Un mal día + Un motivo = Dulce Venganza
Conducido por el calor del momento y sacando a flote mis más primitivos instintos, hice jirones su ropa jalando de ésta con tal fuerza que provoqué que ella cayera. - ¡No te levantes princesa que aún no termino! - grité - . Por asombro o miedo, no sabría decir, ella permaneció ahí.
Llegué puntualmente a mi cita al SPA donde suelo asistir a relajarme y olvidarme del mundo por el tiempo que me sea posible. Había tenido un día terrible y buscaba relajarme con unos momentos de paz y tranquilidad o al menos esa era mi expectativa.
Entré a prepararme y comencé a escuchar una odiosa voz, de esas que son muy nasales y que me encabronan hasta la médula, era una mujer hablando con su mejor amiga.
Me convencí a mí misma que aquello me molestaba únicamente por el hecho del pésimo día que había tenido, también me pedí a mi misma no hacer caso a aquello, solo que la respuesta de mis Demonios internos fué un sencillo : ¡Hoy busca a quien te la pague y no al que te la hizo!
Pues bien, aún así con la odiosa voz de aquella mujer retumbando por todo el lugar, intenté relajarme en el área común, pero lo que sí era inevitable era que me enterase de la historia que contaba, pues parecía que a aquellas mujeres les habían insertado un alto parlante en los agujeros que tienen por boca.
De lo que alcancé a captar, estaban presumiendo amantes y minimizando a sus cornudos ¿Esposos? ¿Parejas? No me quedaba claro solo que ella estaba ahí preparándose para una noche de celebración con el cornudo en cuestión: Fede, quién le daba costosos regalos y le mantenía todos sus gustos, incluso con cierta habilidad hasta los gustos del amante, siendo aquello el colmo del descaro.
Me hizo preguntarme por el tipo de “trabajos” que hacía ella para que el tipo en cuestión la mantuviera ¿Sabes? Eso no me molesta en lo absoluto, tampoco me molesta el hecho de que lo siguiente que mencionaba con lujo de detalle era a su bien dotado amante.
- Como en cada ocasión inventaré un excusa para no tener sexo -dijo ella- hoy estuve todo el día con Benito, estoy muy cansada después de estar cogiendo todo el día como conejos, uffff! ¡Esa gran verga! … mucho ha insistido en metérmela por el culo, pero estoy segura que me destrozaría...
Ambas rieron imaginando la escena e intentando adivinar lo que le darían de regalo esa noche.
- No esperaré menos que una exclusiva bolsa Hermes - Dijo la ¿Dama? En cuestión.
Era tan molesta su voz que no pude evitar girar mi rostro para verlas con desdén, entonces mis Demonios me dieron uno de los múltiples pretextos que me encontraba yo buscando para sacar mi enojo interno y desquitarme con ellas...
Reconocí en uno de sus rostros a quien fuera la bully de mi juventud.
Quise apaciguar a mis Demonios sin embargo, solo que, la chica en cuestión, realizó un simple gesto que decidió mi actuar a continuación… giró su cabeza y se encontró conmigo, pero su error fue mirarme de arriba hacia abajo, gesto que me molesta enormemente y que encuentro sumamente descortés.
Cometió después su segundo grave error: Mirarme a los ojos de manera retadora diciendo con sus labios la palabra ¿Qué? en forma despectiva.
¿Su tercer error? No reconocerme.
¡Por mis Dioses! espero que tenga unos grandes Ángeles de la guarda porque ese día desataría mis a todos mis Demonios para una Dulce y bien merecida venganza.
Si alguien hubiese decidido ponerle un rostro a la maldad, hoy podrían usar el mío.
No juzgo la infidelidad, yo misma la he practicado en algunas ocasiones.
Pero si hay algo en este universo que no soporto, son las personas aprovechadas y ventajosas… en este caso, que cumplen los caprichos del amante a costa de la billetera del cornudo, Fede, según entendí.
Internamente me estaba deleitando, momento para el cual yo ya me encontraba recibiendo un delicioso masaje a cuatro manos, entonces, comencé a planear...
Si tú me observas, puedes ver a una mujer encerrada en sus pensamientos, pero realmente dentro de mi mente se encuentra la mayor fábrica de maquiavélicas ideas que puedes llegar a conocer…. No te equivoques, no es una invitación.
La belleza de las redes sociales de hoy en día me ayudó bastante, seguida de gente chismosa y sin que hacer que cree sin investigar antes.
Bastó con un poco de historia simple, pequeños detalles escandalosos y un poco de manipulación social, para hacer que mi “noticia” se esparciera fácilmente por la red, donde daba detalles de aquella persona en cuestión, mencioné el tema del amante, la descripción del lugar y la amiga, ofrecí revelar el punto donde ellos se encuentran, ya que la discreción no es parte de las cualidades de la bella princesa como plus entregaría un video donde mostraba a los amantes de ambas pasando por ellas a la salida del SPA, pues al parecer aquello no estaba planeado.
Terminé mi noche de SPA trazando un elaborado plan mental al cual únicamente le hacía falta un detalle: Contactarme con el cornudo.
Entonces cómo llamado a escena, me contactó: Fede. Lo cual era la primera coincidencia, quise gritarle “¡Eres un cornudo!” pero me contuve, quería poder ver el espectáculo desde primera fila.
Claro, le hice muchas preguntas para asegurarme así, de que el incendio que iba a iniciar ardiera el lugar adecuado y no pusiera en riesgo a nadie más. No soy tan despiadada.
Cuando esclareció todas mis dudas, le cité para contarle los detalles que había escuchado y entregarle el video, perdió entonces los estribos. Se volvió loco, no daba crédito a la situación en general, jamás mencionó la palabra celos, creo que más bien su orgullo de macho estaba herido.
Bien… ¡Vi el mundo arder! era momento de marcharme.
- ¿Qué harías tú? - Soltó aquella pregunta cuando yo ya le había dado la espalda.
¡Entonces ví a mis Demonios sonreír! ¡No! ¡No puedes hacerme esa pregunta y esperar que me quede callada! Le dije un NO rotundo a mi mente perversa…. Sin embargo, aquel día, Demonios necesitaban alimento, entonces me dejé seducir por ellos y.… no desperdiciaría la oportunidad de continuar con aquella vendetta personal.
Soy una persona de mente diabólica que cuenta con la motivación adecuada… Estaba deseando hacerla sufrir... ¡Vamos! hacer que pisara el infierno descalza…
Pero no solo eso, quería verla perder todo aquello que erróneamente valoraba: Lo material, gritarle a la cara: ¡Recuerda que un día eres quién abusa de los demás por diversión, pero al siguiente día ellos pueden encontrarte en una situación comprometedora en su peor día y solo ese motivo necesitarán para que se encienda en ellos el lado más perverso y te hagan pagar!
Hice un mohín y sonreí dando un paso más hacia la puerta, pero mis Demonios estaban empecinados en que le diera vida a mi plan...
- E-espera - dijo él. Te invito una copa ayúdame por favor, no pienso claramente en estos momentos.
Me giré sobre mis talones en modo perversa “on”.
- Un café para mí - respondí. No bebo mientras trabajo, le miré directamente a los ojos y sonreí.
Lo primero que hice fue escucharle, algunas almas solo necesitan ser escuchadas para sanar sus más profundas heridas… y otras, como la mía solo necesitan saber escuchar para obtener información, y la información queridos lectores, ¡Es poder!.
En fin, como dije… la Luna o simplemente la naturaleza que me negaba a aceptar, hicieron algunas acertadas sugerencias para que aquel cornudo planeará una venganza bien ejecutada en contra de ella: Anna, su futura ex-prometida.
“¡Los seres humanos son tan interesantes!” dijo una vez un sabio Dios de la Muerte y con ello concuerdo completamente, mi primera sugerencia hacia aquel cornudo fué:, “Primero logra que te tenga miedo y con el miedo tendrás el poder”.
De físico, él no estaba mal, pero podía estar mejor quizás podría intentar invertirle mas al GYM y comprarle menos caprichos a la loca aquella.
Unas estratégicas preguntas, sus respuestas e inclinación por platicar más de lo que le pregunté, generaron algunas acertadas sugerencias no sin antes tener bien claro ¿Qué quería hacer él? Y en base a ello…
Me despedí de ahí con una sencilla petición que rayaba en comentario: “Espero que me cuentes todos a detalle”.
Un par de días después recibí un mensaje con los detalles de aquella noche, los cuales disfruté con letras mayúsculas, mientras sostenía en mi mano una copa de mi mejor vino, deslicé mis ojos por la pantalla del ordenador saboreando la historia y tocándome descaradamente.
->->->-> (Desde este punto el relato es detallado por él)
Ella abrió la puerta y le viene bien el dicho “Aunque Anna se vista de seda… PUTA se queda”... o ¿Como era?
Aunque vestía de diseñador de pies a cabeza, ahora conocía su verdadera personalidad.
Me encontraba de pie detrás de la puerta esperando por su llegada, esa noche era una noche especial celebraríamos en casa con una elegante cena, busqué un pretexto cualquiera ya que nuestro aniversario ya había pasado como bien sabes, para lo cual había compré su botella de champagne favorita.
La sorprendí apenas ella cerró la puerta:
- ¡Bienvenida Princesa! - le dije con botella en mano, tras besarla y abrazarla. - Tengo un regalo para tí - le dije y deposité aquella botella junto a las copas en la mesita de centro.
Ella sonrió y se acomodó en el sillón situado frente a la tele, conducida por mí, claro ella esperaba solo lo mejor en noches de celebración, por lo que estaría expectante referente a lo que vendría después.
La invité a encender la tele, donde ahora se proyectaba el video de aquel día, reproduciéndose una y otra vez. La sonrisa de ella se borró, pero la mía iba creciendo. Comenzó a ponerse nerviosa, negando todo aquello… diciendo que no era ella que había habido un error.
La información es poder.
- ¡¿Cuánto tiempo Anna?! ¡¿Cuánto tiempo me has mentido?!
Se puso de pie, a lo que conducido por el calor del momento y sacando a flote mis más primitivos instintos, hice jirones su ropa jalando de ésta con tal fuerza que provoqué que ella cayera.
- ¡No te levantes princesa que aún no termino! - grité con una voz que ni yo mismo reconocí. Por asombro o miedo, no sabría decir, ella permaneció ahí.
Lloraba tirada en el suelo, donde lucía sus tetas 38D que amaba chupar y lucía su menudo cuerpo expuesto ante mí, finalmente le arranque las bragas ante el asombro de aquella mujer quien hasta ahora solo había conocido el lado tierno y amoroso de Fede.
Las cosas serán así - dije disfrutando enormemente aquello - ésta noche te haré pagar por ésto, después te dejaré ir, no volveré a saber nada de ti, lo harás si no quieres que este video se haga público en tus círculos sociales.
¡No Fede! ¡No puedes hacerme esto! - comenzó a lloriquear en serio.
¡Claro que puedo! Y ¡Tendrás boleto en primera fila! - grité nuevamente agitando los brazos en el aire.
La única razón por la cual aquello le causaba terror, era por el rechazo social que aquello le causaría, básicamente por que su status lo había logrado de mi mano.
La tomé por el cabello para arrojarla de frente en el respaldo del sillón individual, ella amortiguó todo apoyando sus manos sobre el asiento.
- ¡¿Que haces bruto?! ¡Sueltame! - gritó ella.
Con ella en aquella posición tomé la botella para abrirla y dejar que la espuma cayera por su espalda para después forzar de a poco la inserción de aquella botella directo en su ojete.
- ¡Fede! - terror en su voz - ¡Fede! ¿Que haces? Tu sabes que....
Le di un par de nalgadas que dejaron mi mano marcada en ellas. Si antes no habíamos estrenado aquel agujero. ¡Este sería el momento!
- ¡Quiero tu culo limpio! sucia Zorra… después nos encargaremos del resto de ti.
Aunque ella lloriqueaba, aquella posición facilitaba la labor y la gravedad hacía lo suyo dejando correr el contenido de la botella dentro de los intestinos de Anna, forcé el cuello de la botella en su totalidad pese a sus ruegos, llanto y súplicas, la sostuve ahí por algunos minutos, girando la botella para adicionar incomodidad y alternando con golpes en sus glúteos y espalda con la mano abierta.
- !Ahhhhhh! ¡Fede! ¡Por favor para! ¡Bebé podemos arreglar ésto! ¡Dueleeeee!
Tapé de inmediato aquel agujero con un plug, aunque la botella había hecho lo suyo, me asegure de que este fuese más grande para que impidiera la salida del líquido.
La conduje hacia nuestro sótano forzándola a caminar con sus intestinos llenos y el culo tapado, apenas si se resistió. Hice entonces lo necesario para poder colgarla firmemente del techo.
- ¿Te he regalado suficientes bolsas cariño? Hermés, LV, DG… ¿Te gustaría conservarlas?
Ella afirmó con cierta cautela.
- Verás -le miré directo a los ojos - ahora te golpearé directo en el culo, serán golpes verdaderamente fuertes y… te dejaré conservar tantas bolsas como golpes aguantes.
Sin permitirle que dijera nada, tomé una tabla que compré después de que tuviera una interesante plática con la mujer que me entregó el video, le clavé sin embargo una serie de tachuelas de metal.
Ante el primer golpe ella gritó, sin embargo sabía que se esforzaría por sus bolsas, pero me daba igual siempre y cuando pudiera azotarla.
Cuando ya llevábamos un buen número de golpes, la subí un poco más, ahora estaba bañada en sudor por el esfuerzo y el dolor físico que estaba soportando con aquellas nalgas de un rojo intenso con algunos toques de morado.
Coloqué debajo de ella un contenedor con todo su maquillaje, ¡Definitivamente la casa no iba a perder! es decir yo.
- Puedes quedarte con todas las bolsas princesa - mi tono era consolador- Entonces golpee sin piedad hasta que aquel plug salió y derramó el contenido de sus intestinos sobre el contenedor que tenía debajo arruinando por completo el contenido.
Reí al ver su rostro. Le arrojé entonces el contenido de varias cubetas de agua en las cuales previamente había depositado grandes cantidades de hielo.
Aquello sin duda la espabiló, pero
el simple hecho de verla me llenaba de furia.
Mientras la bajaba tuve una idea que realicé por mero impulso, tomé unas tijeras y ante sus gritos y resistencia, comencé a cortar su cabello tomando grandes mechones de éste, después de todo yo también había pagado por él.
La tenía quebrada, suplicando y llorando.
- ¡No Fede! ¡Detente! ¡No más! ¡Piedad! ¡Mi cabello no por favor!
Lloró, berreó y gritó, pero ella no era nada para un hombre con la motivación que ahora yo tenía.
Tome una vara naranja de las que proporcionan descargas eléctricas con la punta para divertirme unos instantes y terminar de quebrarla, la necesitaba bien dócil para lo que seguía.
Se retorcía en aquel sucio suelo entre su mierda, agua y cabellos, como la lombriz en que la había convertido.
Estaba empalado, pero no le daría el gusto a aquella sucia Zorra de cogermela nuevamente…
Alternaba tres o cuatro descargas y la dejaba descansar hasta que su postura natural ante aquella tortura fué ponerse en posición fetal intentando cubrir lo más posible de su cuerpo.
La dejé ahí, tenía que preparar lo que venía a continuación, cuando bajé nuevamente, la encontré en un rincón llorando, no importaba donde estuviera incluso me beneficiaba pues no se movería, me encargué de decorar su blanca piel y menudo cuerpo con una correa de piel, delgada, asemejándose a un cable, la arrastré nuevamente para dejarla boca arriba, quería azotarle muy bien esas tetas con un gato de nueve colas hasta que estas estuvieran de un rojo brillante.
- ¡No más Fede! ¡Por piedad! ¡Deten ésta tortura! ¡No puedo más!
Con ella viendo hacia arriba inmovilice sus brazos pisandola firmemente, aunque no pensé bien aquello pues se resbalaba constantemente, no fué sencillo pero cumplí mi objetivo, golpeando fuertemente sus senos que ahora debían dolerle intensamente.
No me costó ningún trabajo atarla a una mesa, donde me aseguré de sujetar lo más posible para limitar su movimiento. Una correa por la frente, otra por el cuello, por aquella cintura, una muy ajustada sobre sus senos…
Introduje entonces un vibrador dentro de ella, colocando la mayor velocidad de éste aparato y la dejé ahí.
Tras unos minutos, llegué acompañado de Benito. Su rostro de asombro, vergüenza y angustia, era perfecto.
-¡Que es esto Fede! - Gritó molesta, al parecer recuperó el valor
Una vez que tuve su atención comencé a hablar deleitándome de sus movimientos y contoneos al saber que el vibrador ya estaba haciendo lo suyo.
- En una cosa no te equivocaste Zorra, el dinero es muy importante, por ejemplo aquí Benito, necesitaba algo de capital para comenzar un negocio donde pueda disfrutar al mismo tiempo de su pasión por los tatuajes.
El tarado en cuestión estaba sacando ahora todos sus instrumentos….
- Sabes que me gusta siempre apoyar a los nuevos artistas, como él…. Con algo de capital pondrá su negocio de Tatuajes en marcha, pero claro, antes necesito ver la calidad de los mismos así sabré que no estoy desperdiciando mi dinero...
Entonces ella vió con terror como él se preparaba.
- ¡No Benito! ¡No! ¡Por favor! ¡Tú no puedes hacerme esto! ¿Porque solo me castigas a mí?
Su voz era temblorosa, por el terror y por el vibrador que tenía adentro.
- Cuando me reuní con él, tenía otros planes, no lo culpo Anna, entiendo la causa por la cual lo elegiste a él… Sin embargo, no olvides, el dinero…. Bueno… Intenta no moverte demasiado ¿Quieres?
El tarado en cuestión se colocó unos audífonos para no escuchar, realmente no le veía la mínima emoción en el rostro cuando comenzó con la labor encargada y muy bien pagada, a cual consistía en tatuar en sus tetas las palabras PUTA e INTERESADA con el tamaño suficiente para que no pudiese usar grandes escotes sin que las palabras fueran mostradas.
- ¡Noooooooooooooooooooo! - gritó ella desgarradoramente al sentir aquella aguja sobre la piel y al saber que nada podrìa hacer para evitar aquel castigo.
Me aseguré de tener un buen lugar para el espectáculo.
- Intenta no moverte Zorra, no querrás arruinar el trabajo de tu amante.
Su cuerpo se encontraba cediendo pero no pudo dejar de moverse, lloró amargamente durante todo el proceso, incluso en algunos momentos nos maldijo.
- No eres la única interesada ¿Sabes? Ahora mismo serás víctima de tus propias creaciones.
Abrí un portafolio lleno de dólares cuando Benito finalmente terminó su labor.
¿Quieres ganarte un dinero extra? - pregunté al taradao. A lo cual él afirmó. Nunca he conocido a nadie de su calaña que rechace dinero sin esfuerzo.
Te puedes llevar todo ésto si enculas a esta Zorra….
¡Ni siquiera terminé de decir completamente aquello! Y él ya se estaba sacando su verga.
Sonreí sacando yo la mía, disfrutaría entonces masturbandome viendo la escena.
Ella apretó los dientes absorbiendo el grito de dolor cuando él introdujo su verga en ella, tenía el vibrador dentro, y solo ella sabía el número de orgasmos que ya había tenido. Tras bombear un buen rato y destrozarle el culo, él descargó su leche y casi al mismo tiempo yo eché la mía en sus tetas recién decoradas.
¡Ahhhhhhh! Ahora me sentìa mejor, mucho mejor....
- Si acaso regresas por aquí, te espera una suerte peor que a ella - le advertí a Benito.
La gran final venía… Desaté una de sus manos y coloqué un celular en esta.
- Tienes exactamente 30 minutos para salir de aquí, llama a quién puedas, terminado éste tiempo bajaré y de encontrarte aquí… me encargaré de llevarte como estés a nuestro restaurante favorito....
¡Ah! Me olvidaba…. Todo ésto fué grabado …. En caso de que decidas ponerte creativa, me aseguraré de editarlo y manipularlo siempre a mi favor… ahora dulce Zorra: ¡Conoces el verdadero poder del Dinero!