que acabamos de tener.

* Mama ….

  • Si mi niño, ahora te toca a ti ….

En ese momento se oyó como alguien abría la puerta de casa, mi madre con cara de pánico, se subió rápidamente sus bragas, se arreglo la falta y se sentó en el escritorio simulando estar concentrada en sus cosas, yo me dirigí hacia mi habitación maldiciendo mi mala suerte, al pasar al lado de mi madre me agarro la mano y con una sonrisa de complicidad me guiño un ojo.

Continuara………..