Un velo de sensaciones

Mirando en mi ventana, siento la brisa en mi piel, observo las ataduras que pasan lentamente por mi cuerpo, sintiendo sus manos, su respiración lenta, pausada, un velo llega a mis ojos dejándome en la oscuridad, no tengo miedo, siento su fuerza y protección. Me muerdo mis labios, mi piel se eriza más, siento como toma mis hombros y me atrae hacia él, y coloca su collar, ese collar rojo que tanto adoramos. Su dorso esta desnudo, y mi espalda siente su pecho grande y firme, siguen pasando las cuerdas, sintiendo ahora como empiezan a ser ajustadas, inmovilizándome los brazos, intento estar calma pero me engaña mi propia respiración, se agita, se mueve, se acelera.

Siento como mis tetas han crecido más por la presión de las cuerdas, como se erigen desafiantes, mis brazos suben quedando rectos, allí desnuda, a la espera de mi AMO, Mi DUEÑO.

Escucho el sonido del TV, en mi mente pasa miles de cosas, pero se soy que soy su perra, así que me quedo lo más quieta posible esperándolo. El volumen sube inesperadamente y un ruido distinto resurge, cae en mi culo un latigazo, la fuerza hace que me desplace hacia adelante, me muerdo los labios, no gritaré, se lo había prometido; su respiración aumenta junto con la mía, va subiendo lentamente, mi espalda es su área preferida, su papel para escribir con lo que mi Amo desee. Siento caer el látigo varias ocasiones, mi piel se calienta, arde.

Se detiene, siento sus dedos pasando lentamente y presionando en las zonas donde cayo el látigo, me sentía abstraída en su contacto cuando el hambriento látigo cambio de camino, busco ansioso mis tetas, presionadas, desafiantes. Necesitaban ser marcadas, selladas con el sello de mi Dueño.

Mi piel brillaba como estrella, exhalaba el olor de mujer libidinosa, en mi coño el mar habitaba, goteaba más y más.

El látigo cambio su rumbo, bajando a mi coño, era tanta la humedad que las gotas saltaban cada vez que el látigo cazador de sensaciones llegaba allí.

Sentí como el mango del látigo se abría camino por esa gruta de emociones y quedaba metido allí, fijándolo con las cuerdas para que no se saliera.

Su voz resonó fuerte, preguntando;

¿Qué eres?, puedes hablar.

La respuesta fue instantánea y sin miedo;

Soy su puta, su perra, lo que mi AMO, DUEÑO y SEÑOR quiera.

Un beso lascivo recorrió mi rostro, llegando a mi boca y lamiendo profundamente dentro de esta y al tiempo presionando con unas pinzas mis pezones. Me agite en ese instante sin huir.

Mis piernas fueron abiertas al máximo y sentí como era elevada, zorramente expuesta, sentí su lengua en mi coño lamiendo alrededor del látigo metido dentro de mí. Sentí como estiraba mis labios vaginales obscenamente, salvaje, sentí la presión de sus dedos, luego re-emplazados por pinzas. Mi clítoris hinchado fue pinzado, de mi salio un leve quejido.

Sus dedos ahora juegan con mi culo, entran y salen, su lengua lame, yo me siento volando, más suya, más puta.

Siento como algo se abre camino por mi culo, en fracción de segundos quedando allí, siento el bombeo, mmmmmmmm que sensación, la presión, el éxtasis. Se detiene, queda allí.

Frente a mi rostro siento como una mano me guía hacia el frente y siento su polla maravillosa en mi boca, el vaivén de ser un columpio, frente y atrás sintiendo esa polla exquisita en mi boca y tratando de hacerle la mejor reverencia posible en su vaivén, siento como se enciende el vibrador en mi culo, un mundo de sensaciones explotan, no debo correrme, no puedo, mi Amo sabe que no lo haré, pero me siento eufórica, y mi AMO lo sabe.

Su ritmo penetrando mi boca aumenta, más rápido, más veloz, ya a punto de correrse. Se detiene y pierdo de mi boca su polla, pienso que no podré seguir adorándola como se lo merece.

Mis piernas bajan, están entumecidas por la posición al igual que mis brazos. Estos también son bajados, siento hormigueo en mis piernas y brazos por el tiempo allí colgada. Me toma del collar y soy guiada hacia un lugar, mi Amo se sienta y me indica a que me arrodille entre sus piernas, podré seguir adorándolo como se lo merece.

Mi boca hace su trabajo en esa polla gorda, mi lengua juega con cada milímetro de su piel, recorriéndola con mis labios, presionando, hundiéndola hasta sus huevos en mi boca, dándole todo el placer que se merece mi Dueño. Siento su mano en mi cabeza, no me guía solo está allí, acelero mi ritmo, más rápido, su respiración es agitada, viciosa, gritando;

Así puta, así. Folla a tu AMO.

Siento sus músculos tensionarse, sus gritos son fuertes, de su polla convulsionan ríos de leche en mi boca, tomo su regalo, su manjar lo más rápido posible, no quiero perder nada, no quiero perder ese licor de dioses que tanto me embriaga.

Limpio su polla como se lo merece, mi boca esta extasiada. Mi Amo se retira dejándome allí arrodillada, mis piernas están empapadas de mi misma.

El vibrador en el culo hace su trabajo, su velocidad aumenta, me siento pasar mis límites, pero aguanto quieta. Escucho al fondo el sonido del agua, mi DUEÑO se ducha, se que la sesión ha finalizado, estoy contenta porque me entregue totalmente a mi Dueño; estoy allí arrodillada, amarrada, pinzada y penetrada por mis 2 huecos, pero feliz.

El agua deja de correr, trascurre un buen tiempo, no se cuanto sea, soy levantada y llevada en sus brazos, me pone en la cama en posición de perra, el vibrador en el culo empieza a horadar y perforar nuevamente, embestidas fuertes y salvajes comienzan de nuevo. Me equivoque, mi AMO tenía más cosas en mente, el vibrador empieza a hacer círculos cada vez más grandes y siento muchísima presión, mi AMO está metiendo su polla junto con el vibrador, dios me muero, estoy derritiéndome, estoy fuera de mi totalmente, empieza a mover el mando del látigo en mi coño y rozando intencionalmente la pinza del clítoris. Que sensaciones me recorren, lujuria, deseo, dolor, placer, no se definirlo, pero soy feliz de SER SU PERRA, su MASCOTA.

Muerdo instintivamente los labios para controlarme, mi Amo lo nota y quita la mano de mi coño y la lleva a mi boca, mete sus dedos y los chupo frenéticamente, jadeo, estoy evitando gritar, mi cuerpo esta a punto de estallar, mi AMO acelera su ritmo en mi culo, lo siento inmenso. Se detiene repentinamente cuando siente que llegare a el orgasmo, me deja a borde de lo inevitable. Saca su polla y me gira, haciendo que mi boca vuelva a devorar y adorar su hermosa polla, así en cuatro toma mi cabeza con fuerza y folla mi boca. En sus embestidas gimo, vuelve y se detiene, me duele mi boca, su polla es muy gorda, pero no me importa.

Me hace acostar y con su boca retira las pinzas de mis pezones, los lame y los succiona con la ferocidad de un león, no puedo evitar que salga un gemido de placer y de dolor al tiempo cuando clavo sus dientes.

Saca el empapado mango del látigo, me lo da para que lo limpie con mi boca, mi propio sabor de perra en celo, es delicioso; sus dedos juegan con la pinza del clítoris y de los labios, presiona; ahora siento como nuevamente mi culo recibe su tratamiento de vibrador. Mi AMO me autoriza a gemir fuerte, mi voz que había estado callada por largo tiempo sale vociferando gemidos de gata en celo.

Mi AMO lleva su polla a mi coño, sus embestidas son frenéticas, con fuerza, salvajes, será inevitable la corrida de ambos.

Entre gritos le pido permiso para correrme, mi culo, mi coño, mi clítoris, hasta mi boca están por llegar a un orgasmo estremecedor.

Soy autorizada, mi AMO se corre entre ríos y yo, yo, su puta, perra, felina, comienzo a convulsionar, a contraer mi coño, mi culo, mi boca, oleadas de contracciones me invaden, espasmos que hacen que mi coño atrape la polla de mi AMO, el esfínter del culo se cierra y se abre con violencia, mi clítoris inflamado hasta más no poder grita y duele, pero al tiempo se contrae en su propio orgasmo. Y mi boca, mi boca solo grita, gime, aúlla, es una explosión total de miles de sensaciones. De mi coño sale ríos de leche, mezcla del orgasmo de mi AMO y del mío. Mi Dueño permanece dentro gritando tan fuerte o más que su perra.

La venda es retirada, las cuerdas caen, el clítoris y los labios se le retiran las pinzas, mi AMO me lleva a la ducha y me baña con pasión y dulzura, luego DUEÑO, aplica crema en mis partes usadas, le gusta la textura suave y cuidada de la piel de su puta, y ÉL se encarga de que sea así, estoy arrodillada a los pies de mi DUEÑO, agradeciéndole por enseñarme a ser su puta.

Gracias MI AMO, MI DUEÑO, MI SEÑOR CULTU.