Una experiencia caliente en el spa
Conozco a una chica en un gimnasio y sigo con ella con un polvazo en el spa donde trabaja
Me llamo Dani y quería contaros mi experiencia con una chica que conocí en un gimnasio cerca de mi ciudad.
Soy un chico alto, 1,88 cm, 80 kilos de peso y un cuerpo normal, sin llegar a musculoso. Voy al gimnasio cada día para liberar tensiones de mi larga jornada laboral. Me relaja mucho correr en en la cinta.
Hace unos días empezó a venir una chica morena, vestía un top gris y unos pantalones a juego y le gustaba mucho el aeróbic. Mientras lo practicaba, empecé a fijarme en ella y lo atractiva que era. Tenía un trasero pequeño pero bien puesto.
Me fui porque mi polla empezó a crecer y no quería que nadie lo notara. Cuando me bajó la erección me fui a hacer un poco de bici estática. Salió de la bici estática y pude verla en su esplendor. Tenía unos pechos medianos pero bien puestos. Ese top ayudaba a ver su forma y no pude evitar pararme para ver a ese bellezón.
Se sentó en la bici de al lado. Intenté disimular empezando a pedalear de nuevo.
-Me llamo Nuria, y tu?
-Yo Daniel, encantado.
Me miró la pantalla de la bici y me dijo riéndose: Llevas 20 km ! Casi de mi pueblo al tuyo!
-Vamos, igual que en el Tour de Francia!-le dije bromeando.
Después de la broma, le pregunté que cuánto tiempo llevaba viniendo al gimnasio.
-Hace una semana, y tu?
-Llevo un mes. Me gusta porque tiene muchos aparatos para hacer ejercicios diferentes, me lo recomendó un amigo.
-Tengo un poco de prisa. Me voy que tengo ir a una reunión de trabajo.
-Nos vemos mañana?- me preguntó.
-No lo sé, a ver si me da tiempo a venir después de salir de trabajar.
Aquella chica me llamó la atención. Era guapa y espontánea, de las chicas que me atraen, y Nuria podría ser alguien con quien compartir aficiones como el deporte y otras que iba a descubrir. Al día siguiente, no me había acordado que mis amigos me habían regalado un circuito de aguas y masajes en un spa para mi cumpleaños por la mañana.
Me llevé una gran sorpresa cuando llegué. La masajista no era más que Núria. La chica con la que me estaba riendo en la bicicleta estática.
-Dani! qué haces aquí?
-Pues mis amigos, que me regalaron un vale para un masaje en el spa y hoy me caduca.
-Pues ve al vestuario, te cambias y te espero en la sala de masajes-guiñandome un ojo.
Núria me iba a dar un masaje!!! No me lo creía, aquella chica que me puso cachondo el día antes iba a poner sus manos en mis espaldas, en mi cara, en mis piernas… Mi polla empezó a ponerse grande pero esperé un ratito a que bajara un poco. Salí del vestuario con una toalla que cubría un bañador que llevaba puesto. No quería que Núria notara mi erección.
Núria llevaba casi el mismo atuendo que en el gimnasio, cosa que me hizo ponerme más cachondo.
-Dani, túmbate boca abajo. Empezaré masajeando la espalda.
-De acuerdo. Nuria, una pregunta. Cuánto tiempo llevas aquí trabajando?
-Unos 6 meses casi. Me saqué el título de fisioterapia, pero no encontré otro trabajo y aquí me contrataron. Hay poco trabajo y tuve un golpe de suerte.
Empezó por mis hombros, muy suave. me tocaba muy suavemente, bajó por mis brazos hasta mi mano y me masajeó los dedos. Lo repitió en el otro brazo y me preguntó:-Tienes una espalda bastante dura. Se nota el gimnasio ehhh…
-Que graciosa eres y qué guapa también!-se me escapó.
-Anda tonto, y tu un zalamero! Estoy terminando con tus piernas y tus pies! Se nota ese gimnasio! No disimules delante de mí! Ya terminé el masaje! Te aconsejo que después de este masaje, te bañes en el jacuzzi un rato, que te ayudará a relajar tus músculos.
-De acuerdo, probaré.
-Me voy que tengo otro cliente esperando.Nos vemos en el gimnasio esta tarde?
-No lo sé. Empiezo a trabajar a las 10 y no sé a qué hora terminaré…
-Te dejo. Ya nos veremos Dani, guiñandome un ojo
El jacuzzi me sirvió para aliviar la erección que llevaba desde antes del masaje. Suerte que no me hizo girarme porque hubiera sentido una vergüenza terrible. Estuve en él media hora. Núria tenía unas manos que hacía maravillas con ellas y eso la hacía especial, aparte de su dulzura y su espontaneidad para ser graciosa con mucho sentido del humor.
Cuando salí del jacuzzi, vi que la siguiente instalación era la sauna. En ella se tenía que ir desnudo, pero como el spa eran horas concertadas, tenía la tranquilidad que nadie me vería desnudo dentro de la sauna. Me quité la toalla y cerré los ojos para terminar de relajarme. El masaje me había puesto muy cachondo y gracias al baño en el jacuzzi se me bajó la erección y mi polla volvió a su tamaño natural.
-ESTÁS MÁS RELAJADO AHORA?-escuché de golpe dentro de la sauna.
Allí estaba Nuria, con una toalla que le tapaba sus pechos hasta su culo.
-Qué haces aquí Nuria!!! le dije de golpe tapandome con la toalla.
-No hace falta que te tapes, ya te la he visto. En el gimnasio desde que te conocí en las bicis me gustaste y el masaje me ha producido una calentuuuura por dentro que necesito que un chico guapo me la baje.
Se acercó a mí y me dió un beso apasionado, metiendome la lengua profundamente. Me puso tan caliente que empecé a besarle el cuello de forma rápida y de golpe ella se quitó toalla de golpe quedando desnuda delante mío y me puso su mando en mi polla. La tenía a punto de explotar.
-Nuria, mira como me tienes!!! le dije mientras le cogi sus tetas empecé a chuparle sus pezones pequeñitos.
-mmmm Dani, sigue! Me encanta! Me encanta esa lengua sudada estando mojados los dos
La cogí y apoyé mi polla con su culo y le cogí por detrás por sus tetas haciendo círculos.
-Eres una belleza de mujer! creo que debemos rematar esto no? Le dije mirándola a los ojos.
-Bufff, no me digas eso, que me estas poniendo perra! He cerrado el spa, esto lo tenemos todo para nosotros.
Buff lo terminamos en el jacuzzi? Ha sido una de mis fantasías- le dije.
Nos metimos los dos dentro besándonos apasionadamente y volví a empezar a chuparle sus pezones mientras le cogía el culo y le tocaba con mi dedo poniéndola cachonda.
La acabas de fastidiar Dani, acabas de ponerme perra total y no sabes lo peligroso que es! me dijo riendo
Me cogió mi polla, le dió un besito y se sentó de golpe encima de ella. Me besó apasionadamente poniendome las tetas en mi cara y empecé a chuparle los pezones mientras ella movía sus caderas mientras mi polla se ponía mas dura.
-Quiero hacer MI fantasía Dani. Acompañame!
-Fuimos a la camilla de los masajes y me dijo: quiero un 69, quiero que me trabajes mi coño y yo te trabajaré bien tu amiguita.
-Buff Nuria, que me va a explotar!
-Eso quiero, que explotes en mi cara y tragarme tu semen, quiero que me lo trabajes bien y que me hagas explotar mientras chillo como una perra. Me encanta ser muy perra!
Me puse debajo y ella encima. Su coño olía muy bien y empecé de forma alternando suave y con rapidez. Ella chillaba salvajemente mientras con su mano me cogía la polla y con lengua me la chupaba rápidamente mientras la cogía con rigidez.
Después me cogió mis bolas y me las chupaba mordiendolas y chupando con su lengua mientras gemía fuerte:
-Me corro Nuria! me corroooooo! rápidamente se bajó de encima mio y me cogió la polla mientras abría su boca.
- Vamos Dani! Dame tu leche! Dámela!
-Me corroooooo!!!!!
Terminamos los dos extenuados. Había sido un polvazo y estábamos sudando los dos y no por la sauna.
-Quieres que nos duchemos juntos? Déjame darte un masaje para terminar un gran dia que siempre recordaré!-le dije guiñandole un ojo, mientras me devolvía el gesto con un besito.
Este es el primer polvo con Núria, pero no el última con nuevas experiencias que seguiré contando más adelante.
Continuará...