Una sorpresa muy especial

A una recién casada le preparan una sorpresa muy especial

Después de cinco años de relación, Sofia y Carlos habían decidio casarse, ellos eran una pareja al uso , él tenía 35 años y ella 32 , Carlos era alto y bien parecido, aunque ella como mujer era mas bonita todavía, no era demasiado alta, medía 1,62, pero tenía una preciosa cara, una larga melena de color castaño y un cuerpo escultural con unos pechos bien formados y unas curvas envidiables que hacían que a los hombres se les cortara la respiración a su paso. Los dos eran de Perú y residían allí, aunque ella antes de conocerle a él, había pasado 7 años en España, concretamente en navalcarnero , un pueblo de la provincia de madrid, ya que su familia había montado una sucursal de su empresa dedicada a la comercialización de productos cosméticos, y como el proceso de ponerla en marcha, además de abrir cartera de clientes y demás problemas que fueron surgiendo, se hizo bastante largo, derivó en que la estancia fuera de su país fuera mas larga de lo que en un principio pensaba.

Debido a que parte de la familia de ella todavía seguía en España por cuestiones de empresa además de los muchos amigos que había dejado aquí, hizo que se les plantera un problema con la boda, ya que era imposible juntar a todos los invitados porque parte estaban en Perú y parte en España, con lo que al final tomaron la decisión de hacer dos celebraciones, una en cada país, de esa manera todo el mundo quedaría contento y evitaban el que nadie tuviera que hacer un viaje de semejante distancia. En primer lugar hicieron la celebración oficial en perú, allí acudieron muchisimos invitados , ya que la familia de Sofia era bastante influyente gracias al negocio al que se dedicaban y tenían muchísima vida social, fue una fiesta por todo lo alto en uno de los mejores restaurantes de la zona, y salió todo perfecto.

Después viajaron hasta España para realizar lo que podría llamarse la segunda boda, además como habían decidido pasar la luna de miel en París, les venía muy bien el que las ceremonias se hubieran realizado en ese orden.

Llegó el día de la celebración, Sofía estaba preciosa, llevaba un vestido blanco entallado que hacía que su cuerpo luciera como nunca, unos zapatos de tacón del mismo color y un peinado que junto a un maquillaje cuidadosamente escogido, daban como resultado que estuviera sencillamente espectacular. Carlos se había puesto también muy elegante con un traje de color negro, una camisa blanca y una corbata de color azul , aunque estaba claro que ese día todos los ojos se iban a centrar en la que ya era su esposa.

Pasaron la celebración de rigor y de ahí al banquete, en esta ocasión el sitio escogido era mas sencillo que en Perú ya que el ambiente en el que se movían en Navalcarnero tanto ella como sus familiares era con gente del propio pueblo y como es lógico  no procedía hacer algo tan ostentoso. Áun así todo el mundo lo estaba pasando en grande, la comida estaba exquisita y los vinos elegidos hicieron las delicias de los presentes, por lo que la mayoría tomaron alguna copa más de lo debido, después continuaron con el baile, donde todo el mundo bailó y disfrutó de lo lindo, sobre todos los afortunados que consiguieron que la novia les concediera ser su pareja en alguna de las canciones que se escucharon.

Las horas fueron pasando y los invitados comenzaron a marcharse, sobre todo los mas mayores y los que tenía hijos pequeños, cada vez el grupo era mas reducido y alrededor de la una de la mañana solo quedaban los novios y el grupo de amigos que Sofía había hecho durante sus 7 años de estancia.

Pero si soy la única chica que queda dijo Sofía entre risas, ainss, no recordaba que tuvieran tan poco aguante las mujeres de por aquí.

Es que tu siempre has sido la mejor le dijo Javier.

Javier, era uno de los amigos de la pandilla de Sofía, estuvieron tonteando durante un tiempo  aunque nunca llegaron a ser pareja formal, pero a ella siempre le había atraido ya que a pesar de que él era un chico con un físico muy normal, le encantaba esa seguridad que transmitía y esa sensación de que siempre conseguía lo que quería.

Oye Sofía le dijo Javier, ya que solo quedamos nosotros , hemos pensado que podíamos ir a tomar la última al pub de Miguel, ya que no ha podido dejar a nadie a cargo para venir a la boda y ha dicho que podemos estar allí a puerta cerrada, con lo que solo estaremos nosotros, que te parece. A mí me parece perfecto, pregúntale a Carlos si le parece bien. ¿A ti te apetece Carlos?, por mi bien. Pues vamos entonces, dijo Javier.

Durante el trayecto hacia el local de Miguel, Carlos se puso a hablar de futbol con Manuel otro de los chicos de grupo, ya que Carlos a pesar de ser peruano era hincha del Barcelona y Manuel del Real Madrid, con lo que el pique debido a la rivalidad, desencadenó en una conversación que tenía pinta de durar mucho tiempo.

No nos podíamos creer que te casabas le dijo Javier a Sofía que aprovechó la conversación de Carlos para ponerse junto a ella mientras seguían andando. ¿Os pilló de sorpresa , eh?, pero como veis he venido a celebrarlo con vosotros.

Es un detalle dijo Javier, la verdad es que desde que lo supimos hemos hablado por aquí mucho sobre ti. ¿Ah si?, dijo ella, y de que habéis hablado.

Pues ya sabes , de cuando vivías aquí, de lo bien que lo pasabamos, y bueno como en el tiempo que estuviste aquí te enrollaste con varios de los del grupo, pues también de las cosas que te gustaba hacer jajajaja.

Hay que ver como sois los hombres dijo ella. Pues si, y la verdad llegamos a una conclusión.

¿A cual?, dijo Sofía.

Pues que te encanta el morbo y el peligro.

Verás , después de varias cervezas y charlando entre nosotros descubrimos que siempre que te habías liado con alguno intentabas provocar situaciones morbosas.

A Miguel le sacaste la polla en el cine y le hiciste una paja cuando teníais gente alrededor, a Jorge le hiciste una mamada en los probadores de una tienda y bueno conmigo ya sabes el polvo que echamos con el coche aparcado delante de la casa de mis padres.

Bueno y que, reconozco que si que me gustan esas cosas, pero eso es pasado y sinceramente me parece de mal gusto que os contarais algo que es privado.

Ya, pero el caso es que nos hemos dado cuenta de como eres, así que hemos decidido prepararte una sorpresa para esta noche.

Que sorpresa dijo Sofía.

Pues verás , cuando lleguemos al pub de Miguel, pienso follarte con tu marido dentro de el local.

Tú estas loco, dijo ella.

Bueno , supusimos que de primeras te opondrías así que sino quieres, pasaremos directamente a contarle a tu marido todas las cosas tan ricas que nos hacías, y sinceramente no creo que le haga mucha gracia que hayas invitado a la boda a un montón de hombres con los que has tenido sexo.

Sois unos chantajistas de mierda.

Bueno , tú decides Sofia.

Ella seguía caminando sin saber que  hacer, pero conocía a Javier y sabía que hablaba en serio cuando decía que le contarían a su marido las cosas que había hecho cuando vivía aquí.

Ella seguía dándole vueltas a la cabeza, cuando sin darse cuenta ya había llegado al local de Miguel.

Encendieron las luces, conectaron el equipo de música, y en un abrir y cerrar de ojos todo estaba como cualquier local un sábado por la noche.

Oye Carlos, le dijo  Miguel, hoy vamos a comprobar de que estáis hechos los peruanos, te hemos preparado un juego que consiste en intentar meter una moneda en un vaso y si lo logras tú decides quien tiene que beberse un chupito, si aciertas tú puedes decir a cualquiera que beba y al revés, cualquiera que acierte te puede hacer beber a ti, ¿que dices?. Esta bién dijo Carlos, os vais a enterar aqui como nos las gastamos.

Lo cierto es que todo estaba planeado para tener a Carlos distraido mientras Javier se follaba a su mujer, ya que era el típico bar con la barra en frente y si estabas colocado allí poco podías saber de lo que ocurría en el resto del local.

La música sonaba bastante alta y el juego con Carlos ya había comenzado.

Está bien dijo Sofía, veo que no tengo elección , vamos al baño y échamos un polvo para acabar con esto.

Nada de eso dijo Javier, te pienso follar encima de esta mesa a 10 metros de tu marido.

Eso ni loca dijo Sofía.

Pues así va a ser.

En ese momento Javier agarró a Sofía por la cintura y la trajo hacia él, para a continuación darle un beso en la boca, buscando descaradamente con su lengua la de ella.

Sofía en un primer momento se quedó totalmente rígida, pero después de unos segundos que parecían interminables, comenzó a sentir un cosquilleo en la tripa, y es que a pesar de su enfado inicial, Javier no había mentido en absoluto cuando le había dicho como era ella.

Javier continuó besandola y empezó a deslizar sus manos por el vestido hasta llegar a un punto donde le permitiera subirselo.

Uff me encanta tocarte el culo, siempre me ha encantado pero me va a gustar mas por debajo del vestido, y en ese momento empezó a levantarlo hasta que quedaron al descubierto unas preciosas braguitas que tambien eran blancas como no podía ser de otra manera.

En ese momento Sofía estaba ya como en una nube, no entendía por que , pero empezaba a sentirse como una perra en celo ante aquella situación.

Mm , me encantan tus bragas putita, aunque ya sabes que no te van a durar mucho puestas.

Javier comenzó a besarla por el cuello, lo que junto a que le llamara putita , cosa que siempre la había puesto a mil, consiguió que se evadiera totalmente y hasta olvidara que a pocos metros, su marido estaba tomando chupitos junto a su grupo de amigos.

Estos de vez en cuando se giraban disimuladamente para ver lo que sucedía, mientras Javier continuaba poniendo cada vez mas caliente a Sofía.

¿Te gusta lo que te estoy haciendo, eh zorrita?.

Sofía no contestaba pero su cara la delataba.

Te he hecho una pregunta dijo él.

Si, joder, me has puesto cachonda pedazo de cabrón.

Así me gusta dijo él, e inmediatamente volvió a buscar su lengua, pero esta vez sus manos fueron a buscar la cremallera del vestido, la cual empezó a bajar lentamente.

No sabía por que, pero Sofía ya no podía oponerse a nada y sentía que la situación la superaba debido a la enorme excitación que sentía.

Javier había terminado de bajar la cremallera y sin perder mas tiempo llevó sus manos hasta los hombros de Sofía movió los tirantes hacia los lados y dejó que el vestido cayera al suelo con lo que Sofía se quedó en ropa interior.

Ufff que buena estas así putita, me encantan las bragas y el sujetador que llevas, me has puesto la polla a reventar.

Vamos cabrón acaba con esto y follame de una vez, ya no puedo más.

Esto acabara cuando yo quiera , vas a ser mi perrita le dijo.

La situación era de una morbosidad extrema, allí estaba una recien casada medio desnuda siendo usada por un hombre con su marido a pocos metros.

De repente Javier se volvió a acercar a ella, la rodeó con sus brazos y comenzó a pasar su lengua por el cuello y muy despacio empezón a desabrochar los cierres del sujetador, cosa que no le costó mucho , ya que a los pocos segundos lo había conseguido.

mmmm que ganas tengo de verte las tetas putita le dijo, y sin mas tiró del sostén dejando a Sofia con sus pechos al aire.

Para ese momento Sofía ya no tenía control sobre sí misma, nunca se había sentido tan austada pero tampoco tan caliente, aquello era mas fuerte que la mayor de sus fantasías y es algo que la superaba.

Vamos túmbate aquí, en esta mesa le dijo Javier, a lo que Sofia accedió sin el mayor reproche

UFff voy a saborear este cuerpo palmo a palmo.

Javier se acostó encima de Sofia y comenzo a lamer su cuerpo, empezó por el cuello para continuar por los pechos, de ahí bajó hasta su tripa, y después a los muslos.

Ahora abrete de piernas zorra quiero ver lo que tienes aquí.

Sofía separó sus piernas y Javier comenzó a lamer la parte interna de sus muslos, la excitación de ella era evidente ya que en esa posición se podía ver perfectamente como sus bragas estaban completamente mojadas.

Al momento Javier se incorporó y se puso delante de ella, deslizó sus manos por las caderas y de un movimiento seco consiguió quitarle las bragas a Sofia y dejarla totalmente desnuda.

La situación ya era indescriptible, Carlos seguía jugando cada vez mas borracho y su mujer estaba detrás de él completamente en pelotas a punto de ser follada, un simple giro de cabeza de este hacia atrás le hubiera hecho contemplar una imagen que no hubiera imaginado o ni siquiera soñado.

Javier ya no esperó ni un momento más, sacó la polla de sus pantalones y de un solo golpe introdujo su polla hasta el fondo.

Sofía se retorció de placer, su coño estaba a punto de reventar y necesitaba que le metieran una buena polla hasta adentro.

Javier empezó a meter y a sacar su polla mientras Sofía arqueaba su espalda encima de la mesa y acompañaba sus movimientos.

¿Te gusta zorra?, eh

Joder, sí fóllame, no te pares, dame mas ahhhhh ahhhh.

Sino llega a ser por el volumen de la música a esas alturas Carlos ya se habría enterado de lo que pasaba, pero los gemidos de su mujer se ahogaban entre las notas de las canciones que sonaban.

Javier incorporó a Sofia y la dejó simplemente sentada encima de la mesa.

¿Te gusta ser mi puta?, le dijo al oído.

Siii le dijo ella.

¿Te gusta que yo sea tu macho?

Siii joder

¿Y te gusta follar con tu macho delante del cornudo de tu marido?

Diosss siiiiiii

Entonces dilo.

Me gusta que mi macho me folle delante de mi mario aaaaaaaaaahhhhhh.

En ese momento Sofía estalló en un orgasmo increible, su cuerpo se retorció y sus ojos se quedaron completamente en blanco.

Ufff como te has corrido guarra, ahora me toca a mi, ponte de rodillas.

Javier puso a Sofia de rodillas delante de él.

Ahora abre la boca puta que tu macho te va a dar su leche.

Javier comenzó a pajearse con fuerza hasta que un inmeso chorro de semen descargó en la boca de Sofía.

Vamos trágatelo todo perra, no dejes ni una gota, ahhhhhahhh.

Los dos habían quedado extasiados después de la situación que acababan de experimentar, pero Sofía enseguida se dió cuenta de que debía vestirse ya que el peligro ni mucho menos había pasado.

Javier se dió cuenta de lo que ella pretendía y le dijo, puedes vestirte, pero antes tienes que saber dos cosas, la primera es que os hemos puesto una cámara en la habitación del hotel.

¿Para qué dijo ella?

Para asegurarnos de que esta noche no follas con Carlos, el día de tu boda la única polla que vas a probar va a ser la mía y así no se te va a olvidar.

Y la segunda es que siempre que vengas aquí vas a ser mi puta.

Esta bien Javier accedo a las dos cosas, ya que sé que no me queda otra.

Mmmm así me gusta que seas obediente perrita.

Aunque parecía imposible, Sofía se volvió a vestir sin que su marido se enterara absolumente de nada ya que había seguido inmerso en el juego con los chicos del grupo.

Hola amor.

Eyy si está aquí mi mujercita, perdona que te haya dejado sola tanto tiempo pero es que tenía que demostrarles a estos que en Perú sabemos beber.

No te preocupes.

Sí no te preocupes dijo Javier, tranquilo que yo me he ocupado de que tu mujer no se aburra.

Se agradece hombre.

¿Y que habéis estado haciendo?

Pues ya sabes recordando viejos tiempos, nada más.

Me alegro que os hayáis divertido.

La verdad que sí dijo Javier, siempre que vengáis vete a beber si quieres con todos estos, que yo me encargo de que Sofía no se aburra.

De hecho dijo Carlos, les he dicho a estos que para navidades seguramente nos acerquemos, así que me encantará repetir esta noche.

Por mí perfecto dijo Javier.

¿A ti que te parece Sofia?

Estaré encantada dijo con una sonrisa en la cara.

Vaya ya es muy tarde dijo Miguel, será mejor que nos vayamos a dormir que mañana me toca venir pronto para dejar limpio el local.

Ok dijeron todos

Salieron del local camino de sus casas y del hotel respectivamente.

Mmmmm la verdad es que tengo ganas de llegar a la habitación mi amor, tanto chupito me ha puesto bastante contento, ya me entiendes.

Uff amor no te enfades, pero los zapatos me estan matando y me duele mucho la cabeza con tanta música, ¿te importa que lo dejemos para mañana?.

Bueno, no te preocupes a fin de cuentas ahora te voy a tener todos los dias y vas a ser solo para mí.

Sí amor solo para tí.