Un loco y desesperado amor
Cuenta la historia de todo lo que se tiene que pasar para estar con la persona que realmente se ama en esta vida.
Empezare diciendo que este es mi primer relato espero y les guste y espero comentarios.
Esta historia es real por lo tanto cambiare los nombres de las personas involucradas.
Bien empezare por Mariela.
Ella es una chava de 23 años, mide 1.74, tez morena, ojos color miel, cabello negro, rizado, esbelta bustos medio unos glúteos bien parados y redonditos. Esta en el último semestre de medicina. En la universidad es una de las chicas mas deseadas por todos los chicos y chicas posibles ella es una lesbiana abierta y para solventar sus gastos da clases de karate.
En cambio Claudia.
Es una chava de 22 años mide 1.63, es de tez güera, ojos color verde azulado, cabello lacio, rubio. Es esbelta busto chico-medio, unos glúteos chicos pero bien paraditos. Esta en el segundo semestre de derecho. Vive con sus padres son como todo buen cristiano y lo peor de que son homofóbicos.
Bueno comencemos.
Claudia: ma ya me voy nos vemos al rato
Mamá: si no te preocupes te cuidas y ve con dios
Claudia: si no te preocupes ma estaré bien ¬.¬
De camino a la universidad le llego un mensaje de una amigo diciéndole que había una revuelta por lo tanto no habría clases. Ella desinteresada se fue al centro comercial para pasar el rato y no estar todo el día metida en su casa. Paso de tienda en tienda hasta que llego la hora de irse a casa.
En el camino se encontró con un tipo el cual la asalto por suerte no paso a mayores solo fue el susto. Con eso que le había pasado decidió meterse a alguna clase que le ayudara a defenderse. Ella recordó que por su casa había una escuela de karate.
Antes de ir decidió llegar a su casa platicarle a su mama.
Claudia: mama ya llegue.
Mama: como te fue? Oye porque te ves tan pálida? Que te paso? Dime di algo no te quedes callada (ya se típico como se puede decir algo si no te dan tiempo ni de respirar pero bueno)
Claudia : mama estoy bien un tipo me asalto pero no paso a mayores (n.n) y bueno estoy bien que es el punto.
Mama :si eso es no bueno pero tenemos que ir a la policía esto no se puede quedar así
Claudia: ¬.¬ mama no te preocupes además bien dices que dios pone a las personas por una sola razón es nuestras vidas, no??
Mama: si tienes raso ( como todos sabrán esas palabras no existen en el vocabulario de una madre es por eso que ella hiso caso como si le hubieran dado a beber vinagre )
Claudia: oye mama cuando venia de regreso vi una escuela de karate no se pensé que si aprendía algo de ello podría defenderme de ese tipo de personas en un futuro tu que opinas le entro o no??
Mama: si, si quieres puedes ir hoy mismo para ver que tal
Claudia: gracias ma bueno ya voy por que cierran tempra te quiero
Mama: yo igual
Ella salió de su casa, al llegar entro y pregunto le dieron los informes y le dijeron que si no quería quedarse a ver la clase a lo que ella accedió. Cuando ella paso al área de visitas observo todo con detalle hubo, y su mirada se poso en la entrenadora. Ella pensó que tal ves estaba en el mismo cielo, sus ojos no podían creer tanta belleza en una persona y menos siendo mujer. La entrenadora al fijarse en ella le regalo una sonrisa. Claudia sin nerviosa se la regreso.
Al finalizar la clase la maestra se despidió de sus alumnos y se dirigió a Claudia.
Entrenadora: hola que tal le pareció la clase
Claudia: muy bien
Entrenadora: (n.n)
Claudia: a por cierto me llamo Claudia
Entrenadora: mi nombre es…
Espero y les allá gustado es mi primer relato así que espero y comenten para saber si le continuo o no gracias