Una noche demasiado rocambolesca
Saqué de un lio a mi hermana y acabe follandome a su mejor amiga.
Era viernes por la noche y aquella sería una noche como otra, mis compañeros de trabajo me dijeron para ir a comer algo baratito y después a tomar una copa a algún garito del centro, cómo no tenía nada que hacer pues acepté sin más.
Después de cenar un bocata nos fuimos a un local: donde ponían música a un volumen correcto y donde la gente podía tomar algo sentado y bailar, en mi mente pensaba que a lo mejor esa noche podría pillar algo, ya que de ligar diríamos que poco y mal, mis ex siempre dijeron que no era feo, más bien del montón: 1.75 de altura, ni flaco ni gordo pero lo que más les gustaba eran mis ojos azules. Así que pensé que a lo mejor algo podría pillar que con 23 años la noche era joven.
Fuimos a cenar sobre las 21:00 y a las 23:00 fuimos a tomar algo aún garito cercano, el tiempo pasó volando y se hicieron las 12 de la noche y como si fuera la hora de Cenicienta, todos mis compañeros se largaron: algunas porque sus maridos las esperaban, otros porque tenían que madrugar.... a fin de cuentas allí estaba yo el bueno de Carlos, sentado en la barra mirando a las chavalas, cuando veo a una chica que tenía 3 o 4 tíos sobándole descaradamente el culo, la veía de espaldas llevaba un vestido rojo bastante corto y con tirantes, a la chica se le veía perfectamente su culo marcado, era de similar altura a la mía, cuando se giró lo flipe ¡¡¡¡coño si es mi hermana Sandra!!!!.
No lo voy a negar, mi hermana está muy buena: 25 años, morena, ojos marrones, labios carnosos, pecho normal pero bien puesto, pero si por algo destaca es por su culo y sus piernas.
La situación me estaba sobrepasando, yo vi que ella no estaba cómoda, a pesar de saber que había tenido más parejas que días tenía el mes, note como me encontró con la vista y me miro y me reconoció y aún no sé cómo lo hizo que se zafo de aquellos hombres y vino hacia mí.
S- Dejadme tranquila que tengo novio y os estáis pasando.
Yo con cara de Escalera de color, lo estaba alucinando ahora no era su hermano, era su novio, mi cara era de WTF yo estaba interesado en saber cómo continuaría aquello, uno de los chicos se dirigió a ella.
- Voy y me lo creo... venga va.
Y entonces, ocurrió algo que cambió las cosas por completo.
S- Y tanto que lo es.
Se dirigió hacia mí, me agarro por la cintura y se fue directamente a buscar mi boca, yo sentía algo extraño era mi hermana, pero era una mujer así que me dejé llevar y nos empezamos a besar, la lengua de Sandra era juguetona yo no sabía si estaba haciéndolo ver o lo estaba disfrutando, me animé y la agarré el culo y empecé a sobárselo noté como a mi polla la situación no le disgustaba, no sé el tiempo que paso cuando oí.
- Vámonos, aquí no hay nada que pillar, es una calientapollas.
Fue entonces que mi hermana se separó de mí, dejándome una sensación muy extraña, la de que me había gustado, pero que aquello no era muy normal y lo peor con mi pene totalmente empalmado.
S- Gracias por sacarme de este lío.
C- De nada mujer, pero esto se avisa.
S- Ya lo sé, lo siento pensé que lo tenía controlado y si me descuido hubiera pasado algo peor, gracias hermanito.
Ahora en mi cerebro había un follón mental de padre y muy señor mío, ya que había sido uno de los mejores morreos que me habían dado en años y allí venía el problema, mi hermana me la había puesto dura como una piedra y ella se había dado cuenta.
S- Joder hermanito, sí que te pongo.
C- Es que uno no es de piedra.
S- Sabes, yo no te puedo ayudar, pero no temas que alguien encontraré para solucionar este problema.
Sandra me iba a buscar a alguien con quien desfogarme aquella noche, yo alucinaba solo era las 00:30 y la situación cada vez me parecía más surrealista.
S- Venga a que esperas, ve a buscar el coche que vamos a buscar a alguien para ti.
C- No te puedo dejar aquí con estos moscones.
S- Cierto, tienes el coche lejos?.
C- Aquí al lado.
Nos fuimos de allí en esos momentos mi cabeza era una olla exprés, mi polla ya no estaba tiesa, pero el calentón que llevaba era brutal, nos subimos al coche un Peugeot 806. de segunda mano que me llevaba por los sitios, el cual no era precisamente el coche más apropiado para ligar.
S- Tienes manos libres.
C- Si... porque?.
S- Es que quiero que oigas la conversación.
A quien coño estaba llamando?, no lo sé lo único que sabía es que estaba muy intrigado, marcó el número de teléfono dio 3 tonos y una voz femenina contestó.
T- Si diga....(parecía medio dormida).
S- Hola Thais, soy Sandra.
T- Ya lo sé.... mujer que quieres a estas horas.
S- Como estás para darte una alegría, para el cuerpo a estas horas.
Aquello cada vez era más raro, mi hermana llamando a una amiga para que se diera un revolcón conmigo... perdón que os he cortao la conversación.
T- No me disgustaría, pero cómo les digo a mis padres que a la 1 de la madrugada salgo a la calle.
S- Invéntate algo, que a venido una amiga a verte algo encontrarás.
T- De acuerdo, espero que valga la pena, túsabes que no me acuesto con el primero que vea.
S- No temas, es de confianza y creo que te gustará.
T- Allí estaré, no tardes mucho.
S- Hasta luego.
Teníamos en coche unos 20 minutos, hasta llegar donde vivía ella, durante ese trayecto mi hermana me explico que Thais era compañera suya en el trabajo, que tenía 29 años y que se había enamorado de un tío con el que se casó pero la cosa acabó mal el tío le pegaba los cuernos con cualquiera y que la maltrataba psicológicamente, era su mejor compañera de trabajo y a la vez una de sus mejores amigas por lo que ella creía que se merecía una alegría, me explico esto para que viera que su vida no era un jardín de rosas con casi 30 años: divorciada y viviendo con sus padres.
Después de todo lo que me había explicado ya tenía ganas de conocerla, los minutos se me hicieron eternos fue entonces que mi hermana me dijo.
S- Tranquilo, no es una cualquiera tu has sido bueno conmigo y me gustaría que lo fueras con ella.
C- Pero tú crees que querrá?
S- Hombre, tienes que ser un poco galante dile algo bonito, no vayas a metérsela eso no gusta a las mujeres.
Esperamos fuera del coche y entonces bajó del portal hacia la calle, no había mucha luz pero se vislumbraba una silueta, cuando la vi solo puede decir.
C- !!!!Madre de dios.... qué guapa¡¡¡¡
S- Es preciosa y es mi mejor amiga.
Nos bajamos del coche y apareció ante nosotros, primero le dio dos besos a Sandra y luego dos a mí, parecía incómoda normalmente una amiga no te llama a medianoche para decirte que ha encontrado a un desconocido para echar un polvo.
C- Buenas noches Thais.
S- Perdón te presento este es Carlos.
Thais, se quedó callada unos segundos a mí me pareció mucho más tiempo, a lo mejor sabía quién era yo, después de ver esa cara y del morreo con Sandra, pensé que la noche se había acabado allí.... vi que todo se iba a la mierda.
T- Carlos.... no será tu hermano -con voz seria-.
S- Si ya lo sé, te parecerá algo extraño pero unos tipos me estaban manoseando y la cosa hubiera podido acabar peor y él me hizo un favor, le hice pasar por mi novio nos morreamos los dos delante de aquellos tipos pero el problema fue y lo entiendo que Carlos se calentó y no lo voy a negar, a mí me gustó y como soy una buena hermana, le dije que le encontraría a alguien que le ayudará después de salvarme de un destino no muy bueno.
La cara de Thais era alucinante, su mejor amiga y compañera le trae a su hermano para echar un polvete después de decirle que lo había puesto a 5000 por hora, yo en esta situación también lo habría flipado así que decidí hacer algo para que vieran que era una persona formal y aquello no pareciera una peli porno de aquellas de.... hola te la meto y me corro, no quería aquello.
C- Os apetecería tomar algo por aquí cerca, ni que sea una Coca-cola?.
T- No me parece mala idea, aquí cerca hay un bar que tiene algo de ambiente y estaremos bien.
S- Ok.
A ella no le pareció mala idea eso era un punto a mi favor... con tanto diálogo me olvidé de describiros a Thais: 1.72 de altura, con una media melena de color rubio en el que sus ojos de color azabache destacaban en aquella noche, llevaba una jersey negro sin mangas a conjunto con unos jeans clásicos que le llegaban por encima de su tobillo y rematado por unos zapatos de medio tacón de color gris brillante, realmente mi hermana no me había defraudado, era un bellezón un culo bastante apretado y una buena delantera, me preguntaba como semejante mujer había sido vejada....
S-Súbete tu delante
T- Me sabe mal.
S- Venga que así os conocéis.
Lo primero que hice fue abrirle la puerta del coche, ella me sonrió como dándome las gracias cuando quisimos darnos cuenta ya habíamos llegado era un bar con gente que iba de fiesta o que terminaba allí la fiesta, entramos y vimos que había bastante un ruido yo me pedí una cola, Thais un vodka con naranja y Sandra un martini.... empezamos a hablar, Sandra conocía a una de las encargadas del local y se puso a hablar con ella, esto me dejó vía libre para comenzar a intimar con Thais.
C- Te habrá parecido rara la proposición de Sandra?.
T- Un poco si pero siempre ha hablado bien de ti, en que tenía un hermano que vale mucho y que se merecía tener más suerte en la vida por eso entiendo que tú las has sacado aquél fregado y que ella te quiere compensar.
C- Si tu no quieres lo entenderé, pero no lo voy a negar me gustas.
Ella se sonrojo por lo que le estaba diciendo ella realmente me gustaba así que fue entonces que pensé que aquel tren no lo dejaría pasar y fue cuando puse una mano encima de su pantalón, ella no dijo nada y cómo si de un acto reflejo se tratará, puso la mía encima de mi pantalón me volvía a sentir nuevamente algo excitado, sin hacer mucho ruido todo aquello me llevó a que mi mano fuera hacia su pelo y que empezara a acariciarlo lentamente algo que a ella parecía no disgustarle, allí estábamos los dos ya que Sandra estaba tomando su bebida en la barra, en un momento determinado me acerqué a sus labios que estaban pintados con un labial de color neutro, noté sus labios y como nuestras lenguas se encontraban aquello me estaba gustando y a ella también, pero algo estaba a punto de fastidiar aquel momento.
- Señores y señoras.... vayan acabando que cerramos.
Ahora en aquel puto momento iban a cerrar, cuando parecía que estábamos conectando.... vaya mierda.
Sandra nos pagó las copas y mi pregunta era que haríamos ahora.
S- Veo que habéis intimado.
T- Si parece buen chico.
C- Si...
Solo pude decir sí, ella pensaría que era muy tonto porque yo a ella la veía muy educada y también me parecía muy inteligente.
Cuando salimos del local aquello parecía una desbandada de gente y una zona como aquella se había quedado casi vacía, el problema era como intimar más con Thais si Sandra estaba con nosotros, aquello parecía no tener solución y la situación se estaba volviendo cada vez más rocambolesca.
Ya eran las 2 de la madrugada y la temperatura había bajado un pelín.
S- Será mejor que vayamos al coche que empieza a refrescar.
C- Si será mejor porque veo que cae alguna gota.
Nos fuimos hacia el coche que lo teníamos en una zona que no había ni una vivienda, no es que cayera una gota sino que empezó a llover como si aquello fuera el diluvio universal, en ese momento fue cuando Sandra me sorprendió.
S- Poneros detrás que yo aquí delante me miraré un rato el móvil.
T- No te sabe mal que nos quedemos aquí detrás, no te molestará.
S- No mujer yo por mi hermano hago lo que haga falta.
Aquello era muy extraño: mi hermana en el asiento de delante y yo con Thais en la parte trasera y lloviendo, más que fantasioso diría que eso ya era muy surrealista.
Dicho y hecho ella se puso con su móvil y yo me empecé a besar con Thais, concluyendo la situación que antes nos habían dejado a medias por una parte me gustaba estar con ella y la situación de que Sandra estuviera delante me tenía un pelín extrañado, así que empecé a besar el cuello de Thais que recorría con mi lengua, ella suspiraba notaba como su respiración aumentaba y fui besando sus brazos hasta llegar a sus manos, ahora era ella la que decidió pasar a la acción: me desabrocho la camisa y empezó a lamerle como si fuera un polo de hielo, poco a poco hasta llegando a mi pantalón que ya no podía esconder mi tremenda excitación, ella se dio cuenta y poco a poco me desabrocho mi pantalón liberándome de aquellos botones que hacían que mi verga se ahogará, a mí me era imposible de ver a mi hermana y saber qué hacía, mientras Thais continuaba sobándome el paquete hasta que se decidió a bajarme el slip y liberó mi polla que es de un tamaño estándar quizás algo más doble y de unos 15 centímetros, fue entonces que la empezó a besar lentamente, dirigiéndose hacia la punta aquello era muy placentero pasado un rato decidió comenzar a chupar mi punta, a mi me importaba un bledo que estuviera Sandra allí como si quería estar un ejército, estaba muy excitado y lo quería disfrutar por mi parte yo empezaba a jadear ya que ella ahora sí me estaba chupando toda mi verga, de arriba hacia abajo con una cadencia excelente me encontraba en el cielo, al cabo de un rato de tan ardua tarea ella me miró a los ojos con cara de que se lo estaba pasando bien, fue entonces que ocurrió un nuevo impedimento.
T- Tienes condones?
C- No, no llevo.
T- Me lo imaginaba no tengo nada contra ti, pero es que a mi me gusta protegerme.
C- Lo entiendo, deberás pensar que soy un patán.
T- No ibas con ganas de hechar un polvo y has salido de verano.
Vaya vergüenza la cosa iba de mal en peor, como nunca echaba un polvo de aquí te pillo aquí te mato pues servidor no llevaba gomita.
S- Espera Thais que yo si llevo.
T- Gracias amiga.
Ahora era ella la que me prestaba el condón, al menos Sandra era una buena hermana.
Mientras continuaba lloviendo afuera, mi excitación se bajó un poco de pensar ante tal impedimento pero Thais supo cómo volver a levantar mi ánimo y es que me volvió a besar, mientras la besaba empecé a acariciarle el pecho a ella le gustaba, cuando notó que ya estaba empalmado.
T- Me ayudas a ponértelo.
C- Faltaría más.
Se bajó puse mi polla bien recta y empezó a bajarme el condón cuando lo tuvo puesto y con mi polla dura como una piedra, empezó a quitarse el pantalón y los zapatos llevaba unas braguitas negras, clásicas pero elegantes, como estábamos a oscuras se intuía una matita de pelo pero a oscuras poco se ve, se había quedado solamente con el jersey fue entonces que se acomodó encima mío de una manera lenta, yo no había acariciado su coño y no sabía lo excitada que estaba así que me fijé en su rostro mientras lentamente introducía toda mi herramienta dentro de ella, fueron unos instantes maravillosos incluso me había olvidado en aquel momento de que Sandra estaba en el asiento delantero.
T- Te gusta Carlos?
C- Si así Thais me gusta mucho, espero que a ti te guste.
T- Si amor.
Como si de un interruptor fuera empezó a subir y a bajar yo allí con las piernas estiradas, aquel coche por fin servía para algo, yo notaba como ella marcaba las cadencias fue entonces que empecé a jugar con sus pechos y es que ella aún llevaba el jersey, ella sin dejar de subir y bajar se quitó el jersey y allí estaban sus pechos ni muy grandes ni muy pequeños con un sujetador negro que libere como pude ya que no soy un especialista, aún así lo logré rápidamente, fue entonces que la acerqué hacia mí y empecé a degustar aquellos pezones oscuros que estaban totalmente erguidos, ella no paraba de jadear y yo también lo más flipante es que se oían gemidos que no eran de Thais.... ¡¡¡la ostia, Sandra se estaba masturbando!!!!, pero yo estaba tan concentrado que pensé que con semejante regalo que me había ofrecido ella se lo merecía.
T- Joder Carlos, cómetelas por favor.
Y así lo hice empecé a comermelas, mientras le daba una ración de palo de tamaño épico, lamerlas era lo mejor su pecho se movía al ritmo de la penetración que le estaba dando
C- Joder me voy a correr,
T- Aguanta un poco.
Yo ya no podía más, notaba que iba a explotar, ella al menos se había corrido dos veces por lo menos y ahora se volvería a correr era impresionante.
C- No puedo más, me voy a correr.
La sensación que tuve fue brutal, noté como mi leche salía disparada a 300 km por hora para alojarse en el fondo de aquel condón, ella lo notó y se quedó abrazada a mi besándome nuevamente y acariciando mi pelo me preguntaba como semejante mujer no había tenido suerte en la vida.
Pasaron unos minutos y ella se salió de mi.
S- Ya habéis acabado?
T- Si ha sido precioso, nunca te lo podré pagar.
S- Mi hermanito se merecía que algo le saliera bien.
C- Gracias
Nos adecentamos y nos vestimos Sandra intentó no mirarnos, cuando pude me bajé y me fui a la parte delantera, el condón lo tiramos en una papelera cercana ya que se tiene que ser respetuoso con el medio ambiente, iniciamos el viaje que se me hizo muy corto y es que por el retrovisor no dejamos de mirarnos ni un solo instante como si fuéramos dos niños que habían hecho una travesura.
Cuando llegamos a casa de Thais pensé que una noche como aquella la guardaría para siempre en mi retina y no quería que fuese la última, así que eche el resto.
C- Thais te apetecería tomar algo un día de estos por la tarde o salir a comer si tienes tiempo?
Estaba esperando respuesta y me la dio.
T- Si po que no, hemos compartido poco tiempo pero creo que lo hemos aprovechado-risas-, me parece una buena idea, dame tu móvil y te hago una perdida.
C- Ok.
Se lo di y al cabo de unos momentos ya tenía su móvil grabado le di dos besos en la mejilla como si nos acabáramos de conocer y espere a que entrará en el portal, cuando entró me dirigí al coche y allí estaba Sandra eran las 3.30 de la mañana y quería conversar con ella de que opinaba de lo que había hecho.
C- Thais me ha parecido muy interesante y me gustaría quedar con ella.
S- Solo te pido una cosa: no quiero que la ningunees es una chica especial y se merece una persona que la mime.
C- De acuerdo, por cierto me ha dado la sensación que tú has hecho algo más que mirar el móvil, ya que te he oído.
S- Que te parece que iba a hacer.
C- Eres un sol hermanita.
S- Venga zalamero vamos para casa que papa y mamá van a alucinar que lleguemos juntos.
Cuando llegamos a casa nuestro padre nos oyó llegar.
P- Buenos días, al menos venís los dos juntos id a dormir y descansar.
Bostezamos y nos dirigimos cada uno a su habitación y al llegar a la puerta.
S- Solo te pido una cosa cuídala.... ah y ha sido una gran noche en todos los aspectos.
Y sin tiempo a decir nada, me dio un beso en los labios.
Aquella noche había sido maravillosa, mi hermana se convirtió en mi mejor amiga. Al día siguiente envié un mensaje a Thais por si quería quedar a tomar un vermouth el domingo y me dijo que si y a partir de allí empezó todo: una relación que se convirtió en amistad y que al final acabo en boda 3 años después y que ya tiene relevo generacional de aquí 3 meses y que por cierto no puede tener mejor madrina que Sandra una hermana a la que salvé y que ella me salvó a mí también y que liberó a Thais de su antigua vida hacia una nueva de felicidad y alegría.