Una deliciosa cogida

Me encanta despertar a mi marido cuando se queda dormido despues de bañarse.

Me encanta despertar a mi marido cuando se queda dormido después de salir de bañarse. Es algo que me calienta demasiado con tan solo pensarlo.

Ayer, yo había estado pensando en él todo el día, ya que traía ganas de "coger", pero como llega hasta en la noche, pues tenía que aguantarme, yo ya había estado pensando cosas todo el día, estaba yo muy caliente.

Anoche, después de que llegó del trabajo, yo todavía no terminaba de limpiar, por esto de los días de navidad, mi casa se llena como nunca con toda mi familia, así que como ya teníamos días que no podíamos "coger" a gusto con tanta gente, pues ayer ya solos, nos desatamos.

Después de que picó el sartén que estaba en la estufa, él se metió a bañar, cuando salió se fue a acostar en nuestra cama, yo andaba desesperada, no quería que se me durmiera mucho para que no me dijera que no mas tarde, así que rápido metí a la niña a bañar e inmediatamente despues de que salió metí al niño, ya eran casi las diez de la noche y yo todavía estaba trapeando las recamaras, les grité mucho a los niños para que se durmieran ya que hoy tenían que ir a la escuela temprano. Los acosté y les dije que si no se dormían pronto les iba a pegar. Solo terminé de trapear las recamaras y la estancia y corrí como loca al baño, sin importarme si había agua caliente, yo quería coger.

Me bañé concienzudamente, deseando que se le ocurriera hacerme sexo oral, pero ya sabía que no lo iba a hacer, eso es algo que no le gusta, ni modo, terminé de bañarme y me sequé bien y me lavé mis dientitos, me envolví en la toalla y salí del baño, tapé bien a los niños, que estaban "contando borregos" y les dije que por nada del mundo los quería levantados, por que luego a la hora de la hora, ahí están esperando que les abra la puerta para acostarse

con nosotros.

Entré en mi recamara y sin querer hice un poco de ruido con unas bolsas de plástico que había dejado sobre el tocador, mi marido se medio despertó y le pregunté –Quieres que te despierte?- respondió medio dormido –Si -, cerré la puerta del cuarto sin importarme si los niños estaban despiertos y me metí debajo de las colchas.

Toque sus piernas, que me encanta besar, las acaricié y mordí de abajo a arriba y de arriba abajo hasta que llegue a su verga que apenas se estaba poniendo dura, le acaricié los muslos, los huevos y la verga hasta que despertó bien, me la metí a la boca y se la mamé con mucha euforia, estaba desesperada, me la metía toda hasta que me tocaba la garganta, él dobló sus rodillas y pasó una pierna sobre mi para yo quedar en medio, entonces me senté con las piernas extendidas hacia él y seguí mamándole la verga, él acerco su mano y empezó a masturbarse mientras yo lo mamaba, entonces se me ocurrió y le pasé la mano por el ano, se sacó de onda pero no dijo nada, así que seguí y empecé a acariciarle el culo, eso me pone mil por hora, intenté meterle un dedo pero no pude, así que me introduje el dedo en la vagina para mojarlo bien y volví a su culo, él seguía masturbándose y yo chupandole la vergota tan rica que tiene, le introduje el dedo con dificultad poco a poco, entonces él empezó a masturbarse mas rápido y gemía mucho, de dolor y placer, le metía y le sacaba el dedo despacio y le mordía la cabeza de su verga cada vez que podía, cuando de pronto se estremeció y se vino en mi boca, con su mano quitó mi mano de su culo y se quedo recostado y contento.

Quería volver a dormirse, pero no lo dejé así que me recosté entre sus piernas, con mi cabeza en su verga, tratando de reanimarlo, le chupaba la verga y los huevos, le dije – Ando muy caliente. Dime que te gustó que te haya metido el dedo - él respondió que no, pero sé que si, le dije – Miénteme para excitarme más- me recosté y lo jalé hacia mí para que me cogiera.

Metió su deliciosa verga en mi vagina que estaba mucho mas que mojada de tantas cosas que había pensado y después de haberlo visto venirse tan rico con mi dedo dentro de su culo, así que su verga entró con muchísima facilidad. Le pedí que me cogiera fuerte, como no me acaricia me gusta que me maltrate, de repente se salió su verga y cuando él intentó volver a meterla, la tomé con fuerza y me la lleve hacia el culo, eso le encanta, yo recostada él me sostenía las piernas hacia arriba y poco a poco me la fue metiendo mientras yo me masturbaba despacio para no venirme en cuanto me la metiera, se me entumieron las piernas, pero después de un rato, empezó a moverse, primero despacio y después muy rápido, yo me tocaba el clítoris con demasiada rapidez y él metía y sacaba su verga por mi culo, me metió los dedos en la vagina y sentí mas delicioso que nunca, imagino que no es lo mismo que tener 2 vergas juntas, pero ha de ser una sensación similar, riquísima, me puse a imaginar que tenía 2 vergas dentro de mi y pronto me vine tan rico como en mucho tiempo no lo hacia. Dejó de moverse, se recostó en mi, y nos quedamos dormidos así, con su verga dentro de mi culo abrazandome. Fue sensacional.