Un sueño sexy

Trabajamos juntos en una empresa de venta de muebles antiguos, mi amiga es una chica bella, de mediana estatura, ojos increíblemente hermosos.

Hola, quiero compartir mi relato con ustedes, y de paso permitirle que el personaje principal la lea.

Trabajamos juntos en una empresa de venta de muebles antiguos, mi amiga es una chica bella, de mediana estatura, ojos increíblemente hermosos, tiene un cuerpo exquisito, piernas hermosas, pechos medianos hermosos, unas nalgas redondas y firmes, en fin como me encantan. Lo que más me encanta de ella es que es una gran persona, me hace reír mucho y es una excelente y fiel amiga.

En una ocasión nos enviaron a una casa a evaluar unos muebles antiguos debido a que iban a vender esta casa y ambos fuímos a hacer el trabajo. Esta casa tenía dos pisos y un sótano que era donde reposaban los muebles. Los dueños solo nos entregaron las llaves de la casa y nos dejaron solos porque tenían compromisos que atender. Mi amiga vestía una blusa pegada y un pantalón de tela que debo reconocer que le quedaba super bien y mostraba sus bellas nalgas de las que he sido fanático siempre.

Pues bien nos dispusimos a trabajar, estábamos haciendo nuestras evaluaciones y mi amiga como de costumbre comenzó a relajear conmigo, es una chica muy divertida y hace de cualquier cosa un chiste. En momento se puso a brincar en los muebles que estábamos verificando, a lo que yo le dije que tuviera mucho cuidado ya que podía romperlos. En eso se colocó de espaldas hacia mi y me dijo que si yo pensaba que esa posición en la que ella estaba no era sensual, yo me quedé riéndome y le dije que si que se veía súper

Ella: Aja, te pillé me estás viendo las nalgas

Yo: No, no sólo veía

Ella: sí sí, me estás viendo las nalgas, yo pienso que a usted le gustan mis nalgas

Yo: Bueno, la verdad es que se te ven preciosas

Ella: Eso lo sé…jajaja

En eso me fui a cerrar la puerta del sótano porque la habíamos dejado abierta y cuando regresé me encontré con algo que nunca espere poder ver….ella se había quitado el pantalón y se había quedado con una tanga diminuta de satín rosado. No puedo describir lo que en ese momento me paso, pasaba por mi mente y me sucedía dentro de mis pantalones. Era lo más bello que había visto en mi vida, mi amiga con sus bellas pompas al aire, con su piel impecable, color y tamaño perfecto, una pequeña tira de tela dividía esas hermosas nalgas que me arrancaron todo tipo de suspiros.

Ella: Se me ven bonitas verdad…?

Yo: Si, no tengo palabras para decirte lo hermosas que son..

Ella: Oiga, las quiere tocar

Yo: Bueno, la verdad es no sólo quiero tocarlas, quisiera….

Ella: Bueno ya que está allí lo dejo que me haga un masaje.

A ella le encantan los masajes y sobre todo si son delicados y sensuales, sé que es algo que la mata, recuerden que somos amigos y sabemos casi todo el uno del otro.

Luego vi que se quitó la blusa y se colocó de espaldas yo comencé a tocar esa espalda bella que tenía y me propuse darle un rico masaje. No dejaba de contemplar su cuerpo, su bello cuerpo, en una ocasión me comentó que no le gustaba que la vieran desnuda (imagino que hablaba de su novio) porque a veces ella sentía que estaba un poco gordita y le daba pena. Pero no hasta como decimos nosotros en mi país, las llantitas se le veían muy bien. Proseguí a seguir con mi masaje por toda la espalda y bajaba hasta sus nalgas las tocaba y masajeaba y a ella parecía gustarle, llegó el momento que no aguante le besé la espalda y comencé a darle pequeños besos a los largo de su cuerpo y sus pompas y a ella le encantaba, solo suspiraba. Ella mantenía los ojos cerrados y yo lo único que pensaba era cambiar mis manos por la lengua, porque solo deseaba besarla y saborearla. De hecho eso fue lo que pasó una vez que comencé a besarle la espalda, comencé a bajar lentamente, tenía una piel de doncella, bajé hasta sus nalgas y comencé a besarla y besarlas. Rápidamente agarré la diminuta tanga que tenía y se la quité. Y seguí besándola y pasando mi lengua por todos lados. Por un momento sé que le dio pena porque la estaba besando por allá bajo pero después le dije que no se preocupara que ella olía delicioso y que si había algo que ella tenía que era muy cuidadosa con su higiene personal. No quedó ningún solo lugar sin que la hubiera besado, tenia unos vellos hermosos y ricos, algo que me mata y me acelera el corazón.

Ella: No te puedes quejar, te has dado el gusto

Yo: Quiero seguir besándote, eres lo máximo….

Ella: Yo no tengo ningún problema con eso, bésame por donde se te ocurra.

Al escuchar esto que fue dinamita para mis oídos, le pedí que se volteara, quedando su bella entrepierna a mi disposición, yo siempre de amigos la molestaba y le preguntaba y le llamaba a su parte "el gatito". De verdad que era como un gatito,,,,,no pude aguantar y me dispuse a proporcionarle las delicias del sexo oral…..Me propuse hacer que ella se viniera con mi lengua y lo conseguí varias veces. Besarla, chuparla y hacerla venir me volvía loco, tanto que tuve una erección incontrolable, sin embargo no intenté hacerle el amor, ya que no me atrevía a insinuarle eso con temor a que se enojara conmigo..

Estaba agradecido de que me hubiese dado la oportunidad de hacerle el amor con la boca que es lo que mas me gusta, y no pretendía dañar ese momento.

Me dedique también a chupar sus lindos senos, que belleza de senos, ni grandes ni pequeños, pero deliciosos, su gatito, sus pompas, todo de ella me encantaba. La verdad se me secó la lengua de tanto usarla.

Una vez que terminó, ella se vistió y rápidamente salimos del sótano, hicimos la evaluación y salimos como si no hubiese pasado nada.

Cuando llegué a mi casa, corrí hacia el baño y me masturbé en nombre de mi amiga y lo disfruté tanto que no lo puedo describir.

La parte mala de este relato es que todo fue un sueño. Es cierto mi amiga trabaja conmigo, pero no juntos en áreas diferentes. Pero tengo la duda y estoy casi seguro de que en realidad es tan excitante como en el sueño.