Un tío normal y el chaval joven. II
Siguen las aventuras con mi nuevo amigo el jovencito, pero esta vez conozco a uno de sus amigos.
Pasaron los días y yo seguí quedando con Marcos, cada vez que salía de la universidad pasaba por mi casa y me follaba, los días que tenía entrenamiento también aprovechaba y se venía a mi casa. Me volvía loco cuando lo veía aparecer con la equipación de su equipo, me ponía muy cachondo. Sin darme cuenta me estaba enchochando mucho de aquel niñato.
Prácticamente llevábamos vida de pareja, hablábamos a cada instante, se preocupaba por mí a igual que yo por él, me contaba sus problemas y yo los míos, los días que no podíamos vernos siempre me mandaba alguna que otra foto de su polla babeando o del empalme que llevaba.
Yo había reducido casi por completo mis encuentros con otros tíos, Marcos me tenía bien servido. Él ya apenas hablaba de chicas, y cuando lo hacía me ponía algo celoso. Me tenía bastante pillado el nene.
Un día Marcos llegó algo preocupado a casa, más de lo habitual. Entre sollozos y nerviosismo pude sacarle que le pasaba. Resulta que uno de sus compañeros de equipo le había cogido el móvil y había descubierto nuestra conversación, conversación en la cuál la noche de antes intercambiamos algunas fotos subidas de tono.
Intenté tranquilizarlo, pero no había manera, Marcos estaba preocupado porque su compañero lo estaba chantajeando. Le contaría a todo el mundo lo nuestro si no accedía a lo que él quisiera.
La sorpresa llegó cuando me contó lo que le exigía. El otro chaval le pedía conocerme, y no solo conocerme sino que le hiciera una mamada.
- JAJAJA en serio te pide eso?. Le pregunté, no dando crédito.- Si... es en serio, no le veo la gracia. Dijo Marcos enfadado.- Bueno, es que me esperaba algo peor. - Creo que es un juego del tonto este.- Bueno pues algo habrá que hacer para comprobarlo no?- ¿Tu estás dispuesto a chupársela si es así?.- Bueno, no sería la primera polla que me como, y todo sea por acabar con este tema no?.- Ya, tampoco me hace gracia que te trate mal.- No te preocupes por mi Marcos, tengo más años que tú y sé donde me meto, no me asustará un niñato.-Bueno hablaré con él a ver que pasa.
La conversación se quedó ahí, me daba la sensación que Marcos estaba un poco mosqueado por el hecho que le tuviera que hacer una mamada a un amigo, lo noté celoso y posesivo. Parece que le molestaba más eso que se enterasen que le iban los tíos.
A los dos días Marcos me puso un mensaje diciendo que Andy, como se llamaba el amigo, y él vendrían al salir del entrenamiento para mi casa.A mi me daba un poco igual el juego de un chaval pajillero, pero me daba mucho morbo tener otro niñato como Marcos y por supuesto me ponía a mil pensar lo protector que estaba Marcos.
Tocaron al timbre, miré por la mirilla de la puerta y allí estaban los dos, pufff venían con esa equipación que tanto me pone. Short de lycra cortitos por los muslos, calcetas hasta las rodillas y camiseta de lycra también marcando pectorales y tableta.
Los hice pasar, Marcos venía muy serio. Andy se presentó, me dio la mano y pasó al salón. Era algo más alto que Marcos para ser dos años menor que él, más o menos como yo, muy delgado, de piel clara, las piernas se le veían mas velludas. Soltaron sus mochilas en el suelo y se sentaron. A Marcos como siempre se le marcaba su polla en esos pantaloncitos. Andy tampoco se quedaba atrás, marcaba buen paquete.
- Bueno pues vosotros diréis. Dije.- Por lo poco que leí en el móvil de Marcos te gustan las pollas de los jovencitos. Dijo Andy.- Me gustan las pollas en general.- A qué has venido? Deja de jodernos y habla claro. Dijo Marcos.- Solo quería comprobar si era cierto que le gustaban las pollas, y por lo que tu le contestabas parece que la chupa muy bien. Dijo el chaval sobándose el paquete.- Si quieres que te la chupe, venga, no voy a perder el tiempo. Me levanté y fui hacia él con la intención de echarle mano a su polla.- Quietoo, ¿aquí delante de Marcos?, no me gusta tener público. Dijo poniéndose de pie.- Tú has puesto tus condiciones para dejar tranquilo a Marcos no? pues ahora pongo yo mis condiciones, y si quieres que te la chupe tiene que ser aquí delante de él.
Marcos se quedó mirándome fijamente, le tranquilizó que pudiera ver lo que pasara. Andy seguía de pie mirándonos a los dos pensando en qué hacer.
- Te juro que si cuentas algo de esto te mato!. Dijo Andy mirando a Marcos.- No contaré nada si tu no cuentas nada.- Eso hacemos.
El chaval no dejaba de sobarse la polla por encima del pantalón, la tenía empalmada, se le veía. Con todo lo chulo que se veía, ahora era un mar de nervios y muy cortado.
- Aquí estoy, te la sacas o qué?. Le dije.
Tuve que arrodillarme frente a él, se asustó, intuí que era su primera vez. Le desabroche el cordón de los pantalones dejándolo flojo, tiré hacia abajo de ellos junto a sus boxers bajándoselos hasta los tobillos. La primera impresión fue bastante buena, se le veía una buena polla. Andy rápidamente se echó mano y empezó a pajearse.
- Todavía no está dura del todo. Dijo excusándose.- No te preocupes nene, yo me encargo.
Le aparte sus manos poniendo las mías, observé bien su rabo, era algo más pequeña que la de Marcos, bastante más velludo, le tiré del pellejo para atrás descubriendo se capullo puntiagudo. Lo que me llamó la atención fueron sus huevos, tenía dos buenas bolas colgando de su tronco. Lo seguí masturbando un rato hasta que su polla cogió todo el tamaño, para su edad no estaba nada mal. El chico ya se deshacía en gemidos y jadeos.
- Venga chúpamela. Me ordenó.
Acerqué mi cara a su rabo, su olor hizo que me pusiera bastante cachondo, claramente venían de entrenar por el olor a sudor mezclado con pis que rezumaba. Abrí la boca y me la fui metiendo poco a poco. El chico no se inmutaba, cerraba los ojos mientras me dejaba hacer.
Me agarré a sus cachetes para impulsarme contra su polla que ya me la metía entera en la boca. Sentía sus huevos chocar en mi barbilla. Andy me agarró de la cabeza para seguir empujándome contra su polla.
Detrás nuestra Marcos seguía sentado en el sofá, evitando mirar aquella imagen, pude verlo de reojo como en su pantalón algo se iba despertando. Yo seguí a lo mio, le manoseaba los huevos al chico, le daba mucho placer por los gemidos que daba.
La siguiente vez que volví a mirar a Marcos ya se había sacado la polla de los pantalones y se la estaba pajeando, me dio mucho morbo ver aquello, no pude evitarlo y le hice gesto para que viniera hacia mi. Rápidamente se sacó los pantalones y vino.
- Pero qué haces tío!. Grito Andy al ver a su amigo acercarse.- Tranquilo, puede ocuparse de las dos pollas.
Yo sin decir nada le agarré la polla a Marcos pajeándolo sin sacar de mi boca la de su amigo. Marcos acabó de desnudarse, mirando de reojo como le comía la polla a Andy.
- Pufff como la come tu amigo Marcos, que maravilla.- Lo sé, es todo un expertooohhh.
Antes de que acabara de contestar me metí su polla en la boca, ahora pajeaba la de Andy. Este no se cortaba en mirar, parecía disfrutar verme comiendo la otra polla.
Allí estaba yo, arrodillado delante de aquellos dos chavales adolescentes, comiéndoles las pollas y disfrutando más que ellos.
Me las comía con gusto, las alternaba, sin duda me gustaba más la de Marcos, pero la otra tampoco tenía desperdicio. Practicamente me estaban follando la boca, las babas me caían de la boca, me estaba sometiendo completamente.
- Joder me tienes a tope, no aguanto más. Advirtió Andy pajeándose rápido.
Le puse mi boca abierta para que acabara en ella, debió de gustarle, sonriéndome empezó a correrse en mi lengua y labios.
- Aaarrggg sii puufff que puto gusto. Gritaba.
Recogí las últimas gotas que le caían y me tragué su leche sin soltar la polla de Marcos. El chico cayó rendido en el sofá mientras yo acababa con Marcos.
- Me has puesto muy cerdo. Me susurró Marcos.
No dije nada, me limité a seguir comiéndole la polla, me gustaba sentir sus venas en mis labios y jugar con mi lengua en su capullo. Me agarró del pelo y me apartó de su polla. Movió un par de veces su mano y explotó en mi cara, regó con su leche toda mi cara, desde los ojos hasta la barbilla me chorreaba su semen. Andy miraba atónito el espectáculo.
- Tengo que marcar mi territorio. Agachándose y besándome.
Me dejó de piedra. Me limpie como pude y me incorporé. Fui al baño a terminar de limpiarme, cuando volví Andy ya se había vestido y Marcos tan solo se había puesto los boxers.
- Bueno yo me piro, gracias por la mamada, ha sido increíble.- De nada, acuérdate del trato, ni mu a nadie.
El chico se fue y nos quedamos solos Marcos y yo. Esa tarde me folló como nunca. Estaba desatado. La situación lo había puesto a mil. Me gustó verlo así.
Los días pasaron, no volví a saber nada de Andy. Una tarde estaba por la zona donde Marcos entrena, le dije de recogerlo e ir a mi casa. Lo esperaba un par de calles más alejado del campo de fútbol, lo vi aparecer con Andy. Algo en mi interior reaccionó e inmediatamente me puse cachondo. No creo que se venga con nosotros, pensé.
- Hola Juan me alegra verte. Dijo Andy.- Hola chicos, qué tal.- Pues nada, cansados del entrenamiento.- Te acerco a algún lado Andy?. Pregunté. Noté como Marcos clavaba mi miraba en mi.- Vale, no vivo muy lejos de aquí.
Los tres nos subimos al coche, ninguno hizo comentario de nuestras aventuras. Yo miraba de reojo a Marcos, ahí estaba de copiloto, tenía una pierna en alto, exhibiendo sus muslos fibrados, no pude evitarlo y me puse a acariciarlo.
- Que suerte tienes Marcos, que cabroncete.- Suerte por qué?- Juan te tiene bien satisfecho no?Todos reímos.- Bueno no me quejo, ni él tampoco vaya!- No no, para nada. Dije yo metiendo mi mano por debajo de su pantalón y agarrando su polla.- Ojalá tuviera yo alguien así.
Marcos y yo nos miramos, comprendimos que podíamos darle otro gusto a Andy. Al fin y al cabo se estaba comportando y a los dos nos gustó la situación anterior.
- Te apetece venir a casa Andy?- Puff ojalá, estoy castigado y no puedo llegar muy tarde a casa.- Pues tu te lo pierdes chaval. Contestó Marcos.- Y aquí en el coche no podemos...?- Ni de coña, es el coche del trabajo. Contesté.- Pues yo necesito desahogar ya, mira como estoy. Dijo Marcos sacándose la polla dura por debajo de la pernera del pantalón.- Tengo una idea chicos, pero no sé si os va a gustar.
Cerca de donde estábamos hay un gran parque, el sitio es conocido por ser una zona de cruising, tiene lugares apartados y escondidos de la gente, le propuse eso a los chicos, estaban tan cachondos que aceptaron sin dudar.
Aparqué el coche y nos pusimos a andar hasta la arboleda. Podía ver la polla morcillona de Marcos zarandearse de un lado a otro de su pantalón. Llegamos a un rincón apartado, apenas se veía nadie.
- Y si nos ve alguien?. Preguntó Andy algo asustado mientras se sobaba la polla.- No pasa nada, aquí se viene a esto. Dije yo arrodillándome.
Marcos fue el primero en sacársela, morcillona, fue la primera en meterme en la boca, mientras Andy miraba de un lado a otro. Le metí la mano en los pantalones y se la saqué, la tenía flácida, supongo que por el nerviosismo de la situación. Lo pajeaba para que cogiera grosor.
- Venga tío céntrate, que no tenemos mucho tiempo. Le dijo Marcos.
Solté la polla de Marcos y fui a por la de Andy, al metermela en la boca fue cogiendo tamaño, me encanta ese sensación de sentir una polla creciendo en mi boca.
- Joder que lengua tienes tío. Decía.
El chaval me agarraba de la nuca y me empujaba contra él, mi nariz se hundía en su vello púbico, esta vez sí pude comerme sus huevos. Se le iba pasando el nerviosismo.
Marcos se pajeaba mirándonos, muy cerca de Andy, prácticamente tenía las dos pollas en la cara. La cara de Marcos hoy era diferente, tenía esa sonrisa pícara, hoy no veía tan mal que se la chupara a su amigo.
- Que cachondo me pones Juan, necesito follarte ese culazo. Dijo Marcos.- Por mí no te cortes. Le dije afanado a la polla de Andy e intentando bajar un poco el pantalón.
Andy miraba perplejo como su amigo me bajaba los pantalones dejando mi culo al aire y se escupía en la mano metiéndomela por la raja del culo.
- Entiendo que no es la primera vez que te lo follas.- Jaja ni la primera ni la última, este culazo engancha al igual que sus mamadas.
Marcos se agachaba en mi culo apuntando su rabo hasta mi entrada, con una mano se agarró a mi cadera y con la otra guió su polla hasta mi ojete lubricado con su saliva.
- Agárrate que voy.
Me agarré a las piernas de Andy para evitar caerme sintiendo como la polla del nene se abría camino dentro de mi culo.
- Hoy lo tienes más estrechito Juan o es que me ha crecido la polla. Rió.
Yo apenas podía hablar ni gemir, Andy cada vez empujaba mi cabeza más contra él, lo que me impedía gemir por la ensartada que me estaba dando Marcos.
- Querrás follártelo Andy?. Preguntó Marcos, agarrado a mis caderas y bombeando su polla en mi culo.- Puff claro que si tío, viendo como estás gozando, y lo puta que haces a Juan.
A cuatro patas, en medio de aquel sitio, siendo sometido por dos niñatos. Estaba hecha toda una perra, me estaban haciendo gozar. Marcos seguía follándome el culo agarrado a mis caderas y Andy dándome de mamar su pollote.
- Venga, deja que lo folle.
Sacó su polla de mi boca, fue junto a Marcos que se puso de pié tras darme un cachetazo.
- Será tu primera vez no Andy?.- Si, pero te vas a enterar como te voy a follar.
Marcos se quedó junto a mi culo, abriendo mis cachetes para que Andy viese mi ano y me la pudiera meter. Andy me escupió un par de veces en agujero y puso su polla.
- Dale, métele la polla hasta el fondo. Le dijo Marcos.
El niñato le hizo caso y me la metió del tirón. Empezó a saltar literalmente en mi culo, menuda cabalgada me estaba dando. Ahora si podía gemir.
- Te gusta que te folle mi amigo?. Me preguntó Marcos.- Joder sii, me encanta que me folléis los dos, pero prefiero esta polla.
Lo agarré de la polla y me la volví a meter en la boca, la mamaba con pasión, le estrujaba los huevos.
- Me encanta verte gozar Juan. Besándome.- ME CORROOO. Gritó Andy dando embestidas a mi culo.
Andy se agarraba a mis caderas hundiendo su polla en lo más profundo de mi culo, notando como me lo inundaba de semen.
- Te ha gustado?- Menuda pasada, quiero repetirlo cuando podamos, siento que me he corrido muy rápido.
Se separó de mi culo, limpiándose la polla.
- Me vas a follar?. Pregunté a Marcos.- No sé, me da cosa, con toda la corrida de este.- Venga que lo tengo que me arde y bien lubricado.- Bueno venga. Dijo ocupando el sitio del amigo.
No se lo pensó mucho y me la metió, empezando a moverse rápido, me agarraba de los hombros dándome fuertes embestidas, sentí su polla deslizarse con facilidad gracias a la corrida del amigo.
- Menudo culo tragón tiene Juan. Decía Andy mientras se guardaba la polla.
Marcos aumentaba sus movimientos, su descarga estaba próxima, así fue. Se corrió dentro de mi culo también. Nos limpiamos y volvimos al coche los chicos se tenían que marchar, los llevé hasta sus casas.
Esa misma tarde recibí un mensaje de un conocido el que decía lo siguiente: "Te he visto esta tarde en el parque, vaya dos chavales, a ver si me los presentas."
Continuará.