Una orgía para mi esposa
Luego de mucho tratar conseguí enfiestar a mi mujer...
Mi nombre es Fernando y estoy casado con Daniela hace 6 años, es una morocha portadora de un hermoso culo y un lindo par de tetas, a la que cualquier hombre le gustaria tener, y esto es algo que ella sabe y le gusta.
Hace tiempo que me rondaba en la cabeza hacer una orgia con ella y con el pasar del tiempo se lo fui comentando pero ella siempre me decia que estaba loco
A mi siempre me gusto que se vistiera provocativa, remeras escotadas, polleras cortas, etc..
Luego de mucho tratar de convencerla, decidi que tendría que buscar la forma de conseguir mi objetivo.
Cierto dia un amigo nos invito a su cumpleaños, asi que le ofreci comprarle ropa para salir ese dia, siempre y cuando fuera del tipo de ropa que a mi me gustaba, a lo que accedio sin problema.
Asi fue que esa noche salio con una pollera que le llegaba a tapar apenas donde su culo empezaba, y una bluza semi transparente que tenia un escote que con agacharse solo un poco dejaba ver sus hermosos pechos.
Llegamos a la fista , en un pub a unas pocas cuadras de nuestra casa y al entrar ella fue centro de todas las miradas, enseguida nos acercamos a saludar a nuestro amigo y nos pusimos a tomar unos tragos.
Luego de un rato de charla y unas cuantas copas nos pusimos a bailar, Daniela en el centro de la pista era el punto de encuentro de muchas miradas.
Siguio la noche y ya al final de la fiesta y cuando el ultimo grupo de personas se retiro nos sentamos con nuestro amigo , los tres a tomar la ultima botella de champña.
Daniela se sento en mis piernas y mientras charlábamos los tres empece a acariciarle sus piernas disimuladamente, acercándome cada vez mas a su entrepierna.
En un momento Eduardo se levanto y fue al baño, y yo empece a susurrarle al oido a Daniela si no le gustaria hacer un trio, con las copas de mas que tenia y las caricias que le hacia por debajo de la pollera se empezo a exitar y yo empece a acariciarle su conchita por sobre su tanga.
En eso llego Eduardo nuevamente y al darse cuenta de la situación me miro como buscando una seña de aprobación , yo le hice un gesto para que se acercara y lo hizo sin dudar, empezo a hacerle masajes en la espalda a Daniela y ella se relajo quedándose sentada en mis rodillas y apollada sobre Eduardo que estaba detrás de ella, el empezo a bajar sus manos hacia sus pechos y al principio Daniela se sobresalto pero entre mis caricias en su concha y Eduardo acariciándole sus pechos de a poco se relajo y comenzo a disfrutar esa situación, lugo de unos minutos de esto la acostamos en unos sillones y le quitamos de a poco su ropa hasta dejarla en tanga, Eduardo empezo a besarle los pechos y yo le quite su tanga y comence a besarle su concha hasta llegar a su clítoris , en ese momento alcanzo un grado de exitacion enorme y la penetre, empece a bombearla primero suave y cada vez aumentando la fuerza y la velocidad, a todo esto Eduardo le enterro la verga en la boca y ella empezo a chuparla desesperadamente, yo le levante las piernas y se las puse sobre mis hombros y empece a darle bien duro, mientras que eduardo tomándola de los pelos , se corrio en su boca y Daniela se trago toda su leche sin dejar caer una gota, viendo esta imagen de mi mujer , desesperada , excitada, y muy caliente me corri dentro de ella..
Daniela se arrodillo delante nuestro y en pocos minutos ya estabamos los dos con la verga bien dura, Eduardo se acosto en el sillon y Daniela se le subio arriba, y empezo a cabalgar como una desaforada, yo le empece a meter los dedos en su culo que se fue dilatando de a poco hasta que empezo a pedirme por favor que la penetrara, y asi fue de una topada se la enterre y en ese momento ella dio un gemido y empezo a tener un orgasmo atrás de otro, la agarre de los pelos y mientras la penetrábamos empezo a gemir y a decir que le encantaba sentirse una perra en celo, enseguida nos corrimos todos a la vez y Daniela se dejo caer sobre eduardo exhausta, en ese momento me di cuenta que el mozo del pub estaba esperando y espiando desde la barra que terminaramos para cerrar el lugar, y agradecido por su paciencia lo invite a echarle un polvo a Daniela , ella sin negarse se abrio de piernas y se dejo bombear nuevamente, y como no podiamos quedarnos mirando y nada mas con eduardo tambien nos sumamos y le dimos otra dosis para cerrar la noche
De regreso a casa Daniela me comento que si no hubiera estado tomada no sabia si se habria animado y se puso contenta de haberlo hecho y me pidio que lo repitiéramos algun dia...........y asi sera!.