Un hasta luego por un adiós

...hay quienes viven la vida que quieren y otros que viven la vida que deben...

Hola de vuelta...bueno...no tan de vuelta pero a los relatos si, quiero saludar y agradecer a tod@s, por sus lindos comentarios, y pues como dije antes no he tenido mucho tiempo, no es que lo tenga ahora tampoco pero digamos que este relato lo tuve que escribir...dos niñas aqui de TR, me inspiraron, si bien son digamos una pareja frustrada pero se nota el cariño, y pues en ellas me inspire para escribir, esta no es su historia pero quizás si sea la de otras niñas, chicas o mujeres que guardan su historia en silencio, no se si yo les di letra, sólo se que este relato aunque algo inverosimil es mas común de lo que pensamos, y bueno porque no, inspirado quizás en mi propia vida también, hay algo de todo y de nada aqui, este es un regresar a escribir relatos, un ejercicio que me hice yo misma para ver si todavía puedo, espero que les guste, no me asesinen con las criticas y comenten, sean libres de expresar lo que quieran yo soy todo ojos y no me ofendo ni me siento mal, todo se toma como un consejo para seguir aprendiendo y avanzando, muchos besos y abrazos y recuerden....amen mucho y gozen mucho más...

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UN HASTA LUEGO POR UN ADIOS

(ding dong)

Caminé hacia el pasillo y de allí hacía la puerta, en todo mi ser llevaba la esperanza de que si fuera ella, pero el temor era lo que ahora más reinaba, la lluvia y el viento se escuchaba como golpeaba las ventanas, y de verdad me preguntaba si de verdad ella vendría  a verme

(ding dong)

El timbre sonaba otra vez y yo trataba de llegar a esa puerta, tome un poco de aire y girando la perilla abrí….y era ella

Miriam: no pensé que vendrías….pero pasa que está lloviendo a cántaros – le ayude con su abrigo y el paraguas y la hice entrar –

Claudia: gracias, ¿cómo es que dijiste cuando entre? – me  miró mientras se sacudía el cabello –

Miriam: que pensé que no vendrías….nada mas

Claudia: - me volvió a dar esa mirada intensa – ¿cómo puedes decir eso? Acaso no he venido siempre que me lo has pedido? – baje la cabeza por vergüenza y asentí –

Miriam: lo siento, tienes razón…pero pasa y toma asiento – la hice entrar al salón y le pedí que se sentara, mientras yo me sentaba frente a ella –

Claudia: oye, no soy una visita cualquiera…ahorra el protocolo y ven siéntate a mi lado si? – me pare de mi asiento y sonriendo me senté a su costado –

Miriam: aún empapada te ves hermosa – le dije, mirándola fijamente –

Claudia: nahh, debo parecer un gato mojado, pero no importa cómo me vea frente a ti, tu siempre dirás que soy hermosa….aunque no sea cierto

Miriam: eres hermosa, y lo sabes, yo no sé porque nunca lo has querido aceptar

Claudia: porque será que sé que no es cierto?

Miriam: jajaja, ay mujer, tienes la belleza de una actriz de cine, desde bebe ya se veía esa calidad…..tu belleza lo dice

Claudia: siempre te he dicho que tu sólo lo dices porque me miras con los ojos del corazón, y no con los de esa carita – me toco con los dedos la barbilla –

Miriam: ….los ojos de mi corazón y los de mi rostro opinan lo mismo así que es definitivo….eres bella

Claudia: bueno bueno mejor ya no digo nada, que tu seguirás con tu terquedad

Miriam: perdona, pero que descortés….no te he preguntado si deseas algo de beber?, tengo pisco, vino, cerveza, un refresco o agua?

Claudia: un vaso de agua está bien – me pare de su lado y ella me sujetó del brazo –

Miriam: que pasa? – la mire con mucha duda –

Claudia: ni un abrazo nos hemos dado – se paró a mi nivel y me abrazó sin yo poder reaccionar, más que corresponder al abrazo –

Miriam: siempre me han gustado tus abrazos – sus brazos me rodeaban completamente y yo me acurruque en su cuello –

Claudia: y a mí los tuyos, siempre me han hecho sentir protegida….tu siempre me has hecho sentir protegida – se separó de mi abrazo y se sentó otra vez en el sofá –

Miriam: - arreglé mi compostura un poco y la miré tiernamente – tu sabes que yo siempre te voy a proteger, como una superwoman, así estemos lejos yo vendré volando a defenderte y no dejare que nadie te haga daño…entendido mujercita?

Claudia: lo sé – me moví del lugar donde estaba y fui para la cocina para traerle su vaso de agua, pero ella se paró detrás de mí y me siguió a la cocina mientras me hablaba – yo siempre te he creído, cuando decías que me protegerías, que no me olvidarías, que cuidarías de mi hasta en sueños, yo aún lo creo

Miriam: será porque es cierto?....todo lo que te ofrecí, te di y sentí todo fue de verdad – la miré a los ojos mientras le entregaba el vaso con agua – regresamos a sentarnos?

Claudia: claro que si – le hice una seña con la mano para que siguiera delante mio y ella la siguió y se sentó en el mismo lugar y yo a su lado –

Miriam: de verdad no pensé que vendrías, yo se que debes estar muy ocupada y pues por eso lo pensé….de verdad gracias por venir

Claudia: yo siempre vendré no lo olvides

Miriam: pensé que te habías olvidado de mí

Claudia: eso jamás pasara

Miriam: jamás es mucho tiempo

Claudia: entonces se necesitarían dos vidas de esta para que yo pueda olvidarte sólo un poquito

Miriam: gracias por eso

Claudia: Mimi, dime como se puede olvidar todo lo que vivimos?

Miriam: tienes razón, no se puede, fue muy bello – bajó la mirada y sujeto con las dos manos su vaso – pero ya es pasado y tu vas a comenzar una nueva vida

Claudia: - tomó un sorbo de su agua y me miro fijamente – y para que querías que viniera

Miriam: ohh si, espera, quería darte algo – me paré del sofá  de un golpe – espero te guste – le dije mientras regresaba de la habitación con una bolsa de papel en la mano –

Claudia: es un regalo?

Miriam: si y no….fue un regalo pero digamos que ahora es un repuesto – me miro con ojos de duda – vamos tómalo y ábrelo

Claudia: - estiró la mano y cogió la bolsa y sacó de su interior una cajita larga y la abrió despacio y a penas vio el interior sonrió – es mi estrella, la encontraste

Miriam: no, mande a hacer una igual, ven dame te la pongo – tome la pulsera de la cual colgaba una estrella y se la sujeté a la muñeca – ya esta….se ve hermosa en tu muñeca

Claudia: tanto tiempo, wow, de verdad gracias, esta idéntica….y la tuya – me miró interrogando y yo sacando la mano del bolsillo le enseñe mi muñeca –

Miriam: aquí esta, esta pulsera sólo se moverá de mi muñeca si se rompe o se pierde, y como no creo que eso pase, lo más seguro es que me entierren con ella

Claudia: te acuerdas cuando me la regalaste?

Miriam: claro que sí, yo no olvido nada, tengo memoria de elefante y ese tipo de momentos también son difíciles de olvidar,  por eso pensé que sería un bonito detalle si te la devolvía aunque en copia, y no tienes que usarla mañana, no no, era sólo para recordarte que siempre estaré contigo y pensándote – su rostro se oscureció y sus ojos se empezaron a abrillantar por las lágrimas que querían salir– hey no llores hermosa todo está bien

Claudia: te hice sufrir, y eso aún no me lo puedo perdonar – la tome de la mano y me senté a su lado y le levante el rostro empujando el mentón  con uno de mis dedos –

Miriam: ya está olvidado, de verdad…ya no hay dolor…cuando decidí resignarme, fue cuando el dolor dejo de sentirse – me miraba atenta a lo que decía pero no decía nada y sus ojos se abrillantaban más – de verdad Clau, desde el corazón te lo digo…no hay dolor.

Claudia: fuiste mi primer amor – me sostuvo la mano y la puso entre las suyas –

Miriam: y tu mi único amor, por eso no se olvida, después de tanto tiempo….aún no se olvida

Claudia: crees que se olvide?

Miriam: no lo sé, sabes?,  a veces nuestra historia se repite en mis sueños y vuelve a tener vida, y parece que fue solamente ayer que todo paso por eso creo que aunque conscientemente olvide el inconsciente no lo hará y en sueños me hará recordar  – sus manos acariciaban mi mano y sus ojos atentos aún me miraban –

Claudia: eso fue lo que más me gusto de ti….tus sueños, me llevaste dentro y con ellos, viaje hasta el infinito gracias a tus sueños y tú siempre a mi lado

Miriam: mira tú, yo pensé que mi vida soñadora fue la que te alejo de mi, tu siempre me llevaste a tierra y yo siempre quise elevarte, supongo que gano la tierra y no el cielo no?

Claudia: no es eso Mimi, tú sabes….- saque mi mano de entre las suyas y me acomode en el sofá –

Miriam: si Clau, yo entendí….hay gente que vive la vida que quiere y hay otra gente que vive la vida que debe, y en eso tu y yo somos muy diferentes, y lo entendí, yo pensé que con mis sueños te haría cambiar, pero lo racional gano….y mañana esa racionalidad estará en su cumbre.

Claudia: Mimi por favor no hagas esto sí? Yo no soy como tú, así de valiente, simplemente las cosas no son tan fáciles…yo de verdad no puedo, no puedo…

Miriam: está bien, no te preocupes, pero igual te quiero decir que muy aparte de todo lo que paso y todo lo que trajo consigo, yo entendí de verdad sí que lo hice…tanto así que hoy estas aquí

Claudia: tu sabes que siempre he venido donde ti, cuando me has necesitado o me lo has pedido, y eso no cambiara

Miriam: lo sé, y no sé porque pero te creo, y no olvides que tu también tendrás eso de mi

Claudia: - se levantó del sofá y se fue hacia la ventana a ver la lluvia caer – y como esta Karina– sin mirarme le hablo a la ventana –

Miriam: bien, acepte un trabajo fuera de la ciudad y nos vamos juntas, es un gran paso y creo que lo había aplazado bastante y la verdad no sé porque lo aplace tanto

Claudia: ella es una buena chica

Miriam: la mejor, es comprensiva, cariñosa, amorosa, la mejor amiga, una buena hija, una buena hermana y una excelente mujer de principios, la verdad es que mejor persona no creo que pueda encontrar

Claudia: te dije que encontrarías a alguien mejor que yo, alguien que te mereciera y lo hiciste…

Miriam: y yo te dije que tú, eres única, así que, otra “tu” no encontrare jamás, y si ella me merece no lo sé, lo único que yo sé es que estoy haciendo todo lo posible por merecerla a ella – volteó para verme en el sofá –

Claudia: - me miró un momento para luego decidirse a hablar – es mejor que me vaya, van a ser las 12 y yo mañana tengo mucho que hacer – se dirigió a la puerta y al perchero para coger su abrigo y paraguas –

Miriam: gran día mañana

Claudia: - con la vista fija en la puerta y con su abrigo en la mano volteó para verme en el sofá – irás?

Miriam: se me perdió la dirección, pero llegare no te preocupes – me paré del sillón para abrirle la puerta –

Claudia: - le abrí la puerta y ella abrió el paraguas y se quedo parada en el umbral  – supongo que ahora que te vas será más difícil vernos –

Miriam: pues sí, pero no hay que perder el contacto si?

Claudia: claro que si, y a donde te mudas?

Miriam: a Trenton

Claudia: pero eso está al otro lado del país

Miriam: si, pero es un buen trabajo, no es solo una gran oportunidad pero, también lo mejor para mi carrera

Claudia: y que puede hacer un geólogo en Trenton?

Miriam: aparentemente bastante – la miré con cara de gracia por su comentario –

Claudia: aparentemente….bueno me voy,  fue bueno verte otra vez – se acercó para darme un abrazo y yo correspondí –

Miriam: - la abrace muy fuerte como no queriendo que se vaya, pero sabía que asi debía ser – como me encantan tus abrazos – me separe de ella y  sosteniéndole el rostro le di un beso en la mejilla –

Claudia: - me miró con nostalgia un momento y me dijo – gracias por el regalo

Miriam: era tuyo, así que yo fui sólo una repartidora – le sonreí y ella me devolvió la sonrisa –

Claudia: me voy está lloviendo más fuerte y me toca manejar bastante – se quedó parada como esperando que dijera algo más, pero no hubo reacción alguna mía más que la de despedida –

Miriam: es cierto, maneja con cuidado – me miró atenta, y luego se sintió un trueno estruendoso que la hizo asustar y se abrazó casi instintivamente a mi –

Claudia: - la sostuve en mis brazos mientras su boca se posaba en mi cuello – perdóname, pero los truenos me asustan mucho

Miriam: lo sé, tranquila – la separe de mi cuello para verla mejor, y ahí me encontré otra vez con esa mirada que me cautivaba – eres tan hermosa – no termine de decirle eso y sentí como sus labios se juntaron a los míos y posaron un delicado beso, y yo sin poder asimilar, no respondí, por lo que ella se separó pero yo reaccioné y la sostuve por los hombros y confirme el beso, y en susurro le dije – Clau que estás haciendo – se lo dije con los ojos cerrados con nuestras frentes pegadas

Claudia: no lo sé, pero lo necesito

No tuvo que decir más la abrace por la cintura y cerrando la puerta con el pie, aún con sus labios pegados a los míos, la lleve hasta la habitación, la pose dulce y delicadamente en la cama mientras me echaba encima suyo, sus ojos brillaban como antes, era todo como antes, otra vez la tenía como la había tenido tantas veces….contemple su rostro iluminado por la luz tenue de la noche y de los rayos de la tormenta que azotaba la ciudad….acaricie sus mejillas con la yema de mis dedos y dibuje esos pómulos  que tanto me fascinaron, bajando hasta su mentón y luego al centro de su cuello y al centro de su pecho, donde empecé a desabrochar uno a uno los botones de su blusa, que conspirada conmigo se dejo caer casi en segundos, para dar vista a un hermoso brasier negro que lo único que hacía era aprisionar sus senos perfectos que parecían gritar “tómame”, no tarde mucho en deshacerme de esa prenda y quedo su torso desnudo, el color cenizo que dibujaba ahora su piel con la casi escasa luz, era  mágico….ella con la misma delicadeza que tuve yo en despojarla de sus prendas, hizo lo mismo conmigo, y en pocos minutos quedamos las dos abrazadas, con nuestros pechos juntos y agitados  que parecían acariciarse con cada jadeo que su boca dejaba escapar y con cada beso que le daba a su cuello….su piel se erizaba cada vez que mis labios rozaban aquellos lugares que yo sabía eran los indicados, no había pasado el tiempo entre nosotras, no había pasado nada, nos volvíamos a amar como la primera vez, ella entregada a mi pasión y yo entregada a hacerla sentir….me acomodé en la cama para terminar de desnudarla y allí como escultura su cuerpo desnudo brillaba, y con ella yo me desvestí para su vista, y me miró como siempre lo hacía con esa admiración y el deseo de querer poseerme….me eche sobre ella y la toque por sus contornos mientras ella con avidez se comía mis labios y su lengua me taladraba el aliento al entrar y salir de mi boca mientras yo me perdía en la humedad de esos besos que no habían cambiado nada, sus manos me recorrían la espalda como tratando de buscar algún lugar nuevo y me acercaba más a su cuerpo apretándome por las nalgas….yo sólo sentía como mi centro de fuego crecía y como su humedad empapaba mi pierna, y como se acrecentó cuando mis besos pasaron de su lengua de fuego a los montes de sus senos, que aprisione entre mis manos, y sus pezones se convirtieron en el juguete de mis dedos y mi boca, que no se cansó de acariciar con saliva y succionar con hambre aquellos pequeños, mi lengua los comandaba como los pilotos del movimiento del cuerpo de mi mujer, cada lengüetazo, cada succión hacía que su cuerpo se arqueara y su boca sea la emisora de los más deliciosos gemidos que no hacían más que avivar mi empeño y deseo….un pequeño dolor sentí en mi espalda, su anillo arañaba mi piel….con delicadeza tome su dedo y metiéndolo en mi boca saque ese anillo que no sólo hería mi piel pero mi corazón…sacándolo de mi boca lo puse en la costado de la cama y ella no pareció importarle mucho porque me jaló de vuelta a su cuerpo y a su calor, que ya parecía fuego….sus manos me dirigían y yo sólo obedecía, me enseñaban su vientre que bese con pasión, acaricié su piel con mis besos y levante su cuerpo para abrazarla aún más entre besos mientras mi muslo continuaba en su labor de apretar su sexo que no dejaba de sentirse mucho más húmedo y caliente….mi boca aun recorría y sabía que lo hacía bien porque sus grititos me lo decían, estaba en el lugar indicado y ese beso era el perfecto….sus vellitos acariciaban mi nariz, y el abrir de sus piernas me abrió las puertas al lugar más bello de esa mujer, su esencia, su verdadero sabor me esperaba, y mi boca se moría de ganas de bajar a ese lugarcito prohibido que antes fue sólo mío….separé un poco más sus piernas para encajar perfecta en su entre pierna, un engranaje perfecto logre con mi boca posicionada en su rajita, y mi lengua menguante en su clítoris….ella apretaba las manos a las sábanas de la cama y su cuerpo se arqueaba, dejando su vientre en los aires mientras yo sostenida de sus caderas no la dejaba escapar de mi boca, mientras mi lengua se dibujaba  en ese clítoris, ese pedacito de carne se movía como si fuera un juguete y de rato en rato mi boca succionaba ese pequeño elemento haciéndolo estirar un poquito lo que movía aún más lejanas a sus caderas a las que yo las tenía casi abrazadas para evitar que se me escaparan….baje un poco el ritmo, no deseaba que esa noche se terminara en un primer intento….mi lengua dejó de mover el pequeño elemento que ya parecía estallar y paso despacio al resto de esa rajita que empapada deseaba más, recorrí el camino entre su clítoris y la entrada a su vagina, que se abría como esperando mi lengua y sin previo aviso metí mi lengua para sentir la calidez de ese lugar, la humedad y el sabor que no hacía más que hacerme desearla más….a mi lengua se le unieron dos dedos que introduje con delicadeza a lo que ella respondió con un gemido sentido….desde el sur abrí mis ojos para ver como ella desesperada estrujaba sus senos, y como su cuello se extendía para abrir su garganta aún más….el placer era evidente y yo no pararía hasta hacerla estallar en mis brazos….con movimientos rápidos pero delicados metía y sacaba los dedos , mientras mi boca regresaba a su clítoris para hacerlo vibrar otra vez al ritmo de mi lengua….sus piernas me aprisionaban como para no dejarme ir, y su cuerpo bailaba sobre la cama… el calor en su entrepierna iba creciendo, y sus húmedas entrañas estaban desatadas a llenarme de jugos de placer la boca, podía sentir el inminente desenlace, su voz se había convertido en jadeos y gemidos y mi boca en una máquina para dar placer….sus piernas se estiraron y su cuerpo se arqueo como buscando el cielo y mi lengua daba las ultimas estocadas para el final, y un gran gemido terminó por describir que el orgasmo había llegado.  Mi cabeza y mi cuerpo también agitados se refugiaron en uno de sus muslos donde apoye mi rostro, ella no decía nada y yo no tenía nada que decir….hasta que ella estiró su mano y buscando la mía y sin hablar me supo decir que me quería a su lado, así que levantando mi cuerpo cansado me eché a su lado y la abracé a mi pecho, ella corrió su brazo sobre mi y su cabeza y rostro se acomodaron en mi cuello, y el silencio y la tormenta que aún seguía, fueron nuestros únicos testigos.

Abrazadas no duramos mucho, ella sin aviso decidió que también deseaba poseerme, y entre caricias, besos y gemidos, ella me hizo suya, y yo me entregue, me deje poseer, aunque sabía que sería la última….la lluvia seguía y ella no tardó en quedarse dormida sobre mi pecho mientras yo acariciaba su pelo y besaba su frente, contemple su perfil y los dibujos perfectos de su rostro, roce su brazo que posaba sobre mi cuello y su mano q sostenía mi hombro…quería que ese momento durara para siempre, pero sabía muy bien que eso no iba pasar así lo deseara con todo mi ser….bese despacio sus labios tratando de ser lo más delicada posible y entre besos la desperté, eran casi las 4 de la mañana y la tormenta ya había pasado…ella sin decir nada enderezo su rostro, me miro un par de minutos y sin pronunciar o producir sonido se paró de la cama, y caminando alrededor de la habitación completamente desnuda iba recogiendo todas sus prendas…yo sólo contemplaba, no sólo su recorrido gracioso buscando su ropa sino también como se puso cada una de ellas.

Claudia: siempre te ha encantado mirarme mientras me visto – dijo mientras una leve sonrisa se dibujaba en sus labios –

Miriam: nunca te has quejado y a mí siempre me ha gustado, también verte bañar, cocinar, dormir y todas las actividades que hacías…y es que lo que me gustaba era verte no importaba haciendo que – le devolví la sonrisa –

Claudia: lo sospechaba, entonces ¿no lo haces con Karina? – me quede en silencio – parece que no…bueno yo….

Miriam: no, no lo hago con ella, a ella la miro, la observo pero a ti te contemplo – se quedo estática con la mirada fija en mi –

Claudia: yo….nada, es tarde, debiste despertarme antes

Miriam: lo siento, fui un poco egoísta – su mirada me rehuía –

Claudia: entiendo, bueno yo mejor me voy de una vez

Miriam: si, es mejor -  nos quedamos mirándonos unos minutos hasta que ella rompió el hechizo –

Claudia: te quedarás ahí en la cama? No vendrás a despedirte? – la miré fija y moví mi cabeza en negación –

Miriam: no señorita, ya nos despedimos para que mas despedidas

Claudia: tienes razón, bueno….iras mañana no?

Miriam: en primera fila, un acontecimiento tan importante no me lo podía perder – sonreí con ironía –

Claudia: no tienes que ser irónica, solo dime si iras

Miriam: - la miré y asentí con la cabeza – siempre he estado a tu lado en los mejores momentos y en los peores y mañana no será la excepción

Claudia: gracias….

Miriam: gracias los monos, ahora vete….que se te hará más tarde

Claudia: tienes razón, nos vemos entonces

Miriam: si nos vemos – vi como caminaba hacia el umbral de la puerta de la habitación y de un grito la detuve – esperaaa!!!!

Claudia: ¿Qué pasa? – Cogí el anillo encima de la mesa de noche y saltando de la cama desnuda me acerque hasta ella –

Miriam: - tome su mano mientras ella me miraba y coloque ese anillo en aquel dedo particular – no querrás que tu futuro esposo se enoje, si no ve tu anillo de compromiso en el dedo que ahora tendrá el de matrimonio no?

Claudia: claro que no, gracias por acordarte…me puedes abrazar?

Miriam: así? Toda desnuda?

Claudia: no sería la primera vez – la miré tiernamente y me abracé a ella, ese abrazo duró poco porque ella se separó y sin darme la cara me dijo– adiós amor

Miriam: mejor un hasta luego, al menos así de verdad pensaré que puede haber un después ok? – ella asintió con la cabeza y se marchó –

Me dio la espalda y salió  de la habitación, lo último que escuche fue la puerta de la calle cerrarse, no sé cuánto tiempo me quede ahí parada desnuda esperando quizás que ella regresara y hubiera algún cambio en toda esta pesadilla, pero no se dio, ella no volvió y yo no fui a su boda, ese mismo día yo me aleje definitivamente de su vida…algunos dirán que así era mejor, al final lo único que puedo decir es que esta vez fue mi decisión, aunque quizás mañana ella vuelva a decidir vivir por mi…y ahí ya veremos…….si volvemos a decidir.

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NO NO este no es el fin, bueno para la historia si, lo dejo sin terminar porque en realidad para mi si termino, les dejo a ustedes la facultad de darle un final, no en papel, ni en letras, pero en sus sentimientos, si de verdad esta historia tiene algo de parecido a algo en su vida...pues ponganse las pilas y empiecen a cambiar el destino y cambien el final....quizás aceptando quienes verdaderamente son, o dándose el valor para atreverse a luchar por lo que de verdad l@s hace felices, o quizás sólo confirmar que ya es tarde (espero que no), bueno ahora q regrese a escribir, yo creo q no tardare en regalarles una historia más larga de muchos capitulos y con mucho drama y por supuesto con mucho amor solo para ustedes....muchas gracias por leer y por estar siempre aqui pendientes, la admiradora aqui soy yo, por su paciente lectura y por su fidelidad a esta página....cuidense mucho, y sean felices, de la forma que sea....pero seánlo....muchos besos y hasta la próxima....