Una tarde de placer
Relato de como me hice una paja asombrosa con un vibrador y una peli de trasexuales.
Primero he de decir ante nada que estoy casado, tengo treinta años pero me flipan los transexuales. Aunque este comienzo lleve a engaño, este no es un relato de transexuales.
Un día, viendo con mi mujer un documental de trans me quedé prendado de ellas, tan descaradas y con esas enormes pollas entre las patas. No me considero gay, pero ver una polla en un cuerpo de mujer me pone a bullir las pelotas.
Poco después, entre en internet a buscar fotos y videos para pajearme y me dio por buscar fotos de trans. Jo, que sorpresa me llevé cuando encontré tantas. Me pasaba todas las mañanas en la oficina haciéndome pajas con las fotos de esas chicas.
Una mañana, entré en un chat y conseguí hablar con una de ellas, me dio su número de teléfono y me masturbe mientras hablaba con ella. Ella me dijo que probara mi semen, y lo hice. Nunca antes lo había hecho y me puso como una moto. Luego me dijo que me metiera el dedo manchado de semen en el culo y lo hice. Y me gustó.
No volví a hablar con él más.
A la semana, estaba dándole vueltas a la cabeza a lo que había hecho en el baño de la oficina y no se como, pero cuando me di cuenta me dirigía hacia el sex shop más cercano. Una vez allí compre, un video de trans y un vibrador de plástico duro verde, muy barato, me costó sólo 9 .
Pués bien, esa tarde mi mujer no estaba en casa así que llegué con el corazón latiéndome en el pecho de tal forma que pensé que me daba algo. Me desnudé, puse el dvd en el reproductor, saqué el vibrador de su envoltorio y comencé a chuparlo, así sin más antes incluso de que saliera el menú del dvd.
Cuando comenzó la peli yo ya tenía la polla tan dura como el vibrador, así que empecé a restregar el vibrador contra mi capullo que esba todo lleno de liquido preseminal y luego me lo lleve a la boca.
La experiencia fue fantástica, el sabor del semen mezclado con el de mi propia saliva era exquisito, la polla me palpitaba cosa mala.
Comencé a ver aquellas transexuales brasileñas de la peli con sus grandes pollas penetrando las boquitas de jóvenes de no mas de 25 años y vi como se corrían en sus bocas. No pude hacer otra cosa que accionar el vibrador al máximo y con un movimiento diestro me lo inserté en el culo.
Oh, que maravilloso placer experimenté cuando vi salir la leche de aquellas pollas negras y yo con aquel tubo de plástico verde vibrando dentro de mi culo. No pude hacer otra cosa que correrme casi sin tocarme la polla, pero se me ocurrió apuntar la polla a mi boca.
Un chorro caliente, acido y espeso salió disparado hacia mi lengua, el segundo me dio en plena nariz, el tercero en la barbilla y el resto en el pecho y en la barriga.
Aquello me cogió por sorpresa pero el de la boca me lo tragué, el de la naríz y la barbilla me los restregué por la cara y los labios y el resto los dejé que se secaran en mi pecho.
Esperé, descansando la polla pero con el vibrador en el culo y lo expulsé lentamente como si estuviera cagando. Lo recogí del sofá me lo restregué por el pecho recogiendo restos de mi leche y lo chupé. Uhmm, que rico. Estuve un rato mamándolo y viendo a otro trans follarse a otro chico. Poco después apagué el dvd y me di una ducha.
Mañana lunes día 04 de julio voy a ir al sex shop a comprar un vibrador con venas y todo y esta ve de goma, ya os contaré.