Un loko desnudo

¡Hola a todos!

Antes de nada quiero saludar a todos los miembros de Todo Relatos, a los lectores y especialmente a los creadores de los relatos. Durante años habéis hecho que mis noches comiencen de una forma agradable, sensual y morbosa.

Durante esta crisis del Covid19 me he dado cuenta de que la cantidad de relatos subidos a esta página ha aumentado en gran medida, y pensé, ¿por qué que no contar mis experiencias? Y aquí estoy, dispuesto a desnudar mi alma para excitaros y que paséis un rato delicioso...(¡espero!)

Antes de publicar mis relatos, quiero presentarme.

¡Qué difícil es describirse! Soy un tipo normal. Me cuido (sin llegar a ser una obsesión) pero también soy un “disfrutón” de la vida. Ya entrado en la cincuentena, me conservo bien, incluso no aparento la edad que tengo. Mido 1,75 de altura, rondando los 66 kilos, constitución normal, atractivo de cara, desde hace muchos años con pelo largo castaño claro (ahora ya más canoso), a veces suelto, a veces recogido en varios tipos de colas; de filosofía y estética hippie, pendientes en las orejas, perilla canosa de candado, ojos marrones y expresivos, el símbolo de la Paz y el Amor tatuado en una ingle, siempre con un par de colgantes, pulseras y tobilleras de conchas. No demasiado vello en el cuerpo, huevos afeitados, nada de pelo en la espalda ni en el culo; un poco de pelo en el pecho y la típica línea de vello que baja por el ombligo hasta el pubis (que me lo recorto), piernas torneadas y con algo de vello. Polla de 10 cm. en reposo y 15 en erección. Gay, aunque también he tenido algunas experiencias con mujeres y con parejas heterosexuales. Vivo en la isla de Mallorca. Amo la naturaleza, el aire libre y estar bronceado. Suelo vestir ropas hippiosillas; pantalones sueltos multicolores que disfruto de llevar sin ropa interior y que se note mi polla balanceándose debajo de la tela al caminar; tejanos muy desgastados rajados y/o rotos que dejen ver partes de mis piernas y nalgas e ingles, y me erotiza mucho llevar tangas, g-strings y taparrabos que me hago yo mismo.

Descubrí el nudismo con 18 años; a lo largo de los años me he convertido en un nudista convencido.

Me encanta estar en pelotas siempre que puedo: en casa, en la playa, en el monte, en la montaña, solo, con amigos, con desconocidos, en zonas de cruising, en clubs gay. No tengo ningún reparo en que mis vecinos me vean en pelotas, incluso salgo desnudo al balcón a cualquier hora del día o de la noche. Practico senderismo nudista. A veces conduzco desnudo, otras voy de pasajero pajero. Me gusta estar en las playas con la polla morcillona o empalmada, pasear por la orilla, bañarme así con toda la naturalidad del mundo, incluso estando con mis amigos. Me gusta dar normalidad y visibilidad a las erecciones en muchas situaciones.

Me gusta colocarme con marihuana y con hachis, relajarme, sentirme a gusto, estar excitado e intentar alargar ese estado lo máximo posible. Bailar empalmado en las fiestas de código desnudo de los clubs, menearme la polla sin pudor y con lujuria, sin ninguna vergüenza, sin ningún miedo, sin prejuicios, sin tabúes; disfrutando de mi masculinidad y de mi profunda adoración por la libertad en su máxima y más hermosa expresión; de utilizar el sexo como vía para elevarme a otro nivel; entiendo la sensualidad, el erotismo y el sexo como un ritual de celebración de la vida, de amor, de respeto y de comunión entre hermanos. Me gusta dejarme fluir y expresar mi sexualidad, mi energía, mis instintos más primitivos, más profundos, que considero parte de mi espiritualidad. Creo que mi vida ha sido y es, una exploración de los caminos hacia la libertad. Y sí, reconozco que soy exhibicionista; no me importa ser visto haciendo uso del mejor regalo: la vida y la libertad, tanto en plan sólo nudista como en actitudes erótico-sexuales-lujuriosas-festivas. De igual forma, amo ver a otros haciendo uso de su libertad.

Espero que estas pinceladas sean suficientemente interesantes para que sigáis mis relatos.

Un abrazo desnudo a todos los que quieran recibirlo y cuidaros mucho en estos tiempos difíciles.

Amor y Libertad