Una mañana de buen sexo (3)

Mis viejas amigas Estela y su madre Doña Adriana, pagan una deuda con su culito.

Hola amigos ¿recordáis las historias anteriores de una mañana de buen sexo?, Pues hoy les narrare la tercera parte. Que se trata de una deuda que tuvo que pagar Estela y su madre Adriana

Pasaron alrededor de 3 semanas después de aquellos dos encuentros descomunales entre mi amiga Estela y su madre Adriana. Cuando decidí ir a visitarlas, era un miércoles por la noche, había salido de trabajar de la radiodifusora eran 8:15 de la noche, al llegar a la casa de Estela toque ala puerta y me recibió su papá, maldición pensó ya no podré hacer gran cosa.

Buenas noches Don Pedro ¿se encuentra Estela?

Estela te hablan- se limito a gritar Don Pedro

Se retiro y me dejo en la puerta, en eso salió Estela, llevaba un camisón puesto que dejaba ver sus sabrosas piernas.

Hola nos dijimos al unísono y nos dimos un beso en los labios

Que tal- conteste

Ven te invito a pasarme dijo

Se dio la vuelta lo que lo que puede visualizar la redondez de su trasero

Me senté en la sala, era un sofá de piel negra

¿Quieres una cerveza? Me ofreció Estela

claro con gusto acepte

En cuestión de segundos alió con la bebida de cebada

Al tocar la bebida me quede pensativo recordando lo que había hecho con doña Adriana la ves pasada, de cómo me tome la cerveza en sus senos

Estela al verme pensativo leyó mis pensamientos se acerco a mi y sentó sobre mis piernas y me dijo ¿quieres ver nuestra fiesta? Y acariciando sus piernas de arriba abajo conteste que si

Le levante su camisón y no tenía sostén así que empecé a besar su abdomen y acariciar sus tetas que estaban muy paraditas, me impresiona la manera en que se mojo, aprecia que ya tenía rato mojada.

Me volvió a preguntar ¿quieres ver una fiesta?

Si contesté ya casi me venia

Se levanto del sofá me tomo de la mano y nos dirigimos hacia la recamara de sus padres, que estaba entre abierta, en el pasillo se escuchaban unos gemidos muy fuertes, mismos que reconocía eran de Doña Adriana, al llegar a la puerta estaba todo a media luz, vi s Dona Adriana tumbada boca abajo y una lengua que se movía entre su ano, ella tenía su culo bien parado se había puesto una almohada en su abdomen luego esa lengua subió lentamente recorriendo su espalda.

Voltee así Estela y le pregunte ¿quien es? Ella me puso un dedo en la boca en señal de que guardara silencio y volvimos asía la puerta. En eso vimos cómo él hombre aquel le encañonaba él pené asía la entrada del ano de Doña Adriana escupió primero sobre el hoyito y le propino unos lengüetazos más, yo me acerque asía el trasero de Estela y juntando mi pené sobre él le tome de sus senos y los masaje, levante tantito el camisón de Estela para que quedaran sus nalguitas al aire estreche mi abdomen sobre sus glúteos desnudos, en eso escuchamos un grito de placer, era Doña Estela que tenía el miembro del hombre ya dentro de ella, la esta culeando salvajemente. Mmmmm no pares decía entre sollozos Doña Adriana, el hombre la sujetaba de los cabellos y meneaban sabrosamente las caderas mientras La señora mordía la almohada con desesperación

En eso Estela me dijo observa a tu derecha, estaba su padre sentado en una silla masturbándose, lo que me dejo boquiabierto, pero de pronto sentí cómo mi amiga desabrochaba mi pantalón y bajaba su lengua asía mi verga se lo metió en la boca de un golpe, ella bajo su boca asía abajo yo la tome de los cabellos, y le di más acceso a mi pija

Voltee a ver cómo iba aquella cogida con Doña Adriana; ella ahora estaba de frente al desconocido al pie de la cama con las piernas abiertas el hombre se inclino sobre ella y al mismo tiempo Doña Adriana lo rodeaba con sus piernas, ella jadeaba de la manera más exquisita sus pechos se balanceaban de lugar a otro, el cuarto se inundo de un olor a sexo increíble, yo con esa escena y la boca de Estela en mi pené me hizo estallar en la boca de mi amiga, en eso el señor contrajo su pelvis, y lanzaron él y Doña Adriana un estruendoso gemido, el esposo se levanto de la silla y se acerco a su mujer para depositarle en su abdomen el semen ocasionado por su masturbación, ella lo embarro con su mano lo froto por todo su vientre, el liquido lechoso.

Estela limpio con su boca mi semen exprimió hasta la última gota, en eso bajamos ala sala y le dije oye ahora quiero tu culo

No- contesto ella

¿Por qué? Respondí

Mira ¿viste al señor que se cogió a mi mamá?

Si

Pues mi papá le pidió prestado dinero y cómo no puede pagar los intereses

, entonces él se cobra los intereses con el culito mío y de mi mamá

.

Ahora si me permites tengo una deuda que pagar

Entonces es hora de retirarme le respondí

Pero no te acongojes el sábado iremos ala playa unos primos y yo y sabes allí la pasamos muy bien ¿vienes? Claro

Bueno entonces hasta el sábado me dijo Estela

Tenlo por seguro- añadí

Bueno amigos esa historia se la narrare en una mañana de buen sexo parte 4, hasta entonces bye