Un giro a mi vida. Parte 11

Ibiza, Sara jovencita madrileña..

Después de aquella noche, me desperté a mediodia con Wilmer al lado, yo tenía una resaca que me moría, pero que mejor que echar un buen polvo con ese pedazo de negro para que se hiciese más llevadera. Así fue, según me desperté y aun con él dormido, empecé a chuparle la polla, se que es algo alucinante para los tíos que los despierten así, la polla de Wilmer es descomunal y por la mañana mucho más. El se fue despertando según se la iba chupando, y me agarró del pelo.

  • "Estos son los mejores despertares Sara"

Yo le sonreí placenteramente con su polla gigante dentro de mi boca, o lo que me cabía de ella.

Sin darle tiempo para nada, me puse encima de él y empecé a cabalgar sobre esa polla descomunal. Al principio cuando follaba con Wilmer me costó mucho hacerme a ella y que no me doliese, pero después con tanta experiencia me encantaba. Despues de estar varios minutos cabalgando, me levantó y en la misma cama me puso de lado y me empezó a follar muy fuerte. Se corrió dentro de mi. Me encantaban las corridas internas, no tanto como las faciales claro, pero había veces que que se corrieran dentro de mi coño lo hacía todavía más especial. Al levantarnos nos fuimos a la ducha y allí desnudos mientras nos secábamos me contó bien la historia de su ruptura con Miriam, a la cual yo conocia de mi epoca en el instituto. Lo había dejado porque en su relación ya no había casi sexo. Como en todas vamos. La llama se acaba apagando. Ley de vida. Y mira que Wilmer era un tío que a su vez follaba por ahí con otras, entre ellas yo. Pero ni aún así. Wilmer me decía que quería volver a la República Dominicana y notaba como que me insinuaba que podíamos intentar algo entre nosotros.

A mi Wilmer era un chico que me caía bien y me daba mucho placer. Pero como Martín, no quería nada serio, yo era honesta, muchas veces daba la sensación de que los tíos se querían agarrar a algo serio conmigo, aún sabiendo como era yo, como para tener una seguridad, y yo le dejé las cosas bien claras. Pasó el día conmigo, y salimos a comer por ahí y después se fue a casa de un amigo a dormir donde tenía sus cosas hasta que buscase piso, y empezase su nueva etapa sin Miriam.

Y llegó la semana esperada del viaje con Fran, yo le había pedido a Martín el viernes libre y trabajar hasta el Jueves a mediodía para prepararme e irme. Martín no me había puesto pegas pero cuando le pedí esos días en el trabajo me dijo que antes me tenía que despedir de él. Vamos que me le tenía que follar. El Martes vino a mi casa y follamos. Entre Rober, su primo, Wilmer y Martín llevaba una semana frenética, una semana en la que supuestamente me quería haber reservado para darlo todo con Fran en Ibiza.

Y llegó el Jueves. Viaje a Ibiza. Un viaje muy corto desde Madrid. Al llegar allí y sin haber facturado maleta, pues solo llevaba una maleta pequeña para el avión me estaba esperando Fran.

  • "Sarita que bien que estés aquí, había pensado que te ibas a rajar"

  • "Yo, ¿Por qué?

  • "No cosas mías"

y me empezó a besar apasionadamente en medio del aeropuerto.

Me llevó hacia una zona de coches de alquiler, ya que había alquilado uno y nos fuimos de allí. Al llegar al hotel ya casi a las 10 de la noche, era un hotel bastante grande con piscinas y jacuzzi, nos dieron una habitación en el último piso, un décimo. El hotel estaba a unos 500 metros de una cala, que se veía desde la habitación. Según entramos en la habitación, Fran me quitó una camiseta de tirantes ajustada que llevaba y el sujetador. Y me tiró sobre una cama enorme. No me había dado tiempo a ver la habitación y ya estábamos follando. Mientras me comía las tetas, me empezó a quitar un short que llevaba y el tanga y me empezó a meter un dedo en el coño mientras me lo chupaba. Yo me volví loca y casi me corro. La verdad es que la situación me encantaba, estaba con el hombre que más me gustaba solos en un hotel y a muchos kilómetros de casa. Era todo para mi, al menos en ese momento.

Empezó a follarme duro desde arriba mientras me besaba la boca y el cuello. No le había chupado la polla aún pero no hacía falta porque estaba entregado. Se levantó de la cama y me llevo hacia el baño, allí puso una toalla en el suelo y me puso de rodillas a comerle la polla, después de unos minutos, me levantó y me puso mirando contra el espejo del lavabo y me folló a cuatro patas de pie mientras me miraba como gemía y se ponía todavía más cachondo.

  • "Sarita sabes que esto es mi despedida y que vamos a follar mucho, y vamos a hacer muchas guarradas aquí en Ibiza". Decía mientras cada vez me follaba más fuerte a cuatro"

  • "Si Fran voy a ser tuya, follame cabrón"

Fran se volvía loco cada vez dándome más fuerte.

"Ya ya ya Sara" me dijo para que acercase mi cara a su polla y correrse.

Al momento le acerqué la cara y me la llenó de leche.

Nos duchamos juntos, y nos arreglamos para salir a cenar y después de fiesta, donde el me llevase.

Cenamos en el hotel, y después salimos a una discoteca de chill out, allí entre copas y sin dejarme pagar nada, conocimos a mucha gente, Fran me presentaba como si fuese su novia, y después entablaba conversación con mujeres y hombres la cual con la música y el ambiente yo no escuchaba. Me dejaba llevar, de vez en cuando venían algunos a ligar conmigo, había algunos que estaban bastante bien, pero era la despedida de Fran y yo iba a hacer lo que el quisiera. Él estuvo mucho tiempo hablando con una pareja de unos treinta, el era Moreno de 1,75 aproximadamente, cuerpo atlético y no muy guapo de cara. Ella era rubia, bajita como yo, era un poco gordita y tenía los ojos claros, bastante guapa de cara. Fran me presentó y fue sincero con ellos;

  • "Está es Sara mi amiga y follamiga que se ha venido conmigo a Ibiza de despedida"

Ellos reían con la situación. Fran estaba claramente algo borracho

Yo sonreí, tampoco iba a negarlo.

  • "Por que no nos vamos a la discoteca, que esto ya lo van a cerrar" dijo el chico, que se llamaba Raúl, pues eran ya la sacó 2 de la madrugada.

  • "Venga vale cogemos un taxi y nos vamos lo cuatro" dijo Fran

Cogimos un taxi en la avenida y nos fuimos a una conocida discoteca, yo empecé a entablar relación con la chica que se llamaba Soraya. Íbamos juntas al baño etc, y una de las veces que fuimos al baño, ella me preguntó que si era verdad que Fran y yo éramos follamigos y el se casaba con otra, o que lo había dicho de broma, y yo la conté la situación. Ella alucinó. Segun llegamos donde estaban Fran y Raul, vi que ella se acercaba a hablar con su novio. Después Raúl se puso a hablar con Fran pero no se les escuchaba nada. Entre copas y mucha fiesta, de repente vi que Raúl empezaba a besarme, yo con la mirada busqué la aprobación de Fran el me gesticuló con la cara y seguí liándome con Raúl mientras Soraya se acercaba a Fran y empezaban a liarse. Los cuatro estábamos muy borrachos y con unas ganas locas de follar, era ya casi de día, y Fran dijo de irnos a nuestro hotel.

A la salida había una chica llorando en medio de la acera donde íbamos a coger un taxi, Fran se acercó a ella, era muy jovencita de unos 18, morena , muy alta con el pelo muy llamativo morena y delgada. Fran la preguntó que qué la pasaba, ella le decía que había venido de sorpresa a ver a su novio que se fue a trabajar a Ibiza, y que le había encontrado con otra. Y había pasado de ella, Fran en menos de diez minutos la convenció y se montó en el taxi con nosotros. No se muy bien que la diría pero la chica debe ser que no tendría un sitio mejor donde ir.

Tardamos unos cinco minutos en llegar al hotel, ya era por la mañana y según llegamos al hotel las familias se iban hacia la playa, y nosotros cinco llegábamos borrachos, con una chica con todo el rímel corrido por la cara y los ojos hinchados de llorar. La situación era subrrealista. Y yo no sabía si Fran la había dicho a la chica a lo que íbamos..

Según entramos en la habitación la chica entró al servicio, y nosotros cuatro empezamos a liarnos. Raúl y yo, y Soraya con Fran, como si la chica no estuviese.

Cuando Soraya y yo estábamos en las piernas de Fran y Raúl chupandoles la polla, ella salió del servicio y se nos quedó mirando sorprendida a los pies de la cama.

  • "Claudia, puedes unirte si quieres" dijo Fran que ya sabía su nombre.

  • "¿Pero sois dos parejas ? Contestó ella con la cara aún sorprendida

  • "Es largo de explicar, ven aquí anda"

Se acercó a Fran y empezó a besarle mientras Soraya se la chupaba. Después Fran se empezó a follar a Soraya a cuatro patas y levantó en vilo a Claudia para comerla el coño. Yo les observaba cabalgando a Raúl, ahí estábamos los cinco sobre la cama. Después vi que Soraya le empezaba a comer el coño a Claudia y aluciné, pero a la vez me apetecía probar un coño, sería mi primera vez. Y mientras Raúl me empezo a follar a cuatro la dije a Claudia que se acercase y la empecé a comer el coño. Era una sensación rara pero me gustaba. Después y sin mediar palabra se la llevaron Raúl y Fran a un extremo de la cama y allí Fran se la metió por la boca y Raul la empezo a follar a cuatro patas intercambiandose mientras Soraya y yo lo contemplabamos desde el otro extremo. Parecía que la iban a desmontar. Claudia era delgada pero atractiva y aunque apenas tenía pechos, tenía muy buen culo. Después la hicieron una doble penetración. La chica estaba entregada y se notaba que despechada por su ex haciendo esto. De repente los dos le sacaron la polla del coño y el culo y se acercaron a Soraya y a mi y nos llenaron la cara de leche.

No recuerdo nada más, porque lo siguiente fue Nos quedarme dormida sobre la cama borrachísima, tras más de 24 horas sin dormir