Un gran dia de verano

Me follé a la tia de mis sueños

Aquel día había quedado con mis amigos y amigas para pasar el día en mi casa y darnos un baño en mi piscina. Esto lo hice principalmente porque en mi grupo de amigos había una chica que me gustaba bastante y estaba deseando verla en bikini.

Me presentaré, me llamo Marcos tengo 20 años, mido 1’75 metros y peso unos 80 kilos, vamos que no estoy esmirriado. Mi polla no es pequeña que digamos mide unos18 centímetrosen su máximo esplendor.

Estando esperando en mi casa empezaron a llegar mis amig@s y empecé a decirles que se pusiesen los bañadores y bikinis. Cuando llego Patricia, que así se llama la chica en cuestión la hice pasar a mi habitación y le dije que se cambiase allí, así tendría su macuto a mano por si quería en un descuido rebuscar dentro y ver que ropa interior llevaba.

Ella apareció con un bikini pequeño que dejaba ver gran parte de su generoso pecho y una braguita que s le ajustaba bien a su coñito y dejaba ver que tenia unos buenos labios vaginales. Cuando la vi aparecer enseguida note que mi polla se empezaba a endurecer y me metí a la piscina para que no se notase mucho. Mis amigos se tiraron también y empezamos a jugar con un balón y una red al voley. Enseguida nos cansamos y decidimos jugar a las peleas en el agua. Nos pusimos por parejas y yo escogí a Patricia, ella se subió a mis hombros y las demás chicas hicieron lo mismo con sus parejas.

Yo estaba en el cielo estaba entre las piernas de la tía que me gustaba y su coñito se frotaba contra mi cuello en cada movimiento que ella hacia sobre mi en un intento de tirar a las demás chicas de encima de sus parejas.

Trascurrida la mañana decidimos irnos a comer y tomarnos unos chorros para ir divirtiéndonos un poco más. En un momento de la tarde decidí ir a investigar en macuto de mi amada, con la escusa de que tenia que ir al baño me dirigí hacia mi habitación y cerré la puerta. Mi excitación aumento de repente increíblemente y cuando abrí el macuto mi polla estaba dura como las piedras. Empecé a buscar y encontré el tanga que llevaba cuando llegó. Lo cogí y me lo acerqué a mi nariz para olerlo. El aroma era increíble un olor a coño limpito pero a coño.

Cuando estaba en esto se abrió la puerta y apareció Patricia y me pillo con el tanga en la nariz. Me puse colorado y me quede quieto con el tanga en la mano y sin saber que decir ni hacer. Ella se acercó a mí y me dijo:

-Veo que estas muy contento, no? (mirando directamente a mi paquete)

-Lo siento Patricia es que…

-Cállate y no digas nada, solo que esta noche te tienes que ofrecer a llevarme a casa y ya hablaremos de lo que ha pasado.

La tarde paso y la gente se fue yendo, hasta que solo quedamos Ramón, Patricia y yo. Ramón se ofreció a llevar a Patricia a su casa pero rápido ataje la conversación diciendo que la llevaba yo que tenia que ir a comprar unas cosas para el día siguiente.

Cuando estuvimos solos Patricia y yo me dijo:

-Que es lo que estabas haciendo con mi tanga esta tarde?

-Estaba oliéndolo, porque me pones mucho y quería saber como te olía el coño.

-Y porque no me lo has preguntado a mi?

-Porque te ibas a enfadar y no me ibas a dejar olértelo.

-Bueno, a ver, lo has olido bien o no?

-Pues mas o menos pero no me acuerdo casi del olor, porque después del susto…

En ese momento me copio del brazo y me llevo a mi habitación y me tumbo encima de la cama. Ella empezó muy despacio a quitarse el pantalón cortito que llevaba y se quedo en tanga delante mío. Después de quito en tanga y cuando lo tenia en la mano se lo paso por su rajita. Su coñito no estaba rasurado como me había imaginado, tenía  pelito pero muy cortó y dejaba entrever unos labios menores grandes y carnosos. Cuando acabo de pasarse el tanga por su rajita se fue hacia mí y me lo puso en la nariz y me dijo:

-Aspira fuerte y quédate con el olor de una mujer excitada.

Aspire con todas mis fuerzas y me invadió un olor a coño mojado, a mujer en celo, a tía cachonda, como jamás había olido antes. Como reacción a esto mi polla se puso dura como una piedra y se notaba un buen bulto en mi pantalón.

Sin mediar palabra ella me quito el pantalón y copio mi polla con sus manos y se la metió en la boca. Yo estaba en un sueño no sabía que hacer, mi polla entraba y salía de su boca a la vez que ella la chupaba fuertemente. Ella siguió con la mamada hasta que le dije que me corría y para mi sorpresa no se quito sino que se trago toda mi leche que salía a borbotones de mi polla erecta.

Cuando termino se quito la camiseta y me dejo ver unas grandes tetas con unos pezones grandes y duros y acostándose a mi lado me dijo:

-Ahora te toca a ti complacerme.

No daba crédito a lo que oía pero me puse manos a la obra. Empecé besándola y su lengua se enredo con la mía mientras que mis manos sobaban esas tetas grandes con sus duros pezones. Baje por su cuello chupando sus orejas y viendo como daba pequeños gemidos de placer. Seguí bajando y me detuve en esos pezones que no dude en meter a mi boca y chupar como un niño hace con un helado. Estaban duros y suaves y era una sensación increíble. A todo esto mi polla ya estaba otra vez dura y dispuesta para la marcha.

Seguí bajando poco a poco y chupe alrededor de su ombligo y aspire hondo porque ya empezaba a oler los aromas de su coño mojado. Cuando llegue a su coño mi visión fue tremenda, me encontré con unos labios menores grandes e hinchados, mojados por sus jugos, un clítoris grande y duro y que palpitaba pidiendo una lengua que lo estimulara. No me entretuve más y pase a la acción. Mi lengua empezó a recorrer sus grandes labios y empecé a notar su textura suave y delicada. Me los metía a la boca y tiraba de ellos con delicadeza mientras mi invitada se retorcía de placer.

Subí un poco hasta que me encontré de frente con el clítoris hinchado que no tarde en meter en mi boca y succionarlo a la vez que lo chupaba. Sus gemidos iban en aumento y fue cuando le llego el primer orgasmo. Sus gritos fueron considerables y su respiración estuvo agitada durante un tiempo.

Cuando levante la cara de su coño me miro y me dijo:

-Sigue un poco mas que ahora te daré tu recompensa.

Sin dudarlo baje mi cabeza e introduje mi lengua en su vagina y lamí esos jugos que manaban de ella como una fuente. Ella se seguía retorciendo con cada lametón que le daba y sus gemidos eran cada vez mas fuertes hasta que note una mano en mi cabeza que me empujaba hacia su coño fuertemente mientras ella me decía:

-No pares, sigue, sigue sigue!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Y su segundo orgasmo llego llenándome la boca con sus deliciosos jugos.

Cuando se recupero se levanto me acostó boca arriba y se subió encima de mi polla que estaba a punto de reventar, y empezó a cabalgarme como nunca me lo habían hecho. Sus gemidos se fundían con los míos en un coro de placer como nunca antes había oído y visto. Yo no llevaba condón puesto y se lo dije, pero le dio igual y siguió cabalgándome. No dure mucho y me corrí abundantemente en su coño. Ella se bajo de encima mío y empezó a pasarse la mano por su coño y a coger mi leche y sus jugos mezclados y se los metió a la boca y los saboreó.

Cuando termino me dijo que teníamos que repetirlo pero esta vez en su casa. Nos vestimos y la lleve hasta su casa.

Al día siguiente me llamo y me dijo que sus padres se habían ido y que me esperaba ansiosa en su habitación.