Un viaje al pasado - 2

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UN VIAJE AL PASADO – 2

Aquella experiencia extramatrimonial, se repitió varias veces, aquel muchacho, me llenaba mi chichi del placer del que me había visto relegada desde que mi marido se encontraba siempre cansado, solo hacia trabajar y a mí me había abandonado sexualmente.

Por tal motivo decidí ponerle una cornamenta de un buen ciervo con 25 puntas. Con mi amiga Carla, salíamos todas las tardes a ligar, y eran bastantes tardes las que pasábamos en un hotel con las piernas abiertas, por lo general no repetíamos con los parteners, era más intrigante estrenar uno cada tarde me iban los jóvenes de 20 -22 años, esos tenían más potencia y me llenaban mas mi coño.

Incluso alguna vez, le ponía la escusa al idiota de mi marido diciéndole que mi amiga Clara y yo nos íbamos de compras a Italia, y claro que íbamos a comprar, pero además a buscar a los amantes italianos que tenían mucha fama, en compensación le traía de recuerdo alguna corbata o bufanda al cornudo de mi marido y el siempre tan agradecido y contento, ya no cavia por las puertas de la casa, tenía que pasar de lado para no tropezar con la cornamenta.

Así mantuve mis necesidades sexuales durante 3 años. Un día recibí una carta del juzgado, al abrirla me quede de piedra, era una demanda de divorcio, alegando infidelidad conyugal mostrando las correspondientes pruebas del delito, un montón de fotografías mías con los amantes de turno en la cama.

Me falto tiempo para pedirle explicaciones al cornudo de mi marido diciéndole de que no estaba dispuesta a concederle el divorcio y que lo iba a dejar en la ruina.

Hable con mi abogado y tras varias consultas me dijo, que tenía todas las de perder, las pruebas que presentaba mi marido eran concluyentes y que no iba a poder sacarle nada, ya que al casarnos lo habíamos hecho en régimen de separación de bienes. Por lo que todas las propiedades que teníamos las había hecho mi marido a su nombre, lo único mío era mi ropa y las joyas que él me había comprado. Cuando se efectuó la vista yo salí de la sala con el rabo entre las piernas, había perdido todo, no tenia casa y solamente una pequeña pensión que me concedía para poder alquilar un piso donde vivir mientras no encontrase trabajo.

Me dedique a buscar un trabajo en lo que fuese, pero no sabía hacer nada, entonces recordé que durante las buenas tardes que me había pasado con mis amantes tal vez alguno me acogiese, pero no dio resultado, ellos venían por los cuartos y ahora no tenía nada.

Una Noche en una Disco, me ligue a un señor muy agradable, estuvimos charlando y tomando unas copas, terminamos la noche en su casa y en su cama, era soltero, y por la decoración de su casa pude observar que le gustaba viajar, tenia fotografías de sus viajes a África, donde acudía con frecuencia a cazar, tenía un salón lleno de trofeos de caza mayor, pieles de leones, colmillos de elefantes pieles de cebras cornamentas de búfalos africanos, fotografías con distintas tribus africanas, aproveche y me lo ligue, durante dos meses estuve viviendo con él, me llevo a Paris, Roma, Londres y un día me dijo que se iba a África de caza si quería acompañarlo, me hacía mucha ilusión, ya me veía como en aquellas películas antiguas de safaris por África, “Las Minas del Rey Salomón” o “Las Nieves del Kilimanjaro”. Inmediatamente acepte la invitación, me llevo a comprarme un equipo de ropa propia para la ocasión, preparamos el viaje, me puse todas las vacunas que aconsejaban para poder entrar en el continente y allá nos fuimos.

Recorrimos varias reservas de caza, en Kenia, Uganda, Zaire, y otros países, los días los pasamos en diferentes campamentos de caza, además de hacer turismo, el viaje duro tres meses, ya cuando teníamos que regresar una tarde me llevo a ver unas hermosas puestas de sol, pero se nos hizo tarde y tuvimos que acampar en un pequeño poblado de indígenas, que nos acogieron ofreciéndonos sus pocas pertenencias y sus escasos alimentos, El se entendía un poco con los nativos, pero yo ni papa, nos habilitaron una pequeña choza y allí pasamos la noche.

A la mañana siguiente, cuando desperté, mi acompañante no estaba en la choza, me supuse que estaría fuera y salí a buscarlo, pero no lo encontré, pregunte a las distintas personas, tanto mujeres como hombres por él, nadie me entendía, comencé a ponerme nerviosa, en eso una mujer, me tomo de la mano y me llevo ante el jefe del poblado.

Era un hombre que aparentaba unos 70 años, pero en realidad no tenía más de 40, le faltaban varios dientes, su cara estaba adornada con varias cicatrices y tenía una barba escasa en forma de perilla, sus manos curtidas y huesudas, daban a entender de que trabajaba mucho con ellas, en eso al verme se acerco y me dio dos cartas iban dirigidas a mí, en una de ellas reconocí la letra de Julio mi ex marido, inmediatamente la abrí y comencé a leer, según leía mi tez se volvía mas pálida hasta que sin darme cuenta, el papel cayo de mis manos y yo me desmalle. Cuando me desperté estaba dentro de la cabaña donde habíamos dormido, retome la carta y leí.

-          Sofía,  te preguntaras como llego esta carta a tus manos, te lo voy a decir,

-          Cuando nos conocimos, yo me enamore perdidamente de ti, te quería con locura, te respete durante nuestro noviazgo con el fin de que fueses al altar virgen. Durante nuestra primera etapa de casados, disfrutamos de nuestros cuerpos al 100x100 yo te he dado todo lo que me pedias, coche, ropa, joyas, caprichos, viajes he trabajado únicamente para mantener tus caprichos, tu lo único que querías era sexo, mañana, tarde y noche, los hombres necesitamos un tiempo de recuperación, por eso nuestras relaciones se fueron distanciando, pero tú no lo admitías y buscaste un amante, no solo uno, sino varios, me pusiste los cuernos un montón de veces hasta que te descubrí y pedí el divorcio, no podía seguir viviendo contigo y ser la burla de mis colegas que estaban al tanto de tus infidelidades, el divorcio llego y tu saliste perdiendo, pero eso no te vasto, querías seguir con tu tendencia al sexo y buscaste amantes por cualquier sitio. No te había llenado lo suficiente el castigo de nuestro divorcio que te liaste con mi amigo Sebastián, el cazador, si somos amigos, el desconocía que hubiésemos estado casados y entre los dos urdimos esto para tu escarmiento. Espero que con tu nueva vida aprendas a valorar las cosas.

La otra carta era de Sebastián que decía:

-          Sofía, afortunadamente tengo buenos amigos que me avisaron en lo que me metía, Gracias Julio. Si, él es mi amigo y me conto tu historia y como le pusiste los cuernos, bueno pues ahora ha llegado el momento de nuestra venganza.

-          Donde estas, es un pueblo, como podrás comprobar que está viviendo como en la edad de piedra, no tienen luz eléctrica, su vestimenta es escasa pero sus leyes son muy estrictas en una sociedad que lucha por sobrevivir. A partir de ahora, vivirás con ellos, si lo has entendido bien, VIVIRAS con ellos en sus mismas condiciones, pero tendrás que hacer una serie de trabajos para poder ser mantenida esos trabajos se te irán diciendo progresivamente.

-          Tienes dos opciones no aceptar las condiciones y en ese caso el poblado, como son nómadas, se irán a otro sitio y tú te quedaras sola en ese lugar a la espera de que alguna fiera se dé un banquete con tus huesos o aceptar todo lo que se te ordene sin replicar, si aceptas esta segunda opción, que te la recomiendo, podrás seguir viviendo, si es así lo primero que tienes que hacer es:

-          1º Desnudarte completamente y entregar toda tu ropa y adornos que llevas a ZAAFIR, que es el jefe del poblado, el ordenara a sus tres esposas que te preparen para ser la cuarta esposa. Te acicalaran a su estilo y vivirás como una más de ellas, aprenderás sus costumbres y su idioma, aprenderás a cocinar, cultivar la tierra, a todas las costumbres de las mujeres de la tribu, tu nombre a partir del momento que aceptes será el que te designe tu esposo y amo,  el significado del nombre del jefe es “Victorioso” tiene un hijo que se llama Gahib =Conquistador, ya lo conocerás. Tienes hasta la puesta del sol para pensarlo si a esa hora no aceptas las condiciones al día siguiente te encontraras sola en esa zona. Espero por tu bien recapacites y aceptas lo que a tu criterio te conviene. Una cosa más, para el resto del mundo, has fallecido en un accidente, tu cadáver no se ha podido rescatar, cayó a una sima de más de 1000 metros de profundidad.

Me senté en el suelo y me puse a llorar, tenía la esperanza de que Sebastián se apiadase de mi y regresase a buscarme, las horas fueron pasando y el no aparecía, tenía que tomar una determinación, faltaban apenas dos horas para la puesta del sol fue entonces cuando me di cuenta que tenía que vivir. Llorando comencé a desnudarme completamente, incluso los zapatos, toda mi ropa y adornos, pulseras, anillos collares los uní ordenadamente y salí de la choza hacia la de Zaafir, me puse delante de él y se la entregue, me arrodillé ante el esperando que me dijese algo, no me importaba lo que dijese, no le iba a entender, solamente dijo:

-          Nilam, al mismo tiempo que me indicaba que me levantase.

Después llamo a dos de sus esposas que me cogieron de las manos y me llevaron a otra choza. Allí desnuda me dijeron con gestos que debería dormir, me dieron una papilla y un poco de leche para comer, me acurruque en una esquina sobre unas pieles de cabra y me quede dormida, en compañía  de aquellas dos mujeres que serian a partir de unos días con las que compartiría a mi futuro marido.

Continuara

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