Una noche tranquila de amigas y un desconocido.

Lo que empezó siendo una noche para contar penas, terminó siendo una noche animada con un nuevo amigo que nos dejó muertas, y nosotras a él complacido.

Era un viernes noche, después de un día duro de universidad, una amiga se vino a dormir a casa donde pensábamos emborracharnos y olvidar los problemas amorosos. Por mi parte que me encuentro en una relación tóxica donde me molesta hasta hacer el amor con él y mi amiga a la que su rollo le dejo de hacer caso hace un mes. Ese finde estaba en casa mi hermano, pero se encierra en su cuarto y como si no estuviera.

Yo tengo 23 años, y decir que mi físico a mejorado estos últimos años. No esque sea digno de admirar pero tengo unas caderas y una cintura que vuelve loco a los hombres. En cambio tengo un pecho normal, para nada prominente.

Mi amiga es algo más alta que yo y con una figura más homogénea.

Después de cenar, ya nos habíamos bebido una botella de vino y empezamos con las copas. Nos fuimos a la habitación para estar más tranquila, nos pusimos música y empezamos a beber.

Con la tontería se nos ocurrió hacer un perfil de mi amiga en tinder, de lo que había poco que se salvara, hasta que un muchacho nos habló y resultó  que vivía muy cerca del piso.

Empezamos a hablar con él y nos dieron las 5 de la mañana sin decirle que estaba hablando con dos personas.

Le contamos que estábamos las dos solas, a lo que el muchacho se ofreció a venir a por nosotras.

Ya borrachas nosotras accedimos con la tontería, aunque ninguna de las dos eramos consciente de lo que se nos venía encima.

El muchacho nos recogió, nos pareció muy mono. Estaba de buen ver.  Cuando llegamos a su casa estaba nervioso , nos sirvió una copa y puso música para relajar en ambiente. Él se bebió su copa y nos ofreció ir a su habitación. En ningún momento nuestra intención era esa, solo fuimos a tomar algo. Como no accedimos, se sentó en medio de las dos y me empezó a tocar la pierna. Se notaba que yo le gustaba.

Alfinal, nos cogió de la mano y nos llevó a la habitación. Me senté en la cama y mi amiga  ya se había quedado la ropa, entonces el se vino para mi y me empezó a besar y a desnudar.

Mi amiga se acerco y empezó a besarlo por detrás. Él me desnudó y se echó encima de mí mientras me besaba. Mi amiga se acercó a besarme y empezó a tocarme. Derrepente me di cuenta que estaba empapada, no me hubiera imaginado que la situación me escitaba tanto.

Él se fue con mi amiga y empezó a penetrarla suavemente, yo me acerque y empecé a chuparle los pezones.

Él se volvió, me empujo en la cama y me la metió derrepente, empujandome hacia dentro con fuerzas, haciendo que cogimiera cada vez más fuerte. Le agarré la espalda y me di cuenta que estaba mejor de lo que había pensado, era todo músculos.

Mi amiga empezó a besarme, mientras el le introducía los dedos en si vagina.

Me dio la vuelta y me la metió por detrás, haciéndome chillar de dolor, nunca lo había echo por detrás, pero le dio igual. Noté que me escupió en el cachete y lo restregó en mi culo para que entrara con más facilidad.

Me di cuenta que mi amiga empezó a sobrar, el solo me prestaba atención a mí.

Tuve un ápice de valor , le ordené que se pusiera de pie y apoye mi pie en la cama con la intención de que me follará de pie. Pero me cogió en brazos y me llevo al sofá, sentándose y diciendo que me pusiera mirando hacia delante, por lo que obedecí como una puta. Empecé a cabalgarle con más ganas que nunca, yo misma me sorprendí cada vez que entraba y salía su pene de mi vagina, se me escapaba un gélido bastante alto. Me agarró y me giró quedando su cara junto a la mia y me dijo que ni se me ocurriera chillar o me iba a enterar.

Aproveche y me subí encima, moví las caderas haciendo círculos dejando su pene dentro sintiéndolo duro, tocaba todo mi ser y lo sentía muy placentero.  De repente lo escuche decir " que rico lo haces"  y me hizo acelerar el ritmo.

Mi amiga salió de la habitación y se unió de nuevo a nosotros. El se puso de pie y empezó a besarla, yo me agaché  y comenzé a chuparsela con todas mis ganas, hasta me atragantado con la saliba y las embestidas que me metia, me estaba fallando la boca. Le miré con la cara de guarra  que tenía, cosa que le puso aún más porque comenzó a follarme la boca más rápido.

Me levanto y nos llevó a la habitación, me tumbe en la cama boca arriba para seguir chupandosela y que me entrara entera en la boca, sin darme tiempo a meterme la dos veces, la sacó y se corrió en mí, llenandome las tetas, llegando incluso a las rodillas. Estaba completamente empapada de su semen.

Nos ofreció ducharnos, y en la ducha continuó la guerra. Me follo apoyada en la pared, mientras mi amiga lo besaba. Miré el reloj y me di cuenta que era las 8.30 de la mañana, se me habia pasado el tiempo volando.

Sin darnos cuenta, la noche paso de ser dolorosa a ser una de las noches más raras de mi vida.

Al día siguiente me habló, diciendo de quedar de nuevo él y yo solos.