Un giro a mi vida. Parte 9

Continuación de la vida de Sara, un cumple muy especial

De vez en cuando hacía recuento de los hombres a los que me había follado, desde Fran aquella noche de verano. Distintas pollas, distintas razas y distintas edades. Pero estaba loca por vivir más experiencias.

Llegaba Mayo, y con ello mi cumpleaños. Evidentemente este año aparte de recibir los regalos de mi familia, quería celebrar algo enfocado al sexo. Y la noche de mi cumpleaños mi objetivo principal era quedar con alguien. Cené con mis padres en su casa, lo celebramos con varios tios y primos, y después me volví para mi casa. Eran cerca de las 12 de la noche, y mi cumpleaños tenía que acabar por todo lo alto, claro.

Podría haber quedado con David, con Wilmer o con Martín para saciar mis ganas de sexo, tras un año donde mi vida había girado en torno a aventuras y a noches de sexo duro con tios de todo tipo. Pero no se explicar muy bien lo que sentía cuando quedaba con alguien por primera vez por la app de ligue. Esa mezcla de nervios y morbo era algo que me apasionaba. Al entrar en la aplicación, lo de siempre, decenas de tios cachondos y salidos, pero esta vez mi único objetivo era buscar a un tío 10, un tío de cuerpo perfecto, de gimnasio y pedirle fotos de su polla, para comprobar que era grande. No quería cualquier cosa en el día de mi cumpleaños.

Tras un rato descartando pesados, finalmente encontré a un tío que me pareció increíble, se llamaba Víctor, por la foto parecía el tío 10 que yo buscaba, moreno con el pelo corto, semirrapado, y muy guapo de cara, alto de aproximadamente 1,90 y con un cuerpo escultural. Un torso espectacular, muy definido. No me lo pensé y le di mi Whatsapp, allí sin cortarme mucho le pedí una foto de su polla en máximo esplendor mandándole un audio caliente. Sencillamente no me iba a follar a un tío con todas las expectativas del mundo para que luego me decepcionase con una polla que no estuviese a la altura de mi objetivo. Me la mandó y la polla estaba muy bien, gorda, y bastante larga además se le veía depilado y la foto me puso tan caliente que le dije que se viniese ya.

Me dijo que estaba a aproximadamente una media hora, pero que vendría, le esperé nerviosa y como digo, muy muy cachonda tomándome una copa de vino y a la media hora sonó el telefonillo.

Abrí. Era un hombre impresionante pensé. De esos con los que toda mujer quiere acostarse alguna vez.

Le recibí con un camisón rosa, bastante ajustado que me lucía mucho mis pechos, mi 100 de pechos redondos y muy grandes, y un sujetador y tanga de encaje del mismo color. Lo que más seduce a los hombres de mi son las tetas, y mi culo. No soy una mujer de 10, lo he dicho muchas veces durante el relato, pero se que a cualquier hombre le gustaría follar a una mujer como yo porque doy mucho morbo.

Y allí estaba él. Charlamos y le puse una copa. Me estuvo contando anécdotas del lugar donde trabajaba, era masajista en un spa. Y con franqueza, me contó la cantidad de gente que se había follado conociendo allí. Es más me hablaba de matrimonios que quedaban con él tras ir allí para ver como él se follaba a la mujer delante del marido. Y así como no va a tener un marido contenta a su mujer pensé..

Spanish La realidad es que muchas parejas sobreviven a la monotonía así, a base de cuernos y los más inteligentes hacen que sean consentidos. Las cosas que me contaba me ponían muy cachonda, mucho más de lo que ya estaba, y entre copa y copa, nos dieron las 5 de la madrugada, y aun no habíamos follado. Normalmente los tíos se lanzaban a mi, pero Víctor se hacía de rogar, y me tuve que lanzar yo a besarle.

Me fui acercando la cara a él y le empecé a besar apasionadamente con lengua. El me respondía de una forma muy caliente y me encantaba. Le llevé a la habitación. Allí todavía de pie le fui desnudando mientras le besaba el cuerpo, era un cuerpo increíble del cual yo no podía dejar ni una parte sin saborear. Fui bajando dándole besos desde el torso, (que era a donde le llegaba) y le quité el calzoncillo, como ya había visto en la foto confirmé que tenía una polla inmensa. Otra polla perfecta pensé! La mejor que me había encontrado junto a la de Wilmer, aunque esta era más impresionante al ser blanca. Se la empecé a chupar con unas ganas que no podría describir, y aunque no me cabía en la boca no dejé una sola parte sin chupar.

Mientras se la chupaba le pajeaba y le comía los huevos, el de pie, me agarraba del pelo y la cabeza, y me decía que la chupaba muy bien mientras gemía. Estaba depilado y se notaba que se cuidaba mucho, cuando le estaba chupando los huevos, me empezó a dirigir la cabeza hacia su culo. Yo nunca había hecho un beso negro a ningún tío, me daba mucho asco de hecho. Pero estaba tan depilado y yo estaba tan cachonda, que le empecé a chupar el culo. Otra cosa nueva que hacía pensé, y no me disgustó. Su rabo cada vez se ponía mas duro y grande. Él me levantó y me recostó sobre la cama, allí empezó a comerme el coño y el culo. Besaba todo con una pasión alucinante, yo gemía mucho. Le miraba mientras me lo estaba comiendo.

Cuando se levantó para empezar a follarme, solo de verle me puse cachonda sentada en la cama y el de pie, se la volví a chupar. La polla estaba durísima. Al final me empezó a follar muy fuerte a cuatro patas. La polla era tan grande y gorda que a la vez de darme gusto, me dolía, pero no me importaba. Lo que si sentí y pegué un pequeño grito fue cuando la empezó a meter por el culo, pero sabía que sería al principio y luego me encantaría. Y así fue. Fue un polvazo indescriptible que acabó con corrida en mi cara y mis tetas. Nos quedamos dormidos casi de día.

Cuando me desperté casi a medio día volví a follar con él, esta vez en la ducha, era difícil por la diferencia de altura follar con él, pero al final poniéndome encima de él, mientras se sentó en una repisa conseguimos follar. Nos besábamos mucho mientras yo le cabalgaba. Ese año había decidido tomarme la píldora con mi cambio de vida. Y no estaría mal una corrida interna con él como ya hice con Leo, el amigo de Fran en nochevieja. Y eso hicimos. Víctor se corrió dentro de mi coño, la sensación fue muy buena, me sentía rellena, y la leche me hacía sentir cosquilleo, y la cara de placer de él, con ese cuerpo me encantó. Después nos duchamos y se fue. Me hubiese gustado que se quedara todo el día y seguir follando con él, pero tenía que trabajar.

Cuando le despedí, volví a la habitación y encendí los datos del móvil y tenía un mensaje de Whatsapp de Fran, no me había felicitado y se había acordado por la mañana del día siguiente. Cito el mensaje: "Sarita que tal estás?, felicidades atrasadas, lo siento pero he estado muy liado, te tengo que contar algo".

Le contesté intrigada, pero no me quiso contar que era. Me dijo que si nos podíamos ver por la tarde y me contaba. Le dije que si, y esa misma tarde de Domingo apareció en mi casa. Llegó con Rober y entendí que querían follarme los dos de nuevo, la verdad es que no me importaba cerrar el fin de semana de mi cumpleaños con un trío. Pero Fran antes de que la cosa se calentase, me dijo:

  • "Sarita te tengo que contar que me caso este verano con María"

Mi cara fue un poema, No estaba enamorada de él, pero me gustaba bastante.

  • "Te has quedado muda" dijo Rober

  • "No, yo me alegro por él, aunque ya sabe que a mi María no me cae muy bien, y si supiese las veces que me le he follado, menos bien la caería yo a ella"

Me salío del alma decir eso, ellos se empezaron a reír a carcajada limpia. Y yo me quedé con cara de orgullosa por lo que había dicho.

  • "Bueno y como ha sido eso?" Dije

  • "Pues llevábamos ya tiempo pensándolo"

  • "Y tu vas a seguir follándote a las tias que quieras o eso va a cambiar?"

  • "Pues no lo se, cuando esté casado ya te lo diré"

  • "Y como has venido aquí para decírmelo?"

  • "Pues porque quiero una despedida chula, y me gustaría hacer algo contigo, aparte de la fiesta que haré con mis amigos y demás"

  • "Algo como qué?"

  • "Pues un finde tu y yo, haciendo tríos con otros, no se, pero irnos juntos a algun sitio y allí de locura, yo se que tu eres liberal, y quiero ir contigo a algun sitio y hacer intercambios, tríos , orgias. ¿Te gustaría?"

Yo estaba Alucinando.

  • "¿Y por qué conmigo?

  • "Pues porque tu eres especial Sarita" Mientras acercaba su boca a la mía y empezaba a besarme.

Yo alucinada seguí besándole mientras estábamos sentados en el sofá. Despues desde el suelo y de rodillas, Rober empezó a quitarme el tanga, y me empezó a comer el coño. A la vez que Fran se desaborchaba el pantalón y me metía la polla en la boca. Fuimos a la cama, y allí intercambiándose empezaron a follarme uno a cuatro patas y mientras el otro me la metía en la boca. Cuando Fran me la metió en el coño, dijo al instante entre gemidos:

  • "Sarita, se nota que has follado recientemente, yo noto esas cosas siempre"

Le sonreí, sacándome la polla de Rober de la boca y mirando hacía atras, y le contesté fogosamente:

  • "Hace menos de tres horas había un tío follándome en esta misma cama con una polla mucho más grande que la vuestra"

  • "Pffff, como me pones Sarita" Contestó Fran, mientras me empezaba a follar mucho más fuerte

  • "Ojalá todas las tias fueran como tú" dijo Rober agarrándome la cabeza mientras se la chupaba.

Y seguimos follando.

  • "Quieres una doble penetración, Sarita" dijo Fran

  • "Vale, pero el que empiece por el culo, que tenga cuidado que anoche me lo follaron"

Empezó Fran por detrás, mientras me cabalgaba a Rober. Me gustaba mucho más que la primera vez con ellos. Cuando Fran la sacó no se contuvo un momentó y me llenó toda la espalda de leche. Fran se levantó y se fue hacia el baño y me quedé sola follando con Rober, que justo empezaba a metérmela por el culo, mientras tenía toda la espalda llena de leche de la corrida anterior de Fran. Rober estuvo diez minutos follandome el culo. Yo ya estaba agotada, pero le dió tiempo a correrse en mi cara. Soltó una buena ración de leche de la cual me tragué bastante.

Me duché con Rober, que mientras estábamos allí intentaba volver a follarme pero no se le ponía dura, entre risas finalmente se rindió. Al salir nos secamos y cuando llegamos al salón estaba Fran allí vestido:

  • "Sarita, entonces que? Te vendrías conmigo un fin de semana por ahí, los dos"

  • "Pero Fran y si nos pilla María imagínate"

  • "No te preocupes  que está todo pensado, y yo te pago el viaje, tu solo tienes que poner las ganas de follar"

  • "Pero me tendrás que avisar del día y eso ¿No?"

  • "Si yo te voy diciendo pero nos vamos un finde en verano, vale?"

  • "Venga vale"

Se despidió con un morreo, curiosamente nunca se había despedido así, siempre eran más frías sus despedidas. Rober también se despidió así.

El verano siguiente prometía ser entretenido... Y lo sería...