Un futuro mejor... ¿existe?

Esta es una historia real aun que sea difícil admitirlo, esto no es una protesta, tampoco quiero darles una clase de civismo solo quiero contar una historia que merece ser escuchada, quiero que la lean y la comenten con alguien. Este relato no es novedad, es un día mas de la vida de muchas personas que por necesidad o ambición cometen errores que destruyen todo lo que aman.

Un mejor futuro… ¿EXISTE?

Mírenme aquí… ni yo mismo puedo creer el rumbo que le di a mi vida, como las decisiones que tome terminaron destruyendo todo lo que en una vida observe y ame, no sabría decir aun si fue necesidad o una vacía ambición. Puedo recordar a mi familia y a mí viviendo en nuestro pueblo, también recuerdo todas las necesidades y carencias que vivíamos, así también recuerdo las vacías promesas de políticos mentirosos que solo se aparecían en época de elecciones.

-Ya sabes si votas por mí tu futuro estará asegurado.

Para olvidarse de nosotros una vez que llegan al poder, por esa razón decidí un día partir a buscar fortuna a la ciudad capital. Lo que vi al llegar era muy diferente de lo que había en mi pueblo, muchos edificios lujosos, lujosas casas, personas que se desviven en el buen vestir, lujosos autos, muchísima comida.

-¡Quisiera que mi familia estuviera aquí!

Pero todo ese panorama tan exclusivo se iba perdiendo a medida que el autobús se alejaba del centro de la ciudad, los barrios se iban asiendo mas descuidados, las personas no eran las mismas un aire de inseguridad rodeaba todo el lugar, autos de todo tipo desde los lujosos que vi al principio hasta los mas feos, se detenían a un costado de la calle y mujeres vestidas con casi nada de ropa en actitud extraña se subían y bajaban de ellos, para luego perderse en la oscuridad, a medida que caminaba veía a hombres y a mujeres fumando lo que al principio pensé eran cigarrillos y bebiendo en cantidad y no era precisamente jugo de uva.

Por fin llegue a mi destino la casa de un tío que me ofreció hospedaje a cambio de contribuir con los gastos, la casa no era muy grande tres habitaciones y un baño, una cocina chica y un comedor igual de chico, me condujo a la que seria mi habitación la cual estaba formada por una cama y un mueble con gavetas para guardad mis cosas, en la casa vivíamos seis en total su dos hijos y una hija, su esposa, él y yo. Al día siguiente salí a buscar empleo y de inmediato me di cuenta de mi posición y que no me seria fácil hacer fortuna.

-¿Campesino? ¿Y sin muchos estudios?... Bueno puedo ofrécete algo pero no ganaras mucho.

El empleo era de ayudante en la cocina de un restaurante, a medida que trabajaba allí pude notar que avían muchos como yo y con mucho tiempo de trabajar allí, el tiempo pasaba y el trabajo era pesado ya que el restaurante estaba localizado en el centro de la ciudad y muchas veces hice turno de 14 horas diarias, llegando a casa muy tarde, sin poder saludar a nadie y comer unas tostadas ya que el cansancio era mayor que el hambre. El día de pago llego y con gran decepción mire mi paga, tanto esfuerzo, tantas horas de trabajo y nada, esto no era suficiente para mantenerme yo y enviarle a mi familia, para colmo tenia que aguantar insultos de mis superiores.

-No te quejes "indio" a tus ancestros le pagaban con espejitos y cuentas de vidrio ja, ja, ja….

Con amargo dolor sentí como era tratada mi gente en la ciudad, trague mi sufrimiento y seguir con mis labores diarias, lo único que me hacia soportar todo era la promesa hecha a mí familia de darles un futuro mejor.

Fue entonces cuando apareció nunca me dijo su nombre, sólo sé que se apellidaba Villegas, y él era al que iba a vender mi alma y mi destino. Lo que me proponían no era nada honorable, pero me dio buenas razones para aceptar, 25 mil buenas razones para ser exacto. Ese día me sentí por primera vez en posesión total de mi futuro podría pasar todo el tiempo con mi familia y sobre todo tenia la seguridad de darle todo lo que siempre desee a mi esposa e hijo y el precio a pagar parecía tan poco en esos momentos.

-Aquí esta tu dinero, vendremos por la mercancía en un mes.

-No se preocupe estará bien cuidada.

Regrese a mi pueblo era donde guardaría el encargo hasta el mes siguiente, mí esposa asustada me dijo que no era lo mejor aceptar que era peligroso e ilegal, yo la tranquilice diciéndole que nada sucedería solo un mes y ya, le mostré el dinero y empezamos a comprar de todo para arreglar nuestra casita y guardamos la mitad para mas adelante. Todo parecía marchar a la perfección, nada parecía que podía arruinar mi nueva vida, nada a excepción de….

-¿Qué? ¡No puede ser!

-Cae el cartel de drogas del Sr. Villegas- aparece esta línea en un periódico local.

Y ahí estaba yo… con más de 12 millones de dólares en droga en mi casa y sin saber que hacer.

-Hay que deshacernos de la droga, la policía vendrá tras nosotros- dice mi esposa.

-¿Tirar 12 millones en droga? ¿Sabes lo que nos haría el Sr. Villegas si hacemos eso?

-¡La guardaremos y si la situación empeora la tiraremos o se la venderemos a otro!

El tiempo pasó y todo parecía igual el señor Villegas en la cárcel y yo aun con el cargamento en mi casa, hasta que ese maldito día llegó

-¡Todos al suelo!

-¡obedezcan o disparamos!

Pensé que era la policía y ojalá hubieran sido ellos.

-Jefe… encontré toda la mercancía, venga paréese que aquí está

-¿Así que guardándole droga al Sr. Villegas? ¿Sabes que esta mercancía nos la tumbo a nosotros? ahora te daré algo para que aprendas a elegir con quien trabajas

BANG…BANG

Esa noche perdí a mi mujer y a mi hijo.

No teniendo ya nada regresé a la ciudad a trabajar y a olvidar, pero mi pasado me siguió hasta allá.

-Está detenido por asociación con el cartel Villegas.

Policías federales llegaron a mi trabajo y procedieron a leer mis derechos y arrestarme en ese momento escuche como todos los compañeros de labores murmuraban entre si.

-¡Dios! y paresia un hombre de bien

-Si, siempre fue un buen trabajador

-Y mira lo que en realidad era, UN NARCO

Me entere que el Sr. Villegas hizo un trato para evitar una sentencia larga dando el nombre de todos los que colaboraron con él… Pobres diablos al igual que yo. También supe que por haber entregado la mercancía al cartel rival el Sr. Villegas mando a incendiar mi poblado.

Y esa es mi historia, ahora espero mi sentencia por guardar droga a los narcos, esa misma droga que hoy destruye a la juventud, droga que es usada para amenizar las fiestas-orgías de niños de papi y mami poderosos y de apellidos de abolengo, droga que se mueve gracias a policías corruptos y políticos sinvergüenzas que hacen trato con los narcos, droga que yo acepte guardar con un único objetivo.

Lograr por fin para mí y mí familia "UN FUTURO MEJOR"

Para desgracia de muchos esto sucede en países de todo el mundo pero la historia que mas se repite es en países de centro y sur América, en estos países hay personas que aun hoy 2007 viven en extrema pobreza, personas que si almuerzan no desayunan ni cenan y a veces no hay para ninguna de las tres, personas que luchan en el campo arando la tierra, parados en el trafico vendiendo caramelos y periódicos, planchando kilos y kilos de ropa al día, que lavan pisos y platos, para poder sobrevivir, por que nunca llegan a tener una buena calidad de vida solo sobreviven, personas que llegan tan abajo que terminan viviendo en la basura rodeados por montañas de ella y buscando con afán ropa en buen estado, comida que no este todavía en descomposición, personas que ya no tienen a donde ir por que no saben leer ni escribir y están tan afectados por los narcóticos que ya no recuerdan ni sus nombres entre ellos hijos, madres, padres, abuelos.

Por estas y mas razones hay quienes por un deseo inmenso de con seguir "un futuro mejor" se alejan de sus familias, de sus hogares, de sus países y trabajan duro pero se dan cuenta que su sueño es eso un mero sueño y muchos llegan a caer en las redes de personas sin alma que aprovechando su ignorancia y los envuelve en mentiras, promesas falsas de cómo conseguir dinero fácil.

Por eso esta historia que hago constar como verdadera la dedico a todos aquellos, campesinos, indígenas, inmigrantes que luchan día a día en trabajos honrados para sobrevivir, por que son personas como estas las que hacen que el mundo aun no se destruya por completo.

Esto es un secreto a voces y yo no quiero estar en silencio