Un taxista abusa de mi en complicidad con mi amigo

Saliendo de un antro en cancún, en estado de ebriedad un taxista y con mi amigo de cómplice, abusa salvajemente de mi en una casa abandonada.

Los contaré algo que me pasó cuando fui a Cancún hace aproximadamente 8 meses, como muchos ya saben en mis relatos trato de incluir una descripción de cómo soy físicamente, a continuación, mi descripción: tengo 22 años, soy algo chaparra 1.59 de altura, aperlada, piernas de gym y pompis algo voluptuosas, la verdad que siempre atraigo miradas entre mis vecinos por la ropa tan chiquita que suelo usar.

En octubre del 2019 fui a Cancún con un chavo con el que andaba quedando (saliendo en plan de ser novios) el viaje estaba planeado que fuera por 4 días, los primeros 3 días fueron de que pasear por la zona hotelera, disfrutar de la playa, el sol, mar, arena y sobre todo mucho sexo obviamente, siempre me ha encantado que es muy intenso en la cama y eso me prende demasiado y además muy cachondo, tiene unas ideas medio locas y en este relato sabrán porque les digo esto, en fin, para el 3 día en la noche, la cual era nuestra ultima noche antes de regresar a monterrey teníamos planeado ir al antro coco-bongo el cual es super conocido por sus shows tan geniales.

Ya en la noche en el hotel me arreglé super sexy, vestido corto, pegado y escotado, sin bra y tanga de hilo negra, a mi amigo le encantaba que me vistiera así provocativa, le gustaba que llamara la atención y que los demás hombres se me quedaran viendo con cara de deseo y lujuria lo cual a mi no me molestaba y de hecho hasta me excitaba también eso.

Nos salimos de la habitación del hotel y nos fuimos al antro, entramos y el ambiente estaba de lo mejor, muchos hombres y mujeres todos disfrutando la música, y sobre todo muchos hombres guapos y mujeres vestidas muy sexys también, a mi amigo muchas le llamaban la atención sobre todo las extranjeras.

Ya en nuestra mesa le dije: ¿sabes que? Como hoy es nuestra ultima noche acá me pienso poner muy ebria jaja, y me dice: si por supuesto, adelante, yo te cuido, aunque también pienso tomar pero no tanto como tú.

Ya habiendo aclarado eso me dispuse a empezar a tomar whiskey el cual me encanta, mientras tomaba me ponía a bailar y le cachondeaba a mi amigo.

Ya avanzada la noche me habían comentado antes que ahí mismo en el antro hacían cierta dinámica donde invitaban a las chavas con un presentador en una tarima o escenario y él las presentaba como con todos los que andaban ahí en el antro pero mientras te pasaban había un chorro de aire que te levantaba el vestido o falda, lo que sea que trajeras puesto.

El caso es que cuando pidieron chicas para pasar mi amigo me dijo: ey ve y pasa ándale.

No lo pensé mucho y acepté y fui a pasar, delante de mí había varias chavas a las cuales les hicieron eso mismo que ya mencioné y ya al pasar yo no fue diferente, me pasaron y en cierto momento mientras caminaba salió el chorro de aire y me levantó el vestido dejándole ver a todos mi tanga de hilo negra, inmediatamente me bajé el vestido pero ya todos me habían visto.

Regresé a mi lugar con mi amigo y me dice: oye me encantó eso, y que me enseña su celular, era el video de cómo se me levantaba el vestido, se había acercado al escenario para grabarme en video.

Al verme así expuesta en el video se me hizo muy excitante la verdad, me dijo después que no compartiría el video que era nada más para él.

Todo esto que les estoy contando es para que sepan como fue sucedieron las cosas que pasaron después, en fin ya para no hacer demasiado larga la anécdota ya eran como las 3am y yo ya andaba super ebria, ya caminaba con dificultad y mas que nada porque mis últimos shots fueron de tequila, la mezcla de bebidas fue lo peor, y ya a esa hora mi amigo y yo estábamos dispuestos a irnos del antro, nos salimos y afuera hay muchos taxis esperando llevar a la gente a sus hoteles y nos subimos a uno en el que el chofer era un hombre de aproximadamente unos 36 años de edad, algo moreno, con un tatuaje en el brazo, honestamente con lo ebria que andaba no noté esos detalles hasta después, mi amigo con dificultad me ayudó a subirme al taxi en el asiento del copiloto y él se fue en los asientos de atrás.

Yo al sentarme y al avanzar como traía las ventanas abajo el taxi me empezó a dar el aire en la cara y pensé que eso me ayudaría a quitarme lo ebria un poco pero fue todo lo contrario, de repente no supe de mí, como que perdí el conocimiento por unos instantes y luego regresé en mí y sentía una sensación muy rara, sentía mi cuerpo y estaba un poco consiente pero no podía moverme casi nada. Se podría decir que adormilada o atontada pero un poco lúcida, jamás en mis 22 años de vida me había pasado algo así y menos sentir algo así.

Para entonces yo confiaba en mi amigo en que él cuidara de mí pero me llevé una gran sorpresa al notar sus manos en mis piernas, así yo sentada sin poder moverme sentía que desde el asiento trasero mi amigo me estaba agarrando las piernas y obviamente el taxista veía todo eso, me estaba agarrando y poco a poco subía mas su mano hasta mi tanga, por lo poco que veía y que estaba consiente alcancé a notar que mi amigo sonreía y el taxista también, como que ambos estaban disfrutando de eso que me hacían.

Recuerdo haber sentido que mi amigo con su mano levantó todo mi vestido hasta la cintura y me empezó a acariciar por arriba de mi tanga, sus dedos se sentían muy bien, me gustaba y lo hizo por unos minutos cuando después de eso ya sintió que me estorbaba y me la hizo a un lado, cuando pasó eso, el taxista no pudo aguantar prender la luz interior del taxi y verme mi panochita toda depilada, tipo estrella porno y sonreía descaradamente, no se que tipo de palabras intercambiaron mi amigo y él que de pronto noté unos dedos diferentes a los de mi amigo tocando mi clítoris y al abrir un poco los ojos era el taxista que ahora me estaba dedeando.

No supe cuanto tiempo pasó y abrí un poco los ojos volteando hacia el camino y aun sintiendo como me dedeaban y no reconocí el camino de regreso al hotel, íbamos como por un camino de tierra solo veía lo que podía alumbrar las luces del taxi y veía mucha vegetación a mis alrededores me llegué a asustar un poco pero de igual manera no podía hacer nada al respecto, mi cuerpo no me respondía.

Recuerdo que pasó un poco mas de tiempo y noté como se detenía el taxi y como pude logré distinguir una casa pero parecía abandonada y muy descuidada, se baja mi amigo de la parte de atrás mientras el taxista va hacia la casa, me parece que iba a verificar que no hubiera nadie o a abrir no supe bien y le hizo una señal a mi amigo y mi amigo me abre la puerta del taxi y cargándome me lleva al interior de la casa.

La casa olía muy mal, como que vivían vagabundos en ese lugar y hacían sus necesidades en cualquier parte que se les antojara, pero en una de las habitaciones había un tipo colchón todo rasgado y sucio y justo sobre el colchón me dejó caer mi amigo así boca arriba, abrí un poco los ojos y logré ver claramente como el taxista sacaba su cartera y le daba como dinero a mi amigo y mi amigo sonrió y cerró la puerta al salir. Algo logré escuchar que le decía el taxista a mi amigo que no se preocupara que a ese lugar siempre se llevaban a las putas los taxistas y nunca habían tenido problemas.

Lo único que se me vino a la mente fue que mientras íbamos en el taxi y me iba dedeando, el taxista y él hicieron un trato de que el taxista pagaría por tener sexo conmigo así en el estado en el que estaba, era lo mas conveniente para él ya que como estaba no podía oponer resistencia a nada de lo que me hiciera, estaba a su merced.

Nada más cerró la puerta mi amigo y empezó a desnudarse y yo no podía hacer nada mas que observar con mis ojos medio cerrados como lo hacia y hasta dejar al aire libre su verga, debo decir que no estaba nada mal el taxista, la tenia mas gruesa que cualquiera que hubiera visto antes, no muy larga, tamaño promedio y muy cabezona.

No tardó en venir hacia mi y rasgar mi vestido dejándome solamente en tanga, no le importó romper mi vestido, lo hacia muy salvajemente sin importarle nada, sin perder tiempo se fue a mis senos, empezó a chuparlos a comérselos casi por completo y a morder mis pezones, como no podía gritar ni oponer nada de resistencia me mordía de manera algo violenta mis pezones casi al punto de pensar que se los quería comer, por suerte no fue así y después de unos minutos haciendo eso se fue a mi tanga, me la quitó y ahora jugó con mi vagina.

Me estaba dando un oral el cual a lo poco que lograba sentir era muy rico, en verdad lo estaba disfrutando, más allá de que era algo que yo no había consentido que me hicieran, con su lengua me comía toda la vagina, la metía por donde cupiera y me gustaba, me mordía levemente mi clítoris y eso se sintió delicioso. Siguió haciendo eso como por lo que yo sentí fueron 5 minutos y ya no aguantaba, ya estaba muy duro.

Sin pensarlo acercó su pene a mi boca, me abrió la boca con sus manos y me la metió, yo no podía ni mover la cabeza, pero podía verlo un poco y agarró mi cabeza con sus manos y él mismo movía mi cabeza para estar dándole un oral muy rico, sus gemidos lo delataban y las palabras que me decía eran que era la puta mas rica que se hubiera cogido jamás.

Le estuve dando oral por unos minutos y supe lo que vendría después, pero la sorpresa fue que yo pensé que sacaría de su ropa algún condón para ponérselo y penetrarme, lo cual no fue así, sin dudarlo y sin ponerse condón me la metió por mi vagina hasta el fondo, yo ya sentía un poco mas lo que me hacía pero aún no podía moverme nada, empezó a bombearme mas y mas así de misionero, boca arriba y con las piernas abiertas, me lo estaba haciendo muy rico la verdad, cuando se cansó me puso boca abajo y me abrió la piernas nuevamente y colocó un pedazo de trapo sucio en mi vientre lo cual era para que dejara en mejor posición mi culito para él penetrarme.

Yo pensé que me seguiría penetrando vaginalmente pero escuché como escupió y me cayó su saliva en mi ano, y supuse lo que vendría después y así fue, noté como empezó a querer meter su pene en mi ano, poco a poco fue abriéndose camino a través de mi culito, eso me dolia un poco pero me habría dolido mas si no hubiera estado tan alcoholizada, no se cuanto tiempo lo estuvo intentando hasta que por fin la metió toda, estaba muy excitado que sentía su pene durisimo y yo igual estaba muy excitada.

Cuando por fin mi ano se acostumbró al tamaño de su pene lo sacó, supongo que para ver el orificio que había hecho en mi ano y como estaba de dilatado y les soy honesta, pude ver que su pene salió con restos de…. Materia fecal de mi ano, no era demasiado solo un poco la punta de su pene, juraría que pensé que se limpiaría con algún tipo de trapo pero en lugar de eso se acercó a mi cara y me abrió la boca y me introdujo su pene, se lo estuve chupando hasta dejarle limpia de nuevo su verga mientras yo me saboreaba mi propia materia fecal, pero sin poder hacer nada para evitarlo y sin poder escupir lo único que podía hacer era pasar saliva y tragar lo más que pudiera.

Ya que se lo dejé limpio de nuevo abrí los ojos y vi que había acercado una silla, por lo que me cargó y me acomodó en una posición tipo de perrito, pero como no me podía sostener por mi misma, sacó de no se donde unas cuerdas con las cuales me amarró mi cabeza en el respaldo, mis brazos a las patas de la silla y mis piernas igual a las patas de la silla, ya amarrada en esa posición no podía moverme ni nada.

Yo estaba totalmente a su merced como su esclava sexual, desnuda amarrada en posición de perrito, se puso atrás de mi y empezó a penetrarme vaginalmente de nuevo, mientras lo hacia me empezó a dar nalgadas muy fuertes, jamás me habían golpeado tan fuerte mis nalgas, sentí que me las estaba dejando todas rojas, mientras me decía cosas como perra, zorra, piruja. Por si fuera poco no fue suficiente con golpearme mis pompis con sus manos, sino que fue a su pantalón y sacó un cinturón y ya sin penetrarme agarrando todas las fuerzas que pudo empezó a darme golpes con el cinturón, lo notaba ya como todo un sádico, disfrutando el golpearme y humillarme y disfrutando mi dolor, el cual para su mala suerte no sentía por completo por mi estado de ebriedad.

Para mi suerte como que volvió un poco en sí y dejó de lado el cinturón y volvió a penetrarme salvajemente, era un perro montando a su perra, me agarraba de la cintura y me jalaba contra él, empecé a escuchar sus jadeos y de acuerdo a lo esperado sentí un chorro caliente y espeso de semen llenándome por dentro de mi vagina, sacó su pene y sentí su semen escurriendo al piso desde mi vagina.

Estaba exhausto y pensé que ahí se había terminado mi tortura, que ya se había hartado de mi y que llamaría a mi amigo para que me llevaran de nuevo al taxi e irme, pero no pude haber estado más equivocada. Como tenia que esperar tiempo a recuperarse nuevamente para seguirme penetrando se le ocurrió jugar con mi cuerpo, hacerme cosas.

Lo primero que hizo fue que con una de las cuerdas que le habían sobrado empezó a amarrarme mis senos así propiamente desde la base, muy fuertemente amarró ambos senos dándole muchas vueltas para que no se soltaran, no se bien como describirlo pero espero se lo imaginen, después de eso de tener mis senos hinchados por estar amarrados empezó a darme de cinturonazos también en mis senos, como son mas sensibles se marcaban muy rápido los golpes del cinturón, me dio unos cuantos y después paró, como que se le había ocurrido una idea mejor.

Fue hacia su ropa que estaba tirada en el piso y no vi exactamente que sacó pero era un objeto pequeño y solo lo ví cuando lo puso frente a mí, era un encendedor, sin dudar lo encendió y empezó a quemarme mis pezones, veía un poco su cara y eso le causaba demasiado placer, le excitaba torturarme, yo por mi parte me dolía eso que me hacía pero no podía gritar ni llorar ni nada. Creo que se excedió un poco en quemármelos porque olía a carne quemada mis senos, daba ese olor. No se en que momento decidió que ya era suficiente tortura y se alejó.

Yo por fin pude sentir que mi cuerpo me empezaba a responde nuevamente porque movía mis manos y mis piernas, él debió de haberlo notado porque me dijo: ya te andas despertando puta, mejor acabo ya contigo para irme.

No supe exactamente que significaban esas palabras pero lo descubrí unos instantes después, en la misma posición en la que estaba así de perrito amarrada a la silla, se puso frente a mi yo levanté mi cabeza para voltear a verlo y justo en ese momento empezó a orinar en mi cuerpo y se reia a carcajadas, mientras sostenía en una de sus manos su celular y tomaba video de cómo orinaba mi cara y mi cuerpo, el muy idiota trataba de atinarme a mi cara y mas que nada a mi boca, yo aun no podía moverme bien y prácticamente quedé toda bañada.

Una ves que acabó de hacer eso, se empezó a vestir nuevamente y seguía riéndose supongo que por la manera tan golpeada y marcada que me había dejado, abrió la puerta y le gritó a mi amigo que fuera de inmediato, llegó mi amigo y le dijo: valió la pena el dinero que te di, esta muy buena la puta de tu amiga, me divertí mucho con ella, tal vez quieras llevarla a que la curen de las marcas que le hice y además que tome una pastilla de emergencia porque le dejé mis mecos dentro. Yo me iré en mi coche pero enseguida mando otro taxi, para que venga por ustedes y los lleve a su hotel.

Se despidió y mi amigo fue a desamarrarme con asco porque estaba bañada en su orina, yo ya podía hablar un poco y moverme más, incluso ponerme de pie. Me dijo mi amigo, no me odies Karen, todo el dinero que me dio el tipo te lo daré a ti, en serio. No sabía si odiarlo por prácticamente haberme vendido y prostituido o si agradecerle porque gracias a esa experiencia logré apreciar la excitación y lo rico que se siente el mezclar el placer y el dolor.

Como mi ropa estaba toda rota como pude con los pedazos de mi vestido me tapé mi vagina y mis senos y al poco tiempo vimos como se acercaban las luces de un coche y era un taxi, nos subimos y nos fuimos rumbo al hotel y en el camino concluí que ha sido hasta ese momento la experiencia más loca que haya experimentado.

Gracias por leerme y estén al pendiente para nuevos relatos y anécdotas mías, besos.