Un nuevo yo que no conocia... (1)

En un relato anterior, una amiga introvertida me enseño dos cosas importantes: Que tengo una afición por la dominación y que tengo un lado que no conocía, mi gusto usar juguetes sexuales conmigo.

Ambos descubrimientos, usados juntos, son una combinación bastante erotizante...

Este relato lo voy a tener que dividir en varias partes, incluso no sé cuantas ya que mi gusto por estos artefactos que me acompañan (y hasta ahora solo ellos) sigue hasta el día de hoy.

Julieta, la amiga que descubrió esto primero que nada intento disculparse, creyó que se había aprovechado y que incluso me había usado, obviamente le tuve que explicar que mas que enojado y usado estaba

agradecido, había demostrado que no por este gusto perdía mi hombría y mi masculinidad, esto incluso es algo que hoy mismo me discuto a mí mismo, me reconozco bisexual pero tengo una lucha interna en definir si

me atraen sentimentalmente personas de mi mismo sexo o si solo fantaseo con sexo, y nada más.

Esto igual no entra en este relato, la autosatisfacción es algo que descubrí de chiquito, recuerdo que antes de incluso eyacular ya me masturbaba, esto probablemente hizo que me desarrollara mas rápido, tenga pelos

en mi cuerpo desde más chico y que incluso acabe antes que muchos de mis amigos, recuerdo que era una de mis cualidades que ellos adoraban de mí y me llevaban al nivel de "líder" toda pregunta de sexo era a mí, y

aunque solo sabia satisfacerme a mí mismo muchas cosas las inventaba para queda bien y no perder mi nivel que tanto me gustaba tener.

Decía que autosatisfacerme era muy placentero, me masturbaba 3, 4 o hasta 5 veces por día, en el baño, solo en el living viendo tele, de noche e incluso en la escuela en los recreos en los baños... era un tanto adicto, y

es que la sensación al principio era tan nueva, tan fuerte y tan rara que no podía no hacerlo, solo descubría cosas que nadie mas podía darme, me conocí sexualmente más de lo que nadie jamás me conoce... aunque

siempre hay gente como Julieta que se dedican a demostrar cosas que no se conocen.

"La introvertida" como le gustaba que la llame y como se titulan los relatos de ella, mediante un pequeño aparato vibratorio hizo que una erección tremenda me demostrara que tenía algo sensible ahí dentro..

Además una acabada de novela me dejo extasiado y casi inconsciente... ese es el punto en donde esto es importante, donde este gusto se convierte en otra de mis adicciones, con esta, al contrario de la otra, puedo

dejarla por largo tiempo sin extrañarla, pero cuando la vuelo a retomar la adicción me hace gozar y dilatarme mas y mas y mas...

Comenzare después de tan extenso prologo diciendo que me masturbe con infinidad de aparatos y objetos, y es que mi corta edad al descubrir este gusto hacían imposible conseguir juguetes reales o más

sofisticados, pero también esto hizo que mi imaginación fuera tan loca y construya con mis propias manos objetos muy reales y hasta mas placenteros que juguetes de verdad.

Uno de mis primeros y de mis favoritos objetos, fueron como a casi todos... mis dedos, el índice y el corazón... juntos son mi mayor tesoro, igualmente mis juegos comenzaron con uno solo, la sensación era

inexplicable por lo extraña, me fascinaba acabar jugando con mi dedito lo metía y lo sacaba lentamente y cada vez me gustaba mas... A las pocas semanas mi instinto de querer conocer más me hizo probar hacerlo con

2 dedos, lo hice sin dilatarme bien, y casi sin lubricante, y ahí fue cuando deje de hacerlo por un tiempo, fue tanto el dolor que sentía que ya no quería hacerlo más, cada vez que me sentaba sentía un dolor bastante

molesto, pero a los pocos días, el dolor cedió y volví a probar, esta vez como se debe con mucho lubricante y mucha paciencia y ahí si los disfrute muchísimo, la primera vez que lo hice fue en el baño, estaba sentado y

me masturbaba al mismo tiempo que jugaba con mis dedos en mi cola, sentir ser penetrado me abría las puertas a algo nuevo, un costado que no conocía de mi pero que evidentemente llegaba para quedarse, a

medida que me masturbaba la sensaciones se multiplicaban y el placer era inmenso, me relajaba cada vez mas y tiraba mi cuerpo hacia atrás cerrando los ojos...con mi manos izquierda jugaba en mi cola y con la

derecha me masturbaba mi pene cada vez mas rápido y mas enérgico... hasta que de pronto un enorme chorro de semen salió de mi pene, fueron segundos de diferencia, pero recuerdo que me asombre de que no

tuve un orgasmo junto con la acabada... y ahí nomas, segundos después el orgasmo llego, un cosquilleo se apodero de mi cuerpo al mismo tiempo que me retorcía de placer por lo que estaba sintiendo, mis ojos

estaban cerrados y no podía mas... sudaba y movía mi cabeza extasiado por todo lo que sentía en ese momento...

Un momento después tuve una sensación muy rara, me sentía extremadamente mal, fue un momento de apertura mental y me di cuenta que había descubierto mi lado homosexual, en una palabra, burda y lapidaria,

me sentía por primera vez... un puto.

Esta confusión mental, momentánea, pero que no deja de ser cierta duro poco y al otro día tuve ganas de seguir explorando mi nuevo costado, la calentura era más fuerte que yo, y de pronto todo lo que veía era con

una forma sugestiva le veía a todo la manera de poder convertirlo en un juguete sexual... entre ellos una lapicera gruesa que me regalo de chiquito un tío, una lapicera que vibraba y al escribir el trazo era irregular...

ese objeto terminaba en punta, tenía en la parte de atrás una goma antideslizante y hasta se podría decir que tenía un tamaño ideal para ser usado como un pene artificial y sentir algo con una forma bastante real por

primera vez... si mi tío supiera para que use yo su lapicera se desilusionaría mucho...

De todas maneras, es suficiente por hoy, recordar tantas cosas de mis inicios bisexuales es muy fuerte... en un próximo episodio mi "primera vez" con mi nuevo objeto y mucho más detalle sobre como comencé a

disfrutar y necesitar cada vez objetos más grandes...

Espero, lo hayan disfrutado, pronto se vienen mas...!