Una historia diferente 11

Lo insistente que puede ser una madre para conseguir lo que quiere,jeje

ALBA:

Su  madre se puso terriblemente pesada con el tema de que fuera a esa doctora que le habían recomendado, que era la mejor y no se que cosas mas, no se daba cuenta que le daba igual, que nadie podía ayudarla, pero como insistió durante mucho tiempo por no escucharla mas le dijo que si, que llamara si quería que ella iría a esa doctora, pero que de antemano supiese que no la podían ayudar.

Su madre salió de su cuarto como siempre, con una cara de tristeza, agobio y angustia por no entender a su hija y mas aun por no saber que le estaba pasando, quería que volviera esa niña dulce y con esa sonrisa que siempre le brindaba y que desde hacia ya algún tiempo no la veía ni asomar por su carita.

Se tiro mas de media hora hablando por el teléfono, se le escuchaba pedirle a la doctora que hiciera un hueco e incluso escucho que su madre decía que se estaba dejando morir en vida. Sabia que tenia razón, pero es que no podía quitarse ese dolor que tenia y esa desgana que le había como secuestrado. Cuando colgó el teléfono salió corriendo para su cuarto y al llegar ni toco ni nada, entro como un torbellino, cosa que en su madre era bastante raro.

Madre: hija, el viernes tienes la cita (lo dijo con una cara sonriente, como que después de conseguir la cita, esa angustia que tenia en la cara hubiera desaparecido)

Alba: muy bien mama, no tengo nada mejor que hacer el viernes (lo dijo con la misma desgana que decía todo desde que paso lo que paso)

Madre: bueno, ya veras como todo cambia a partir del viernes, lo presiento

Alba: si mama, lo que digas. Pero en verdad sabía que eso no iba a ser cierto y que su madre se iba a llevar una desilusión muy grande, pero como se lo decía con lo feliz que la veía.

Madre: hija, se que no lo ves ahora, pero esa doctora hace imposibles, así que se que contigo lo va a conseguir, aunque no te lo creas

Alba: es verdad mama, no me lo creo, pero aun asi, por hacerte el gusto iré a esa consulta.

Madre: gracias hija, le dio un beso en la frente y se fue.

Alba se quedo pensando en que era otro intento inútil, que por hacerle el gusto a su madre iría, pero que en verdad nadie podía ayudarla por el simple hecho de que Pablo la amenazo con hacerle daño a Clara y porque ella seguro que la odiaba tanto que no quería saber nada de ella. En sus pensamientos volvió la imagen de Clara, lo linda que era, todo lo que había sentido con ella, que nunca sintió con nadie, lo que la quería y de repente volvieron esas lágrimas que ya eran cotidianas en Alba. No podía soportar el hecho de que la odiara, pero prefería eso a que le pasara algo, porque por lo menos estaba viva y seguro que algún día encontraría o habría encontrado ya a alguien que la hiciera feliz. Eso en cierta manera la reconfortaba, pero solo en cierta manera, porque lo que mas deseaba en la vida era estar a su lado, volver a sentir sus besos, volver a oler ese aroma, volver a ver esos ojos que le hipnotizaban y esa sonrisa que le encantaba.

La semana transcurrió como  todas las anteriores, sin hacer nada, lo único diferente era que su madre estaba todo el día diciéndole lo magnifica que era la doctora, le conto la historia del hijo de una de sus amigas y como consiguió que mejorara y que curo a no se quien. En fin, era todo halagos para la doctora. Llego el punto de que una parte de mi pensaba que podía ayudarla, pero que estaba pensando, si sabia que eso era imposible, que Pablo le había dicho que no se lo podía contar a nadie, pero dijo conocidos, pensó, y esa doctora no es conocida, se decía. Bueno, dejare de pensar que me voy a volver loca.

Llego el viernes que tanto su familia deseaba y que durante la semana habían hecho que ella también lo deseaba, solo por conocer a esa doctora de la que tanto había oído hablar.

Se ducho y se vistió con la desgana que últimamente le caracterizaba, su madre le esperaba abajo para irse a la consulta, fueron andando porque se encontraba relativamente cerca y según su madre, así le daba el aire un poco que hacia semanas que no salía de casa. Al llegar a la consulta, a Alba le sorprendió la decoración, era especial, le hacían sentir bien y eso hacia semanas que no lo sentía. Entraron en la sala de espera, le reprocho a su madre que habían llegado demasiado pronto, porque vio que había alguna gente en esa sala. Se sentó a lado de su madre en uno de los sofás y cuando andaba como siempre con sus pensamientos, apareció una muchacha joven con una bata blanca, cuando la vio, salió de sus pensamientos y un sentimiento de paz y protección inundo su corazón. La doctora solo saludo y llamo al siguiente. Alba se quedo pensando en la doctora, pensando que era una persona tranquila y que hacia sentir protección y seguridad. En ese momento, pensó que a lo mejor podía contarle todo, pero estando su madre, no podía hacerlo, porque podía ser que Pablo se enterara y le hiciera algo a Clara, volvió entonces ese sentimiento de terror y angustia que le acompañaba desde hacia semanas. Cuando miro, ya no quedaban pacientes y su madre le comento que la próxima seria ella, porque ya no había nadie en la consulta. Alba se puso algo nerviosa, tenia unas ganas enormes de contarlo todo, pero tenia muchísimo miedo a las repercusiones que sus actos podían acarrear. Alba se quedo mirando un cuadro, era especial, al mirarlo sentía algo que no sabia explicar, se acerco a ver quien era el autor o autora, pero no se podía apreciar, no podía dejar de mirarlo y una pequeña sonrisa apareció en su rostro. Su madre se levanto del sofá y la abrazo, era la primera vez en semanas que aparecía otra vez su hermosa sonrisa, cuando Alba casi no podía respirar de lo fuerte que la abrazaba su madre, le dijo que la soltara y se quedo mirando embobada ese cuadro, los colores, era como si ya lo hubiera visto, pero donde no lo sabia.

Después de un rato, salió la doctora, se despidió del paciente y les dijo que pasaran, pero vio como Alba estaba mirando fijamente el cuadro y ni la escuchaba, así que se acerco a ella.

Doc: te gusta el cuadro? (con una sonrisa en la cara)

Alba: si, la verdad es que me encanta.

Doc: pues si te mejoras de lo que quiera que tengas, te lo puedes llevar. Además, la autora me pude hacer otro si se lo pido

Cuando la doctora dijo autora sintió como el corazón le daba un vuelco, no entendía muy bien el porque, pero latía mas rápido.

Doc: bueno, pasen a mi consulta y me cuentan

Alba y su madre: gracias

Las dos pasaron delante de la doctora que las guiaba por donde tenían que ir, cuando estaban en el despacho, Alba se sentía segura y protegida, como si nadie ni nada le pudiese dañar y la doctora les dijo que tomaran asiento. Ella se sentó enfrente de Alba y su madre.

Doc: bueno, díganme cual es el problema, porque vi que estaban muy angustiadas

De repente Alba se quedo callada, se le quito incluso la sonrisa y volvió esa angustia y esa tristeza en los ojos, cosa que la doctora se dio cuenta. Se fijo que cuando pregunto que es lo que pasaba, se quedo callada y se puso triste, pensó que algo tenia que ser lo suficientemente grave para que su madre no supiera y se quedara completamente muda. En ese momento, la madre de Alba le conto las apreciaciones que tenia sobre la situación, pero no sabia porque se encontraba asi y por mas que le preguntaba no decía ni una palabra, después de un rato hablando, la doctora le corto.

Doc: entiendo perfectamente lo que tiene que estar pasando (dirigió la mirada a la madre de Alba) pero todo lo que me cuenta que ha visto en su hija es consecuencia de algo, y ese algo es la causa de que este su hija así, por lo que tenemos que saber la causa.

Madre de Alba: pues por eso hemos venido, porque me han contado que usted consigue los imposibles y ya estamos su padre y yo desesperados viendo como esta muriendo en vida.

Doc: se que quiere saber, pero también le tengo que comentar, que en este caso, tengo que hablar a solas con su hija y si ella me lo permite le contare, pero si no me lo permite, solo podre decirle si la podre ayudar o no y como va mejorando o no. Claro, si le parece bien, es como trabajo, si no pues no tengo problema ninguno. Se lo digo antes que nada para que luego no me venga con ningún reproche ni nada.

Madre de Alba: si, si, si es por que mi hija mejore, no se preocupe que acato todo lo que haya que acatar.

Doc: bueno, pues si no le importa le acompaño a la sala de espera

Madre de Alba: gracias por todo, solo quiero que se cure y que vuelva a ser mi dulce niña

Doc: hare lo que pueda, no le puedo prometer que se curara, pero si puedo prometerle que hare todo lo que este en mi mano. Por cierto, ahí esta una sala con café, te y pastas, por si quiere tomar algo. Después nos vemos.

Entro otra vez a su despacho y se encontró a Alba con lágrimas en los ojos, que intento disimular cuando vio que entraba, pero se dio cuenta de que estaba llorando.

Doc: bueno, ya estoy aquí, soy toda oídos

Alba no hablaba, no sabia si se lo podía contar o no, era una duda que la mataba, por un lado necesitaba contarlo y no sabia porque pero sabia que se lo tenia que contar a ella y por otro tenia miedo de que algo malo le pasara a Clara. Ella seguía en sus pensamientos y la doctora solo la miraba fijamente, no perdía ningún detalle y como sabía que no iba a contárselo, se levanto y se sentó a su lado, claro antes pidiéndole permiso para sentarse tan cerca y entonces comenzó todo.

CONTINUARÁ-----------------------------------------

AQUI TENEIS LA CONTINUACION, ESPERO QUE OS AGRADE.

GRACIAS COMO SIEMPRE A TODOS.