Un Joven Semental

Javier con 18 años de edad estudia el tercer grado de la educación secundaria, es de una familia sencilla al oriente de la Cd. De México, es inquieto y aventurero, es tierno, pero tiene un carácter fuerte, ha encontrado como fuga a algunos problemas que tiene en casa el tocar la guitarra, falta un mes para que cumpla 19 años, y desea comprarse, para ese día, una guitarra nueva, tiene novia y quiere casarse con ella cuando cumplan 20 años

A esta edad Javier aparenta mas edad, es un chico bonito, tez blanca, 1.70mts de estatura, cabello castaño rubio, ojos miel aceitunados, labios rojos gruesos y delineados, dientes blancos y perfectos, una sonrisa agradable y sensual, delgado con cuerpo definido aunque en formación todavía, piernas largas y un traserito rico y apretadito que se le dibuja por atrás. Aquella noche calurosa, mientras se acercaba a mi, no puede evitar ver su entrepierna, a través de un delgado pans azul marino de algodón que llevaba puesto, algo se movía de un lado a otro discretamente. Con esa facha el niño es un blanco perfecto y una presa vulnerable para fanáticos del buen sexo.

Me llamo Gabriel, tengo 30 años moreno claro 1.76 mts. 77kg. delgado y dicen que no mal parecido, me considero bisexual, ya que he tenido aventurillas por ahí con personas de ambos sexos y soy fanático del buen sexo, que coincidencia!!!, pero bueno, procuro estar activo, hago algo de ejercicio y me gusta pasar tiempo en el cine, en centros comerciales comprando conviviendo y observando.

Esa noche había ido yo a comprar algunas cosas y salía del centro comercial.

Si que me cautivo el muchacho incluso con su voz, una voz de niño adolescente, algo ronca y chillona.

Si usaba sus tardes libres después de la escuela y los fines de semana, seguro que juntaba para la guitarra, o al menos eso pensaba Javier ese día

-Hola, –Esa dulce vocecita ronca!- estoy vendiendo chocolates para apoyarme en mis estudios, ya que, no tengo muchos recursos y deseo seguir estudiando porque…………………………….…….

No recuerdo toda la letanía, pero no paraba de hablar, creo que era su estrategia hablar y hablar………hasta que le compraran.

-Esta bien, esta bien! –Dije sonriendo ya que me causo gracia que no parara de hablar. - Cuanto cuestas? Perdón cuanto cuestan? -caray! El subconsciente traicionero!

-4 chocolates por 10 pesos! –Al ver que le sonreí, el devolvió la sonrisa. Que lindo esta el chaval! pensé.

-Porque tan caros? – Pregunte divertido- Parecía un chaval muy activo, y lleno de vitalidad.

-No están caros, son de buena calidad –Exclamo con su vocecita chillante que me atrapo de inmediato –ahora que si quiere 1 por 5 pesos.

Solté la carcajada

–Oye si que eres bueno para las ventas! -También se rió mi amigo.

-Si no, no es negocio! –dijo divertido también.

-Que estudias?

-La secundaria, tercer grado.

-Que bien, y sacas buenas notas?

-Si claro, de los mejores de la clase.

-Aha, -murmure viéndolo directo a esos lindos ojos aceitunados y sonriéndole.

-De verdad, si estudio, no crea que estoy vendiendo solo para perder el tiempo…bueno, la verdad es que estoy ahorrando para comprar una guitarra y por eso estoy trabajando aquí.

-Que bien! Te gusta tocarla?

-Si, de hecho, si esto de las ventas funciona quiero tomar clases de música en forma.

Bueno, funcionó el asunto de hacerle la plática. Llegamos a mi auto. El estacionamiento era subterráneo y estaba algo oscuro, ya que, eran las 9 de la noche y en domingo, a estas horas hay poca gente saliendo de los cines o comprando cosas de último momento.

-Y que edad tienes?

-18, casi 19 años

La verdad es que seducir a un chaval de 14, puede ser una tarea fácil para quien se lo propone, pero no deja de ser un delito, esto es, abusar de un menor, pero la verdad es que esa noche… no fue así. En realidad antes ya había tenido yo contacto con un chaval de 18 años, pero eso había sido hace 11, tenía yo 19 años entonces y mi primo 18, el había comenzado el juego y terminó muy cachondo el asunto. Pero bueno, volviendo a la realidad

Le llevo 12 años al chaval –soy un desgraciado! pensé para mis adentros, por imaginar siquiera tener un acercamiento con el muchacho. -Bueno podría enseñarle algunas cosas! – Maldita imaginación!!!

-Entonces si me compraras? Mira que ya te acompañe hasta aquí!

-Ahora resulta que me cobraras también la caminada!

-Si claro! Recuerde, todo es negocio!

-Todo??? –Dije con una sensación en el estomago, como cuando uno esta nervioso.

Mis instintos volvieron y ya no pude parar la situación.

-Si todo –Permaneció una sonrisa en sus labios.

Estaba claro que Javier no conocía mis intenciones en ese momento. La puerta del carro estaba abierta yo en el asiento con un pie dentro y otro fuera buscando cambio en el interior para comprarle chocolates y el de pie a un costado del auto esperando, sosteniendo la bolsa de chocolates con la mano izquierda y la otra recargada en marco de la portezuela del vehiculo.

Lo mire por un segundo con pasión, lujuria, deseo, calentura y miedo, mire alrededor en un milisegundo para comprobar que no hubiese nadie mirando y entonces extendí mi mano y rocé su paquete con la parte posterior de la palma de la mano suavemente, de arriba abajo tocando toda la extensión del bulto tentador que se dibujaba en su pantalón deportivo.

-Y cuanto cuesta esto? –interrogué sin dejar de sobar su entrepierna.

Los nervios lo invadieron, miro mi mano sobando su paquete por encima del deportivo y me miro a los ojos, sus pupilas se movían inquietas dentro de sus ojos, esa hermosa tez blanca de su rostro se tornó colorada, y no se movió ni un milímetro de la posición en la que estaba, recargado en el auto. Por un momento pensé que iba llorar. Entonces después de haber comprobado el tamaño del trozo de carne que tenia mi amigo entre las piernas, que por cierto ya había comenzado a cobrar vida por la lujuria del momento, aparte mi mano y le dije

-Te han hecho sexo oral?

Agacho la mirada por un momento como avergonzado y me dijo

-No –Una respuesta tan seca y corta que casi me mata.

-Sabes que es?

-No

-Quieres saber que es?

No me contestó, solo me miro de nuevo a los ojos como diciendo, déjame ir!.Pero mi lujuria pudo mas en ese momento, ahí como estaba sentado en el asiento del auto, mire a todos lados para asegurarme que no hubiese nadie cerca y extendí mi mano nuevamente, esta vez con la palma de la mano para darle mas tacto al asunto y toque esa carne viva que comenzaba a reaccionar mas y mas al tacto de mis manos. Agacho la mirada y observo como su pene lo traicionaba y comenzaba a levantarse poco a poco dándome un espectáculo delicioso, con una mano levante su playera y con la otra mano baje el resorte del pantalón deportivo dejando a la vista un bóxer blanco de algodón ligeramente ajustado y marcando una carne de unos 12 centímetros en semi-erección recargada a en su costado izquierdo -vaya el muchacho se excita rápido, pensé- . Pase la punta de mi dedo por encima de su bóxer justo en la punta de su glande, lo toque muy suavemente y entonces observe el espectáculo completo, Guauuuuu!!! Que chaval tan delicioso tenia a escasos centímetros de mi con el pans a la mitad de unas piernas con un fino vello entre rubio y negro, un trozo de carne debajo de un bóxer ya semi-mojado, otra fina línea de vello que se elevaba un poco por encima de su ombligo y bajaba hasta perderse en el elástico del bóxer, un abdomen fino y delicado, no marcado todavía, pero apetecible, y dos bolas perfectas, redondas y un tanto contraídas, supongo por los nervios de mi amigo, que hacían juego con el delicioso miembro de mi joven victima.

No demore más tiempo, aunque en todo esto teníamos a penas 3 minutos, le baje el ligeramente mojado bóxer y aprecie la carne en todo su esplendor. Mi amigo tenía un pene muy bonito, lo tomé delicadamente con mi mano derecha y acerque poco a poco mi boca a tan apetecible manjar. En el camino a engullir ese delicioso postre pude percibir un olor fabuloso, un olor a macho joven, inexperto, virgen, hundí mis labios en ese rico pene joven, que poco a poco fue creciendo mas y mas hasta que en un momento que lo saque de mi boca me percate que apuntaba justo al techo, alzándose grueso, orgulloso y soberbio de su tamaño, para la edad de mi amigo, unos 15 centímetros duro en completa erección.

Mire a los ojos de mi amigo y observaba perplejo el espectáculo, hasta entonces dejo la bolsa de chocolates, que creo que debían estar completamente derretidos por tanto calor, encima del auto y me miro a los ojos, después de 3 minutos de una mamada intensa que le di, mi amigo me miraba ya, de otra forma, en sus ojos veía lujuria, curiosidad y algo de superioridad, en ese momento tomo su herramienta con su mano derecha y la apunto a mis labios nuevamente, de la punta de su pene escurría líquidos seminales mezclados con mi saliva, entonces con una mano alce su pene hasta arriba y con mi lengua recorrí el camino desde sus testículos suaves, con un escroto blanco y terso, hasta poco a poco recorrer toda la extensión de su miembro. Mi amigo no estaba circuncidado, el prepucio estaba completamente retraído y lucia un glande rojo y delicado. El ligero temblor de sus piernas me decía que era la primera mamada que alguien le daba a este chaval. Después de unos minutos mas de chupársela colocó una de sus manos en mi cabeza y me estaba dando tremenda cogida por la boca, el chaval en unos minutos se había convertido en un cojelón oral profesional. Yo me aferre con una mano a su miembro para controlar las envestidas de mi joven semental y con la otro masajeaba sus delicadas bolas que se movían el ritmo de sus caderas y chocaban ahora con mi barbilla, mientras mi nariz aspiraba el rico olor de la ligera mata de vellos púbicos que cubrían tan hermoso mástil.

No había dicho una palabra en el transcurso de esos 8 minutos aproximadamente que teníamos en esto. Vi entonces un baño de personal que estaba justo a unos 10 metros de distancia al fondo del estacionamiento.

Detuve sus estocadas y aparte su mano de mi cabeza.

-ven –Le dije levantándome del asiento del auto y apartándolo del camino de la puerta del mismo, cerrando ésta tras de mi tire de su brazo y entonces me siguió intentando acomodar su grueso y erecto miembro dentro del bóxer y del pans.

Era un vestidor del personal, jale el brazo de Javier lo senté en una banca de madera y de un tirón eche abajo su pans con todo el bóxer, cayendo éstos hasta los tobillo, me arrodille frente a el abrió sus piernas y con su mano nuevamente guió su pene a mi boca, su mástil no había perdido longitud, levante un poco sus piernas hasta que se reclino en la banca y entonces me quedo a lo vista su ano, unas nalguitas duras y con una raja semi velluda mi amigo tenia un ojete delicioso, urge con mi lengua alrededor de su ojete. El simplemente se abandono a mis deseos que eran los suyos propios, mi legua jugo con su raja y sus bolas, tenia yo una de sus piernas en mi hombro y la otra el la Tania arriba de la banca. Entonces comencé a desabotonarme el pantalón y libere mi pene, que estaba a punto de reventar en mis pantalones. Entonces se levanto súbitamente de la banca, me puse de pie también, y me dio la vuelta, bajo mis jeans y se quedo con mi trasero a la altura de su miembro, comenzó a deslizar torpemente su pene erecto entre mis nalgas, recorría toda mi raja hasta mis bolas que pendían inertes, con una de sus piernas separo las mías y me agacho de tal forma que apoye mis manos en la banca de enfrente dejando mi culo a su disposición, mi amigo jadeaba excitado y sudaba a chorros, solo sentí como dio un paso a hacia mi y con su mano apunto su glande a la entrada de mi raja, no hacia falta lubricación, el chaval echaba liquido seminal al por mayor, entonces sentí su carne palpitante abrirse paso en mi raja, buscando entrar hasta el fondo, poco a poco mi joven macho me fue penetrando, sus movimientos eran torpes y nerviosos, no lograba que se pene entrara en mi ano, jalaba mis caderas de una manera salvaje hacia el, el cabron me quería coger a como diera lugar, hasta que abrió mis nalgas localizo la entrada de culo y empujo con su carne erecta en ese dirección, el chaval presionó tan fuerte que me saco lagrimas de dolor.

-Cabron!!! Despacio- dije adolorido después de la primera estocada.

Era yo su primera relación sexual, su inexperiencia al empezar a penetrarme lo delato y el temblor de sus piernas era casi incontrolable, mi amigo estaba a punto de estallar, aun así logro penetrarme hasta el fondo, sentí su sexo completamente dentro de mi esfínter y sus testículos oprimidos entre nuestros cuerpos, casi me desgarraba el culo con semejantes envestidas, pero eran esos torpes movimientos lo que mas me excitaba. Semejante muchachon culeandome, no podía contener el fluido de liquido de mi pene que colgaba erecto, duro y sacudiéndose al ritmo que mi semental adolescente mandaba con su penetración.

-Despacio, Cabrón que te vas a lastimar y me vas a lastimar a mi más de la cuenta.

Bajo un poco el ritmo y luego acelero como poseído entonces hubo una conexión sensacional, después de unos minutos, logro controlar sus envestidas y el temblor de sus piernas, su pene comenzaba a abrirse paso en mis entrañas con mas delicadeza. Nuestros cuerpos fueron uno por varios minutos. Se aferro a mis caderas y nalgas de una forma tal que me dejo marcados sus dedos. De pie con las manos apoyadas en la banca y el trasero a disposición de este calenturiento chaval mi pene duro y erecto se balanceaba de enfrente atrás entre mis piernas bañadas de sudor junto con mis bolas inertes al ritmo de este semental adolescente.

Que tremenda experiencia, que energía, llevaba solo 5 minutos follándome el culo y a mi me perecía una eternidad, mi esfínter comenzaba a molestarme y entonces de repente comenzó con unas estocadas tremendas que y

-aaahhhh, uuuuuffffffff, cabrón, que culo!!!!!!, -exclamaba mi joven amigo al tiempo que empujaba mas su pene en mis entrañas y escupía semen en mi interior. –aaaaaaahhhhhhhhh

Caramba que delicia, siiiiiiiii.

Se corrió por casi un minuto entre chorros grandes y pequeños dentro de mis entrañas. Era la mejor cogida de mi vida. Se quedo inmóvil por dos minutos recargando su pubis en mi culo mojado, tocaba mi pecho, bajo su mano hasta mi miembro y lo comenzó a masturbar, ya me había corrido a la mitad de sus envestidas sin tan siquiera tocarme, pero mi pene estaba en completa erección nuevamente, Me puso a mil y entonces me incorporé saque delicadamente su miembro de mi ano, me di la vuelta y lo bese, fue un momento tan cachondo que casi me corro nuevamente con el beso que le di. Roce mi pene erecto con el suyo flácido y coloque toda mi erección justo debajo de sus bolas y comencé a penetrar sus piernas, lo abrace, el se abandono a mis caricias. Sentir sus bolas mojadas en sudor y semen masajeando mi pene me puso aun más erecto, y eyacule, perdí la cuenta de cuantos chorros cayeron manchando el piso del lugar y nuestras ropas pero de algo estaba seguro, me dolían las bolas de tanto semen que arroje aquel día.

Mi amigo y yo apenas pasamos 10 minutos en el interior del vestidor de servicio del personal del estacionamiento, sin embargo a mi me pareció una eternidad. Salimos de ahí después de lavarnos las manos y acomodarnos las ropas. El estacionamiento seguía prácticamente vació de autos. Las 9.20 de la noche. Entonces me acerque a los labios de mi amigo y lo bese suavemente, el respondió tímidamente y le dije al oído

-Para la otra me toca a mí.