Un nuevo amigo (1)

UN NUEVO AMIGO

Tenía escritos unos cuantos relatos de un tono gay, yo las llamo historias, porque siempre he contado las que han ocurrido a mis amigos o a mí.

Uno de estos, después de leerlas, me aconsejó las pusiera en todorelatos.com para como me dijo.

Deleite de los que se conectan porque están muy bien escritas.

Gracias, pero por los relatos que veo allí, estos no creo tengan demasiado sustancia sexual, son poco calientes - le contesté dudoso.

Quizá no tengan eso que llamas sustancia porque no la tienen los sucedidos. Si un día te ocurre alguna aventura caliente, como eres un maravilloso escritor, la reflejarás en el relato en toda su calentura.

Envié a esa Web parte de los que tenía escritos (tengo aún más para enviar) y he podido comprobar han tenido bastante aceptación, aunque el número de lectores no alcanzan a los relatos más atrevidos, los que me han escrito o añadido al msn, me han elogiado lo suficiente como para que esté muy contento.

De uno de ellos quiero hoy escribir. No voy a dar detalles de su nombre, ni del correo electrónico, ni de la ciudad donde vive. El primer contacto que tuve con él fue la aparición, de un deseo por su parte de que le añadiese, cosa que hice, para seguidamente ponerle un mail, dándole las gracias y algunos detalles míos y pidiendo me escribiese dándome los suyos.

Antes de que me contestase, aquella misma noche vi que estaba conectado al msn. Le abrí la pantalla, me presenté y esperé su reacción. Cuando estuvimos en contacto, hicimos lo que creo todos durante la primera conversación, decirnos el nombre, la edad, en este caso cómo le había parecido lo que había leído de mí y al final la sexualidad de cada uno, éramos los dos gays. Yo le dije que era virgen (las razones no venían al caso) y él me contó había tenido alguna experiencia.

Mientras hablábamos estuve mirando la fotografía que tenía expuesta. Cara redonda, gordita, unos ojos negros muy bonitos y vivarachos y una media sonrisa que me estaba diciendo se trataba de un chaval simpático y guapo. Pero lo que más me gustó de él, fueron sus labios. Lo primero que pensé al vérselos fue que eran los ideales para que se cerrasen sobre mi miembro que sin ordenárselo había empezado a moverse entre las piernas.

Seguimos hablando de cosas intrascendentes y yo continuaba mirando aquella boca, con los carnosos, gordezuelos, abiertos, rojos y frescos labios y mi pene, que también creo los notaba, se iba endureciendo de tal manera que me obligó a interrumpirle lo que me escribía para decirle.

Cuanto me gustaría que estuviéramos cerca para que me la mamaras.

Se quedó cortado porque no creo esperaba esta frase por mi parte, así de repente, sin haber hablado aún nada de sexo.

Al final reaccionó y menos mal que lo hizo positivamente.

¿Te gusto? - leí en la pantalla.

Mucho, tienes los labios más sexuales que he visto en mi vida y una sonrisa que me hace desear acariciarte y besarte. Te voy a mandar unos versos libres que acabo de componer dedicados a ellos.

En tu foto los veo, húmedos, dulces, chupantes,

entreabiertos, cariñosos, esperantes.

Los sueño, sensuales, ansiosos, ardientes,

con lengua, sexuales, turgentes.

Los espero, besantes, rojos, salivantes ,

gordezuelos, receptores, quemantes.

• Gracias - vi escrito y a continuación - ¿Tienes cam?

Aquí me vi obligado a explicar algo que muchos, cuando lo hago, no me creen. El ordenador que hay en casa lo comparto con mi padre para su trabajo. Después de terminar su consulta, por las noches, escanea, ordena y pone al día sus fichas y no considera necesario que pongamos una cam.

¿ Para que necesitas eso? ¿Para ver la cara de los que hablas o para algo más? - me dijo con una sonrisa extraña una vez que lo insinué.

Mi nuevo amigo aceptó mi explicación y la que siguió a continuación.

• Antes de que sigamos hablando quiero que sepas que soy un inválido de las piernas. Mi vida se desarrolla encima de una silla de ruedas, como no puedo salir es por lo que soy virgen.

• No me importa quizá eso me haga quererte más en un futuro. Por lo que he leído tuyo y por lo que llevamos hablando me gustas también. ¿Quieres que te conecte la cam?

No quise decirle que nunca acepto ni aceptaré nada que sea motivado por la pena que pueda producir mi minusvalía, pero aquello de abajo, que se había ya endurecido, pedía guerra.

Deseaba ardientemente verle la cara al natural, sobre todo para comprobar los maravillosos labios y ya había soltado la cremallera de mi pantalón y salido mi verga, inhiesta, desafiante y solicitando de alguien que la acariciara.

• No me atrevo a pedírtelo porque yo no puedo corresponder, pero claro que me gustaría - escribí.

La fotografía desapareció y en su lugar vi la cara de mi nuevo amigo, sonriendo mientras escribía.

¿Te gusto ahora?

Mucho, eres más bello en persona que en la fotografía aunque es bastante buena. Veo ahora esos mojados y suaves labios que me están volviendo loco.

Mírame mejor - acercó la cara para que pudiera contemplarlos debidamente y los abrió y cerró para señalarme como me iba a comer mi pene.

Seguí mirando la pantalla mientras ahora se separaba para que le pudiese contemplar bien. Vestía solamente un pijama corto. Suavemente sus manos comenzaron a desnudarle, la salida de la camisola dejó ante mi vista, su medio cuerpo superior, su cara sonriente, su pecho, sus tetitas y su estómago que según iba viendo acariciaba en mi mente con la lengua. Cuando sus manos agarraron la cintura de su pantalón, le pedí avanzara despacio, para gozar lentamente de la visión de su maravillosa parte inferior.

Así lo hizo, realizó lo que se pudiera llamar un verdadero striptees. Lo fue aflojando y bajando lentamente, apareció primeramente su vientre, hasta casi señalar el empiece de su vello púbico. Se paró de pronto, se dio la vuelta y fue enseñándome su culo, gordito, blanco, duro y respingón.

Abrió las nalgas de su trasero para enseñarme su raja y con dos de sus dedos acarició la oscura entrada de la gruta de su tesoro, mientras dejaba deslizarse al pantalón definitivamente. Antes de voltearse movió su culito atrás y adelante varias veces invitando a mi endurecido falo a penetrar por él.

Aunque aun no había visto su pene me encontraba excitado. La visión de su medio cuerpo y sobre todo el final de su espalda habían sido suficientes para encenderme y que mi mano comenzase a acariciar mi miembro.

Darse la vuelta y enseñarme su polla me lo hizo desear. Fue haciendo movimientos en los que se ponía de un lado y después de otro, mientras pasaba acariciante sus manos por los blancos muslos.

Al fin me lo enseñó, lo tenía empinado, duro, mirando al cielo. Era muy bonito, no demasiado grande, ni grueso, una medida normal, como a mi me gustan. Las pollas burro no me excitan, lo hacen mucho mas esas que miden entre 14 y 16 cm. como la que veía en la pantalla y de la que mi nuevo amigo retiraba la piel para enseñarme su punta enrojecida.

Esa vista hizo acelerar mi mano que ya pajeaba desesperadamente mi caliente pollita.

- ¿Quieres que haga algo para ti? - me preguntó la pantalla.

• Acompáñame en la paja que me estoy haciendo - le solicité.

Se colocó de forma que la cámara recogiese su mano frotando aquella bonita cosa que tenía en ella y él desde su casa y yo desde la mía seguimos "trabajando" nuestro pene durante un rato.

Para compensarle de que él no me veía, fui poniendo en la pantalla señales del placer que estaba disfrutando.

, ¡¡ Qué bien !! mmmmmmm ¡¡ Te deseoooo !! ¡¡ Me corrooooooo !! ¡¡ Eres maravilloso !!

Escribí.

¡¡ Dale rápido, que me corro !!

Hizo caso, vi aceleró el movimiento e hice lo mismo y en el momento que veía salir de su polla el semen a chorros, sentado en mi silla, derramaba yo el mío.

Había sido una paja medio compartida que me llenó de satisfacción lo que le comuniqué dándole las gracias por la deferencia que había tenido conmigo y recordé entonces que no le había preguntado desde qué ciudad me estaba hablando.

Lo hice y por poco me desmayo al leer donde habitaba mi nuevo amigo. Estábamos separados por muy pocos kilómetros el uno del otro, de manera que si quería podría, sin ninguna dificultad acercarse hasta mí, porque entre ambos sitios había una buena comunicación.

Me callé en aquellos momentos pues pensé que después de eyacular algunas personas pierden los deseos sexuales momentáneamente y lo que deseaba proponerle era que siguiéramos personalmente, en otro momento, lo que habíamos iniciado por medio de la cam

La segunda parte en la que nos encontramos la pondré en breve.

Espero comentarios.