Una a otra rozando nuestras pieles
Poema erótico.
Una a otra rozando nuestras pieles
va quemando tu aliento con mi boca,
va doliendo, pues déjame hasta el alma
entre sabias caricias de tus manos,
con el suave latir que en mis oídos
retumba recostado ahí en tu pecho.
Una a una, libando de tu pecho
recojo las caricias, nuestras pieles
se quedan tiritando; y mis oídos
escuchan los murmullos de tu boca
pidiendo que te bese con las manos,
si en ellas vuela el hálito del alma.
La razón en suspiros que mi alma
guardaba en los sonido de mi pecho,
y el sabio entendimiento de tus manos
que hace estremecerse nuestras pieles
me hace que repita con mi boca
el beso que resuena en tus oídos
"Te quiero" digo, y llega a tus oídos;
el habla que lo ha dicho era mi alma
y queda muda y trémula mi boca...
redobla el cor: se sale de mi pecho...
y una a otra fúndense las pieles
de tantos corazones en mis manos.
La trémula caricia de mis manos
recorre ojos, cara, labio, oídos
me quemo en el contacto de las pieles
y temo en esa dicha de mi alma
seguir con la caricia por tu pecho
si no escucho sonrisas en tu boca.
Una a otra unida boca a boca
una a una con miedo nustras manos,
el tímido latir que habita el pecho
es ritmo celestial en mis oídos;
de tanto que ha latido asola el alma
ansiando que el latir llene las pieles.
Son las pieles latidos, y mi boca
Ardiendo igual que mi alma con tus manos
Suspira con tu pecho en mis oídos