Una gran mujer y sumisa

Para una Señora especial, y a la vez la mejor de las Sumisas

Hola, he dejado los anteriores relatos, para contaros lo ultimo de mi vida, y espero mas importante y definitivo.

Como todos los que me leéis ya me conocéis bien, y los que me lean por primera vez bienvenidos a este maravilloso mundo.

Aunque llevo mucho tiempo en el mundo de la dominación, en el cual creo que he adquirido mucha experiencia, siempre había deseado encontrar una mujer que quisiera algo estable y que a la vez fuese señora y sumisa. Llevo años en paginas de dominación, de contactos y como no aquí en todorelatos, y en una de estas paginas hace poco leí un perfil de una mujer de 41 años de una provincia ni cercana ni lejana a la mía, en el texto donde normalmente nos describimos como somos que buscamos, ella no ponía mucho, pero lo suficiente para llamar mi atención, decía algo así como, "Soy nueva, algo liberal, curiosa y me gustaría experimentar , conocer y disfrutar si eso se pudiera hacer como sumisa", a mi me llamo la atención y le escribí un correo interesándome por lo que buscaba o deseaba, y dándole mi Messenger por si me quería agregar y hablar conmigo, al cabo de un par de días me agrego a su msn y empezamos a hablar, y a conocernos. Aunque al principio estuve un poco receloso, pues coincidíamos en muchas cosas, y para ser sinceros creía que me estaba tomando el pelo, me fui dando cuenta que no era así, que era cierto lo que hablábamos y que teníamos cosas en común, pero la más importante de todas, es que ella quería ser sumisa, pero de su pareja, es decir, de puertas para adentro una puta para su Amo, y para los demás una Señora. Ella era un poco y lo es cortada, pero la fui metiendo en la conversación y en la situación, a veces como mujer y otras como puta, pues la verdad es que merecía la pena y me gustaba mucho, y por nada la quería dejar pasar.

Un día sin yo pedirle nada, ella me puso su cam, y bueno, mejor de lo que se había descrito, morena, bonitos ojos, mejor sonrisa, buenas tetas, un culo precioso y unas piernas torneadas, vamos tal y como me gusta una mujer y una puta sumisa, y además inteligente, con conversación y saber estar. Al cabo de un par de días de hablar con ella, conocernos mejor y coger confianza le dije que quería verle las tetas, algo que al principio se negó, pero ella ya estaba empezando a entregarse y a ver que aunque ella no quería, su mente la hacia obedecerme, así que me las enseño, cosa que me agrado por lo bien que las tiene, y porque era el primer paso para poseer a la sumisa.

Al día siguiente con las tormentas ella me envió un mensaje al móvil, excusándose que no podía conectar porque no iba el adsl, a lo que yo le conteste que lastima, porque hoy le iba a pedir que se desnudara para mi, que quería ver a mi perrita desnuda, y bueno casualidad o no al rato volvió la línea y conseguimos hablar, así que lo primero que hice fue decir que era cosa del destino, que me perteneciera, y que quería verla desnuda, ella al igual que la otra vez dijo que no que se cortaría, pero lo hizo, se desnudo para mi, para su Señor.

En esos días ella se reincorporo a su trabajo pues estaba de vacaciones, y cuando hablamos el primer día de su trabajo, me dijo que compañeros suyos le dijeron que la veían distinta, que parecía como si estuviese follando con alguien, eso a ella le gusto, pero a mi aun más.

Y así seguimos hablando conociéndonos e intimando más hasta que el primer fin de semana que ella descanso y yo me pude desplazar, cogi el tren y me fui para la población donde ella reside, para ese primer encuentro le ordene que se pusiera falda, medias, tacón alto y bragas y sujetador, cosa que como pude comprobar cumplió y muy bien, pues además tiene gusto para vestir. A todo esto ella a mi no me había visto nunca, y no sabia quien era pero yo a ella si que la conocía, y al apearme del tren, allí estaba ella, buscando a ver si descubría quien era, se le veía nerviosa y hasta un poco impaciente, pues yo pase delante de ella pero no me pare y me puse cerca pero observándola, y cuando ya iba a llamarme me acerque y me presente, ella nerviosa fue a darme dos besos, pero yo la cogi del pelo y la bese en la boca, notando que temblaba todo su cuerpo, me separe de ella y la mire de arriba abajo, quería ponerla un poco más nerviosa, y luego me acerque y le dije que me gustaba lo que veía, ella me sonrió y bajo la cabeza.

Como eran las nueve de la noche nos fuimos a tomar algo, así que cogimos el coche, pero al entrar en el coche la volví a besar y comprobar que todo estaba a mi gusto, y si que estaba, la zorra estaba húmeda y mojada, y yo me limite a sacar un dildo con mando a distancia y dárselo para que se lo pusiera, me miro con cara de asustada, pero al ver que no bromeaba, lo cogio y se lo introdujo en el coño, y nos fuimos a las afueras del pueblo a un lugar tranquilo a tomar algo, al entrar en un sitio muy coqueto mire a ver el lugar donde sentarnos, para poder actuar sin que nos viesen, y escogí una esquina donde ella podía sentarse sin que se le viese, solo a mi.

Al sentarnos ella se quito el abrigo, dejándose una pañuelo tipo bufanda, a mi me extraño, y le pregunte, pero me dijo que estaba estrenando una camisa de seda y que se transparentaba el sujetador negro de encaje, y lo que es más como estaba excitada, tenia los pezones de punta y se les notaba mucho, y yo ni corto ni perezoso, le quite el pañuelo, porque me gusta ver que mi sumisa esta excitada con su Amo.

Cuando se acerco el camarero yo accione el dildo, pillándola desprevenida y pegando un pequeño salto, que hasta el camarero creía que se había asustado por algo, y ella se puso de todos los colores, pero aguanto el tipo muy bien, y aunque su cara estaba roja, su sonrisa de estar a gusto complaciéndome lo decía todo, yo lo conectaba y desconectaba a mi placer, solo por ver la cara que ponía, hasta que me dijo que se iba a correr que si le daba permiso, cosa que no hice, porque no quería que se corriese todavía así que pare el mando y le dije que fuese al baño a quitarse el sujetador, me miro con cara de asustada, pues si con el se le notaban los pezones, sin el ya iba a ser escandaloso, pero aun así se levanto y fue a coger el pañuelo, cosa que yo le quite e impedí, quería que vieran que ella era toda una hembra de su Amo, con todo el dolor de su corazón se fue a obedecerme porque sin explicárselo, se sentía obligada a obedecerme, a que su Amo se sintiese orgullosa de ella.

Cuando volvió me fije en ella, vamos yo y todo el mundo, mas por el movimiento de sus pechos que por que se le viesen, eso si, los pezones si que le iban a atravesar la blusa.

Una vez que terminamos de cenar, le dije que estaba cansado y que nos íbamos a su casa si quería continuar, si no aun estaba a tiempo de echarse atrás, a lo que contesto que aunque aun le costaba, ella me pertenecía y que estaba deseando que la usase y tomase a mi antojo.

Esta vez le pedí las llaves del coche pues lo iba a llevar yo y que ella se sentase pero con la falda levantada, pues quería ver como estaba su coño, a lo que me contesto que tal y como estaba iba a manchar la tapicería, cosa que a mi me dio igual, así que dándole un cachetazo en el culo le dije que ahora era mi puta y como tal me daba igual que se le manchara, se limito a agachar la cabeza y entrar en el coche.

Mientras me iba indicando el camino para llegar a su casa yo la iba masturbando pero si dejar que se corriese, y cada vez que iba a correrse paraba, y ella ya estaba en un estado que cualquier cosa que le hubiese pedido lo hubiese hecho con tal que la dejara correrse, cosa que no permití, pues yo también estaba muy excitado y con ganas de usarla.

Aparcamos cerca de su casa y una vez que entramos en ella