Una experiencia distinta
De como por curiosidad, en vez de terminar teniendo relaciones con un hombre o una mujer como sería lógico, termine haciendolo con una linda travesti.
UNA EXPERIENCIA DIFERENTE
Hola, este relato trata de cómo, por curiosidad, en vez de terminar teniendo relaciones con un hombre o con una mujer, como sería lógico, termine haciéndolo con una linda travesti.
Todo Comenzó hace cerca de un año, con un anuncio en el periódico de la ciudad donde vivo, el cual decía mas o menos así: Lindísima tv, servicio de masajes para caballeros y damas . Entre otras cosas.
El aviso me llamo la atención, así, entre muerta de la curiosidad y los nervios, llame y me contesto una voz suave diciéndome:
Me llamo Tatiana, soy travesti, delgada, buenas piernas y buena cola, mido 1.70, piel canela bien dotada, y me dijo cuanto costaba el servicio, así que acepte y quede en ir a su apartamento, ya que atendía ahí .
Me costo un poco encontrar la dirección de su casa, pero al fin la encontré, abrí el portón y llegué hasta su puerta, toque y un voz me contesto desde adentro:
-¿Quién?
Soy yo Hablamos hace rato, vine por el servicio ..
Ah, si, por favor espera un momento.
Escuche unos pasos, de tacones altos específicamente, segundos después la puerta se abrió ante mi y dijo:
-Pasa.
- Gracias, respondí.
Al pasar, cerró la puerta y entonces la vi de espaldas, se veía mucho mas alta que yo, pues tenía unos tacones de unos 7 cms mas o menos, delgada y cabello negro largo hasta media espalda, al volverse a mi la pude ver mejor, ver su rostro, muy femenino, tenía senos pequeños, tenia puesto un sostén de vestido de baño y un bóxer del mismo conjunto, mientras yo vestía unos jeans, una blusa sin mangas color verde claro y unas sandalias de tacón de unos 4 cms.
-Hola, soy Tatiana, saludo.
- Mucho gusto, Evelyn, le respondí, eres muy linda, agregue.
-gracias, también eres bonita pasa por favor, vamos a mi habitación.
La casa era de dos plantas, en el primer piso estaba su habitación, en el segundo piso vivían otras personas que en el momento no se encontraban según me dijo ella.
-Y que quieres hacer linda? Pregunto.
-No se, pasarla rico, respondí a las vez que me acercaba detrás de ella acariciando sus nalgas y subiendo mis manos por sus caderas y cintura.
La verdad no se por que lo hice, creo que fue algo instintivo, por que en ese momento sentía un montón de cosas en mi miedo, deseo, curiosidad, miles de cosas se agolpaban en mi mente, pero solo respondí a mi impulso de buscar su cuerpo y tocarlo.
Mientras le acariciaba ella se bajo el bóxer quedando en una diminuta tanga que escasamente tapaba su pene, cuando quedo así, solo en tanguita, se volvió hacia mi y me beso en la boca, a la vez que tocaba mis senos, mis nalgas .
Yo respondí igual, la manoseaba toda, le saque el pene, era pequeño, la verdad pensé que seria mucho mas grande, solo le media unos 5 cms flácido, tenia la cabecita descubierta, comencé a menearlo suavemente mientras ella me desnudaba.
Cuando estuvimos desnudas, no metimos en la cama, besándonos los pechos, el cuello, acariciando nuestros sexos, ella era realmente deliciosa, lo hacía muy bien, sabía como tocarme y como besarme, y su cuerpo era precioso, nunca pensé que una travesti pudiera ser así.
Ella se acostó y me puse sobre ella, su pene apenas se ponía duro, su erección no era fuerte, seguíamos con nuestras caricias y besos, cada vez con mas pasión, hasta que lentamente fui bajando por sus pequeños senos y su abdomen hasta llegar justo a su pipicito, llevaba rato masturbándolo, pero no se ponía muy duro, su erección apenas se sentía y apenas alcanzaba los 12 o 13 cms, pero se veía lindo.
Comencé a lamerlo suavemente por los lados, saboreando la cabeza, lamiendo hasta las bolas, ella entre suaves gemidos me pidió que le pusiera mi chocho en la cara.
Haciendo un 69 nos fundimos largo rato, ella lamía mis labios, mi clítoris, el ano, metía un dedo en mi vagina, mientras yo degustaba ese pequeño y casi blando pero delicioso palo
Después de un rato así, me dijo:
-Quieres que te penetre?
-Ajá, asentí, pensando que su débil erección apenas podría entrar en mi chocha y hacerme sentir algo, así que le chupe la cabeza, para ayudarle a tener una mejor erección, pero eso no cambió mucho, le puse el preservativo y me dijo:
- Acuéstate.
Me acosté boca arriba, cogió mis piernas y las puso sobre sus pechos, mientras lentamente metía su pipicito en mi, a pesar no ser muy duro, la sensación fue mucho mejor que con hombres que la han tenido a punto de reventar.
Cuando hubo entrado toda, empezó a sacar y meter lentamente mientras me acariciaba las piernas y nalgas y me decía:
-Estas muy rica nena, tienes una cuquita deliciosa, estas riquísima, me decía todas estas cosas mientras me chupaba los dedos de los pies, cosa que me vuelve loca mientras me cogen ..
-ahhh, si Tati, si Tati. Sigue así amor, dame más con ese pipi, aahh, aaahhh
Lo movía rico, me gustaba como lo hacía, cambiamos de posiciones, me hice sobre ella, después lo hicimos a lo perrito, en ese instante me pidió que fuera yo quien la penetrara a ella con un consolador que tenía guardado.
Lo saco y saco también un lubricante, lo unté en el consolador y en su ano, lo tenía pequeño y se veía provocativo .
Comencé a penetrarla con aquel juguete, y me pidió que le mamara la verga mientras lo hacia, entonces nuevamente hicimos un 69 yo encima de ella hasta que finalmente ella se vino sobre mi, derramando su lechita, la cual fue realmente poca en mi cuello, por mi parte, yo llene su boca con mis juguitos dos veces.
Espero les haya gustado, es mi primer relato y espero poder compartir mas cosas con ustedes, besos.
Eve.