Un polvazo especial

Cómo la vida misma te trae lo más bonito y lo más feo que le puede pasar a un gay.

Tenía veintidós años, toda la vida por delante, un mundo prometedor, una familia que me quería, unos amigos que me apreciaban y amaban de verdad y una pareja que se desvivía por mi, y ahora casi que todo aquello que me había forjado con los años era un tremendo final oscuro y tétrico.

Mi homosexualidad era bien conocida por todos desde bien joven, creo que con dieciséis años ya lo dije en mi casa, tenía claro que a mí me gustaban los chicos y por supuesto que no fue nada fácil aquel trámite, tanto para mí , como para mi familia, pero donde existe amor y cariño, todo tiene solución.

Durante algunos años fui la marica loca desfogada del instituto, que pillaba a cualquier tío y se la chupaba o me dejaba follar. Eso no quiere decir que fuera afeminado ni nada por el estilo, sin prejuicios contra ellos, simplemente quería describir mi locura sexual durante el año de descubrimiento de mi homosexualidad. Me tiré a escondidas a media clase del instituto o por lo menos sus pollas pasaron por mi boca, pero desde luego siempre a escondidas, su máscunilidad y su heterosexualidad no debía ponerse en riesgo, así que todo lo hacíamos con escrupulosa discreción.

Aquella época de mi vida fue bestial, no puedo deciros que este orgulloso o tan siquiera que me arrepienta, lo que si que puedo contaros es que lo disfruté a tope. Pero como todo, son etapas que suelen durar un tiempo , para luego madurar y volverte mucho más tranquilo. Y eso fue lo que me sucedió a mi. Después de aquella fogosidad, empezé a sentar cabeza, me centre en mis estudios e hice verdaderos amigos con los que salía de fiesta habitualmente, mi familia por fin me vio mucho más centrado y se tranquilizaron, pero aún así mi vida sexual era de escándalo, todos los fines de semana los pasaba en casa de algún maromo distinto.

Yo era un tío fuerte , curtido y con un cuerpo trabajado en el gimnasio, nunca tuve problemas de ligar con nadie, nunca había sufrido un rechazo, era yo el que los tenía que espantar. Pero todo cambio a partir de la aparición de Víctor. Lo conocí en una fiesta de cumpleaños de mi amiga del alma Sofía, nunca lo había visto antes y era primo de un conocido, enseguida clave mí vista en el y toda la noche fue mi objetivo, pero en realidad lo tenía bastante crudo ya que gracias a las averiguaciones de Sofía pude saber que era completamente hetero y que acababa de salir de una relación con una chica de varios años.

Víctor era un tipo alto, guapo, pelo rizado y muy moreno, tenía unos labios tremendamente carnosos y desprendía belleza. Aún sabiendo de su heterosexualidad, convencí a Sofía para que me lo presentará y tomáramos una copa con el.....

  • hola....creo que eres el primo de Rubén no?

  • si, siiiii.....soy Víctor tu?

  • yo soy Sofi y este es Pedro mi mejor amigo. ( Víctor le dio dos besos a Sofía y chocó el puño conmigo).

  • encantado Víctor.....( Dijimos al unísono mi amiga y yo)

  • bueno te lo pasas bien o que?

  • la verdad es que no conozco a mucha gente, pero hay muy buen ambiente.

  • bueno perdonar yo os dejo. Tengo que ir a hacer un pissss....jejeje.

Sofía sutilmente se marchó dejándonos a solas. Víctor tenía un cubata en su mano y sorbía tragos pequeños que humedecían esos hermosos labios, me di cuenta de sus ojos verdes, y su mirada cautivadora, estaba completamente abducido por aquel chaval, no podía dejar de mirarlo.....

  • ehyyyy......Pedro te pasa algo?

  • no......nooooo.....disculpa estaba pensando en cosas tontas. Eres de aquí de la ciudad?

  • si.....claro.....pero soy justo del otro lado, de la zona norte. Nunca había salido por aquí.

  • ahhhhh....entiendo. Quizás por eso nunca coincidimos?

  • bueno yo estoy aquí por mi primo, la verdad no iba a salir, estoy de bajón por una relación terminada. Pero me convenció y aquí estoy.

  • pues me alegro de que así haya sido, por lo menos te he podido conocer.

  • bueno......jajaja .....mejor hubiera sido que hubieras conocido a una de todas estas pivas que hay por aquí, seguro.....además no creo que sea la felicidad implícita en estos momentos.

  • bueno todos pasamos por momentos duros y tenemos que apoyarnos en los demás. Y con lo que respecta a las chicas, no creo que sean de mi atracción.

  • eres.....bueno, perdona, que eres homosexual?

  • si exacto.....espero no hacerte sentir cohibido.

  • no.....nooooo.....para nada solo un poco traspuesto por mis comentarios.

  • era lo lógico, soy un chico y lo natural era que buscara chica.

  • jajajaja, pues si, pero hoy ya no todo es así.

  • desde luego, en la diversidad de los gustos está la libertad.

  • claro....

  • quieres que nos sentemos en aquella mesa del Rincón.

  • buenooooo....pero no sé si voy a ser tu mejor compañía, por lo menos déjame pedirte algo.

  • valeeeee....un gin tonic.

  • ok, me pediré otro.

Cuando nos sirvieron las bebidas, ambos nos fuimos a aquel rincón , nos sentamos en el cómodo sofá que rodeaba la mesa y estuvimos toda la noche hablando, sobre todo de su relación y porque habían roto, era la típica noche muermo en la que te toca consolar a un buen amigo, pero en aquella ocasión no era mi amigo y tan siquiera hubiera cambiado un segundo de aquella noche junto a Víctor por estar de fiesta.

Cuando al fin tuvimos que despedirnos, Víctor se atrevió a darme un abrazo al cual yo correspondí, me dio las gracias por soportarlo y después se giró para marcharse....

  • ehyyyyy......Víctor. si te apetece quedarte mi teléfono por si quieres charlar en otro momento?

  • ahhhhh.....si claro, será estupendo.

  • toma mi teléfono y marca tu número, así lo tendremos los dos.

  • ok.....ya está, perfecto. Te llamaré Pedro. Xaooooo.

  • xaoooooo.

Me fui de allí con la idea clara de que nunca más iba a volver a ver a Víctor en mi vida, sabía que había sido su pilar de aquella noche en donde llorar sus penas, pero casi una semana después de aquel primer encuentro mi teléfono reflejo su nombre y la música de mi configuración empezó a sonar. Era Víctor, me quedé asombrado y enseguida pille la llamada.

  • ehyyyyyy hola Víctor.....que te cuentas?

  • hola Pedro, cómo estás?

  • bien , biennnnn.....y tu?

  • bien la verdad.....ya estoy mucho mejor. Lo mío por fin se rompió del todo y ahora soy todo libre jajaja

  • y como lo llevas?

  • perfecto, lo pasé un poco mal, pero me he dicho que la vida es corta y hay que disfrutarla.

  • jajajaja, así es amigo. Bueno y que puedo hacer por ti?

  • bueno después de dejarlo con mi ex, el grupo de amigos era de ella y la verdad, pensé en ti para salir a tomar algo.

  • vayaaaa....pues claro. Pon día, hora y lugar y allí estaré.

Víctor y yo nos citamos en una zona de ocio donde no solía ir la gente con la que ambos solíamos salir, entramos a un disco- pub y ambos estuvimos bebiendo, bailando y riéndonos durante parte de la noche. Después caímos rendidos en una de las zonas más alejadas de la pista de baile y allí empezamos a relajarnos....

  • joderrrrr tío que marcha llevas, no sé si voy a poder seguirte.

  • jajajaja, que va tío, te seguía a ti, estaba deseando que pararas.

  • eres un cabron Pedro...tienes algo que incita a pasártelo bien.

  • bueno cabron no se.....maricon mucho jajaja.

  • jajajaja, perdona.

  • no tienes que disculparte es la realidad. Porque has salido conmigo esta noche Víctor?

  • no se, lo pasé bien la otra vez contigo y la verdad tenía ganas de verte, y tu a mi?

  • pues la verdad es que fuiste un muermo, pero si, también tenía ganas de verte.

Los dos nos quedamos mirándonos sin decir nada, su mano fue a coger el vaso de la mesa y yo aproveche para sutilmente agarrar muy tímidamente con mis dedos la suya y acariciarle suavemente con delicadeza, el tembló y yo me extremeci con aquel contacto, agachó su cabeza y después la levantó....

  • creo que será mejor que nos vayamos Pedro.

  • valeeeee....como quieras.

Nos levantamos salimos de allí y el pillo un taxi para irse a casa, tan siquiera quiso subir a mi coche y que lo llevará. Empecé a sospechar que lo había perdido en aquel instante, no debí hacer aquello,

Víctor era hetero y había confiado en mi, mientras que yo intenté seducirlo a sabiendas de eso.

Habían pasado varios meses sin que hubiera sabido nada de él, y un día mi teléfono volvió a sonar, era el de nuevo, supe en ese instante que sentía algo por mi, que estaba confundido y que yo tenía que ser muy sutil. Quería que nos viéramos y yo le propuse venir a mi casa ese sábado, mis padres no estaban y podíamos cenar allí y ver una película. Víctor acepto gustoso, así que quedamos a una hora y allí que se presentó puntualmente.

Esa noche lo noté bastante nervioso, ninguno quiso hablar de lo sucedido aquel día, la cena transcurrió divertida contándonos anécdotas, y después nos sentamos en mi sofá a ver una peli. Los dos estábamos fijos a la pantalla, pero ninguno hubiera podido decirle al otro de que iba la película, nuestras mentes estaban imaginándose otra cosa y tenía claro que sí no era yo el que lo intentara, el nunca se iba a lanzar.

  • joderrr...no tienes fresco Víctor.

  • un poco si, la verdad.

  • espera traigo una manta.

  • valeeeee.

Cuando volví, la extendí, era pequeña y no ocupaba todo el sofá, por lo que si nos poníamos cada uno a un extremo no nos taparía....

  • no llega para los dos tiooo.

  • ya veo.....puedo arrimarme a ti si quieres.

  • claro....por qué no?

  • vale, espera.

Me senté junto a él, y heche la manta sobre nosotros, después nos acomodamos y seguimos viendo la película. Sólo había pasado unos minutos cuando sentí el roce de su mano con la mía, las teníamos pegadas en uno con el otro, me arme de valor y puse la mía sobre la suya, espere su reacción y no hizo nada , así que me decidí a apretarla junto a la mía, fue entonces cuando él también reaccionó y note su presión, simultáneamente giramos las cabezas, le sonreí tiernamente y después lo hizo el.

No pude aguantar más, saque una de mis manos que acaricio su mejilla y con mis dedos toque sus labios muy despacio, el se retorcio sobre mi mano buscando mi contacto y cerró los ojos, después me acerque a él muy poco a poco y mi boca se posó sobre la suya dándole un pico muy suave, espere su reacción y al ver que seguía inmóvil, volví a besarlo, esta vez mucho más contundentemente, note como el me besaba y ambos empezamos a abrir nuestras bocas dejándonos llevar sutilmente, nunca con nadie había sentido esa sensación tan especial, todo mi vello se erizo y solo quería seguir disfrutando de sus labios, los dos nos vimos inmersos en una ráfaga de profundos besos en donde nuestras lenguas se enlazaban húmedas, nuestras manos empezaron a reaccionar con rapidez y poco a poco fuimos descubriendo nuestros cuerpos desnudos. El frío se había exfumado, con el solo el contacto de piel con piel hacia que la temperatura nuestra fuera la ideal. El acariciaba mi espalda , mientras mi boca chupeteaba su cuello y los lóbulos de su oreja, Víctor vibraba , se estremecia y gemía despacito, mis manos acariciaron sus pechos mientras mi boca siguió besándolo , nuestros cuerpos se fundían en uno, note su pene erecto rozar contra el mío, su boca deslizándose ahora por mi cuello, sentía escalofríos de placer, lo presionaba fuertemente contra mi, empezamos una lucha fiera por ver quién besaba al otro por cada parte del cuerpo, mis pezones, mi vientre , mis hombros, sus manos acariciándome, me sentía en una nube de placer que nadie hasta aquel día había conseguido hacérmelo sentir. Poco a poco los besos fueron siendo insuficientes para la tremenda calentura que llevábamos, me lancé sin rodeos sobre su pene, lo agarre con una mano y lamí su prepucio, sus manos se agarraron y estrujaron mis hombros , lo noté estremecerse y como gemía de gusto con cada lameton mío, su polla estaba dura como una roca, recta, gruesa , con los huevos depilados, los agarre y másajee con una mano , mientras mi boca empezó a tragarse su pene, su vientre se contrajo y sus manos guiaron mi felación entre jadeos y suspiros de Víctor , hasta que el vio que no aguantaba más y estiró de mi para que parara. Entonces fue el, quien me empujó con una mano y tomo la iniciativa, me volteo, agarró mi pene y sin titubear empezó a lamerme el prepucio, sentí morirme, pegue un gran suspiro, acaricie su pelo rizado y lo deje hacerme una de las felaciones más ricas de las que había disfrutado nunca, aquello lo viví mucho más adentro, mucho mas sincero, con cariño, con amor, cosa que nunca había experimentado.

Los dos disfrutamos de aquel momento chupandonos las pollas, pero yo quería sentirlo dentro de mi, quería que me hiciera el amor, no que me follara. Lo lleve de la mano a mi cuarto, los dos desnudos, el me seguía sin resistirse, allí nos tumbamos y seguimos jugando uno con el otro, me arrime sutilmente a su oreja y le dije que quería que me lo hiciera, el se quedó en un principio parado, pero después empezó a acariciar mis nalgas, a apretarlas sin dejar de besarme, note sus dedos meterse entre mis cachetes y como sus llenas rozaban mi ano haciendo que mi culito palpitara de placer. Víctor no era experto en aquello, pero yo fui un poco su guía, le humedecí sus dedos con mi saliba, le hice que me los mentira muy despacio en mi trasero y que jugará con ellos, seguíamos jugando, acariciandonos y besándonos cariñosamente mientras tanto. Mi trasero de habia dilatado, dispuesto a que Víctor me posellera, se puso sobre mi y encogí mis piernas abriendolas para que su pelvis pudiera acercarse, colocó su pene en mi ano y poco a poco fue presionando y con la ayuda de mi mano que lo dirigió, fue entrandome con suavidad. Víctor estaba dentro de mi, empecé a jadear y a pedirle que se moviera, los dos empezamos movimientos suaves donde su polla entraba y salía de mi, ya solo suspirabamos, jadeabamos y cuándo podíamos nos besabamos. Estuvimos así un buen rato, el placer era bestial, me sentía querido , amado, no follado y eso me hacía feliz y gozar como nunca.

Me di la vuelta , me puse en posición de perrito, volvió a penetrarme y empezó a sacudir su cintura contra mi, su polla entraba y salía más deprisa, se tumbó sobre mi espalda y con su boca besaba mi cuello y mi boca cuando podía girarme para buscarlo, sentí como suspiraba , jadeaba y se volvía loco moviéndose contra mi , me corrí en ese instante de placer sin tocarme, nunca había sentido esa sensación follando, era especial. Note como Víctor empezó a convulsionar y besarme rapidamente con lujuria, sabía que iba a correrse y así sucedió, quiso hacerlo fuera, pero no lo deje y su semen inundó mi trasero entre mordiscos, suspiros y jadeos de placer por parte de ambos.

Estábamos agotados, casi que asfixiados, nos tumbamos juntos , abrazados y besándonos. No queríamos terminar, de hecho continuamos hasta volver a estar a punto y volvimos a hacer el amor sin descanso. Aquella noche fue enorme, sentí lo que nunca había sentido y fue porque había amor en aquel momento tan bonito.

A la mañana siguiente Víctor se marchó entre besos y caricias, diciéndonos lo mucho que nos queríamos, no fue fácil salir del armario en nuestra relación, pero lo conseguimos y éramos las personas más felices del mundo , sin escondernos ante nadie y disfrutando de nuestro amor a la vista de la gente, era tan feliz.

Habían pasado seis maravillosos meses juntos. Un día empecé a sentirme mal, no sabía lo que me pasaba, estaba cansado , no acababa de recuperarme y tenía décimas de fiebre y escalofríos. Fui a un médico y me recomendó hacerme la prueba del VIH, yo no dije nada a Víctor y cuando fui a coger el resultado, mi mundo se vino a bajo, era positivo, me asusté muchísimo, tenia miedo a morirme, pero lo que más me preocupaba era haber contagiado a Víctor.

El médico me tranquilizó, me dijo que si me trataba y seguía sus indicaciones podría llevar una vida normal, sería difícil, tendría que seguir una serie de revisiones, pero nunca pensara en que me iba a morir. Pero me atormentaba el como decírselo a Víctor.

Esa misma tarde, lo llame para tomarnos algo, y sin muchos rodeos le comunique la noticia, se quedó blanco, se puso a llorar,

intente calmarlo y le dije que tendría que hacerse la prueba, le indique dónde y con quién hablar, le dije que iría con el, pero se levantó salió furioso de allí y me grito que lo olvidará que no quería saber nada de mí.

Los siguientes días y semanas fueron lo peor para mí, quería morirme, no sabía nada de Víctor, tan siquiera si se había echo la prueba. No conseguía hablar con el, lloraba todo el día, quería dejar de vivir, un día un excueto mensaje me ponía, " soy negativo, olvidame". Insistí en hablar con el, me bloqueó en todas las redes sociales y hoy os cuento esto desde una cama de un hospital, en donde me recupero de un intento de suicidio por perder a la persona que más quería por mi enfermedad.

Alguien llama a la puerta.....esperar un segundo....

  • adelante puedes pasar.

  • hola.

  • hola tio.....joderrrr.....que haces aquí?

  • te he hechado mucho de menos Pedro. Perdoname por Dios.

  • que quieres?

  • a ti......, he sido un niño, me he asustado, no sabía cómo afrontar esto. He ido a un psicólogo, te quiero.....te quiero tío, y juntos lo vamos a superar.

  • estás seguro Víctor? Estoy enfermo, y es para siempre.

  • y yo te quiero a ti para siempre, no quiero vivir ni un segundo más sin ti. Casi me muero cuando me dijeron que habías hecho esto, nunca más por favor, nunca más.

  • ven aquí.

Los dos nos hemos abrazado, nos besamos como locos, nos buscamos, no acariciamos , no queremos soltarnos, nos decimos cuanto nos queremos......soy feliz , somos felices y juntos seguro que vamos a superar todas las piedras que está enfermedad quiera ponernos, tanto en lo físico, como en el estigma que socialmente pueda crear ser VIH en estos momentos. QUEREMOS SER FELICES.

HOY....... BUENO AYER FUE EL DIA MUNDIAL DE LA LUCHA CONTRA EL SIDA. DESDE AQUI UN GUIÑO Y SOLO DECIR QUE SE PUEDE VIVIR SIENDO VIH, LO PEOR ES SENTIRSE RECHAZADO POR EL SIMPLE HECHO DE TENER EL VIRUS. NO ES UNA ENFERMEDAD DE DROGATAS, DE GAYS, DE PUTAS, NI TAN SIQUIERA DE HETEROS, ES UNA ENFERMEDAD QUE CUALQUIERA PUEDE PILLAR SI NO SE VA CON CUIDADO., POR ESO PROTEGETE, HAZTE LAS PRUEBAS Y SOBRE TODO DISFRUTA DEL SEXO SEGURO. UN VIH TRATADO CON CARGA VIRAL INDETECTABLE, DEBEIS SABER QUE NO TRASMITE LA ENFERMEDAD Y ES SEGURO TENER RELACIONES CON EL. NO AL ESTIGMA PIR FAVOR.

Bueno y quería hacer este homenaje a la gente que vive con VIH y tienen que esconder su enfermedad, como si fueran asesinos. Un besazo a todos y podéis comentar este relato un poco especial o bien por todorelatos o por mi Instagram, vlcpedro22 😘😘♥️♥️♥️♥️♥️. Se os quiere.