Un trabajo especial

Como a pesar de estar locamente enamorada de mi marido el pillarme leyendo unos relatos en la oficina cambia mi vida sexual totalmente.

UN TRABAJO ESPECIAL

Hola a todas me llamo Mary, soy de Madrid y trabajo en una empresa de distribución logística desde hace 8 años y la verdad que estoy muy contenta ya que el ambiente y el trabajo me encantan y encima esta bien pagado. Tengo 32 años estoy casada y totalmente enamorada de Julio mi marido, aunque en el tema del sexo no es todo lo que yo desearía y de hecho la mayoría de las veces soy yo quien toma la iniciativa y pongo el morbo que hace falta para tirar para adelante, en fin es bastante soso. El caso es que por casualidad empece a coger el gustillo algunas tardes después de comer en el trabajo a leer relatos eróticos por Internet, que es cuando sé esta más tranquila. Pero a pesar del cuidado de que no te pillen, al final siempre té pilla alguien.

Todo empezó el día en que sin darme cuenta y después de leer un relato que me encanto y me puso cachonda, comencé a leer otro que encima incorporaba en el texto fotos, se supone que de la chica que lo había escrito, y a pesar que esos relatos los evito para que no canten las fotos en la pantalla, ese día como os digo y tal y como estaba decidí proseguir con su lectura sin importarme si me pudieran ver. Estaba tan ensimismada con la lectura y tan dispuesta a llegar hasta el final, que me empece a tocar por debajo de la falda, no era la primera vez que lo hacia por algún relato, y aunque era corta no muy provocativa. Ya tenia un dedo dentro del tanga y empezaba sentirme a gusto cuando sin darme cuenta apareció por detrás mi jefe sorprendiéndome leyendo relatos eróticos con unas fotos porno en el ordenador. No sé si estuvo mucho tiempo y si se percato de lo que estaba haciendo por debajo de la falda, aunque creo que la escena podía ser muy explícita. Echándome una mirada desaprobadora se fue supongo que enojado, su cara consiguió que desapareciera la excitación que tenia en ese momento y que dejara de acariciarme. Por mi cabeza pasaron todo tipo de conjeturas sobre mi futuro en la empresa.

Yo creía que me iba a despedir cuando más tarde su secretaria me llamo para que fuera a su despacho, a donde me dirigí toda nerviosa y viéndome ya en la calle. Una vez dentro me dijo que cerrara la puerta para una vez cerrada y estando cerca de donde él estaba, me dijo que le enseñara las tetas, dejándome tan sorprendida y sin saber que decir, que me aseguro que no me despediría si lo hacia a pesar de los motivos que tenia, por lo que como os podéis imaginar no tuve mas remedio que hacerlo, la verdad que no esta nada mal y entre nosotras mas de una vez me he masturbado en la ducha imaginando que me lo hacia con el, lo que en absoluto me esperaba es que cuando me desabroche la blusa y me quite el sujetador me ordeno que me tocara los pezones y que metiera una mano por la falda como si estuviera acariciándome, no se como pero iba haciendo lo que me pedía sin rechistar, me metí la mano por la cintura y me dijo "así no por debajo de la falda tal y como lo estabas haciendo", hice lo que me pidió, ni que decir tiene que se estaba poniéndose más cachondo aun. Toda ilusa iba a empezar a ponerme el sujetador y vestirme cuando me pidió que me acercara un poco mas hacia donde estaba él y me dijo que le hiciera la ultima cosa antes de irme, "Bájame la cremallera del pantalón y me la chupas", me quede petrificada al lado suyo con las tetas al aire y cogiéndome mis manos que dirigió a su cremallera, no se como pero dije "Eso es demasiado" solo me contesto mientras las manos estaban ya en la cremallera "Tu veras que decides si quieres que no te despida" estaba alucinada con la escena semidesnuda con mis manos ya casi tocando su pene con una erección enorme y amenazada a quedarme sin trabajo, el caso es que continúe sacándosela del calzoncillo y metiéndomela en la boca terminando chupándosela hasta que se corrió en ella.. Después de vestirme me dijo que si estaría dispuesta a ser algo mas para él, no supe que contestar de repente, aunque cuando reaccione le dije que estaba feliz casada y no entraba en mi cabeza no ser fiel a mi marido, me despidió diciéndome "Piénsatelo y no creo que estés muy feliz con tu matrimonio" después de lo que había pasado no quería pensar en mi marido si se enterase no solo de la escena sino también que había tragado todo, cosa que con el no soy capaz ni de hacerlo ni en los momentos de mayor excitación. El caso es que le conteste que pensaría al respecto. Esa noche no pude dormir pensando en los pros y contras y aunque me seguía atrayendo hacerlo con él me daba miedo hasta donde podría afectarme. He de deciros que él tiene unos 40 años y su mujer es preciosa. Lo que no me podía imaginar fue lo que me esperaba el próximo día, a través de su secretaria me cito en su despacho por la tarde que venia su mujer y necesitaba que hiciera algún trabajo particular. A las seis de la tarde como una tonta fui al despacho justo cuando su secretaria se había tenido que ir, pero al ver a su esposa me tranquilice y eso que me pareció que iba un poco descarada con minifalda y un escote que dejaba ver que no llevaba sujetador. Aun me acuerdo de sus palabras textuales cuando nada mas entrar y cerrar la puerta me dijo, "hemos decidido que a partir de ahora nos vas a pertenecer y solamente para gozar de la vida", al ver mi extrañeza continuo haciéndome sentar al lado de su mujer mientras en la pantalla del ordenador empezó a verse todo lo que me hizo hacer el día anterior que estuvo grabando con una cámara vídeo sin que yo me enterase.

No sabia que hacer mientras la película avanzaba y veía como de rodillas me metía en la boca y chupaba su pene hasta correrse totalmente viéndose con detalle como mis labios al separarse iban llenos de semen, entonces me ordeno que chupara las tetas a su mujer que ya se estaba acariciando, conteste que no me atrevía, Su esposa que continuaba acariciándose los pezones por dentro de la blusa le dijo a su marido "Creo que habrá que enseñar a tu chica muchas cosas para que sea complaciente y disfrute con nosotros" y mientras su marido me hablaba de que me ayudaría en el empleo y en que me sentiría bien en todo lo que haríamos me recordaba lo bien que se me veía y lo hacia en el vídeo, sus manos me habían desabrochado los botones de la camisa y sentía las manos de su mujer por debajo de mi falda, yo seguía sin decir nada y dejándome hacer hasta que me vi totalmente desnuda y siendo manoseada por su mujer que ya estaba con las tetas al aire y mi jefe quitándose los pantalones, en esa guisa y sin saber porque, les pedí si me darían la película de vídeo, me contestaron que si quería me daban una copia pero que habían hecho mas copias para ellos y sus amigos, en vista de lo cual deje el tema y deje que siguieran tocándome, besándome, chupándome, en fin me tumbaron en la mesa del despacho y los dos se dedicaron a tocarme y a ponerme muy mojada y tan cachonda como pocas veces había sentido, así mientras el me tocaba los pezones, que creía me iban a estallar, ella se recreaba con mi rajita, con caricias por mi clitoris y pasando sus tetas por toda mi raja metiendo incluso un pezón casi dentro, yo estaba en la gloria gozando.

Cuando ella empezó a chuparme toda la raja y a darme caricias y chupetones con su lengua en el clítoris e iba a correrme ya, vi que se acercaba él con su pene muy empinado y grueso hacia mi boca que abrí y lo recibí dispuesta de nuevo a hacer todo sin reparos. Me corrí mientras seguía masturbándole con mi boca y aprovechando los movimientos de los respingos que daba mi cuerpo mientras me corría conseguí que se excitara tanto que me lleno la boca sin poder tragarme todo y cuando se separo de mi boca y tal y como estabamos todos su mujer acerco su boca a la mía metiendo su lengua dentro y saboreando el semen que aun tenia yo en la boca, siguió con su lengua dentro de mi boca y yo instintivamente, a besar sus labios mientras mi lengua chocaba y gozaba con la suya.

Estando en esa situación mis manos empezaron a tocar y acariciar sus tetas y pezones mientras ella hacia lo mismo, baje las manos hacia su raja mientras notaba que la excitación me estaba llevando hacia otro orgasmo, me corrí en esa postura mientras mis manos estaban ya tocando su clítoris al mismo tiempo que metía mis dedos dentro, proseguí bajando mi cabeza hacia su raja que por primera vez veía con todo detalle y me lance a chuparla y tocarla con mi lengua por todos los sitios hasta que conseguí que se corriese.

No puedo creerme que se la chupara y tragara todo de su marido, que luego una mujer me tocara y terminara corriéndome hasta mi orgasmo y para terminar yo hiciera lo mismo a ella, para colmo disfrutando de lo lindo de todo ello.

Después de relajarnos un poco y beber algo que yo necesitaba, me dijeron que había estado magnifica y que querían seguir disfrutando conmigo y que como veían que a mí también me gustaba, harían lo posible para facilitarme las cosas.

Los días siguientes no deje de pensar en lo que paso y en como disfrute, estando a punto de contárselo a mi mejor amiga, pero no me atreví. Realmente estaba esperando y deseando que me llamaran para hacer algo mas con ellos y disfrutar y gozar de nuevo como nunca antes habia sentido, y aunque me preocupaba hacia donde podia ir esa nueva relacion con mi jefe y su mujer, no me quitaba de la cabeza lo que habia descubierto de mi persona y si realmente era yo asi, gustandome ser complaciente y obediente en todo lo que quisieran una vez que estaba en faena, y me preguntaba porque no lo habia descubierto antes, pero os repito, estaba deseando que me hicieran volver a disfrutar del sexo como nunca antes habia sentido ni realizado.

Pero esa semana solo un día el jefe después de verme en mi mesa me llamo por teléfono y me pidió que me quitara el tanga y abriera las piernas que quería verme al pasar, yo no solo me quite el tanga sino que aproveche a quitarme el sujetador y desabrocharme algún botón mas de la blusa y a hacer que me acariciaba cuando el paso. Creo que le encanto porque a los diez minutos me llamo a su despacho y dándome la vuelta me apoye en su mesa y en esa postura estuvimos follando hasta correrse

La siguiente semana me asignaron un puesto de mas actividad comercial con lo que mi horario era más flexible y con algún que otro viaje para que mi marido y compañeros no notaran nada y eso si, con un un poco mas de paga, y empece a realizar las ordenes especiales que me mandaba mi jefe, según sus apetencias, algunas de ellas bastante provocativas que a mi me encantaba hacer con todo el morbo que suponian.

Para no enrollarme mas hoy os diré que mi vida desde entonces, hace seis meses, ha cambiado totalmente pues no se como llamarme si esclava, complaciente o puta, bueno esto no porque no me pagan, pero el caso es que hago mas de lo que os podéis imaginar incluso con algún que otro cliente o pareja según quieran.

Soy incapaz de dejarlo porque me encanta y estoy disfrutando del sexo como nunca en mi vida y mi marido sin sospechar nada, ya que me encargo de satisfacer sus necesidades en nuestra relación y poco a poco le hago cosas que el no se atreve ni a pedir.

Me gustaría que me escribieseis si tenéis alguna experiencia parecida o bien si os habéis enrollado con vuestros jefes a mi email prometo contestaros

Marycod@terra.es

Besos y gracias porque al fin se lo he podido contar a alguien Mary