Un simple error puede cambiarte la vida

Hola a todos, ante todos me presento; soy Alejo, tengo 21 años y esta es mi historia que me paso cuando tenia 18 años, yo soy de las afueras de la ciudad de Buenos Aires, cuando terminé el colegio secundario hice lo que muchos chicos del interior hacen, me vine a buenos aires.

Aquí tenia pensado estudiar y obviamente conseguirme un trabajo para mantenerme, por el alojamiento no debía preocuparme porque tenía la suerte de contar con una tía que me cedió su departamento para que yo me hospedase, lindo departamento, linda ubicación pleno Palermo.

Como estaba solo hacia lo que quería, hasta que un día mi tía me llama para decirme que mi primo, o sea su hijo se había divorciado y que no tenia donde ir por lo que iba a necesitar el departamento, que mala noticia, se me acababa la vida de arriba, ahora si tenia que preocuparme porque necesitaba un lugar para alquilar. Mi tía me permitió estar un tiempito extra mientras yo conseguía algo.

Yo tenia un trabajo part-time que me permitía estudiar también. Lo único es que volvía tarde como las 23 horas al depto.

Un miércoles llego al edificio subo por el ascensor hasta el piso 6 en donde era el depto cuando me dispongo a entrar siento ruido en el interior, se me puso la piel de gallina, un escalofrío me recorrió el cuerpo, ya que se me vino a la cabeza los chismes que se oían que decían que en el edificio de enfrente habían entrado a robar en varios deptos en los cuales los dueños no se encontraban. Entonces antes de entrar tome un florero que había sobre una mesa en el pasillo del edificio y haciendo el menor ruido posible entre al depto lo que mas temía estaba pasando, alguien se metió en casa, vi la sombra de un hombre medio corpulento que estaba de espalda y ahí no mas sin mas ni menos le estampé el florero en la cabeza, el tipo cayo al piso instantáneamente luego de haber pegado un grito ensordecedor, rápidamente encendí la luz y lo vi... intentando recuperarse parecía ebrio, pero repentinamente volvió en si y me tomo del cuello me arrastró contra una pared y me elevó medio metro del suelo, ahora si que no sabía que hacer, me la había dado de macho entrando, en lugar de haber salido corriendo, ya me costaba respirar cuando el tipo me bajo dejándome apoyar mis pies en el suelo, lo primero que hice fue intentar reponerme y tomar aire pero cuando estaba por terminar de recuperarme veo venir una mano derecha cerrada, era un puño... después no lo vi mas porque se me oscureció todo y empecé a sentir un tremendo dolor en mi rostro me había puesto una piña, cuando la segunda no se hizo esperar al medio de mi vientre, seguida por una tercera, una cuarta, una quinta y una sexta, no aguantaba más el dolor, cuando siento que me toman por la espalda del cuello de mi remera, y de mi cinturón y me arrojan contra la pared.

NO RECUERDO MAS NADA...

No sé cuanto tiempo habrá pasado pero luego me desperté sintiendo frío en el cuerpo. No se que paso pero me encontraba totalmente dolorido no podía moverme sentía que el cuerpo no respondía a mis estímulos que quería levantarse para ver que me había pasado, para mi sorpresa, me encuentro desnudo únicamente con mis boxer puestos, pero los mismos muy destrozados, estirados, eso no fue todo, descubrí también porque no podía moverme, estaba atado de pies y manos a la cama en la cual yo por lo general lo que hacía era dormir solo o acompañado de alguno que otro muchacho... intente desesperadamente escapar, pero me resultaba imposible ese hombre o esos hombres ya que no sabia cuantos eran habían hecho un trabajo muy delicado ya que los nudos que me tomaban estaban muy bien hechos ya que no podía por mas que intentase moverme y zafar de eso.

Tenia también una mordaza que me impedía hablar por lo que se hacia imposible que yo pidiera ayuda, cualquier intento por salir de esa situación era en vano. Por lo que podía suponer estaba solo en el depto ya que en mi desesperación por escapar generaba un montón de ruidos con la cama y el piso las paredes y cualquier cosa que pudiera estar en contacto con la cama y nadie acudía al dormitorio para ver lo que sucedía, hasta que no se bien cuanto tiempo después yo había desistido con mis intentos y me propuse descansar un poco hasta que el dolor que sentía en mi cuerpo me gano y no se si me dormí o desmaye pero quede inmóvil un tiempo hasta que siento en la puerta de entrada como que alguien quiere abrir y lo hace.

Obviamente tenia las llaves porque entró enseguida y se dirigió al dormitorio en el que me encontraba, no se si por miedo o que, me hice el dormido, desmayado o.. muerto solo se que no quería recibir mas golpes.

--Esto de hacerse el dormido lo aprendí de chico ya que lo hacia para que mis padres cuando me mandaban a dormir siesta me vieran dormido, y luego cuando ellos hacían lo mismo yo me escapaba y me iba con los chicos del pueblo a jugar.—Ahí lo vi, entro mi agresor, eso suponía yo, ya que solo lo vi de espalda, de frente mucho no lo había visto porque me tapo los ojos con su paliza. Era sin dudas fuerte, tenia una altura de aproximadamente 1.85 mts. Fornido calculo que unos 95 kg. tez blanca Pelo castaño corto, y una barbita candado, sino fuera por lo que es ese tipo y lo que me hizo seguramente me lo hubiera llevado a la cama para hacerle maravillas, pero sinceramente estaba muy sensible y conmocionado, como para pensar en tener sexo.

Con los ojos entre abiertos vi que el hombre se acercó, me miro un poco y dio media vuelta para retirarse del dormitorio; ahí pude ver que ese corpulento tenía en la cabeza una venda blanca y la camisa manchada con sangre, sin duda pude ver que ese era mi agresor... o al que yo le partí el florero encima.... pero no, ese hombre pegó media vuelta y abrió el placard, ahí mi corazón se me salía, yo guardaba el dinero en uno de los cajones del placard, iba a ser testigo del robo, intentaba serenarme pero me era imposible, dudaba entre reaccionar o seguir haciéndome el dormido, pero vi que el tipo ese se saca su camisa ensangrentada, y saca del placard una remera mía y se la pone, era obvio que no tenia la misma contextura física que yo, intenta ponérsela y siento un juuiiik, le iba chica mi ropa, sin duda, pero siguió y se la dejo puesta. le iba bien apretada lo que marcaba mucho sus formas, claro que esa persona se encargaba de cuidar su físico ya que estaba en buena forma...tenia que sacarlo de mi mente era horrible que la persona que me había dejado en estas condiciones, me empezara a atraer.

Pienso en otra cosa también para calmarme, recuerdo mi infancia mis viajes con la familia... TAC.

Cerro la puerta del dormitorio, abrí los ojos y examinaba todo, no podía entender que era lo que pasaba, quien era ese extraño, parecía instalarse y no irse mas, siento que prende la tele y al rato vuelve a aparecer, trae algo en sus manos, no se lo que es, pero me empece a poner cada vez mas nervioso, se aceraba mas y mas y me observaba detenidamente, por mi bien, eso creo cerre los ojos.

Parece que es un poco torpe y no lo digo por los golpes que me dio, sino porque se llevo por delante algo y cayó al piso insultando, rompió lo que tenia en la mano, aproveché para espiar y pude ver que era un retrato mío lo que traía en sus manos y que cuando cayó rompió el vidrio que tenia. Ahora si me quería morir, traía un trozo de vidrio y mi foto en sus manos, cuando lo oigo decir... ""¡¡¡ay primito!!!, que idiota sos, que bienvenida me diste"" me quedé helado, era mi primo, el divorciado que venia a ocupar el departamento y yo lo habia recibido con un golpe en la cabeza.

Y bien escuche esto, abrí los ojos, para mi sorpresa mi primo Lorenzo -así se llama- se había sentado en el sillón al lado de la cama y me miro e hizo una sonrisa.

-hola! Alejo, verdad?

-Si, respondí. -Soy tu primo -me dijo-

Asunto solucionado, fue todo una confusión, te pido disculpas, no fue esa mi intención, no sabia que estabas aquí, yo me voy a buscar otro lugar para vivir y te dejo tu casa para que vivas, ahora desátame que quiero darme una ducha y arreglarme y un poco.

Che che che, ¿que te pensas vos?, después de cómo me rompiste la cabeza. ¿pensas que esto te va a ser gratis? Vos vas a hacer lo que yo diga y me vas a respetar... ¿me entendiste?

Eso a mi no me gusto nada, sabía que las cosas no estaban bien, pero ni lo conocía a mi primo, creo que fueron tres veces que lo vi y no sabía que clase de persona era.

Este misterio se va a ir revelando, y juntos vamos a conocer a mi primo Lorenzo.

Este es mi primer relato, si alguien quiere ayudarme a seguirlo y quiere ver plasmadas en el sus fantasías, que se ponga en contacto conmigo, así juntos vamos dando sentido a esta historia de sexo, intriga, suspenso y.. ¿Amor?

Escríbanme lo que quieran ver o contar en esta historia que empieza con mi primo y quien sabe con quien terminara.

Un beso a todos y espero que les guste!!