UN PADRE AFORTUNADO segunda parte
La noche que cambiaría la vida de toda la familia...
El abogado Javier Fernandez habia escogido aquella profesion por tradicion familiar, su abuelo y padre, habian sido abogados de prestigio y renombre, el habia seguido el legado y habia amasado una coniderable fortuna y un gran respeto.
Las mujeres siempre fueron su debilidad, le habia sido infiel a su esposa numerosas ocasiones, era un avido frecuentador de prostitutas caras, mientras mas viejo se hacia, mas enloquecia por las jovencitas.
De ahi que aquel dia que esas dos bellezas que eran las hijas de Raul habia entrado a su oficina, su vida se habia perturbado en gran manera, su mente estaba concentrada en esas potables chiquillas que todo hombre quisiera tener en sus sabanas.
Y valiendose de aquellas artimañas que los abogados saben hacer muy bien, habia logrado en cuestion de semanas estar muy cerca de poder cogerselas como tanto añoraba.
Volvamos al dia en que se sello el trato, el abogado se sento en el sofa esperando mientras Raul se sento enfrente de el lanzandole miradas de desprecio en todo momento o ¿eran de envidia?.
Pasaron como 15 minutos y la ansiedad devoraba a ambos hombres, en ese instante los dos se quedaron con la boca abierta despues de presenciar un hecho insolito, ambas chicas bajaban por la escalera, en un apoteosis de belleza sin igual ambas se habian arreglado para la ocasion y lucian mas hermosas y deseables que nunca.
Lily vestia unos leggings negros super ajustados que resaltaban sus femeninas piernas y su lindo trasero, blusa verde pero en cambio Miranda estaba para dar infartos usaba aquella memorable noche una blusa pegada a la piel y una falda negra muy alta que dejaban ver casi en su totalidad ese par de piernas maravillosas que poseia, las dos chicas estaba listas como para un desfile de modas,al abogado se le caia la baba de ver esto.
Raul se sentia igual o mas perturbado que el abogado, sabia que sus hijas eran hermosas, pero aquella noche habian exagerado, sin darse cuenta se le habia puesto la verga dura de ver como el miserable del abogado iba a gozar de esos suculentos manjares.
Finalmente para romper el hielo del momento, Lily tomo la mano del abogado y le dijo
-Acabemos con esto de una buena vez-, tomo al abogado de la mano y lo llevo a hasta su recamara, Raul estaba palido sabiendo que ya nada ni nadie podria impedir que sus adoradas hijas se acuesten con aquel repulsivo viejo.
Sabiendo que su hermana Miranda no tenia ninguna experiencia, Lily habia planeado muy bien las cosas, ella seria la primera en tener sexo con el abogado, de todas maneras en los dias previos ella la habia entrenado muy bien.
La peculiar pareja de amantes, subio las escaleras rumbo al dormitorio de Lily, Raul se quedo en el sofa sintiendose el mas miserable de los fracasados, estaba apunto de estallar en llanto, cuando sintio que su hija Miranda le dio un calido abrazo al tiempo que le decia.
-tranquilo papi, esto sera muy rapido-, y todo volver a ser como antes-
-no mi amor, esto no puede estar sucediendo, ustedes no merecen tener un padre como yo que con sus errores las haya llevado a algo tan degradante-
Raul lloraba como un niño, mientras su hija trataba de consolarlo, en ese instante fueron interrumpidos por ruidos en el domitorio de Lily.
Efectivamente en aquel cuarto pasaba dos cosas muy extremas, por un lado una bella y avergonzada jovencita haciendo esfuerzos sobrehumanos todo en beneficio de sus seres queridos y por otro lado, un viejo dandose el mayor gusto de su vida, a estar cerca de culearse semejante belleza.
Y despues de pagar la altisima suma de dinero por la hipoteca de la familia Gonzalez, el abogado estaba dispuesto a disfrutar segundo a segundo de aquella noche, Raul quien ya se habia tranqulizado un poco, se moria de ganas de presenciarlo todo, pero no como un padre angustiado, sino por por la curiosidad de ver como se desempeñaba su hermosa hija mayor, pero sin embargo no tuvo las agallas de hacerlo, por otro lado Miranda se puso los audifonos y se puso a escuchar musica a todo volumen para olvidarse de lo que pasaba en el cuarto de su hermana.
Lily quien ya habia tenido sexo varias veces con su novio, se sentia tan avergonzada y timida como la primera vez, pero saber que lo hacia por el bien de sus seres queridos y sumado al recuerdo de su difunta madre le dio valor, se quedo parada viendo al enorme espejo del cuarto, y dejo el ruin viejo haga lo que quiera con ella.
El abogado no perdio ni un minuto de tiempo, entendio la actitud de Lily, y empezo a desnudarse por completo, y rodeo con sus asperas manos la cintura de la chica, dandole un beso en la mejilla, quem Lily recibio con repulsion, el viejo veia con morbo ese cuerpo tan exquisito que estaba a segundos de ser explorado en su totalidad.
-tranquila mamacita, me portare como todo un caballero contigo, ya veras que hasta lo disfrutaras- le decia el miserable abogado al oido a la muchacha que hacia esfuerzos para no llorar.
El viejo acaricaba las piernas de Lily por encima de la delgada tela de los pantalones leggins que usaba esa noche, no desperdicio la oportunidad que poder tocar el culo de la chica todo lo que quizo, tal como lo soño.
Pero el abogado era un experto en las artes amatorias, y se dio cuenta de que la joven no estaba en lo absoluto relajada, y eso a el no le gustaba, el no queria forzarlas a nada, era de aquellos machos que les gustaba oir a sus mujeres cuanto lo estaban gozando, y que los disfruten tanto como el.
Lentamente el viejo empezo a bajarle el pantalon a Lily, dejandola solo con la blusa y una diminuta tanga blanca, esta vision le puso la verga mas dura que nunca, y considero que su momento habia llegado
Lily parecia una muñeca sin voluntad, parecia que estaba drogada, el abogado la acosto en su cama, esa misma cama donde tuvo su primera vez con Ignacio, donde le contaba sus secretos a Miranda, y donde todas las noches escribia en su diario, las vivencias del dia a dia, el viejo le levanto la blusa dejando sus pequeños tetas al descubierto, y empezo a lamerlos con desesperacion, succionaba como si la vida se le fuera en ello.
El abogado disfrutaba cada microsegundo del trato al que habia llegado con Raul, ya excitado al maximo besaba con pasion desmedida cada rincon del hermoso cuerpo de la jovencita, que solo se limito a cerrar los ojos esperando que todo acabe pronto.
-Ponte en 4 patas cariño- le dijo el viejo a Lily, quien sabia de las condiciones que su papa habia puesto donde prohibia completamente el sexo anal.
-no eso no, olvidelo-
-tranquila muñeca aqui no pasara nada que no quieras- le dijo el viejo tranqulizando a la muchacha, sin embargo el queria penetrarla en esa postura porque habia fantaseado con ello desde que la conocio.
Lily obedecio sin chistar, completamente desnuda, se puso en 4 patas con, las manos agarrados a la cama, el viejo enloquecia al ver ese maravillosos espectaculo que le ofrecia esa postura de la joven, podia ver su vagina en todo su esplendor era tan hermosa como siempre imagino,rosada y completamente depilada como a el le gustaban.
El viejo estaba decidido a que Lily lo disfrute tanto como el, asi que de inmediato se puso a la tarea de lamer la vulva de la muchacha, y el plan le salio muy bien, de repente la timida y acomplejada joven lentamente empezo a gemir, pero no de miedo sino de placer.
Abajo la situacion era muy tensa, Miranda seguia concentrada en su musica, muy angustiada sabiendo que despues de que abogado terminara con su hermana le tocaaba su turno, en cambio Raul podia oir claramante los gemidos de placer de su adorada hija, esta situacion lo tenia con la verga dura, y de no ser por la presencia de su hija menor se hubiera comenzando a jalarsela.
En el dormitorio de Lily el abogado era el hombre mas feliz sobre la faz de la tierra, pasaba su aspera lengua haciendo rapidos movimientos en la vulva ya muy mojada de la joven, que aunque avergonzada gemia cada vez con mas frecuencia, el viejo se dio cuenta de que estaba lista y se preparo.
Tal como se lo prometio a Raul, se coloco el preservativo e hizo realidad su fantasia, lentamente penetro a Lily quien agarraba con fuerzas la sabanas de su cama, gimiendo con cada arremetida, al abogado no le podian salir mejor las cosas, en cuestion de minutos habia logrado domar a aquella muchacha que despues de todo era humana y habia encontrado placer en el infame trato.
-aghhh hmmm si ohhh- esbozaba Lily ya empapada en sus jugos vaginales, el abogado viendo la situacion, aceleraba el ritmo de la culeada, mientras acariciaba la hermosa espalda de la chica.
-Eres mas maravillosa de que lo pense-
Decia el viejo miserable, mientras vivia uno de sus mejores momentos, era un mete y saca frenetico que tenia a la muchacha a punto de un orgasmo.
Abajo la situacion no cambiaba, Miranda cada vez mas nerviosa le angustiaba que estaba cerca de tambien entregarse al viejo, por otro lado Raul, parecia no tener mucho control sobre si mismo, podia escuchar con claridad los gemidos de ambos que cada minutos eran mas fuertes,
Y efectivamente el domitorio de Lily era una mezcla de los gemidos placer de ambos amantes, claro que los del viejo eran mucho mas explicitos ya encontrandose en la vispera de venirse.
El abogado se moria de ganas de venirse en las deseables nalgas de la jovencita, pero se contuvo y lleno de leche el preservativo al tiempo de que ambos llegaban al orgasmo al unisono, el viejo se retiro de Lily mientras no desperdicio la oportunidad de acariciar todo su cuerpo como despedida.
-Ya larguese de aqui-
decia Lily enojada, el hombre obedecio en el acto y fue al baño a limpiarse.
Miantas Lily se vestia, le mandaba un mensaje de texto a su hermana menor diciendole que todo habia acabado y que le tocaba su turno, Raul se dio cuenta de la situacion y estaba dispuesto a impedirlo, ya viendo que su inocente hija menor estaba cerca de acostarse con aquel ruin hombre, cambio de idea y se negaba a cumplir con el trato.
-No iras a ningun lado mi amor, yo me entiendo con ese miserable-
-pero papa ya esta todo acordado-, perdermos la casa si no lo hago-
Justo en ese momento el abogado bajo para cobrar la segunda parte del trato, Raul iba a impedirlo cuando su hija mayor solicito su presencia.
-Papa por favor no hagas una tonteria, sube tenemos que hablar-
En eso Raul le rogo una tregua al abogado.
-por favor deme unos minutos mientras hablo con mi hija-
-como usted quiera sr Gonzalez, pero dese prisa, no tengo toda la noche-
Raul subio las escaleras sin quitar la vista de su hija y el viejo que se quedaban abajo en la sala de la casa, una vez que llego a la dormitorio de su hija mayor se encontro con Lily acostada tranquilamente en su cama vestida solo con un camison transparente que dejaba ver con facilidad un short cachetero rojo.
-¿De que quieres que hablemos ahora mi amor?-
-papi, no sabes lo horrible que fue todo esto, pero quiero que sepas que lo hice por mi hermana pero especialmente por ti-
Lily le mentia a su padre ya que lo habia disfrutado tanto como el viejo
-No debiste hacerlo amor, te lo dije muchas veces que era preferible quedarnos en la calle antes que acceder a la peticion de ese infeliz-
-si papi pero lo hecho , hecho esta, y no quiero que faltes a tu promesa impidiendo que Miranda se acueste con ese viejo-
-No mi amor no puedo permitirlo- insistia Raul quien se habia dado cuenta de que habia un brillo especial en la mirada de Lily.
a Raul se le helo la sangre, cuando su hermosa hija puso llave al dormitorio, y se acerco a el lentamente.
-papi ¿que te parece si tu y yo nos relajamos meientras Miranda cumple su parte del trato?-
-no se a que te refieras, pero no puedo perder el tiempo aqui hablando contigo-
Lily se acerco mas a el.
-y ¿quien dijo que vamos a hablar?-
En ese instante Lily se sento en las piernas de su padre como lo solia hacer cuando era una niña, solo que el tiempo habia pasado y ahora era una jovencita hermosisima y muy deseable ante la vista de cualquier hombre.
Raul se puso muy nervioso y sin darse cuenta del plan de su hija mayor, trato de hacerla a un lado.
Pero Lily lo habia planeado todo muy bien, conocia a su padre como la palma de su mano, y sabia que Miranda era su niña consentida y que la hora de la hora impediria que el trato se cumpliese, y ella lo mantendria "entretenido" para que no estorbe.
-papa no hagas una estupides, si lo impides, todo lo que hice no habra valido la pena-
En ese momento Lily con todo el cinismo del mundo, le dio un calido beso en la boca a su padre, quien creia que estaba en una pesadilla.
Pero Raul era un ser humano como cualquier otro, ya eran mas de dos años en los cuales solo se habia limitado a masturbarse ante la ausencia de una pareja, habian logrado que toda esta situacion lo tenga muy excitado, ademas el parecido de su hija mayor con su difunta esposa era inmenso y parecia que habia regresado del mundo de los muertos solo para darle placer.
Raul se olvido de que era su padre, y respondio a aquel beso con entrega y pasion, al tiempo que sus manos acariciaban las hermosas y delicadas piernas de la jovencita que aquella noche esta dispuesta a defender su casa como fuera posible.
Abajo la situacion era muy curiosa, por un lado Miranda con la vista en piso, rogando que una mano gigante aparezca y se le lleve de alli, y el abogado que ya estaba impaciente por cobrar la segunda parte del trato.
En ese momento Lily abrio la puerta de su cuarto para dirigirse a ambos.
-Mi papa no va a impedir nada, ya acaben con esto de una buena vez-
Esa ultima frase le puso la verga dura al viejo quien de inmediato se dirigio hacia la desdichada Miranda.
Esta titubeando y muerta de la verguenza le dijo.
-vamos a mi habitacion que esta cerca-
-relajate preciosa, en este sofa estaremos bien- le dijo el abogado que no estaba para mas protocolos, la queria culear en cualquier sitio.
En el cuarto de Lily estaba apunto de consumarse un infame incesto, despues de la orden que les habia dado a ambos abajo, la muchacha siguio con su plan, se saco el camison quedando solo con el diminuto short que hacia de pijama.
Lily se puso encima de su padre, y mientras le sacaba la camisa, lo besaba apasionadamente, al tiempo que le decia.
-papi olvidate de ellos, solo disfrutalo y no digas nada mas-
Las palabras de su hija excitaron como nunca a Raul, quien ahora si se olvido de aquella preciosa muchacha era su hija, y solo la vio como una mujer.
De inmediato se coloco encima de ella, y empezo a acariciar el perfecto cuerpo de su hija, pero Lily estaba dispuesta a todo aquella noche le dijo al oido a su padre que la penetre.
La sesion de sexo con el viejo abogado habia dejado a Lily muy excitada, y se habia quedado con ganas de mas. Raul se negaba a su peticion, aun sabiendo de lo excitado que estaba tambien, pero unos gemidos femeninos que provenian de la sala de la casa lo hicieron cambiar de opinion.
Abajo en la sala, la situacion era aun mas erotica, Miranda completamete desnuda estaba con las piernas en los hombros del viejo abogado que la penetraba salvajamete, la jovencita lloraba sabiendo que su preciada virginidad ya no existia mas.
El abogado vivia la mejor noche de su vida, ambas hermanas le encendian la sangre, pero era Miranda la que mas le gustaba y queria esa inmortal noche defogar con ella toda la calentura que tenia acumulada desde hace semanas.
En cuestion de minutos el abogado no aguanto mas y volvio a llenar el condon hasta el tope con su leche espesa y abundante, de inmediato y aun con la verga dentro de la pobre Miranda, se dispuso a comerle las tetas.
Pero en la habitacion de arriba ni Lily ni Raul se habian percatado de lo que estaba pasando abajo, padre e hija estaban absolutamente entregados a una sesion de sexo sin igual, Raul encima de ella penetrandola con toda la fuerza que le quedaba, olvidandose de que era su propia hija, y Lily que estaba viviendo la mejor noche de corta vida, en la segunda follada de la noche.
Cuando estaba cerca de venirse estaba dispuesto a hacerlo afuera ya que no estaba usando condon, pero Lily lo abarazo fuertemente mientras lo besaba dandole a entender que no le importaba que se venga dentro de ella, y Raul no pudo contenerse y despues de mas de dos años de completo celibato explotaba su verga dentro de la panocha de su bella hija, ambos gimieron de placer al tiempo que se dieron un calido beso como si fueran marido y mujer.
Una vez que terminaron Raul le dio un beso a su hija en la frente y la abrazo fuertemente.
Mientras tanto en la sala de la casa, el abogado ya viendo que el trato se habia cumplido segun lo acordado se disponia a vestirse para marcharse pero viendo que Raul ni Lily hacia acto de presencia, y que Miranda que lucia mas hermosa que nunca yacia aun el sofa, decidio que aun era temprano.
Nuevamente se acerco a Miranda que se estaba vistiendo, y la abordo.
-mira preciosa, como fue tu primera vez no lo disfrutaste como toda hembra lo merece, asi ¿que te parece un segundo round? jajaj-
le decia el miserable hombre que ya comenzaba a aprovecharse de la situacion
-no dejeme en paz, ya le di lo que queria voy a llamar a mi papa y le dire todo-
pero el abogado ya estaba enterado de todo lo habia ocurrido en la habitacion de Lily y la puso al dia a Miranda.
-mira preciosa, mientras te culeaba tu papi se la estaba cogiendo a tu hermanita jajaja, que familia pervertidilla que tienes jajaj-
-usted esta loco, deje de decir tonterias-
en eso el abogado se avalanzo sobre ella tapandole la boca y amenazandola
-mira zorrita, pague tanto dinero por ustedes que mientras el pendejo de tu padre se la goza a tu hermana, tu y yo nos quedaremos gozando aqui jajaja-
Miranda estaba desesperada y lo peor es que no habia nadie que la socorra.
El viejo nuevamente llevado por la calentura, se avalanzo sobre la muchacha quien hacia lo posible por defenderse, el ruin hombre le tapo la boca con las manos, estaba dispuesto a culearsela por segunda vez y nadie se lo impediria.
Rapidamente le alzo la falda y empezo a chuparle la panocha con devocion, mientras le sobaba las tetas con rudeza, Miranda le rogaba que se detuviese y que estaba faltando a su palabra.
-no por favor, ya basta ya cumplimos con el trato-
El viejo hacia oido sordos a los pedidos de la jovencita, estaba a punto de mandarle la verga por segunda vez y esta vez sin condon, pero se le ocurrio una mejor idea, empezo a meter los dedos en el dulce culito de Miranda.
-tranquila mi amor, ya veras que vas a pedirme que no te la saque mas jajaj-
-no por favor se lo suplico eso debe doler mucho- decia Miranda en un mar de lagrimas, su hermana le habia contado que alguna vez habia intentado tener sexo anal con su novio Ignacio pero que el intenso e insoportable dolor la habian detenido.
Pero el despreciable viejo se las sabia todas, y mientras introducia sus dedos en el orificio rectal de la chica, con la otra mano estimulaba su clitoris que ya estaba hinchado de tanta excitacion, aquel juego dio sus resultados, y en cuestion de minutos Miranda dismunia sus quejas y empezaba a disfrutarlo.
-ya no siga mas por favorrr, ya nooo-
-tranquila cariño, ahora viene lo mejor- decia el viejo mientras se acomodo para su infame accion.
Y asi violando las reglas que habia puesto Raul, el abogado cm a cm fue introduciendo su tranca en el diltatado culo de la jovencita, que lloraba de dolor le rogaba que la sacara, pero ya era demasiado tarde.
Arriba Raul por fin despertaba del hechizo en el cual habia caido por la sensual trampa que su propia hija le habia puesto, en ese momento recordo a Miranda y escucho que su tierna hija se quejaba comno si le estuvieran partiendo en dos, iba a correr aver que sucedia en la sala, cuando Lily nuevamente se lo impidio.
-papa, no seas dramatico, Miranda se esta volviendo mujer al mismo tiempo que defiende nuestro hogar, dejalos que terminen por favor no los interrumpas-
-no no puedo dejara a tu hermana sola-
En ese instante nuevamente Lily hizo gala de su astucia, y volvio a rodear a su padre con sus brazos llevandolo nuevamente a la cama, se puso en posicion perrito y Raul sabia que no podria resistirse.
Ignorando por segunda vez lo que ocurria abajo, padre e hija se entregaron en una nueva sesion de sexo mutuo, Raul no se hizo de rogar y penetro por segunda vez a su hija,no le importaba que fuera su hija, o que no tuviera proteccion, solo queria disfrutar el momento, ademas saber que un extraño se habia culeado a las dos mujeres de su casa, de daba mas valor.
Asi en aquella casa que estaba cerca del embargo, se habia convertido en el escenario mas erotico que alguien se pueda imaginar, arriba un padre y una hija cometian un placentero incesto y en el sofa de la sala, un viejo depravado se culeaba a una jovencita como se le antojaba.
El abogado taladraba con furia el culo de la pobre Miranda, desde un costado del sofa, mientras le pasaba su asquerosa lengua por su hermoso rostro, mientras le decia obcenidades al oido.
-tu papa deberia de ponerse un prostibulo con unas putas tan buenas como ustedes jejej-
Arriba Raul por segunda vez explotaba su verga dentro de su hija, los dos habian quedado muy agotados, Lily se vistio y se disponia a bajar las escaleras cuando se encontro con un morboso escenario, su timida y tierna hermana menor estaba sentandose en la enorme verga del abogado y en su rostro se veia su absoluto placer, Lliy se quedo muda del asombro.
De inmediato y para que su padre no viera aquella escena, subio rapidamente a su cuarto para impedir que este bajara, mientras tanto el abogado hizo lo que no habia podido hacer con Lily, que fue explotar su verga en las nalgas y piernas de Miranda, que sin querer habia pasado la mejor noche de su vida.
El abogado se vistio sin poder disimular su mueca de alegria de haber tenido a ese par de maravillosas hembras a su disposicion, y se marcho no sin antes estrechar la mano de Raul.
-sr Gonzalez usted tiene un par de hijas maravillosas, nunca me desprendi de tanto dinero con tanta felicidad-
Las dos chicas se fueron a bañarse, mientras Raul tenia sentimientos encontrados, por un lado se sentia como una basura por haberle entregado a sus bellas hijas a aquel aprovechador viejo, pero por otro lado se volvio a sentir pleno y feliz despues de tanto tiempo luego de la magnifica sesion de sexo con Lily.
En la mañana en la hora del desayuno, ambas chicas lucian muy contentas y actuaban como si nada hubiera pasado, Raul se sorprendio de su actitud pero mas se quedo impresionado de que ambas solo traian unos diminutos shorts a manera de pijama, cuando ellas siempre fueron muy pudorosas, pero despues de los ultimos eventos la verguenza en aquella casa habia desaparecido.
Tanto Raul como las chicas se sentian felices de haber podido mantener su hogar, y ya solo pensaban en como rehacer sus vidas despues de los ultimos hechos, pero lamantablemente estaban equivocados.
CONTINUARA...