Una noche mas

Cuando alguien se ve involucrado en un crimen es cuando uno saca lo mejor o lo peor de sí, eso le paso a la protagonista de esta historia que una tarde de verano como cualquiera iba caminando como todas las tardes desde hace unos años después del trabajo a su casa, Tahara una mujer no muy hermosa pero con su encanto, no muy alta con 1,72 delgada, pero con sus curvas un cuerpo que llamaba la atención, un cabello negro ondulado con unos ojos color marrón  claro y una mirada enigmática y brillante que  a veces era difícil de adivinar, era una morena que debajo de una caratula fría y calculadora, era tierna y apasionada. Pero, su corazón había sido traicionado varias veces dejando el amor en un segundo plano y ahora solo se dedicaba  a trabajar como asesora de una firma de inversionistas muy importante en la ciudad.

Esa tarde parecía como cualquiera, camina por el bulevar camino a la torre de apartamentos donde vivía, debido a que hace muchos años no manejaba por el tráfico de la ciudad, al cual odiaba y no soportaba, le gustaba contemplar el ambiente de aquélla ciudad a la cual había ido a vivir hace unos años al encontrar nuevo empleo, su empleo le encantaba y disfrutaba y los más importante le brindaba la estabilidad económica e independencia que necesitaba después del divorcio. Que no termino en buenos términos y no le dejo nada, solo una pensión para medio vivir. Le agradecía a su padre a haber pagado la universidad y obligarla a terminar a pesar de su testarudez de casarse muy joven con alguien mayor.

Su trabajo era extenuante y muy demandante ya que la firma se encargaba de inversionistas nacionales y extranjeros en los cuales invertían en negocios, en pocos años manejaba un portafolio muy bueno y era reconocida en la firma como una de las mejores.

Todo iba muy bien pero, hace menos de un año la firma comenzó a ser investigada por lavado de dinero y narcotráfico y aunque hasta el momento habían salido bien librados nos descartaban una intervención directa del gobierno, esa tarde había salido de una larga jornada de reuniones y toma de decisiones que tomarían y se sentía cansada de tanto problema  al tal punto de que había dicho que quería renunciar para evitar tanto problema.

Sumergida en sus pensamientos y en la charla que había tenido esa tarde con el presidente de la firma inversionista, le recordaba que ella sabía mucho y que la renuncia, no era la mejor solución le recordaba que había gente muy peligrosa y con poder al cual ella manejaba su dinero y que estaban muy contenta con ella y no la dejarían ir así de fácil.

Pensaba en como librarse de todo mientras caminaba que no se dio cuenta al atravesar la calle que un carro se pasaba el semáforo atropellándola. El golpe no fue muy duro pero al intentar levantarse ve a alguien bajarse del carro y correr hacia ella era una joven mujer que al intentar reclamarle siente un ligero dolor y se desmaya…