Un viaje bien disfrutado

Avergonzada baje la mirada, encontrándome la mirada de ceci, los cuales me miraba con satisfacción, asustada por que quizás estaba poniéndome en evidencia.

UN VIAJE BIEN DISFRUTADO

Hola, me llamo Susana, ante todo gracias a todos los que me habéis leído, sobre todo aun más agradecida a aquellos que me habéis escrito. Agradezco de corazón, que os haya gustado e incluso que os haya sido tan placentero, como a mí relatarlos.

Ante todo me debo disculpar, pues no siempre puedo responder a todos los que me habéis mandado vuestro email, y aun menos el poder responderos de la cantidad que sois, a veces se me han abierto hasta 150 pestañas aclamando mi presencia, llegando incluso a colgarse el Messenger, por lo que desde aquí os doy las gracias y muchos mando un beso muy tierno en esa parte de vuestro cuerpo que mas deseéis. Os recordaré que soy una ardiente chica del sur de Andalucía, de 23 años, morena, de ojos castaños, de 1.75m de altura, 90/59/88 aprox., y bisexual. Me considero una chica simpática, abierta, extrovertida, atractiva, inteligente, en otras palabras una sin vergüenza integral, muy buena gente, simpática y bastante loca... vamos una chica con la que se puede pasar un buen rato (joder, algo más de 15 minutos… bocazas absteneros). Me gusta conocer gente, descubrir cosas nuevas, divertirme, lo típico de una chica de mi edad (tengo una manera especial de ver la vida creo, que os habéis dado cuenta). Me gusta salir, hacer locuras, aunque me sea difícil de reconocer que me gusta beber (joder, no soy alcohólica… pero debería de controlarme algo).

Soy conciente que por mi forma de vestir, me hace ser más destacable para ser manoseada, aunque no soy ni fetichista, ni exhibicionista, simplemente me gusta vestir, de forma que realce mi cuerpo (joder, como decía mi abuelo tengo un cuerpo de perdición), me gusta que las partes mas sensuales de mi cuerpo sobre salgan, aunque a veces me digan que parezco un "zorrón". Dicen que tengo un hermoso cuerpo (como decía mi difunto abuelo de pecado), me considero una mujer ardiente, de mente muy abierta, siempre deseosa de ampliar y probar nuevas experiencias, pues me considero aun lo bastante joven como para continuar disfrutando del sexo, de gozarlas de todas las diferentes formas, pues mi adicción al sexo me hace a veces, a llegar a puntos tan extremos que hasta a veces yo misma me ruborizo, y no os digo a vosotros. No me considero una estrecha, pero me molesta muchísimo que me pidáis que conecte mi Cam… sin saber si al menos la tengo (ostias, salidos de mierda… os deberían de meter un palo por el culo).

He de explicaros, que mis gustos en general, aunque lo niegue es la morbosidad de ser manoseada en publico, de sentirme acariciada, siempre que sean lugares públicos (coño, es tal la morbosidad, que es difícil describirla, pero os la intentare relatar). He mantenido relaciones con hombres maduros (joder, por que coño no van a disfrutar ellos también, es una sensación morbosa ser manoseada por viejos, no es vicio solo es puro morbo). Deberíais de aprender de ellos, pues muchos de ellos tienen la experiencia necesaria como para hacernos disfrutar. E incluso muchos de ellos, no tiene nada de envidiaros pues con semejantes maquinas nos hacen llegar, a diferentes tipos de satisfacciones y disfrute que a veces me hacen no solo perder el norte sino, el tiempo, pues algunos son verdaderos machos a la hora de dar placer. No os ofendíais de la verdad, aunque os duela pero lo importante no es que la tengáis muy grande, sino que sepáis darnos satisfacción, Que nada mas salgáis de la cama, digamos hay va mi hombre.

No siempre buscamos cantidad sino más bien calidad, que hoy día ya no os preocupáis de esos minutos preminilares que tanto deseamos, lo que deseamos es que disfrutemos… pero ambos, pues incluso después de habernos echo al menos llegar a dos hermosos y geniales orgasmo, lo que mas deseamos es que disfrutéis vosotros, nos gusta que os venga en un tiempo prudencial… y dentro de un preservativo (joder, que no queremos problemas dentro de unos 9 meses, y aun menos que nos peguéis algo raro). Lo que me he dado cuenta a veces, que no os dais cuenta de cuando nos viene, e incluso menos cuando los disimulamos. Muchos de vosotros pensáis, que entre vuestras manos tenéis la consola de la "Game" (joder, que somos personas), que ha veces nos tratáis peor que a un animal (ojo, no todos). Demostrarnos que nos amáis, hacernos disfrutar y sonreír (coño, que estoy cansada). Cabrones, si tenéis más ternura con el puto móvil de las narices que con nosotras, y joder menos correr… que ni sois Fernando Alonso, ni nosotras somos Hamilton (Joder, haber si sois más sensibles).

Bueno basta de tantas palabrerías y vamos a lo que vamos, a narraros una mas de mis confesiones, esta nueva confesión fue bastante difícil de redactar, al principio creí que no la llegare a acabar, e incluso la he tenido apartada varios meses, referente a unos hechos que ocurrieron hace aproximadamente ya dos años. Posiblemente me ocupe más de la cuenta, pero intentare no alargarme demasiado. Comenzare a contaros primero como la conocí, cortare mi prologo respecto a ella en la medida de lo posible (coño, no me pidáis mas los números de sus móviles, y aun menos sus email), aunque es algo difícil de relatar pues llega a hacer incluso hasta vergonzante, aunque os debo mentar que tengo su consentimiento por parte de ella, para relatarlo. Pues comenzare, la conocí por un anuncio en la pagina de contacto "www.Explanada.com", en el apartado de chica busca chica. Su anuncio era escueto, pues comentaba que aunque tenía novio y no quería que este se enterara, se encontraba confusa con sus sentimientos, pues sentía sensaciones extrañas hacia su mismo sexo.

Por lo que pedía, que una chica con experiencia le enseñara, que pudiera instruirla, pues quería saber que es lo que realmente siente, no significaría que acabaran teniendo sexo. Pues quería averiguar sus sentimientos sin son verdaderos o acaso solo fantasías, pues ni quería engañarse y aun menos engañar a su chico. Continuare, conteste a su email y desde un principio nos caímos bastante bien, continuando nuestra amistad por el Messenger, para mas tarde conocernos en persona, sorprendiéndome no solo por su belleza sino por su inocencia… creo que fue esa mezcla, lo que mas me cautivo. Perdón no os la he presentado como debía, se llama Cecilia pero a ella le gusta que se llame por Cecí, cuando la conocí tenía solo 18 años. Nada mas vernos entablamos una conversación, en la cual se sinceraba comentándome que se encontraba confusa, aunque tenia novio con el cual lleva dos años (joder, era increíble que llevará tanto tiempo, aguantando a ese cabronazo). Continuo mide 1.69 m de estatura aunque no es muy alta si es grande de corazón, de piel suave y morena no precisamente por el sol, de ojos castaños oscuros e embriagadores, del mismo color que sus cabellos.

Como os he dicho antes, una chica de rasgos inocentes, atractiva, simpática y sexy, aunque ella en este punto ni se lo cree, y eso que desde un principio pensé que era una creída. Según comenta no se considera bisexual, pues ha día de hoy ignora cual es su condición sexual. Actualmente vive en casa con sus padres, pues estudia empresariales, y según dice no tiene tiempo para trabajar, aunque desea independizarse (coño, en el fondo tiene miedo del mundo exterior). Ha descubierto que le ocurre como a mí, que con una copa de más nos perdemos, pues de ser una chica sencilla y dulce se convierte en una chica lanzada y atrevida, se destapa siendo de lo más alocada (Ostias, según vuestra opinión una calentona). Aunque intenta no beber de más, por que es de lo más responsable y seria, lo más importante que cuando se la necesita siempre esta ahí. No deja de repetirme, que desea que nunca su chico descubra su secreto, pues la tacharía de pervertida e inmoral (mierda de tío, machista tenia que ser y encima hasta facha), desde que la conocí ella se convirtió en mi debilidad, quedando tanto Andrea como Lucia en un segundo.

Cuando en su día se vino a vivir conmigo (joder, mas por motivos personales que ya os contare mas adelante), ojo que os debo puntualizar… se vino a vivir solo como compañera de piso, no como pareja que os conozco bastante bien (joder, que sois hombres siempre tan mal pensado, que solo pensáis en caliente y no precisamente con la cabeza que suele estar entre vuestros hombros, sino precisamente con la que tenéis debajo… entre vuestras piernas). Recuerdo bastante bien esa noche, no solo por tenerla escrita en mi diario sino por lo que significo. Cuando ocurre lo que ocurrió, siempre deseamos olvidar esos momentos… ese día, que desapareciera de nuestra vida. Pero en vez de olvidarnos, recordamos hasta los rasgos más insignificantes, esas pequeñas cosas que hicimos durante ese día, y encima con todo detalle. Bueno comenzare a narraros mi nueva confesión, que como he comentado todos deseamos que hubiera quedado como un anécdota más.

Comenzare pues, quede con Ceci días antes para vernos el viernes, pues ella debía de avisar no solo a sus padres que iba a pasar el fin de semana en mi casa, sino también con su novio al cual ni le gustaba la idea de no pasar el fin de semana con el, y mucho menos el pasarlo conmigo (cabron, machista hijo de puta). Nada mas aparecer Ceci en mi piso, nos fundimos en tal abrazo que daba la sensación que hacia meses que no nos veíamos y sin esperar ni tan siquiera que hubiéramos entrado dentro, me atosigo a besos. Sus labios ardientes morreaba los míos, mordisqueaba no solo mi cuello llenándome de moratones, sino mis orejas lamiendo mis lóbulos, sabia perfectamente ya la muy cabrona como perderme. Como se aprovecha la muy cabrona, que nada mas verla rápidamente eche mano de su maleta y bolsas, quedándome sin medios para poderla apartar… como si yo hubiera querido. Digamos que estaba abusando de mi, pues sin poderle decir nada, dirigió una de sus manos hacia mis pechos acariciándomelos, al tiempo que su otra mano la poso sobre mis nalgas. Se aprovechaba que estaba a su merced para que allí mismo, comenzaba a abrirme la camisa en el mismo rellano, descubriendo que precisamente esa vez no llevaba sujetador, tachándome de pervertida, no os imagináis lo excitada que me estaba poniendo.

Imaginaros el morbo, pensar que podría haber algún vecino espiándonos, observándonos a través de la mirilla de la puerta, quien sabe si no habrían manchado la puerta por no deciros los mismos pantalones a nuestra salud. Continuo, le comente que podíamos continuar dentro, pero no oyendo mis palabras recuerdo que introdujo una de sus manos, por debajo de mi falda en dirección hacia mis braguitas. Sentí como con violencia, como posaba su mano sobre mi pubis sintiendo la humedad de braguitas, para sin detenerse continuar pasando las yemas de varios de sus dedos, recorriendo desde mi vagina pasando por mis labios vaginales y terminar en mi orificio anal, haciéndome alcanzar un tremendo orgasmo (Dios, le pedí que se detuviera, que continuemos dentro). Le pedí que me dejara al menos poderla corresponder. Recuerdo como la muy cabrona, sin perder tiempo se arrodillo ante mis pies, tiro de mi falda hacia abajo dejándome un poco avergonzada, pues me dejo prácticamente semidesnuda, con la única prenda en ese momento que mis braguitas y eso que las tenia introducida entre mis nalgas.

Continuo, siguió abusando de mi, aprovechando que me tenia sin poderme mover, con objetos en mis manos. En la posición que ella estaba hundió su rostro entre mis muslos, sintiendo sus labios mordisquear mis braguitas a modo de arrancármela, sintiendo su lengua lamer mi pubis (joder, imaginaros lo que sentí, hasta deje caer las maleta sin importarme el ruido que haría). Recuerdo que mientras abría la puerta como pude, tras sujetarla con fuerza por no deciros con violencia, tire de ella hacia dentro cerrando la puerta como pude. Su rostro evidenciaba al principio su descontento por mi acción, cambiando cuando me eche sobre ella en busca de sus calidos labios, comenzando a besarnos sintiendo sus tiernos labios, probando mis fluidos en su boca. Aquí comenzó nuestra pequeña orgía, pues no necesitamos nada mas y aun menos a nadie… perdón la verdad es que algo si, un objeto largo y venoso, uno de mis juguetes que dan placer, que saben satisfacer sin protestar y sin cansarse (perdón, si os parezco bastante cabrona, pero joder algunos ni dais la talla). Continuo, nada mas finalizar nos quedamos abrazadas tirada sobre la alfombra en el suelo, quedándonos al final dormidas, despertándonos el sonido de un móvil.

Recuerdo, que tras cogerlo con cara de mala ostias, me sorprendí pues eran las chicas, recordándonos la hora y el lugar de encuentro (joder, menos mal que habían llamado, sino no hubiéramos llegamos). Por lo que comenzamos a prepararnos, cogimos las prendas a colocarnos, nos depilamos a la carrera… eso si completas al menos ella, yo en cambio me dejo algo, pues aunque se que es mas higiénico y hasta cómodo a veces, es mas por el gusto. Bueno continuo, que me enrollo mas que una persiana, continuamos introduciéndonos ambas en la ducha pues necesitamos limpiarnos a fondo… ya sabéis que necesitamos a alguien, que pueda llegar a esas zonas que no alcanzamos, o que son muy profundas uuummmm… Acabamos secándonos, acabando por vestirnos. Como habíamos quedado en la puerta de la discoteca, a una hora determinada cuando llegamos ahí estaban las chicas esperando. Os comento que la noche fue de lo más productiva, encontrando tal compañía que fue de nuestro agrado, donde estuvimos jugueteando toda la noche con ellos, hasta que llego la hora de marcharnos.

En verdad os digo, que el tiempo bien aprovechado se pasa volando, pero siendo la hora que era teníamos que volver, aparte que deseaba Ceci continuar con nuestra pequeña orgía (joder, no sabéis lo excitante que es ella, cuando te satisface). Bueno caminando llegamos hasta la estación, donde esperamos en el anden a que pasara el cercanía, la verdad es que apenas había gente (joder, había pero no tanto como desearíamos, ostias que solo eran las 4.00 de la mañana), cuando por fin apareció el cercanía nosotras hacia rato que habíamos comenzado a tontear (joder, estábamos aburrida y hasta hacia frió), nos montamos en el vagón que se había detenido delante, siendo la casualidad que era el ultimo. Esperaba que estuviera vació, pero nos encontramos que había un par de chicas y algún que otro chico. Joder, la verdad es que hay que admitirlo veníamos algo por no decir bastante cargaditas de alcohol (joder, no nos íbamos a privar en nuestra noche). Continuo, una vez ya en marcha el cercanía en dirección a Sevilla, entre risas bastante tonta, nos fijamos en un chico comenzándolo a mirar de forma descarada, llegando este a avergonzarse.

Nos gusto su timidez, e intruso nos embriago pues parecía bastante inocente, habíamos comenzado a darnos al principio algunos piquitos, continuando colocando nuestras manos en nuestras zonas púdicas, dándonos cuenta que el tampoco perdía detalle de nosotras (coño, llegue a pensar que hasta seria maricón, pues hoy día no me sorprendería). Recuerdo como sin haberlo planeado, sorprendió la actitud de Ceci pues posando su mano en mi barbilla, me giro hacia ella dándome tal beso que me dejo sorprendida, no me quede quieta sino todo lo contrario se lo devolví, e incluso con lengua. Os admito que nos comportamos como cabronas, pues no dejábamos de mirar al chico de forma que se diera de nuestra actitud, observando como este había comenzado a frotar su entrepierna con una de sus manos. Cuando habíamos comenzado a besarnos con mas intensidad, nos sorprendimos al separarnos al encontrarle parado de pie delate de nosotras, sin darnos cuenta este se había levantado para caminar hasta nosotras. Cuando lo vimos con claridad, me di cuenta de su aspecto pues era agitanado, quise retractar mi actitud, pero Ceci me lo impidió.

La verdad es que estaba bastante bien (coño, no tengo nada en contra de ellos, pero una serie de experiencia me han hecho desconfiar), tenia algo que no os puedo describir. Comenzamos con un juego de miradas, cuando no era yo era Ceci quien lo miraba, dándonos cuenta que se sentó, prácticamente enfrente de nosotras, continuando con una de sus manos frotándose por encima de su entre pierna, perdiendo ese encanto tan inocente pero ganando por el tamaño de ese bulto en su entrepierna. Me levante no se por que motivo lo hice, pero Ceci me acompaño mientras no dejaba de sentir sus labios, continuando recorriendo mi cuello hasta llegar a mi oreja, que comenzó a mordisquear el lóbulo haciendo que se me pusiera la piel de gallina, finalizando introduciendo su lengua en el interior…Dios, me hizo perder durante algunos minutos la noción del tiempo (Joder, la muy hija de puta hizo que me viniera, Dios sin poderlo evitar). Habíamos ignorado al chico por completo, sintiendo una presencia detrás de mí, dándome cuenta que este estaba precisamente de pie detrás, al principio note su respiración agitada y caliente mientras se iba acercando a mi, a medida que estaba cada vez mas cerca pude notar como algo duro chocaba contra mis nalgas, hasta que daba la sensación que se incrustaba entre mis glúteos.

Os admito que al principio me vi bastante sorprendida, pues ni siquiera pensé en el chico e incluso menos sus intenciones, comenzó a moverse a simular como si estuviera penetrándome, sin darle mayor importancia le deje hacer pero la presión de su miembro era cada vez mayor. A modo de dar por hecho mi consentimiento, note como el chico descendiendo sus manos, desde mis caderas hasta mis muslos notando como sujetando la tela del vestido comenzó a tirar de ella, de modo que fue levantando mi falda hacia arriba, sintiendo la desnudez de su miembro directamente en mis desnudos muslos. Quise apartar al chico de mi, a modo de poderlo retirar eche mi brazo hacia atrás, con la consecuencia que con mi torpeza o quizás los nervios, choco mi mano con su miembro quedándome un poco en blanco sin saber que hacer y menos reaccionar. Por lo que actuando rápidamente el chico, sujetando fuertemente mi mano comenzó a moverla a lo largo de su tronco, de arriba hacia abajo, notando sobre la palma de mi mano las protuberancia de su miembro, a medida que aumentaba el ritmo sentía como se iba humedeciendo cada vez mas, pues emanaba de su cabezota liquido preseminal.

Recuerdo como avergonzada baje la mirada, encontrándome la mirada de Ceci, los cuales me miraba con satisfacción, asustada por que quizás estaba poniéndome en evidencia. Recuerdo como el chico me comento que no me preocupara, pues estábamos cobijados por los asientos, pues al estar por detrás de estos nos ocultaba lo bastante como para no dar la nota, pero os juro que eso no me tranquilizaba pues observaba como me miraban, pensé que quizás los mamparos de cristal del tren reflejaba la situación. Dude en continuar, mientras Ceci me miraba me comento que lo dejara hacer, que a ver hasta donde llegaba el chico. Os juro que mi primera reacción fue retirarme, pero por satisfacerla me deje, sintiendo como la mano del chico manoseaba mis nalgas, deslizándola a lo largo de mis glúteos hacia mis muslos y de nuevo al punto inicial, como si amasara pan con suavidad pero con una pizca de fuerza (joder, y eso que opinaba que era tímido…joder con el inocente). Al principio se mostró juguetón, gustándome sus caricias y magreos, continuo magreando mis nalgas, a manosearlas, a separar mis glúteos dejando que la tela de mis bragas se incrustara entre ellos, no dejaba de magrearlos, sintiendo como la tela de mis braguitas las cuales la tenia metida por mi vagina se empapaba de mis jugos.

Ceci, deslizo una de sus manos hasta que llego a mi pubis, posándola encima de la tela de mis braguitas, comenzando primero a frotar mi pubis en círculos en movimientos muy suaves, alternándolos con movimientos en líneas a lo largo de mis labios vaginales, sintiéndolos frotar de nuevo hasta llegar a mi vulva, haciéndome estremecerme tanto que creí desfallecer, aun mas cuando sentí como con uno de sus dedos se iba introduciendo muy lentamente por mi vagina, sin molestarle mis molestas braguitas.

Girando mi cuello hacia atrás, pidiendo al chico entre susurros que se detuviera, pues no quería continuar y darle falsas esperanzas, si había pensado que pudiera a ver algo más. Pero la muy puta de Ceci, no estaba por la labor, dándose cuenta que no pretendía continuar y que me iba a detener, presiono uno sus dedos fuertemente sobre mi vagina (joder, imaginaros con lo sensible que la tenía), precisamente el corazón haciéndome. Joder, solté tal exclamación que no fue de dolor sino de satisfacción, pues la muy puta al haber echado la tela de mis braguitas a un lado, me perforo con dos de sus dedos hasta notar la aspereza de sus nudillos. Como resultado eche de forma involuntaria mi cuerpo hacia delante, flexionando mis rodillas al tiempo que echaba mis nalgas hacia atrás, sintiendo sin querer la dureza del miembro de ese chico. Recuerdo que me disculpe con el chico, mientras este con sus manos a cada lado de mi cintura, acariciaba mis muslos ascendiéndolas hasta tocar levemente mis pechos. Descendiéndola de nuevo, hasta introducirla por debajo de mi falda y comenzar a manosear mis nalgas, pellizcando mis glúteos dulcemente, acariciando con placer mis duritas nalgas, echando a un lado mis braguitas y continuar sobre mi piel.

Me encontraba como dormida por el placer, adsorbida por la satisfacción (joder, creo que descubrieron su sexualidad dominadora), mientras la muy puta de Ceci no dejaba de hacerme gozar, llevándome a extremos de tal morbosidad, que entre ambos retiraron mis braguitas. Volví a la realidad, al notar la dureza de su miembro presionar mis nalgas, para que en minutos era tacto de su mano se había sustituido por la desnudez de su miembro, restregándola primero por mis nalgas, para continuar por posarla por la unión de mis glúteos y deslizarla hasta notarla chocar contra mis labios vaginales. Gire rápidamente mi rostro, a modo de poderle decir sin que le suene mal, pues tampoco quise decírselo de mala manera que no solo retirara esa mano sino su miembro. Pues tampoco quise mostrarme como una calienta pollas, tras retirar tanto su mano como su miembro de mis nalgas, Ceci increpo mis palabras y mi acción, comentándome que volviera a pedir al chico que volviera a colocar aquello donde debía, sino quería que en la noche le mostrara mi atención.

Tras colocar su mano de nuevo en mis nalgas, el muy cabron la poso directamente sobre la unión de mis nalgas, comenzando a recorrer con varios de sus dedos mis glúteos, de arriba hacia abajo fui notando cada vez como las yemas de su dedos, los iba introduciendo en mi orificio anal favorecido por la falta de mis braguitas, haciéndome sentir un preludio de un nuevo orgasmo, una sensación de lo mas agradable. Como bien tengo sabido (coño, pues la experiencia de tantos años, me avala sabiendo como pensáis, pues joder sois tíos), minutos mas tarde el chico se pego a un mas adivinando mis intención. Joder se llevo un rato presionando mi orificio anal, sintiendo sus dedos entrar en mi al mismo tiempo que los de Ceci en mi orificio vaginal, a veces giraba mi vista hacia donde se encontraba los demás pasajeros, los cuales entre cuchicheos y risas evitaban mirarme. Joder, me dio la sensación que el chico separaba mis glúteos, para que sin decir palabra alguna fui sintiendo como me iba penetrando (ostias, no soy tota pero llevaba un par de minutos, con dos de sus dedos perforándome).

Comenzó a penetrarme lentamente, llenándome de carne en su totalidad, haciéndome sentir el puro placer de sus embestidas, me tuve que sujetar a las barras de sujeción mientras gozaba. Comencé a gemir casi en susurros, a modo de ser agradecida le fui comentando lo bien que se mueve, lo bien que me hacia gozar (joder, es lo que todo tío siempre quiere escuchar). Como el muy cabron se detuvo, comentándome si quería que continuara o por el contrario se retirara, entre otras obscenidades le comente que continuara que no tengo objeción alguna, sino todo lo contrario que continuara. Era bastante excitante el momento, pues éramos observados por algún que otro pasajero, las chicas nos miraba avergonzada de lo veían, y algunos chicos que incluso habían entrado al final nos observaban excitados, e incluso hasta envidioso del chico. Mientras me dejaba llevar por ambos (ojo, si el vagón hubiera habido mas gente, no me hubiera dejado a mas… joder que no soy una buscona). El chico coloco su otra mano sobre mi cintura, ascendiendo su mano hasta notar sus dedos cerca de mis pechos, para descender hasta donde la longitud de sus brazos le permitían, acariciando mis muslos y prendiéndome del calor que nos emanaba (Dios, como notaba la dureza de ese pedazo de carne). El chico no soltaba palabra alguna, aunque estas hubieran sobrado.

Ceci hacia rato que se había separado de nosotros, sentándose enfrente de nosotros continuando por su cuenta, mientras nos observaba sin perder detalle alguno (joder, la muy zorra como se introducía casi en su totalidad su mano). Imaginaros la imagen, yo estaba de pie apoyada a unos de los soportes de sujeción vertical, mientras un chico de rasgos agitanado me estaba embistiendo haciendo gozar, mientras lamía mi cuello y mi oreja, en busca de mis labios, mientras ya una de sus manos magreaba uno de mis pechos. Cuando creí que el chico estaba a su fin, pues de la misma manera que me la introdujo la fue sacando, para de nuevo volverla a introducir ayudándose esta vez por una de sus manos. Comenzó de nuevo a penetrarme, sintiendo como en vez de perforar mi orificio anal fue incrustándose en mi orificio vaginal, teniéndome que morder el brazo por emitir sonido alguno de tal satisfacción, pues el muy cerdo me estaba haciendo disfrutar de lo lindo.

Sintiendo como su vientre golpeaba mis nalgas, como sus genitales se estrujaban contra mi piel, mientras continuaba mordiendo mi brazo mientras miraba con lujuria a Ceci, la cual continuaba enfrente de nosotros echada a lo largo de los asientos, acariciándose y dándose placer. Recuerdo en abrir y cerrar de ojos, la observe como se incorpora hasta acercarse hasta llegar a mí, comenzando por acariciar mis muslos, hasta llegar a mi ingle. Colocando su mano sobre mi pubis, acariciando mi escasa vellosidad al tiempo que rozaba con sus dedos, el miembro que entraba y salía de mí. La muy puta pasaba sus dedos por mi pubis, recorriendo mi vagina y como podía mis labios vaginales, llegando e incluso a introducir uno de sus dedos mi interior, al tiempo que el chico (ostias, como aprende con la muy puta… pero me gusto). Joder, sentí tal placer que volví a notar un inmenso orgasmo, al tiempo que mi cuerpo de nuevo se arqueaba, como consecuencia el notar aun mas la plenitud del vástago del chico.

Una de sus manos fue recorriendo mi cuerpo, desde mi costado hasta mi vientre, para descender hacia mi pubis, mordiéndome los labios le pedí por favor que se detuviera, que no siquiera con esta locura. Pero os juro que en mis adentros pedía que ignorara mis ruegos. No solo sentía con toda su plenitud sus embestidas, sino como me acariciaban entre ambos mi cuerpo, el ir y venir de sus manos recorrer mi piel, el sentir como masajeaban mis pechos tras incluso haberlos sacado, como me los magreaban y pellizcaban e incluso como los labios ardientes de Ceci los hizo suyos, haciéndome alcanzar un nuevo orgasmo, sentía como si me hubiera orinado encima, pues debía de haber tantos líquidos en mi interior, que hasta los sentía descender, por la parte interna de mis muslos. E incluso parecía que íbamos al compás del cercanía, pues suaves embestidas iba al ritmo del pasar de los raíles, sintiendo ciertas molestias por el grosor de su miembro, mas como me había entrado que por el tiempo (ostias, Ceci tubo que intuir mi disfrute al ver mis ojos cerrados).

Ceci aparto las manos de mi cuerpo, para comportarse como simplemente una espectadora, mientras se echaba sobre el respaldar del asiento, dirigió sus manos hacia su entre pierna comenzando a masturbarse y su otra mano busco sus pechos, los cuales pude ver como sus pezones estaba duros. En cada una de sus bastas embestidas, mi cuerpo chocaba contra el tubo de sujeción vertical, chocando una y otra vez mis pechos contra estos, mientras observaba como Ceci llegaba al orgasmo. Este me la saco para restregármela por mis bajos una y otra vez, para de nuevo colocar su miembro en mi entrada vaginal, y de nuevo de un solo empujón metérmela hasta sentir sus genitales chocar contra mi pubis, y comenzar a moverse sin mucho estilo. Mientras yo estaba con mi cuerpo mis nalgas hacia atrás a modo de complacerle, este me sujetaba por mis nalgas metiéndome de dentro hacia afuera mientras me sujetaba a la barra de seguridad, me amasaba mis pechos.

Con los ojos entre cerrados por el placer, mire hacia abajo encontrándome a Cecí, la muy cerda se encontraba "espatarrada" hacia mi (ostias, la muy puta estaba con los muslos bien abiertos… para entendernos), se estaba masturbando a expensa de nosotros, se le veía claramente que estaba gozando, pues observe como se le perdía varios de sus dedos en su vagina. El chico continuaba penetrándome desde atrás, sintiendo sus embestidas cada vez mas lenta, dándome cuenta que pronto se vendría (joder, se lo merecía el muy cabron, pues por mi parte estaba mas que satisfecha). Coño, aunque había alcanzados varios orgasmos sin saber exactamente cual había sido el mejor, cuando comencé a sentir el preludio de uno mas, como es algo normal en los tíos pues sois de lo mas inoportuno joder, en ese momento me comento que se iba a venir y si deseaba que lo hiciera dentro (coño, ni de coña ni que estuviera loca, menuda pregunta). Obviamente me negué (joder, vale tomo la píldora…y que, no le voy a dar esa satisfacción), me comento que deseaba corredse sobre mis pechos (joder con el tío, menudo pervertido de mierda nos a salido), cuando quise negarme de nuevo recuerdo como Ceci, me comento oyendo con incredulidad sus palabras, que fuera ella quien reciba el néctar del chico (joder, me quede sorprendida, no esperaba que Ceci fuera tan puta, pero me gusta).

Bueno continúo, este comenzó a venirse echando todos sus jugos sobre los pechos de mi Ceci, pero algunos trallazos impactaron en su rostro y demás parte del mobiliario del vagón. Cuando el chico repuso el aire, guardo su miembro dentro del pantalón y se marcho, dirigiéndose hacia la puerta de salida, dejándonos a ambas allí sentada. Pero ojito, nosotras no acabamos pues Ceci me dejo que la limpiara, probando esos jugos tan calientes. Aquí llega el final de mi experiencia, pero no del trayecto pues esta situación dio lugar a otra no precisamente tan satisfactoria, pues mi temor por ser observadas por extraños al final estaba bien enfundado. Y pensar que siempre me decía mi padre, que no me fiara ni de mi sombra, pues de ella salen los peligros, y cuanta verdad es ya os contare mas adelante como acabo.

Bueno ante todo, debo deciros referente a los comentarios de mi forma de explicaros mis historias. que si mi escritura, no esta bien redactada, que apenas es legible, que tiene dificultad a la hora de leer o incluso que da mal sentido, a la hora de explicar los placeres obtenidos o sentidos. Lo siento enormemente, pero intentare redactaros lo mejor que pueda mis experiencias, me cuesta a veces escribir todos mis sensaciones, pues el plasmarlas creo que es lo mas difícil.

Espero que os haya gustado, si queréis que siga contaros me lo comentáis pues me gusta mucho recibir vuestros email. A aquellos que queráis contactar conmigo hacedlo a mí dirección de email: susanabix@hotmail.com. O si queréis pasaros por mi blogs, aunque se que no esta actualizado, si os muestro con varias fotos: susanabix-misconfidencias.blogspot.com