Una historia de cuarentena
Jugar ajedrez.
No dejo de pensar que hice una estupidez.
Me separé hace seis meses y hace 5 empezó la cuarentena. Hace casi dos semanas exactas vino mi vecino y me invito a jugar ajedrez a su casa.
Me dijo que ya no daba mas de soledad y que no solo ha salido lo estrictamente necesario. Así que accedí. El es mayor que yo, yo 38 y el 57.
Fuimos a su casa y empezamos a jugar.
Me ofreció una copa de vino mientra jugábamos. Cuándo me lo sirvió volteo un poco sobre mi blusa,
yo me trate de limpiar y cuando estaba en eso me agarro los pechos y metió su lengua en mi boca
Eso me sorprendió. Acaricio mi pelo, mi cara y me dio un beso suave. Nos sentamos en el sofa
Y me sedujo.....acaricio mis muslos....los junté, subió por mi abdomen, por dentro de la blusa y bajó los tirantes de mi corpiño dejó mis pechos al aire y empezó a lamerlos, morderlos, succionarlos; pasaba de uno a otro. Traté de detenerlo y poner mi blusa en su lugar. Pero me dió un beso en la boca y pese a que tenia mis muslos juntos puso su mano sobre mi chocho, empezó a dedearme, a masturbarme y pasó su lengua por la unión de mi oreja y mi cuello. Me tomó de la nuca y metió su lengua en mi boca, recorría el interior de mis labios con su lengua y volvió a sacarme los senos; después de eso.....simplemente me entregué....me quitó del todo la blusa, me dio vuelta, empezó a besar y lamer mi espalda desde el inicio de mis nalgas hasta mi cuello. Me puso en 4 y bajo mi jean abrió mis piernas, mis nalgas y me mordio cada nalga. Luego vino un beso en mi ano, no una lamida, un beso.
Me tomó en sus brazos y me llevó a la ducha. Estaba la ducha y entramos, desnudos, me arrodillé y se la mamé con el agua cayendo sobre nosotros él acariciaba mi cabeza. Se sentó en la tina y me sentó sobre él, en ese momento de frente a el por fin me ensarto.....movía suave mi vagina con su pene adentro como si se estuvieran besando, el estrujaba mis nalgas, me recosto en la tina y lamio todo mi cuerpo, cada centimetro, me daba vuelta, me ponia de costado, de rodillas, detrás de mis rodillas, mis pies, los dedos de los pies, los brazos, las manos. Me llevó a la cocina y me puso miel en los senos no sólo en la punta, en la teta completa y trataba de tragarla enterayo no estaba depilada en mi vulva y me lleno los vellos de miel. Se sento en una silla y me volvió a ensartar, la miel pegoteaba nuestros vellos mientras fornicabamosLuego me llevo a la cama y me lo iba a meter por el culo; le dije que no. Pero me dijo que se notaba que me gusta por ahí. Así que lo dejé ensartarme por el culo. El resto de la tarde me tuvo gritando de boca sobre la cama o bien sentada dándole la espalda.
Ya llevamos casi dos semanas follando a diario.