Un trío de alto voltaje
( allí estaba yo un respetable cincuentón casado, atractivo y con éxito mientras un jovenzuelo de 22 años me daba por el culo, todo delante de mi mujer y encima me gustaba .)
Pedro Puri Javi (Un trío de alto voltaje)
( allí estaba yo un respetable cincuentón casado, atractivo y con éxito mientras un jovenzuelo de 22 años me daba por el culo, todo delante de mi mujer y encima me gustaba .)
Soy Pedro, un hombre casado de 48 años y con tres hijos, trabajo de comercial en el sector de hostelería, lo que me obliga a estar muy a menudo de local en local, también en restaurantes, vamos que sé donde está el ambiente de toda la provincia. En este negocio si quieres ser bueno hay que estar siempre en la calle, pendiente de todos e invitar a mucha gente a tomar algo. Mi mujer sabe de mis "sacrificios" y hay noches que llego a casa bastante tarde e incluso a veces un poco borracho. Nuestra relación personal es más que buena, es una gran mujer, simpática, inteligente, guapa, y con clase y hasta hace no mucho éramos muy constantes en el sexo, y ambos lo hemos disfrutado.
Desde hace un par de años mi "potencia" ha ido bajando peligrosamente, supongo que estoy todo el día en la calle y cuando llego intento dormir. De hecho últimamente hemos dejado el sexo casi para el sábado noche, cuando antes follabamos un día si y otro también. Mi mujer Puri estaba mosqueada e incluso pensó que tenía una amante por ahí, cosa que no es cierta pues aunque he tenido muchas oportunidades siempre he sido fiel, y es que mi mujer era y es una gran mujer incluso en la cama, y nunca encontré aliciente en acostarme con otras cuando en casa lo tenía todo. Estuvo un tiempo a la espera de algún indicio de mi infidelidad, y cuando creyó que no era así se decidió a hablar conmigo. Directamente me planteó que la tenía muy mal acostumbrada pues habían sido un montón de años de sexo casi diario disfrutando mucho como para que ahora tener que quedarse sin nada, más cuando nuestros hijos son mayores y hacen su vida, pudiendo disfrutar nosotros de más tranquilidad.
Supongo que para tranquilizarla decidimos irnos una semana de vacaciones a la costa, a Cádiz. Todavía era temporada baja y no había mucha gente, algunos extranjeros y alguna que otra pareja. Coincidió que tuvimos unos días preciosos, sol pero sin agobios y pudimos disfrutar de la playa y de mucha tranquilidad.
Esos días recuperamos el tiempo perdido y follamos como hacía tiempo, Puri se pasó los 8 días en celo, parte fue culpa mía pues en la playa le convencí para dejar al aire sus tetas, que son un espectáculo pese a sus 44 años, preciosas es la palabra adecuada. Además usaba un bikini minúsculo que consiguió que muchos hombres la desearan y la admiraran. Yo encima le hacía comentarios de cómo la miraban con deseo, de las pajas que se iba a hacer tal o cual jovenzuelo acordándose de ella y cosas así. Vamos que cuando subíamos de la playa siempre estaba mojada y caliente y no era del sol. Un día le convencí para irnos a una playa nudista, creo que acepto por el morbo de ver y ser vista. Como sabéis la gente pasa de muchas cosas, sin importarle si esta gordo, flaco, o tienes las tetas caídas, cada uno va a lo suyo; pero también hay mucha gente que va a pillar, a ver y a intentar ligar de alguna manera.
Cuando instalamos nuestros bártulos enseguida tuvimos a los típicos moscones que están a la espera de poder ver algo. Mi esposa creo que les contentó a todos, pues desde el primer momento se desnudó y estuvo todo el tiempo espatarrada y tomando el sol, haciéndose la dormida. Yo cuando me parecía le decía la gente que le miraba, como se le había puesto la polla a este o a aquel de verla y que seguro más de uno iría al agua a hacerse un pajote.
Cuando fuimos al agua nos volvimos enseguida porque todavía estaba muy fría, y la estuve secando, para hacerlo le di un repaso en condiciones, metiéndole mano por todos sitios y poniéndola al punto del orgasmo, tanto se calentó que me dijo de volver al hotel, a lo que me negué y le dije que cuando la playa se quedase más vacía intentaríamos echar un polvo allí mismo, además le decía que seguro que alguien nos vería y le alegrábamos el día.
Total que más se iba acelerando. Cuando ya empezó a declinar el sol y quedábamos pocos por allí, empecé a besarla y a meterle mano a su cosita, al principio estaba inquieta y nerviosa pero llego un momento que se puso tan cachonda que no le importaba ni la gente ni nada, solo de besarla y jugar con mis dedos en su coño se corrió, quedándose transpuesta.
Para entonces yo ya estaba empalmado como un burro, por eso le hice tumbarse en la toalla y tal cual se la clavé, Puri estaba más que lubricada y después de un rato de menearnos me corrí dentro de su coño, y al poco se corrió ella. Estuvimos un ratito más en la playa descansando y cuando nos pareció recogimos y nos fuimos. Al irnos tuvimos que pasar al lado de un chaval joven, aparentaba ventipocos años, con una tranca descomunal y totalmente tiesa. Al pasar a su lado ninguno de nosotros dos pudo evitar ver un aparato tan increíble.
Este chaval, que luego no diría que se llamaba Javi se sonrió y en alto nos dijo que nosotros eramos los responsables pues nuestro espectáculo había sido muy fuerte. Puri se puso como un tomate y ambos sin decir palabra no fuimos. Ya en el hotel y después de una más que necesaria ducha, nos tumbamos en la cama a jugar un poco, no se porque se me ocurrió decirle algo a Puri del chaval de la playa, ella contestó con algo parecido a que es imposible disfrutar de una polla tan grande.
Yo sólo dije que a todo te acostumbras, ella dijo luego que nunca lo sabríamos, y a mi me salió de no sé donde "que porque ella no quería" que a mi parecer el chaval estaba más que dispuesto a demostrarle su valía. Puri me miró fijamente y me pregunto sin dobleces que si le estaba proponiendo que se acostase con otro hombre que no fuese yo.
Yo le dije que bueno que yo ya estaba fallando mucho y que si así conseguía hacerla feliz, pues que se podía intentar. Me miró con cara entre incrédula y sorprendida y tan solo afirmó que estas cosas se sabían como empezaban pero no como terminaban. Esa noche cenamos estupendamente y por la noche hicimos el amor tranquilos y con mucho tiempo. Al día siguiente pregunté a Puri si quería volver a la misma playita nudista, me dijo que quedaba a mi elección que le daba igual. Total que le recordé lo bien que lo pasamos en la arena y volvimos.
Pasó como el día anterior, de momento tuvimos varios moscones y luego ya estuvimos más tranquilos. El chaval del día de antes no estaba, pero a media tarde apareció de nuevo, supongo que tenía un sitio fijo y quedó relativamente cerca de nosotros. Como el día anterior sequé a Puri, le di crema y aproveché para tocarle y meterle mano y al final que se mojase como una perra. Además se lo demostré pues uno de mis dedos fue a su coño, ella pegó un gritito de sorpresa pero al llevárselo a su propia boca le dije al oído que estaba pero que muy cachonda.
Al fin de la tarde cuando ya casi no quedaba nadie empezamos a jugar otra vez, el chaval estaba relativamente cerca y supongo que esperando si montábamos un espectáculo como el del día de antes. Nosotros no nos cortamos ni un pelo, y tal cual empecé a acariciar a Puri, a besarle, a mamar sus tetas perfectas y al poco estaba berreando como una cerda. Una de las veces miró y vio que el chaval tenía su polla monstruosa tiesa como la sota de bastos y se la estaba meneando. Puri no podía aparta su mirada de aquello tan grande, cuando me lo dijo y miré yo, me quede asombrado, este chaval tiene un pollón de más de 27 cm y aunque no es muy gorda se le marcan unas venas que hacen que se la mires aunque no quieras.
Yo me desentendí y poniendo a Puri boca arriba se la metí enterita, Puri mordía de placer, entonces ocurrió que el chaval de rodillas en la arena se acercó hasta nosotros y se puso a la altura de mi mujer, su polla quedaba al alcance de su mano y ella no se pudo reprimir y se la agarró y comenzó a menearsela, yo estaba pasmado pero bastante tenía con seguir el ritmo de la follada, el chaval tenía que estar tan cachondo como nosotros porque se corrió echando un chorro de leche como jamás lo he visto ni en las películas, Puri ni así le dejo y aunque se le bajo un poco, como seguía dándole arriba y abajo enseguida estaba otra vez en forma, entonces se corrió Puri con todo mi aparato dentro y enseguida fui yo quien le llenó el coño de leche.
Puri estaba recuperándose pero en ningún momento dejo de menearsela, cuando yo me quite de encima y estaba más cómoda se movió y quedo con su polla junto a ella, siguió maniobrando y el chaval, Javi, se corrió otra vez pero esta vez soltó gran parte de su chorro entre las tetas de mi mujer. Cuando acabó y por fin le soltó, él le dio las gracias pues según nos dijo el espectáculo de la tarde anterior le llevó a hacerse dos pajas en casa esa noche.
La situación era un poco tensa, pero pasado el primer momento de apuro charlamos de un montón de cosas, nos dijo que se llamaba Javi, que era de allí y que ahora no trabajaba por las tardes y venía a la playa a ponerse moreno y reconoció que a ligar, que ha ligado mucho en la playa, sobre todo con casadas que al verle el aparato no se cortan y directamente quieren follar.
También nos comentó lo que era una fantasía que tenía, pues nunca había estado con una pareja, Puri muy lanzada le dijo que eso se podía arreglar si yo quería, me vi un poco forzado a decir que quizás nos lo plantearíamos. Ya se estaba haciendo de noche, en esa medio oscuridad que ves pero no ves, y seguíamos allí hablando, a Javi poco a poco de la conversación y de ver a mi esposa frente a él, se le fue animando el aparato de nuevo, se fue levantando poco a poco pero se puso de nuevo tieso, muy tieso.
Puri no dijo nada pero con los ojos me lo dijo todo, vi que estaba decidida a follarse a Javi, entonces visto que no podía hacer nada sin violentarnos todos, le dije a Javi que si quería mi mujer estaba dispuesta para recibir placer. Eso detonó todo, pues Puri se incorporó un poco de tal forma que empezó a comerle la polla a Javi, este se recostó en la toalla, y mi mujer de rodillas se la comía como podía, no le entraba entera y lo que hacía era saborearla como un cucurucho de helado, el culo de Purí quedaba a mi alcance así que alargando la mano empecé a jugar, con su coño, con su ojete, y a acariciarla por todos los lados, la muy puta se movía para que siguiese, y al final consiguió que a mi también se me levantase el pito. Como pude me agarré a sus caderas y se la metí desde atrás, con mis empujones más se tragaba la polla de Javi, este estaba como un toro, bufaba y suspiraba pero no se corría, yo me corrí echando la poca leche que tenía en el coño de Puri, mientras ella seguí comiéndole el rabo a Javi, cuando me desacople de ella, lo que hizo fue avanzar y a horcajadas sentarse encima de él.
Como pudo no sin cierta dificultad se fue clavando en esa estaca, Javi estaba quieto como muerto y mi mujer acabó totalmente empalada en su verga, cuando se adaptó empezó a mover el culo y a subir arriba y abajo. El espectáculo era brutal pues Puri gritaba como si la estuviesen matando, aunque yo no me daba ni cuenta gozando del espectáculo y del polvo increíble que estaban echando. Hubo un momento en que Puri se quedo rígida y de golpe se dejó caer en la polla de Javi, se corrió como nunca antes yo la había visto hacer. En ese momento Javi también dio un par de empujones de cadera y gritando le llenó el coño de leche. Se quedaron los dos quietos pero sin desacoplarse, pero a Javi, no se si es que la situación le ponía, no había forma de que se le bajase, y la puta de Puri tampoco se soltó según ella con lo que le había costado entrar ahora quería aprovecharlo.
Sin sacársela rodaron un poco de lado y en tijera Javi seguía follándose a mi mujercita, entonces yo me pude poner frente a ella y besarla y comerle sus tetas y con mi mano acariciarle el conejo donde quedaba libre, de tal forma que también tocaba el rabo inmenso de Javi, cosa que creo que a ninguno de los dos nos desagradó.
Cuando se salía más de la cuenta era yo mismo el que se la volvía a poner en su sitio. Puri empezó a gemir y a decir que así sería siempre, que el cabron de su marido haría de mamporrero para que su macho la follase y le llenase bien de leche. Después de un buen rato de metisaca se corrió Puri, otra vez aullando y luego otra vez Javi, que le volvió a soltar una gran andanada de leche.
Por fin se soltaron, era para vernos, desnudos, sudando, con semen por todos lados, e incluso vimos que escondido teníamos un mirón que no se había perdido detalle de nada. Total que nos levantamos todos y nos fuimos, andando de camino al coche charlamos un poco con Javi que pese a su juventud es un chaval encantador. Nos despedimos y bueno volvimos al hotel. Yo estaba preocupado y así se lo dije a mi mujer, primero por haber hecho el trío, aunque reconocí que lo había disfrutado y segundo porque no habíamos usado condón y eso me preocupaba no por embarazos; que eso estaba más que controlado sino por posibles contagios. Puri dijo que se había dejado llevar y ni lo había pensado, que lo sentía pero que no lo pudo evitar.
Esa noche no salimos a cenar, y dormimos bien abrazados y seré sincero pues esa noche nada pasó. Por la mañana, nos levantamos con resaca de sexo, pero estuvimos hablando y Puri reconoció que había gozado como nunca, yo le prometí que seguiría intentándolo y que bueno de vez en cuando tendríamos placeres extras. Echamos un polvito mañanero que nos dejo más que relajados. Al salir, Puri con intención me preguntó si volvíamos a "nuestra playa".
Yo contesté que ya que era el último día podíamos comer bien y luego a media tarde echarnos una siestita al sol en la playa. Dijo que bien, comimos de maravilla y el vino que estaba frío entraba de cine, total que bebimos, sobre todo Puri más de lo acostumbrado. Ya en la playa y desnuda se quedó como un tronco, tumbada boca abajo y espatarrada, era para verla de lo buena que estaba. Javi llegó más tarde y se alegró de vernos, vino hacía nosotros y al verle le hice señas de que no hiciese ruido, porque Puri dormía.
Cuando se acomodó a nuestro lado le pedí que sin que Puri supiese que era él y desde atrás le pusiese crema. Javi se llenó las manos de crema y a su lado empezó a masajearla entera. Puri se despertó pero siguió tumbada y con los ojos cerrados. Javi en cada pasada era más audaz, pues no se conformó solo con sobarle las mollas del culo sino que incluso con sus dedos llegó a sobarle el coño, Puri estaba muy mojada y poco a poco y por su respiración comprobé que estaba muy salida. Cuando más o menos Javi acabo de darle crema en la espalda la movió para que se diese la vuelta y seguir por delante. Al hacerlo y ver que era Javi quien la había estado metiendo mano se llevó una agradable sorpresa y mas cuando notó su mástil totalmente tieso. Entonces me miró y con los ojos semientornados me mandó un beso de agradecimiento. Javi siguió dando crema ahora por delante, sobando sus tetas, y consiguió que los pezones se pusiesen completamente erectos demostrando lo acelerada que estaba Puri, jugó en su vientre, en sus muslos e incluso jugueteó con los pelos de su pubis, Puri no aguantó y mordiéndose la mano para no gritar se corrió.
Se quedo relajada en la toalla mientras la polla de Javi se mantenía más que tiesa. Yo me acerqué a mi mujer y dándole un beso le dije que ya que era nuestra última noche si quería podíamos aprovechar e invitar a pasarla con nosotros a nuestro amigo. Con cara de lujuria dijo que si, entonces le dijimos a Javi si quería compartir con nosotros esta última noche, por supuesto que quería y nos preguntó donde podíamos ir, pues él vivía todavía con sus padres. También estuvimos hablando de que el día anterior no habíamos usado condón, pero Javi nos juró que él no estaba dentro de riesgo, pues de hecho también él lo usaba siempre pero esa vez la inmediatez de lo ocurrido y al haber sido imprevisto no tenía a mano, por eso no lo usó. Medio nos convencimos los tres de que no había riesgo.
Le dijimos que podíamos ir al hotel que no habría problemas. Además decidimos hacerlo ya, pues el mirón de la noche anterior nos preocupaba. Con los dos coches condujimos hasta el hotel con la salvedad de que Puri se montó en el coche de Javi y por lo que me contaron se fueron metiendo mano todo el camino hasta llegar.
Aparcamos y con discreción y sin que nadie reparase en nosotros subimos a la habitación, lo primero fue una ducha que compartieron Javi y Puri y cuando yo ya no aguantaba más entre también, encontrándome el espectáculo de ver como se rozaban y besaba y metían mano debajo del agua, les dije que dejasen algo para más tarde y salieron, me duché entonces yo a todo correr y cuando salí todavía estaban desnudos pero ahora encima de la cama y besándose como si el mundo se fuese a acabar.
La polla de Javi no podía estar mas en forma, asustaba de lo grande que era, pero a Puri no le daba ningún miedo, cuando me tumbé yo también en la cama quedé a la espalda de mi mujer que se restregaba contra la polla del chaval. Yo también le besaba, en la nuca, en el cuello, jugaba con su pelo y con una de mis manos acariciaba su culo, llegue a meter un par de dedos en su culete, lo que hizo que todavía se arrimase más a Javi. Cuando ya no podía más levantó la pierna y poniendo el glande de la polla de Javi en la entrada de su coño le pidió que la follase, Javi no se hizo rogar y apretando poco a poco con la cadera y moviéndose un poco se la metió hasta dentro, realmente le costó varios minutos, pero cuando estuvo dentro Puri le dijo que se quedase quieto que era ella la que quería hacer el trabajo, entonces empezó a culear y a mover pelvis y cadera, yo desde atrás con dos dedos en su culo todavía hacía más fuerza, enseguida Puri empezó a chillar y a gemir y se corrió llenándonos de sus jugos.
Mi propia polla estaba como nunca, y se le estuve restregando por su espalda y por su culo. Javi seguía enterrado dentro del coño de mi mujer pero se empezó a mover poco a poco, esto consiguió que Puri reaccionase y entonces también ella decidió participar. Yo desde atrás sugerí que Javi se tumbase y fuese Puri quien lo cabalgase, así lo hicieron y cuando ya llevaban un rato de cabalgada unté mi polla de saliva y también el agujero de atrás de mi señora e intenté clavársela por ahí. Nosotros hemos practicado muchas veces el sexo anal así que a Puri no le pilló de nuevas, solo que ahora no lo esperaba, me costó metérsela en principio porque ellos no paraban quietos y porque la postura no es fácil, pero entró.
Al sentirse llena por los agujeros Puri ni hablaba, se dejó ir, entre mis embestidas y las grandes culeadas que le daba Javi la teníamos rota y totalmente abierta, se corrió llorando y gritando y se quedó casi desvanecida mientras nosotros seguíamos y primero se corrió Javi y enseguida yo. Cuando se la sacamos los dos se tiró a la cama y quedo traspuesta total.
Javi y yo nos fuimos a la ducha, primero se ducho él y cuando lo estaba bajo el agua me animó a que lo hiciese con él. Me dio mucho morbo ducharme en pelotas con otro tío y allí estábamos los dos desnudos y casi empalmados de nuevo. Con el agua cayendo encima de los dos y muy juntos que estábamos, me besó en la boca y pego su polla a la mía. No sé que me pasó porque nunca antes (ni después) me han atraído los hombres pero sé que nos besamos y que mi polla se irguió en busca de la suya. Entonces tiró de mis hombros hacía abajo y supe lo que quería. Me arrodille en la ducha y empecé a mamarsela. Javi no se corría, tan solo conseguí que se le pusiese en forma de nuevo, me levanté nos dimos un beso de órdago y llevándome de la mano en la polla volvimos a la cama. Puri se quedó pasmada al vernos entrar mojados y con mi polla en la mano de Javi. Además este le dijo que era un gran mamador y que sino llega a ser porque llevaba ya varias corridas me habría llenado de leche hasta la garganta. Puri se rió y dijo que desconocía esa faceta mía.
Total que tumbados en la cama de nuevo, mi mujer y yo nos estuvimos besando mientras Javi en la espalda de Puri le hacía sentir su dura polla otra vez, esta le dijo que lo sentía pero que tenía el coño y el culo escocidos y que por hoy ya valía, entonces Javi hizo un comentario que nos dejo helados a los dos, dijo que entonces me tendría que dar por el culo a mí, yo por supuesto dije que no , que esa cosa tan grande en mi culo no entraba y que además no era ningún maricón; pero Puri muy animada le animó a hacerlo, por eso se quitó de en medio quedando nosotros dos de frente y tumbados. Javi me beso y a la vez me acariciaba el rabo y la puta de Puri me metía un dedo en el culo para relajarme. Llegó un momento en que estaba tan caliente que todo me dio igual, así que me tumbé de espaldas y levantando el culo todo lo que pude, mientras Javi sujetaba mis piernas en alto, y deje que lo intentase. Puri estuvo al quite mamando y lubricando con su saliva primero y luego con una de sus cremas después tanto la polla de Javi como mi culo y entonces puso su cabezota en mi entrada, al entrar me dolió un horror pero lo aguanté, y poco a poco Javi fue entrando, el placer era distinto pues Puri no dejo en ningún momento de menear mi propia polla. Algo increíble, allí estaba yo un respetable cincuentón casado, atractivo y con éxito mientras un jovenzuelo de 22 anos me daba por el culo, todo delante de mi mujer y encima me gustaba.
Tenía los cables cruzados. Pero me gustó y me corrí soltando la poca leche que mis huevos tenían, cayó a lo largo de mi tronco, mientras Puri seguía masturbándome sin dejarme parar.
Javi de repente aceleró el ritmo y dándome unas embestidas brutales me llenó el culo de su leche. Nos quedamos los dos acoplados pero tumbados y su polla se salió con el típico "ploff". Me dolía el culo pero jamás me había sentido tan vicioso y tan bien. Estábamos tan cansados y era tan tarde que ni cenamos, hicimos un hueco en nuestra cama a Javi y nos dormimos los tres.
Por la mañana me despertó un leve movimiento, y es que la puta de mi esposa quiso aprovechar el tiempo y sin esperar se arrimó a la polla de Javi y consiguió ponérsela dura, cuando lo consiguió se la puso en la entrada del coño de frente como estaban y como la tiene tan grande se la clavó.
Y cuando yo me desperté así estaban, dando pequeños movimientos de caderas y disfrutando de un polvo despacito. Yo desperté con la polla también erecta, y acaricié a mi mujer en su espalda, pero recordando lo de la noche anterior me levante al baño, meé y volví con un bote de crema, me embadurné bien mi polla y con un poco de crema en mis dedos también lo hice en el culo de Javi, este viendo por donde venían los tiros, puso a mi mujer de espaldas, él se puso entres sus piernas follandosela y él mismo estaba todo abierto de piernas para facilitar que lo enculase, no sin dificultad conseguí que mi polla entrase. Y al rato acompasamos nuestros movimientos de tal forma que cuando yo empujaba, Javi venía hacía mi y mi mujer sacaba la cadera total que poco a poco conseguimos mantener el ritmo, el primero en correrme fui yo echando una buena andanada en el culo de Javi, enseguida lo hizo Puri y al poco Javi llenándole el coño con un montón de crema.
Estábamos sudando del esfuerzo, pero mi mujer sorprendiéndome todavía más se puso en la espalda de Javi y se puso a comerle el culo, pasó su lengua por el agujero y rebañó toda el semen que pudo, con la boca húmeda me busco y me dio el beso más morboso de mi vida, así saboreé mi propia leche después de pasar por el culo de mi amigo y en la propia boca de mi mujer. Javi estaba en la gloria y nos aseguro que en todos los años que lleva practicando sexo nunca había tenido una noche y una mañana tan especial.
El muy cabrón tenía todavía la polla morcillona y creciendo, así que le agarré y acercándola a mi boca se la comí como pude, enseguida vino Puri a ayudarme, por eso girándome un poco iniciamos un perfecto 69, nosotros dos y con Puri saltando de polla en polla y de agujero en agujero. A mi se me desató la vena bisexual y antes de correrme mandé parar a Javi, me puse a cuatro patas y le pedí que me comiese el culo y luego me la enfilara por ahí.
No lo dudo y entre él y Puri me dedicaron una gran lamida y luego con un poco de crema me sodomizó. Sus pelotas rozaban mi culo y la sensación era indescriptible, pues me besaba en la espalda a la vez que con una mano libre me pajeaba y con mi mujer besando y comiéndome la boca, a la vez que me rozaba con sus maravillosas tetas. Me corrí y mi semen quedo en las sábanas como muestra de mi placer mientras Javi dando unos terribles golpes de cadera se dejaba ir en mi culo.
Puri no lo había podido aguantar y se estaba metiendo el dedo, hasta que se lo quite y lo sustituí por mi mano. Estaba tan mojada que le entraron casi cuatro dedos y le dediqué una labor digital de escándalo, consiguiendo que se corriese de nuevo. Entonces si que nos quedamos rotos. Todavía dormitamos un poco encima de la cama, hasta que tuvimos que levantarnos para ducharnos preparar las maletas y salir de vuelta a casa.
La despedida de Javi fue muy emotiva pues le besamos Puri y yo con tanto sentimiento que se acongojó, todavía pudimos compartir nuestras lenguas Puri y yo con él, que por cierto se quedó con nosotros hasta la misma hora de marchar. Antes habíamos intercambiado teléfonos y datos personales y nos prometimos un reencuentro.
Pese a todo Cádiz está muy lejos, pero en este último año hemos pasado varios fines de semana en Madrid juntos, compartiéndolo todo, y practicando todo el sexo que se puede practicar entre dos hombres dispuestos y una mujer increíble.
Nos gusta todo desde encularnos el uno al otro hasta un "sándwich" que hace que Puri se quede rota y todo lo que podáis imaginar. Nuestra vida de pareja esta ahora en su mejor momento y las amigas de mi mujer le preguntan que ha pasado en su vida que está cada día más guapa y radiante.
Con Javi hablamos varias veces a la semana y ahora hemos pensado poner una webcam, yo soy un inútil para estas cosas de la informática pero Javi dice que él se encarga de todo, nos ha asegurado que tendremos unas sesiones de sexo "virtual" a tope y por supuesto que hemos aceptado su sugerencia.
Y este verano cogeremos tres semanas de vacaciones y por supuesto las pasaremos en Cádiz y Javi ha prometido vivir con nosotros como si fuésemos un matrimonio de tres, y además cuando él coja sus vacaciones en Septiembre se vendrá a nuestra casa y mientras yo trabaje mi mujer cuidará de él para poder disfrutar a mi regreso.
Esta es nuestra experiencia que creemos debe ser compartida y que demuestra que nuestra situación no es tan anómala y que a nosotros al menos nos ha descubierto caminos que nunca hubiésemos imaginado.