Una Suegra y un Yerno, en una fiesta de Boda.

La Boda se celebró tal como se había anunciado, a lo grande. Los contrayentes eran de familias acomodadas y no cuestionaron los importantes gastos que tuvieron. El hijo de una de aquellas familias solo hacía dos meses que había acabado Abogacía y además con notas altísimas. La Novia era una chica hermosísima y única heredera de Familia muy importante. Allí todo sería Glamour. La Orquesta que amenizará el convite estaba considerada una de las mejores del País. Para redondear el evento se celebraba en un Hotel de 5 estrellas con un salón en que podían caber más de mil personas. La Madre de la Novia como invitada importante tenía a su hermana Carlota y a su hija Carla junto al Román, marido de la hija.    A mitad de la fiesta aquello ya parecía la Torre de Babel. Todos los Comensales tenían que comunicarse voz en grito, las burbujas de Champaña Les nublaban las cejas. Tan pronto como la Orquesta atacó los primeros compases a la hija de Doña Carlota la invitó a bailar un vecino de la mesa, el yerno de Doña Carlota hizo lo mismo con su suegra. Soy muy feliz de tenerte en mis brazos querido Román, hacía ya bastantes años que no nos veríamos, pero yo he continuado pensando en ti. Muchos querida suegra, yo también he pensado en ti. Sabes, querido Roman que el beso que me diste aquel día nunca lo olvidé ? Yo tampoco, querida, fue un día que yo andaba un poco tocado por el Rioja que nos sirvieron. Hoy tendrías que ponerte como aquel día y podríamos hacer alguna travesura, no lo crees así Yerno ? Si, el día de hoy sería propicio, aquí dentro de poco estarán todos tocados y es cuando uno puede desaparecer de escena sin que nadie se dé cuenta. Espero que que tú también , en, te pones tocado y me llevas a algún sitio donde puedas besarme como aquel día que no he olvidado. Como veo que a mi mujer no la suelta el pollo que baila ni lleva intención de hacerlo, por que su mano no la aparta de su culo, voy a mirar donde podemos meternos. No me dirás qué tienes celos yerno ? Pues no lo sé, pero no me gusta Suegra A todas nos gusta que nos deseen, además que una flor no hace Mayo, y un día es un día, además que mi hija está como un Bollicao ! Si tú lo dices ? Anda, acaba el vino de la copa que parece polvora, y buscas un rinconcito. Tengo ganas de ti yerno, no puedes imaginar cuantas. Por qué nunca me llamas ni pasas por mi casa ? Tengo unos horarios demenciales que no me permiten hacer escapada alguna, pero si te prometo que de ahora en adelante lo haré, suegrecita. Tanto me deseas querido yerno ? Si. Ya te lo demostrare, voy a mirar si puedo conseguir una habitación en este Hotel, volveré enseguida.No bien se había marchado el Yerno cuando apareció Carla.  MAMA ! que mi marido te ha dejado sola ? Ha ido a tomar el aire, el vino lo ha puesto en trance hija mía. Veo que tú no has perdido el.tiempo ? El gacho que me saco a bailar además que está más bueno que una tarta de manzanas de Calahorra, sabe cómo ponerte caliente, al cabo de un momento ya tenía su polla entre mis piernas, y si con ello no tenía bastante me puso su mano en el culo. Son como niños hija, que todo lo quieren tocar. Cuando el yerno volvió a la mesa Carla ya se había ido a bailar con el mismo pajarito. Suegra, vámonos que tengo la llave de una habitación, y qué casualidad con en NRO. 69. Vamos Yerno, con lo que me gusta el 69, empezaremos por este.

Tan pronto como entraron en la habitación la suegra echando sus.brazos en el cuello de su querido yerno lo besó con la pasión de una amante que llevaba tiempo alejada. Mientras aquel caliente yerno le subía las faldas y bajándole las bragas metía sus dos manos en aquel lustroso culo de mujer madura y lujuriosa. ya los dos desnudos totalmente y encima de la cama la emprendieron con el más que sabroso 69. golosos, ella la tomo con su gruesa polla mientras con su mano le masajeaba los huevos. El yerno, con su cara encima del frondoso chocho con la lengua le fue succionando el clítoris, hasta que llegaron a un ruidoso orgasmo. La leche del yerno blanqueo su cara de hembra caliente, entre suspiros de placer. Para no perder un tiempo precioso la suegra volvió a meterse en la boca aquel arrugado zipote hasta que lo volvió a poner Iniesto, una vez ya duro como la pata de una mesa se giro'  y puso su culo a disposición del yerno. Este, antes de meterle su Priapo por el ojete lo lúbrico con su lengua y en cuanto noto que estaba a punto se lo clavo de un seco golpe. Ella poco tardo en moverlo agradecida y de cuando en cuando enculandolo para que le entrase hasta el fondo, tan encendidos estaban que no pararon de decirse todas las obscenidades que inconscientemente salían de sus labios, la Suegra no pudo evitar que se le escapase una ventosidad con olor a aceite quemado. Cuando volvieron a la mesa del convite, Carla continuaba bailando con el pollo aquel de la mano en el culo.

FINE