Una boca muy rica
Lo que imaginas no es siempre tan cercano a la realidad.
Una boca muy rica.
Qué tal amigos lectores, nuevamente estoy aquí para contarles lo que me sucedió precisamente el día de hoy, ya que estamos en mero puente vacacional por motivo del día de la independencia Mexicana.
Pues resulta que como siempre, mi grupo de amigos decidió que fuéramos a clase a pasar lista y salir de la escuela muy temprano, y así lo hicimos, dentro de ese grupo de amigos hay una chica alta (1.75 cms), gordita, atractiva, y con quien me llevo muy bien, ella se llama Alicia, y ya hacia tiempo que tuvimos una rica sesión de besos únicamente.
He de aclarar que mi relación con mi novia no va muy bien que digamos, ella se hizo la indignada y se fue de puente a Cuernavaca (¿?). Mis niveles de libido están hasta la punta del pelo del pelo, ya saben lo que es estar en celo y sin quien.
Pues, esta vez sin buscar nada, me llevé la sorpresa de mi vida.
Estábamos Alicia y yo, platicando sobre los documentos que debemos leer para el examen, y como buen compañero, ofrecí prestarle algunas copias que le faltaban, así que decidimos ir a mi casa para revisar los documentos.
Ya en mi habitación el juego de tú ofreces, yo regateo comenzó:
-- Oye Alicia, que bien besas, tienes una boca MuuuuuUUUyyyyYYY Rica (le dije teniendo cuidado de hacer muy bien la insinuación de una rica chupadita)
-- Ay gracias, me sonrojas...
-- De verdad, esos labios carnositos están de lujo.
-- No empieces, porque luego no me cumples - Dijo ella en modo de aceptación.
-- ¿Cuándo te he dejado a la mitad?, tú eres la que me deja caliente y luego no sé que hacer...
-- Pues ahí tienes a tu novia.
--- No te pases, si sabes que es lo mismo meterse al refrigerador que a la cama con esa chava.
--- No me digas (decía mientras se sentaba en la orilla de la cama)
Viéndola ahí sentadita en la orilla, me puse en frente de ella con la intención de que viera mi bulto que ya necesitaba sentir el calor bucal.
-- ¿Qué intentas hacer?
-- Yo nada...que tú no quieras.
Y en ese momento que le meto un besote, de esos que te tocan la lengua y te rebuscan entre los cachetes, hasta adentro, mientras eso pasaba en nuestras bocas, mi manita traviesa apretaba uno de sus frondosos pechos, firmes, y de pezones erectos, mi otra mano buscaba entre sus piernas, buscando la carnosidad que abriga la entrada a la caliente cueva vaginal.
Ella no se quedó atrás y se recostó, yo ni tardo ni perezoso hice lo mismo y seguí con el cachondeo hasta recorrer con mi lengua su cuello, fue cuando sentí que su mano bajaba por mi abdomen hasta alcanzar el cierre de mi pantalón, la introdujo suavemente y saco mi caliente pene, que ya enseñaba el glande, orgulloso, se eregía a través del prepucio, ella comenzó a bajar su cabeza hasta que pude sentir su aliento cerca de mi pedazo de carne palpitante.
De pronto su boca de labios carnosos y rechonchos, atraparon al caliente trozo de mi humanidad, ¡QUE PLACER! La sensación fue determinante para afirmar que mi imaginación no se había equivocado esa boca era experta!!!
Subió y bajo el prepucio, chupando el glande, a veces lamía todo con su lengua tersa y caliente, mientras que con sus labios cubría el trayecto que acariciaba, sus dientes de cuando en cuando hacían presión sobre la sensible piel.
En ese momento sentí como su boca abarcaba cada vez más mi palpitante pene, hasta que llegó a la base, su lengua salió un tanto de su boca para acariciar mi bolsa escrotal, mis testículos respondieron subiendo y bajando mientras su boca engullía mi verga.
Solo el sonido de su boca hacia mella en mi mente, mi cuerpo sentía que todo él estaba dentro de esa boca, posado en esa deliciosa lengua, ¡EL PLACER ORAL EN SU MÁXIMA EXPRESIÓN!.
De pronto comenzó a moverse más y más rápido, mi pene, entraba y salía, su boca se movía chupando, masajeando, su mano acariciando mis huevos, ¡ASI, ASIII, ASIII, NO PARES POR FAVOR!
Comencé a sentir ese inigualable temblor que indica que una carga de semen está a punto de ser lanzada, ¡AY DIOS, NO PARES MAMITA, NO PARES! -chup, chup, cloch-- ¡ASIII, MAS, MAS, AJA, SI AJA! -MMMHHH, CHUP, CHUP, SLURP-eran los sonidos que ambos emitíamos y de pronto ¡AAAAAHHHHHHH! La carga de semen salió inundando su boca, eso no la detuvo, puesto que siguió moviéndose más cachondamente hasta que sentí que el climax llegó, ella, por su parte se comió todo lo que salió, y con una sonrisa pícara volteó, me dio un beso, y dijo:
-- ¿No que no te iba a cumplir?
Me quedé en pleno éxtasis, sin decir nada más, se levantó, y me dijo: Tengo que irme es tarde.
Y se fue, y me quedé con mi climax, con mi orgasmo.
Hasta que el sueño me venció.