Un negro para mamá (6)

Relatos dividido en dos partes. Una para los clásicos y otra para los aventureros.

Para que el relato guste a la mayor parte de los lectores, lo divido en dos partes. Una parte hétero, sin más sexo homo, y una parte bisex. Que cada cual lea la que más le atraiga, o las dos, aunque tienen partes en común, claro


PARTE HETERO


Juan estaba muy confundido. No era homosexual. Al menos no lo había sido hasta ahora...Pero no, ni ahora tampoco. Seguía deseando a las mujeres. Seguía deseando a su madre.

Sonrió.

-¿De qué te ríes? - le preguntó Majed.

-De nada. Acabo de acordarme de la escena de una película.

-¿De cuál?

-De Torrente. Torrente, supuestamente el típico macho español, le decía a un chico que si se hacían una pajillas, pero sin mariconerías.

-Jajaja, si me acuerdo. Y bien?

-Coño Majed. Hasta ayer yo era 100% hétero. Y ahora...ahora me has echo dudar. Pero sé lo que soy y lo de ayer no se volverá a repetir, lo siento.

  • Bueno, lo entiendo, no pasa nada. ¿Cómo te follaste a tu madre ayer?

  • En la cocina. Le di por el culo mientras mi padre estaba en el salón.

-Uf. ummm, así que te la enculaste con tu padre cerca!!! No soy yo el único morboso por aquí..¿Crees que podré yo darle por el culo a tu madre?

-Joder, no creo. Si le metes esto la matas.

-Bueno, todo es cuestión de probar. ¿Y qué cosas le gustan a ella?

-Todo. Nunca me ha dicho que no a nada. Ah, pero quiero que la trates con respeto. Y nada de violencia.

  • No te preocupes, tío. Seré un caballero. El caballero negro. ¿ No ves que ya tengo lanza? jajajaja

-jajajaja. Y vaya lanza.

.-¿Te vas a follar a tu madre hoy?

-Por supuesto.

  • ¿ Y qué le vas a hacer a esa preciosidad?

  • Pues no lo sé. Lo que surja.

  • ¿Usáis consoladores?

Juan se sorprendió. En todo este tiempo con su madre nunca se le había ocurrido usar ningún objeto.

-No, nunca. no tenemos.

-Umm, pues tienes que ir preparándola para el cumpleaños. Antes de ir a casa pasa por el super y compra un buen pepino...y esta noche se lo metes mientras la follas.¿Lo harás? Comprarás el pepino y mañana me cuentas?

-Sí. Puede ser divertido - le dijo

Se despidieron hasta el día siguiente. Una vez en la frutería buscó un buen pepino. Buscó uno largo y grueso como su polla, quizás un poco menos. También compró tomates y lechuga, pensando que quedaría raro si salía sólo con el pepino. La gente es muy mal pensada.!!

Cuando llegó a casa lo escondió en su cuarto, a la espera de que su madre fuera a visitarlo por la noche. Como el día anterior estaba cachondo, así que buscó a su madre. Estaba en el salón, hablando con su padre de no sequé.

-Hola, mami. Hola papá.

-Hola, precioso

María se dio cuenta de que su hijo estaba cachondo. Por cómo la miraba y sobre todo por el bulto del pantalón, claro. Se preguntó que de donde vendría para venir tan excitado, como ayer. No es que le importara. Es más, la enculada que le dio le encantó, pero se preguntaba que estaría haciendo, y sobretodo con quién. Pero ya se lo diría él cuando quisiera.

-Oye, Juan, ¿ me buscas una cosa por internet?

-Claro, mami. ¿Qué es?

-Espera, voy contigo y te digo.

Los dos se dirigieron al cuarto de Juan, dejando al padre frente a la tele. Cuando iban por el pasillo ella se le echó encima y se morrearon. Juan le apretaba el culo mientras ella le llevaba la mano a la polla.

-Ummm, mi niño está caliente - le dijo mientras le bajaba la bragueta y le sacaba la inflamada polla. - ¿Qué quiere que le haga su mami antes de la cena?

Por toda respuesta Juan la empujó de los hombros, haciéndola arrodillar delante de él, en pleno pasillo. María cogió la polla y se la empezó a pasar por la cara, sonriendo y mirándolo a los ojos. Con vocecita mimosa, le decía:

-Ummm, así que mi niño lindo quiere que su mami le coma la polla, ¿ Verdad? Que su mami se meta en la boca esta polla enorme y no pare de chupar hasta que salga toda la lechita caliente..A que sí!

-Aghhhh, sí, sí, eso quiero, mamá. Que me hagas una mamada de las tuyas hasta que me hagas correr.

-Que rico. Ya sabes que me encanta chuparte la polla, Juan. ¿ Y dónde te quieres correr? ¿Quieres llenarme la boca y que me trague toda tu leche o quieres correrte en mi carita? - y se metió la polla en la boca, empezando a mamar.

-Uf, uf, que boca tienes, María....Me correré en tu cara. ummm, como me gusta correrme en tu cara.

-Vale mi amor. Llénale a mami la cara de leche. A mi también me gusta que me dejes perdidita

Juan puso sus manos en los lados de la cabeza de su madre y empezó a follarsela por la boca. Aún no podía metérsela toda, pero cada vez conseguía metérsela más. Algún día toda su polla desaparecería en la garganta de su madre. Algún día se correría con la polla metida hasta el fondo para que su semen fuera a parar directamente a su estómago.

-Ummm, como me gusta follarte la boca, preciosa - le decía mirando su polla, brillante ya por la saliva de su madre, entrar y salir de su boca.

A veces la sacaba y le daba golpecitos en las mejillas, la pasaba por la frente de ella. Ella lo miraba y sonreía. Veía en su cara el placer que le daba a su hijo y eso la hacia inmensamente feliz.

-Aghh, mami, me voy a correr.

-Dámela toda mi amor. Cúbreme la cara. Márcame de ti.

Se apoyó en los talones, levantando un poco la cara. Cerró los ojos y esperó a sentir la caliente lluvia que se avecinaba.

No tuvo que esperar mucho. Juan cogió la polla con la mano derecha y se pajeó delante de la cara de su madre hasta que estalló. Su orgasmo fue muy fuerte. Sus chorros golpeaban con fuerza la cara de su madre, dejándola llenita de leche. Su frente, sus mejillas, sus labios. Hasta parte de su pelo quedó marcado.

Cuando la polla dejó de soltar leche, Juan la volvió a meter en la boca de María. Sintió su lengua lamer el capullo, aún palpitante.

-Que guapa estas, mami.

  • Ummm, gracias hijo. Ha sido una buena corrida. De las más abundantes que recuerdo. Deberías estar muy cachondo.

-Uf, mucho mami. Esta noche ya verás.

-¿Sí? ¿Qué tienes pensado, malandrín?

-Jeje, es una sorpresa. Ya sabes, en cuanto papi se duerma vienes a mi cuarto.

-Allí estaré. Ahora la que está cachonda soy yo, pero bueno, tenemos que cenar. Voy a asearme un poco.

-¿Por qué? Así estas preciosa. ¿Por qué no cenas así?

-Capullo! jajajaja. No me imagino que cara pondría tu padre.

Se levantó, le dio un beso y se fue al baño.

Durante la cena Juan se dio cuenta de que aún tenía manchas de semen en la blusa, y hasta algo en el pelo. Con la mirada se lo dijo. Ella sonrió, indicándole que las había dejado a posta.

Al rato, después de ver un rato la tele se despidió de sus padres y se fue a 'dormir'. Aprovechó para limpiar bien el pepino y dejarlo debajo de la almohada.

Minutos después oyó como sus padres también se iban a la cama. Dentro de poco su madre aparecería por la puerta. Se desnudó y se puso boca arriba en la cama. Se empezó a tocar la polla para tenerla bien dura cuando su madre apareciera por la puerta. ¡Anda que vaya chasco si en vez de ella apareciera su padre!!! jajaja

Al poco oyó los pasos suaves de su madre acercándose. Cuando entró en el cuarto lo vio allí, con la polla en la mano.

-Ummm, Vaya. ¿Me esperabais a mi? -  le preguntó mientras se acercaba, divertida.

-Nop, esperábamos a la vecina del quinto.

-Quuuueee? Pero si tiene casi 80 años!!

-Sip, pero esa dentadura postiza me da muuucho morbo.

-jajajaja, pero mira que eres bruto. Ven aquí, que llevo toda la noche con el coño encharcado.

Sin más preámbulos, se subió a horcajadas sobre la cama y se clavó la polla de Juan hasta el fondo, cara a él.

-Ummm, si que estás mojada, mami

-Aghhhhh, que polla mi amor. Es que llevo todo el tiempo pensando en que sería esa sorpresa que me tienes preparada. Conociéndote seguro que me va a encantar- susurró mientras empezaba a cabalgarlo.

Juan casi se parte de risa. Si ella estaba así por lo de esta noche, si supiera lo que le esperaba con Majed se mojaría tanto que se deshidrataría.

La cogió por los hombros y la empujó contra su pecho. Se besaron. Juan le puso las manos en las nalgas. En esa postura ella no podía cabalgar, sólo restregarse con la polla de é dentro. Entonces, él se mojó los dedos con saliva y los llevó al ojete de su madre. Le metió dos dedos y luego un tercero. Fue moviéndolos para lubricar bien el esfínter.

-Qué rico, cariño...

-¿Te gusta?

--Ummm, mucho mi vida, ya lo sabes. Todo lo que me haces me vuelve loca.

Siguieron besándose mientras Juan seguía preparando el culito de ella para lo que vendría a continuación. Cuando comprobó que ya estaba lista, y sin que ella se diera cuenta, sacó el pepino de debajo de la almohada y lo llevó hasta el culo de ella. Lo apoyó...

-¿Pero? ¿Qué.?

-Shhhhhhh, mi amor..déjame a mi...

María quedó tensa. Sentía algo muy duro empujando en su culo. Estaba ya acostumbrada a la polla se Juan, pero aquello era mucho más duro..Y poco a poco entraba dentro de ella. Sólo le causó un poco de dolor cuando entró la punta.. pero luego..ummm luego solo placer. Sentía su coño lleno de la polla de Juan..y ahora como su culo se iba llenando también...con lo que parecía otra polla muy dura... aunque no podía ser, claro.

Cuando tenía dentro más de la mitad de la verde hortaliza, Juan paró.

-Aggggg, Juan, mi amor. ¿Qué me haces? ummmmm que placer

-¿ Te gusta, mami?

-Ohhh, ummmm, agg. si,si..¿qué..qué es?

-Un pepino.

-Aggggg, ya lo decía yo!! Que la verdura era buena para la salud!! jajaja

-Ahora es como si tuviera dos pollas. Es como si dos hombres te estuvieran follando a la vez.

-Mi amor, que placer...fóllame más. Métemelo más...Fóllale el culito a mami con el pepino ese..AHhhh

María empezó a moverse, a restregar su pubis contra el pubis de Juan, sintiendo como su polla se frotaba contra las paredes de su coño. Y sintiendo como aquel nuevo invasor entraba y salida de su culo. Y se corrió. Fue un orgasmo repentino, salvaje. Hundió su boca en el hombro de Juan para no gritar. Un torrente de jugos bañó la polla de Juan

Pero siguió moviéndose. Y Juan siguió follandola por el culo con su nuevo amigo. María gemía, rota de placer. Nunca había sentido tanto. Se sentía llena. Empezó a besar salvajemente a su hijo. Al hombre que la estaba haciendo estallar de placer.

Sintió que se iba a correr otra vez. Esta vez si pudo sentir el orgasmo llevar..como una ola que la iba a destrozar...Y tubo entonces el orgasmo más fuerte de su vida. Tan fuerte que incluso perdió un momento la conciencia, quedando desmadejada sobre su hombre.

Juan entonces sacó lentamente el pepino del culito de su madre y la acostó, junto a él. Respiraba profundamente. El no se había corrido aún, pero no le importaba. Estaba feliz de haber dado tanto placer a su amada madre.

La beso tiernamente, y acariciando su pelo, se durmió junto a ella.


PARTE BISEX


Juan estaba muy confundido. No era homosexual. Al menos no lo había sido hasta ahora...Pero no, ni ahora tampoco. Seguía deseando a las mujeres. Seguía deseando a su madre.

Pero no podía negarse a sí mismo que lo de ayer, aunque inesperado, lo había excitado. Joder!!! A estas alturas y sintiendo cosas raras con su amigo negro.

Se preguntó si sólo sería por su madre. Quizás la excitación de pensar en lo que podría pasar entre ella y Majed era lo que le hacía sentir así. Se dijo que no sentía ningún deseo sexual hacia ningún otro hombre. Y tampoco sentía deseo sexual hacia Majed...pero le había hecho una paja. Y le había gustado.

Sonrió.

-¿De qué te ríes? - le preguntó Majed.

-De nada. Acabo de acordarme de la escena de una película.

-¿De cuál?

-De Torrente. Torrente, supuestamente el típico macho español, le decía a un chico que si se hacían una pajillas, pero sin mariconerías.

-Jajaja, si me acuerdo. Y bien?

-Coño Majed. Hasta ayer yo era 100% hétero. Y ahora...ahora me has echo dudar.

-Mira, Juan. No te comas el coco. Lo que sea que eres lo eres desde que naciste. Lo de ayer no tiene nada que ver. No significa que seas marica. Ni siquiera que seas bisexual. ¿O crees que los presos son homosexuales? El sexo es una gran fuerza y la necesidad obliga. Yo hubiese preferido que ayer en vez de tú fuera una preciosa mujer la que me hiciera la paja. Pero, jejeje, no había ninguna a mano.

  • Y tú? No sólo quieres que te haga otra paja. Te ofreces incluso a chuparme la polla.

-Yo tengo muy claro lo que soy y lo que me gusta. Me encanta el sexo. Y las mujeres. Blancas a ser posible, jeje, pero aquí en España estoy a dos velas. No creas que es fácil para una persona de color como yo ligar. No está bien visto, en general. Decís que no sois racistas, pero miráis con desprecio a las parejas interraciales. Y las mujeres, en general, aunque les doy... morbo, al final no se atreven. Así que ya ves. Me gusta tanto el sexo que no me importa si lo obtengo de una bella mujer...o de un amigo.

-Entonces ere bisexual.

-Umm, puede que sí, puede que no. No me lo planteo. Simplemente disfruto del sexo. Y ahora dime que a ti no te gustó lo de ayer.

  • Bueno.. no..no me disgustó.

-¿Te hace eso menos hombre?

-No.

-¿Pues entonces donde está el problema?

-Bueno, tienes razón. Voy a dejar de comerme el coco.

  • Eso es hombre. Oye, ayer cuando te fuiste tan apresuradamente ibas caliente. ¿Te hiciste una paja en casa?

-jejeje, nop. Me follé a mi madre.

-Cabrón. Yo con una simple paja y tú follándote a ese preciosa mujer. ¿De verdad que tenemos que esperar al cumpleaños?

-Sí

-No es justo.

-Es lo que hay

-Juan, venga...se  bueno. Hazme otra paja.

-Eres un pesao.

-Venga, va. Sólo una y no te lo pediré más. Es que estoy recaliente.

-Bueeeno. Pero sin maricodadas, eh?

-jajajajaja. Vale.

Se dirigieron al baño. Con cuidado para no ser vistos...entraron. Majed enseguida se bajó los pantalones y su inmenso rabo negro quedó frente a Juan.

-Joder, Majed. ¿Cómo se puede tener semejante rabo?

-La naturaleza, amigo mío. Pero no creas que esto es siempre una bendición. Más de una ha salido corriendo al vérmela. Oye, en cuanto a la mamada que te ofrecí antes..

-Sólo la paja, Majed

-Como quieras. Que sepas que estoy dispuesto.

La idea de que Majed le chupara la polla no le atraía. En casa tenía a su madre, que era más guapa que él y que lo hacía estupendamente..Pero su madre no tenía la tranca de Majed. Se dio cuenta de que lo que le atraía era la polla, no Majed. No era el hombre. Sólo la polla. Aquella inmensa polla. Alargó la mano y la cogió. Sintió su peso, su calor.

-Ummm, eso es. Hazle un pajote al negro. Dime. ¿Cómo te follaste a tu madre ayer?

  • En la cocina - empezó a contar Juan mientras movía su mano a lo largo de aquella boa negra - le di por el culo mientras mi padre estaba en el salón.

-Uf. ummm, así que te la enculaste con tu padre cerca!!! No soy yo el único morboso por aquí..¿Crees que podré yo darle por el culo a tu madre?

-Joder, no creo. Si le metes esto la matas.

-Bueno, todo es cuestión de probar--Ummm, sigue, que rico...¿Y qué cosas le gustan a ella?

-Todo. Nunca me ha dicho que no a nada. Ah, pero quiero que la trates con respeto. Y nada de violencia.

  • No te preocupes, tío. Seré un caballero. El caballero negro. ¿ No ves que ya tengo lanza? jajajaja

-jajajaja. Y vaya lanza.

-No la quieres probar?

-No. Habíamos quedado en una paja.

-No seas bobo. Ya puestos que diferencia hay?

-No.

Majed no quiso insistir, por ese día. Pero sabía que al final lo haría, por la manera en que le miraba la polla sabía que al final no podría resistirse.

-Ummmm tío, vas a hacer que me corra. ¿Te vas a follar a tu madre hoy?

-Por supuesto.

-Aggg, y ..que le ..vas a hacer a esa preciosidad?

  • Pues no lo sé. Lo que surja.

  • O tío.. estoy a punto. ¿Usáis consoladores?

Juan se sorprendió. En todo este tiempo con su madre nunca se le había ocurrido usar ningún objeto.

-No, nunca. no tenemos.

-Umm ahhh, pues tienes que ir preparándola para el cumpleaños. Antes de ir a casa pasa por el super y compra un buen pepino...y esta noche se lo metes mientras la follas..AGGGGGG, me corroooo

Juan volvió a sorprenderse del inmenso caudal de leche que aquella polla producía. Contó 13 disparos de espeso y grumoso semen. Algunos chorros llegaron incluso al espejo del baño.

-Uf, gracias, tío. Menuda paja. ¿Lo harás? Comprarás el pepino y mañana me cuentas?

Juan seguía con la polla de Majed en la mano. De la cabezota colgaba un hilillo de semen. Apretó la polla, subiendo la mano para vaciarla del todo.

-Sí. Puede ser divertido - le dijo

Se despidieron hasta el día siguiente. Mientras Juan se acercaba al super iba pensando en lo que estaba haciendo. Dos pajotes le había cascado a su amigo... y ya no se arrepentía.. Incluso se sorprendió pensando que como sería chupar aquella enorme polla, recibir en la boca aquel torrente de semen caliente.

Una vez en la frutería buscó un buen pepino. Buscó uno largo y grueso como su polla, quizás un poco menos. También compró tomates y lechuga, pensando que quedaría raro si salía sólo con el pepino. La gente es muy mal pensada.!!

Cuando llegó a casa lo escondió en su cuarto, a la espera de que su madre fuera a visitarlo por la noche. Como el día anterior estaba cachondo, así que buscó a su madre. Estaba en el salón, hablando con su padre de no sequé.

-Hola, mami. Hola papá.

-Hola, precioso

María se dio cuenta de que su hijo estaba cachondo. Por cómo la miraba y sobre todo por el bulto del pantalón, claro. Se preguntó que de donde vendría para venir tan excitado, como ayer. No es que le importara. Es más, la enculada que le dio le encantó, pero se preguntaba que estaría haciendo, y sobretodo con quién. Pero ya se lo diría él cuando quisiera.

-Oye, Juan, ¿ me buscas una cosa por internet?

-Claro, mami. ¿Qué es?

-Espera, voy contigo y te digo.

Los dos se dirigieron al cuarto de Juan, dejando al padre frente a la tele. Cuando iban por el pasillo ella se le echó encima y se morrearon. Juan le apretaba el culo mientras ella le llevaba la mano a la polla.

-Ummm, mi niño está caliente - le dijo mientras le bajaba la bragueta y le sacaba la inflamada polla. - ¿Qué quiere que le haga su mami antes de la cena?

Por toda respuesta Juan la empujó de los hombros, haciéndola arrodillar delante de él, en pleno pasillo. María cogió la polla y se la empezó a pasar por la cara, sonriendo y mirándolo a los ojos. Con vocecita mimosa, le decía:

-Ummm, así que mi niño lindo quiere que su mami le coma la polla, ¿ Verdad? Que su mami se meta en la boca esta polla enorme y no pare de chupar hasta que salga toda la lechita caliente..A que sí!

-Aghhhh, sí, sí, eso quiero, mamá. Que me hagas una mamada de las tuyas hasta que me hagas correr.

-Que rico. Ya sabes que me encanta chuparte la polla, Juan. ¿ Y dónde te quieres correr? ¿Quieres llenarme la boca y que me trague toda tu leche o quieres correrte en mi carita? - y se metió la polla en la boca, empezando a mamar.

-Uf, uf, que boca tienes, María....Me correré en tu cara. ummm, como me gusta correrme en tu cara.

-Vale mi amor. Llénale a mami la cara de leche. A mi también me gusta que me dejes perdidita

Juan puso sus manos en los lados de la cabeza de su madre y empezó a fallársela por la boca. Aún no podía metérsela toda, pero cada vez conseguía metérsela más. Algún día toda su polla desaparecería en la garganta de su madre. Algún día se correría con la polla metida hasta el fondo para que su semen fuera a parar directamente a su estómago.

-Ummm, como me gusta follarte la boca, preciosa - le decía mirando su polla, brillante ya por la saliva de su madre, entrar y salir de su boca.

A veces la sacaba y le daba golpecitos en las mejillas, la pasaba por la frente de ella. Ella lo miraba y sonreía. Veía en su cara el placer que le daba a su hijo y eso la hacia inmensamente feliz.

-Aghh, mami, me voy a correr.

-Dámela toda mi amor. Cúbreme la cara. Márcame de ti.

Se apoyó en los talones, levantando un poco la cara. Cerró los ojos y esperó a sentir la caliente lluvia que se avecinaba.

No tuvo que esperar mucho. Juan cogió la polla con la mano derecha y se pajeó delante de la cara de su madre hasta que estalló...Y mientras lo hacía pensaba en lo que sentiría él si el que estuviera arrodillado fuese él y no su madre, y la polla que se corría fuese la de Majed y no la suya. Su orgasmo fue muy fuerte. Sus chorros golpeaban con fuerza la cara de su madre, dejándola llenita de leche. Su frente, sus mejillas, sus labios. Hasta parte de su pelo quedó marcado.

Cuando la polla dejó de soltar leche, Juan la volvió a meter en la boca de María. Sintió su lengua lamer el capullo, aún palpitante.

-Que guapa estas, mami.

  • Ummm, gracias hijo. Ha sido una buena corrida. De las más abundantes que recuerdo. Deberías estar muy cachondo.

-Uf, mucho mami. Esta noche ya verás.

-¿Sí? ¿Qué tienes pensado, malandrín?

-Jeje, es una sorpresa. Ya sabes, en cuanto papi se duerma vienes a mi cuarto.

-Allí estaré. Ahora la que está cachonda soy yo, pero bueno, tenemos que cenar. Voy a asearme un poco.

-¿Por qué? Así estas preciosa. ¿Por qué no cenas así?

-Capullo! jajajaja. No me imagino que cara pondría tu padre.

Se levantó, le dio un beso y se fue al baño.

Durante la cena Juan se dio cuenta de que aún tenía manchas de semen en la blusa, y hasta algo en el pelo. Con la mirada se lo dijo. Ella sonrió, indicándole que las había dejado a posta.

Al rato, después de ver un rato la tele se despidió de sus padres y se fue a 'dormir'. Aprovechó para limpiar bien el pepino y dejarlo debajo de la almohada.

Minutos después oyó como sus padres también se iban a la cama. Dentro de poco su madre aparecería por la puerta. Se desnudó y se puso boca arriba en la cama. Se empezó a tocar la polla para tenerla bien dura cuando su madre apareciera por la puerta. ¡Anda que vaya chasco si en vez de ella apareciera su padre!!! jajaja

Al poco oyó los pasos suaves de su madre acercándose. Cuando entró en el cuarto lo vio allí, con la polla en la mano.

-Ummm, Vaya. ¿Me esperabais a mi? -  le preguntó mientras se acercaba, divertida.

-Nop, esperábamos a la vecina del quinto.

-Quuuueee? Pero si tiene casi 80 años!!

-Sip, pero esa dentadura postiza me da muuucho morbo.

-jajajaja, pero mira que eres bruto. Ven aquí, que llevo toda la noche con el coño encharcado.

Sin más preámbulos, se subió a horcajadas sobre la cama y se clavó la polla de Juan hasta el fondo, cara a él.

-Ummm, si que estás mojada, mami

-Aghhhhh, que polla mi amor. Es que llevo todo el tiempo pensando en que sería esa sorpresa que me tienes preparada. Conociéndote seguro que me va a encantar- susurró mientras empezaba a cabalgarlo.

Juan casi se parte de risa. Si ella estaba así por lo de esta noche, si supiera lo que le esperaba con Majed se mojaría tanto que se deshidrataría.

La cogió por los hombros y la empujó contra su pecho. Se besaron. Juan le puso las manos en las nalgas. En esa postura ella no podía cabalgar, sólo restregarse con la polla de é dentro. Entonces, él se mojó los dedos con saliva y los llevó al ojete de su madre. Le metió dos dedos y luego un tercero. Fue moviéndolos para lubricar bien el esfínter.

-Qué rico, cariño...

-¿Te gusta?

--Ummm, mucho mi vida, ya lo sabes. Todo lo que me haces me vuelve loca.

Siguieron besándose mientras Juan seguía preparando el culito de ella para lo que vendría a continuación. Cuando comprobó que ya estaba lista, y sin que ella se diera cuenta, sacó el pepino de debajo de la almohada y lo llevó hasta el culo de ella. Lo apoyó...

-¿Pero? ¿Qué.?

-Shhhhhhh, mi amor..déjame a mi...

María quedó tensa. Sentía algo muy duro empujando en su culo. Estaba ya acostumbrada a la polla se Juan, pero aquello era mucho más duro..Y poco a poco entraba dentro de ella. Sólo le causó un poco de dolor cuando entró la punta.. pero luego..ummm luego solo placer. Sentía su coño lleno de la polla de Juan..y ahora como su culo se iba llenando también...con lo que parecía otra polla muy dura... aunque no podía ser, claro.

Cuando tenía dentro más de la mitad de la verde hortaliza, Juan paró.

-Aggggg, Juan, mi amor. ¿Qué me haces? ummmmm que placer

-¿ Te gusta, mami?

-Ohhh, ummmm, agg. si,si..¿qué..qué es?

-Un pepino.

-Aggggg, ya lo decía yo!! Que la verdura era buena para la salud!! jajaja

-Ahora es como si tuviera dos pollas. Es como si dos hombres te estuvieran follando a la vez.

-Mi amor, que placer...fóllame más. Métemelo más...Fóllale el culito a mami con el pepino ese..AHhhh

María empezó a moverse, a restregar su pubis contra el pubis de Juan, sintiendo como su polla se frotaba contra las paredes de su coño. Y sintiendo como aquel nuevo invasor entraba y salida de su culo. Y se corrió. Fue un orgasmo repentino, salvaje. Hundió su boca en el hombro de Juan para no gritar. Un torrente de jugos bañó la polla de Juan

Pero siguió moviéndose. Y Juan siguió follandola por el culo con su nuevo amigo. María gemía, rota de placer. Nunca había sentido tanto. Se sentía llena. Empezó a besar salvajemente a su hijo. Al hombre que la estaba haciendo estallar de placer.

Sintió que se iba a correr otra vez. Esta vez si pudo sentir el orgasmo llevar..como una ola que la iba a destrozar...Y tubo entonces el orgasmo más fuerte de su vida. Tan fuerte que incluso perdió un momento la conciencia, quedando desmadejada sobre su hombre.

Juan entonces sacó lentamente el pepino del culito de su madre y la acostó, junto a él. Respiraba profundamente. El no se había corrido aún, pero no le importaba. Estaba feliz de haber dado tanto placer a su amada madre.

La beso tiernamente, y acariciando su pelo, se durmió junto a ella.

CONTINUARÁ